—Craig ¡Ngh craig! — trato de aferrarse más a este pero sólo sintió cómo su cuerpo comenzaba a desintegrarse hasta no quedar nada, el rubio desesperado tenía una expresión aterrada y veía a su alrededor, todo, absolutamente todo estaba oscuro y de repente ya no era un niño, su cuerpo se veía a cómo era actualmente, su cabeza le daba vueltas y sentía que se volvería loco, hasta que en eso es volvió a escuchar la voz de su amado y se dio la vuelta con prisa.

Frente a él se encontraba craig, este también había regresado a su edad actual y lo veía con demasiada frialdad.

—Craig —solto con voz temblorosa.

—... Hasta donde fuiste capaz de llegar por temor a lo que darían tus padres tweek — dijo el azabache.

Tweek se le quedó viendo en silencio, su corazón empezaba a doler por las palabras de este.

—Eres un cobarde... Y peor que eso, un traidor.

—Ugh.

—No te importo acostarte con el bastardo de tu socio, con tal de cuidar tu imagen y la de tu familia... No te importo estar con alguien además de mi a pesar de que dices tanto amarme. Tsk... Ya no te creo nada tweek.

—No... No craig, Ugh yo sólo lo hice para protegerte, ese infeliz intento hacerte daño ¡y si el sabia que seguías con vida lo intentaría otravez! — le decía el rubio entre sollozos, soltando pequeñas lágrimas de sus ojos.

—Ya deja de fingir dolor... Sólo piensas en ti mismo tweek, en tu dinero, la absurda herencia de tu familia. No me interesa estar con alguien así — dijo el azabache mientras su cuerpo empezaba a desaparecer.

—E-Eso no es verdad Ngh, craig — intento acercarse rápidamente, pero ya no quedaba nada, nada a que aferrarse — ¡craig no te vayas! Ughh no... No te vayas — cayó arrodillado al suelo y no paraba de llorar — por favor perdoname, Ngh no fue mi intención hacerte tanto daño Ugh.

—Ay tweek... Eres tan ingenuo, tan estúpido... — hablo una voz fría y conocida.

El rubio abrió sus ojos grande y algo temblorosa levantó su mirada, ahora frente a él se encontraba el responsable de su sufrimiento, la persona encargada de humillnarlo y chantajearlo hasta no poder más.

Pete...

El gótico tenía una pequeña sonrisa en su rostro, una que no parecía tramar nada bueno y disfrutaba de verlo en esa condición tan miserable.

—Tu... Tsk, maldito infeliz — dijo tweek frustrado, apretando sus dientes sin levantarse del suelo.

—Es una lástima que no haya podido seguir usandote, fue... Entretenido mientras duró — pauso un momento sin quitar la mirada de este.

—Largate de mi vista... — apretó sus puños con fuerza y agacho la cabeza.

—¿Que dijiste?

—¡¡Ngh qué te largues!! ¡¡Desaparece de una jodida vez!! — grito enfurecido y viéndolo a la cara.

Pero esa reacción sólo entretuvo más a Pete, ya que simplemente soltó una risita y siguió burlándose. Haciendo que la cabeza de tweek doliera de una manera terrible y se tapara los oídos desesperado, también cerró sus ojos y negaba con la cabeza para ignorarlo.

—¡Vete! ¡Ugh! — dijo varias veces.

Y de un momento a otro la figura de Pete desapareció, Tweek respiraba agitado y luego se levantó del suelo, viendo al mismo tiempo a su alrededor para asegurarse de que este de verdad había desaparecido.

—... Esto es el infierno Ngh — se dijo asi mismo preocupado. Estaba encerrado en ese extraño cuarto a oscuras y sin salida — acaso... ¿Estoy muerto? — pensó aterrado ante esa posibilidad — Pete me empujó por las escaleras, Ugh debo estar muerto.

—No estás muerto hijo... Bueno, no aún... — hablo una mujer y tweek vio alertado hacia los lados, luego hacia detrás, pero no había nadie.

—¿M-Mamá? No puede ser... — dijo ya la borde del colapso, muerto o inconsciente estaba viviendo un infierno.

—Si mueres ya no tendremos a quien darle toda nuestra fortuna, recuerda que eres nuestro único hijo.

—Ngh.

—Haremos todo lo posible para que sobrevivas y regreses a la mansión con nosotros — hablo está vez su padre — ya ahí podrías reflexionar mejor y darte cuenta de tus errores.

—¿Que están diciendo?

—Has sido un hijo muy desobediente cariño, te enredaste con un un tipo totalmente inferir a nosotros y manchaste nuestro apellido.

—Ya... Ya paren.

—Pero te daremos otra oportunidad... — continuó la mujer — Apenas despiertes nos reuniremos con Pete y organizaremos todo para su boda.

—¿¡Que!? — dijo nervioso y un fuerte viento soplo en su dirección y se cubrió con los brazos — Ugh ¿que está pasando?

Al abrir sus ojos se encontró con dos gigantezcas figuras de sus padres, inevitablemente solto un grito asustado y dio varios pasos hacia atrás. Su madre sonreía, pero era una sonrisa que le daba escalofríos, su padre al contrario sólo lo veía con esa expresión seria e igual de escalofriante.

—Pete es el hombre perfecto para ti... — recalcó la madre sin dejar de sonreír.

—¡No! ¡No lo es! — grito de inmediato.

—El te ama...

—¡¡Me empujó por las escaleras!! ¡Es un maldito psicópata!

—Fue un accidente, el esta muy arrepentído... — dijo Richard tweak con toda la tranquilidad del mundo.

—¡No lo fue! ¡Tenía todas las intenciones de matarme! — respondió con rabia, la impotencia que sentía en ése momento era demasiada.

—Estás siendo muy injusto con el... Dale otra oportunidad — rio esta al final.

—Tu madre tiene razón, sabes que el te conviene...

—Dale otra oportunidad...

—Perdonalo...

—El te ama.

—Sólo podrás ser un tweak de verdad cuando te cases con el...

—También tiene mucho dinero, serán felices...

—Ya tienes la edad suficiente para contraer matrimonio.

—¡Ugh, no! ¡Callense! ¡Ya paren de una vez! — volvió a taparse los oídos al escucharlos insistir, ya nisiquiera sabía que era real y que no. Su cabeza dolía más y más y sin que se diera cuenta cayó al suelo mientras lloraba frustrado, aún podía esucharlos. No les importaba en lo absoluto, sólo pensaban en ellos y en su herencia, nunca en su felicidad.

Se sentía miserable... Frustrado, no podía salir de ese infierno, no sabía cómo transcurria el tiempo en ese lugar, pero era un sufrimiento eterno. Cuando las aterradoras figuras desaparecían quedaba un silencio insoportable, pero preferia eso a verlas. Sólo lloraba con la cabeza gacha y con miedo, esperando a que todo acabará. Cada vez que alguien aparecía era para reclamarle todos sus errores en la cara y hacerlo sentir aún más miserable.

Nada parecía tener fin...

—No pude haber sido tan malo para merecer esto ¿o si? Ngh — decía tweek en voz baja, este recostado en el suelo y con una expresión depresiva — siempre fui algo inseguro sobre mi relación con craig, pero nunca dañe intencionalmente a nadie...

Girando un poco su cabeza hacia un lado, el rubio noto una pequeña luz blanca aproximarse, este se extraño y algo asustado se sujeto la cabeza adolorido.

—Aghh... D-Duele mucho... ¡Ugh!

La luz sólo se acercaba cada vez más y ahora de la nada se encontraba en la sala de la mansión. Tweek se sorprendió y después dirigió su mirada a las escaleras, su corazón latió fuerte y se sintió aterrado al ver bajar a sus padres, quienes caminaron hasta el.

—...

—Ya estás de regreso hijo — dijo Richard.

Tweek sólo se quedó mudo y los veía desconfiado.

—Lograste sobrevivir... Ahora debes cumplir con tu deber — añadió su madre y en eso ambos vieron dirección a la puerta principal, la cual era abierta por una de las sirvientas y daba paso a Pete, este con su expresión confiada camino hasta ellos y tweek estaba en shock ¿que demonios estaban tramando?

—Tweek... Mi amor — intento tomar la mano del rubio pero este sólo se alejo.

—Aléjate de mi, Ngh.

—Hijo por dios, se más educado con tu esposo — le reclamo la madre un poco molesta y tweek la miró desconcertado.

—... ¿Que dijiste?

—Tweek ¿por que actúas tan raro? ... Sólo soy tu marido — dijo Pete con esa sonrisa que le ponía la piel de gallina.

—¿Cómo que esposo? ¿¡De qué demonios están hablando!?  — pidió una explicación desesperado y estos sólo sonrieron con tranquilidad.

—¿Ya lo olvidaste? Nos casamos hace una semana... — explicó Pete y el rubio negó angustiado.

—No... Eso no es verdad, yo nunca me casaría contigo ¡nunca!

—No grites amor, parece que algo anda mal contigo...

—No estamos casados.

—Claro que si ¿es necesario que te muestre todas las pruebas?

—No, no es posible ¡no lo es! ¡Ugh! — soltó con sorpresa cuando este le sujeto los brazos a la fuerza y lo aferraba a su lado.

—Esuchame bien maldito ruidoso, tu eres mi esposo y de ahora en adelante harás lo que yo te pida ¿esta bien? De lo contrario no fallare la próxima vez que quiera matarte — le. Amenazó con voz fría.

Tweek miró de reojo a sus padres y estos sólo se veían serios, sin decir nada, parecían simples estatuas sin sentimientos.

—¿Está bien? — repitió el gótico está vez más molesto.

—N-No... ¡Sueltame! — grito molesto.

—Cierra la boca.

—¡No! ¡¡Quíta tus asquerosas manos de mi!! ¡Quita...

Este se removia desesperado y buscaba liberarse de su agarre, pero luego sintió cómo le enterraban un filososo cuchillo en el estómago, tweek tenía ojos ojos bien abiertos y luego tosio sangre, Pete había soltado su agarre y en eso llevó ambas manos hasta su herida, la cuál fue lo suficientemente profunda para acabar con el, al ver sus manos cubiertas de sangre empezó a sentirse mareado y le costaba respirar, seguido cayó al suelo y la sangre seguía manchando todo el suelo. Su vista se torno borrosa y sus ojos estaban entrecerrados, sólo alcanzó a ver a sus padres, quienes se veían igual de estoicos, ni siquiera estaban preocupados por lo que acababan de ver, y por último esa macabra sonrisa de Pete, quien sin ningún tipo de remordimiento limpiaba el cuchillo con un pañuelo y se marchaba.

Todo era muy confuso... Nada tenía sentido... Lo único que sabía era que había llegado su fin, y cerrando sus ojos lentamente espero esperanzado a despertar en un lugar mejor.

La oscuridad se apoderó de su mente nuevamente, y con un fuerte dolor de cabeza y la respiración agitada el rubio abrió sus ojos de golpe y se hayo sobre una cama de hospital. Este veía a su alrededor y su vista seguía un poco borrosa, pero cuando escucho esas voces y su vista logró aclararse el miedo lo invadió

Por casualidad sus padres se encontraban en la habitación en ese momento, y estos al ver a su hijo despertar se sintieron mucho más aliviados, les daba gusto saber que su hijo estaba bien.

—Tweek, cariño — casi lloro la madre, intentando darle aunque fuera un delicado abrazo, pero la reacción de su hijo fue algo que no se esperaraban.

—Ugh ¡No me toques! ¡Aléjate! — grito con todas sus fuerzas, aunque se sentía débil y su cabeza dolia cómo el infierno, los gritos no pasaron desapercibido para las enfermeras, quienes entraron a la habitación  con prisa.

Hellen y Richard veían preocupados a su hijo y por lo que decía estaba claro que no los quería ahí.

—¿Que sucede? — pregunto la enfermera rapido.

—¡Váyanse! ¡No quiero volver a verlos nunca más en mi vida! ¡Váyanse! — seguía gritando el rubio, estaba sacando toda su rabia y desesperación.

Una de las enfermeras intento calmarlo, esos gritos sólo lo pondrían peor, y además estaba demasiado alterado.

—¡Hijo por favor! — dijo Richard.

—¡¡Largo!! ¡Ugh! ¡Déjenme en paz y larguense! — cerró sus ojos con fuerza.

—Joven por favor, tranquilicese, aún sigue en un estado delicado.

—Saquenlos de aquí ughh, dígales que se vayan — dijo tweek con una voz temblorosa y triste, llorando con fuerza después de eso.

Ver a su hijo así les destrozó el corazón, y se sentian de lo peor, en verdad le habían hecho mucho daño y podía notarse a leguas toda la impotencia que sentía.

—Voy a pedirles que salgan de la habitación por favor... — dijo la mujer y estos se dieron una mirada preocupada, pero no tenian otra opcion, tweek no quería verlos, así que tristemente tuvieron que salir de la habitación, dándole una última mirada a su hijo y dejándolo a solas con la enfermera.

—Ya... Ya se fueron, ahora respiré profundo — dijo está.

Tweek aún sollozaba y su expresión era devastadora, ahora tenía terror de cerrar los ojos y volver a vivir ese infierno. Sin embargo después de un rato pudo calmarse, aunque en su cara podía notarse el cansancio y la tristeza, apenas noto que su cabeza se encontraba toda vendada y que tampoco podía mover su pierna izquierda, eso lo aterro al principio pero la enfermera le dijo que pronto volvería a moverla, sólo estaba un poco fracturada pero no era tan grave.

—¿Cómo te sientes? — pregunto amablemente.

—... Aún me duele la cabeza.

—Eso se debe a tu reacción de hace un rato, te alteraste mucho y llorar de esa manera también te afectó. Tenías que seguir guardando reposo y no levantar la voz.

—No sabía que ellos estarían aquí... Por eso reaccione así.

—No te preocupes más, si no quieres que te visiten respetaremos eso, es por el bien de tu salud. El golpe que te diste en la cabeza fue bastante fuerte... — le comento.

—...  ¿Cuanto tiempo llevaba inconsciente? — quiso saber.

—Bueno... Te ingresaron al hospital hace cinco días.

—¿Cinco días?... — bajo su mirada con sorpresa, no podía creerlo.

—Si, pero por suerte despertaste... Eso nos da gusto, pensabamos que entrarias a un estado de... De coma.

—Ngh... Apenas y recuerdo lo que pasó.

—Sólo descansa ¿si? Mientras más calmado te encuentres más rápida será la recuperación.

—...

—Ahora que despertaste tendremos que hacerte unas pruebas para saber si el golpe te dejó secuelas. Regreso en un momento, ah, por cierto... Veo que recordaste a tus padres sin ningún problema, así que supongo que tus recuerdos siguen intactos.

—Ngh, si... Aún los recuerdo... A ellos y a los demás — contestó tweek, tocandose la cabeza.

—Bien, en ese caso la amnesia queda descartada — le mostró una amable sonrisa y después salió de la habitación.

En eso la enfermera camino por el pasillo y se encontró con el francés, sabía que era amigo de su paciente ya que había venido a verlo varias veces.

—Disculpe, quiero ver a mi amigo, me dijeron que ya había despertado — dijo Chris algo impaciente.

—Así es, ya despertó.

—Que excelente noticia — sonrio aliviado — aunque sus padres me dijeron que despertó muy alterado y no quería verlos ni en pintura, pero mejor dígame ¿cómo está el?

—Ya se encuentra más calmado, y tengo la impresión de que su relación con ellos no es muy buena, mm... ¿Pero que hay de ti? No quiero que se vuelva a poner igual, debe guardar reposo — lo miró algo desconfiada.

—¿Yo? Bueno, soy prácticamente cómo su hermano mayor, mejores amigos, etc... Por favor déjeme verlo, se que le dará gusto verme.

—... Dejame hablar con el primero, prefiero evitar un mal momento — dijo la mujer para después regresar a la habitación.

Christophe suspiro.

Tweek reposaba en la cama y veía la pared en silencio, y cuando la enfermera entró nisiquiera se volteo a mirarla.

—Tweek... Tienes visita — le informo.

—... Quiero estar solo.

—... Oh, bueno... Es que se trata de tu amigo, creo que su nombre es Christophe.

El rubio se quedó un momento en silencio y recordó a Chris, aún se sentía tan frustrado y molesto, pensándolo mejor le vendría bien una platica con su mejor amigo.

—Dígale que pase... — le pidió.

La enfermera asintió con una leve sonrisa y después salió de la habitación, dando paso ahora al chico francés, este al entrar se alegro de verlo despierto y de inmediato se acercó.

—Amigo... No sabes el gusto que me da verte consciente ¿Cómo te sientes?

—... Chris... ¿Que pasó con Pete? — pregunto el rubio ignorando su pregunta.

Christophe noto su tono serio y algo débil, pero no le extraño tanto su pregunta, era normal que quisiera saber que pasó con el responsable de su accidente.

—... Por el momento sigue encerrado. Después de que te empujó por las escaleras intento escapar pero no se lo permitimos, inmediatamente llamaron a la policía y lo obligaron a confesar, aunque de todas formas ya tenía varias pruebas en su contra.

—...

—Ya no podrá molestarte más.

—Mis padres supieron la verdad todo este tiempo Chris... — lo miró frustrado — mientras que yo soportaba todos los chantajes de Pete para "cuidar" la imagen de la familia tweak, resulta ellos ya sabían de craig e incluso se aliaron con Pete para hacerle daño a mis espaldas y pedirle luego a ese bastardo que se casara conmigo para asegurar la maldita herencia Ngh. Eso jamás se los voy a perdonar.

—Supongo que por eso los corriste de aquí apenas despertaste.

—... Los odio — dijo en tono frío, uno que sorprendió un poco al francés, aunque también entendía muy bien su situación.

—Te entiendo... Y yo estaría igual de molesto que tu si hubiera pasado por lo mismo.

—Ya no me importa lo que digan ellos, o los demás, Chris... Renuncié a su estúpida herencia.

—Vaya... En serio debes tenerles mucho rencor para rechazar una herencia de no se cuantos millones de dólares — rasco su mejilla con una sonrisita nerviosa.

—... No los necesito, tengo mi propia empresa y con eso me conformó.

—Y también cuentas con una mano derecha que siempre dará la cara por esa empresa mientras estás inconsciente, recuerdalo muy bien — le dijo con una sonrisa de medio lado y el rubio le sonrio también.

—Por supuesto... No se que haría sin ti Chris.

—... No es ningún problema, yo... Estaba muy preocupado por ti tonto, lo digo muy en serio.

—... Gracias.

—Bueno... Todo anda bien en la empresa, y me asegure de que todos guardarán discreción en cuanto lo que te ocurrió, no fue tan fácil y dudo que almenos salga un reporte de esta locura pero al menos no es viral.

—Eres el mejor.. — le sonreía contento, sin duda ver a su amigo le subió más los ánimos.

—... Tal vez esto no te interese pero tus padres están haciendo hasta lo imposible para hundir a Pete, solo quería que lo supieras.

—... Es lo menos que podían hacer. Pero... En parte esto también ha sido mi culpa, por no haber sido valiente antes ni denunciar a Pete cuando pude, soy tan estúpido Chris.

—No seas tan duro contigo mismo... Estabas en una situación difícil y no sabias que hacer, con tu paranoia y ansiedad debió ser un completo infierno pero ya todo acabó. Ahora debes recuperarte y te aseguro que todo estará mejor a partir de ahora.

—... Y... ¿El lo sabe?

—No... También me asegure de que no lo supiera aún. Pensé que sería lo mejor después de que me dijiste que las cosas habían terminado algo tensas entre ustedes dos... Perdón si hice mal.

—No... No te preocupes por eso... — dijo con un semblante más decaído — mi relación con craig ya no tiene ningún futuro, y creo que ahora le dará igual si enfrente o no a mis padres. Lo mejor será que me olvide de él y lo deje vivir su vida... Quizás... El pueda llegar a ser feliz con alguien más.

Christophe lo veía apenado, era obvio que le dolía su decisión.

—Por lo que he sabido ahora trabaja en una famosa joyería de la ciudad... Lo supe por un artículo que leí hace un par de días. Es nuevo pero tiene mucho talento.

Tweek sonrio al escuchar eso, le daba gusto saber que craig empezaba a superarse cada vez más.

—Eso es genial... Y espero que siga sacándole provecho a su increíble talento.

—Es lo más seguro. Y tweek ¿Que harás al salir de aquí? — pregunto curioso.

—¿Que haré? Pues... Volveré a dedicarme únicamente a mi trabajo y supongo que sólo eso, tal y como cuando vivía en Italia.

—... Te haría bien conocer y salir con otras personas ¿no lo crees? no todo en la vida puede ser trabajo.

—No lose...

—Oh vamos, se que sigues super coladito por tu amor de la infancia pero acabas de decir que ya renunciaste a él, y tu también mereces ser feliz por tu parte.

—... No será sencillo abrir mi corazón a alguien más. Lo que siento por craig es... Único, especial.

—Si, creeme que lo se, igual no estaría demás intentarlo.

—...

Justo en ese entró el médico a la habitación, este con una carpeta en su mano y viendo al rubio con serenidad.

—Buenas tardes, joven... ¿Cómo se siente?

—Ah... Me dolía un poco la cabeza pero ya me siento mejor gracias.

—Muy bien, aún tenemos que hacerte unas pruebas.

—Si... Fue lo que me dijo su enfermera.

—También me comentó que puede recordar bien a sus conocidos, sin embargo aún puedes presentar problemas de memoria o concentración en un futuro.

—Ngh.

—No te preocupes amigo, te apoyare en todo lo que pueda apenas salgas de aquí.

—Y espero que sea pronto... Aún tengo una empresa que administrar — le informo al doctor y este negó lentamente con la cabeza.

—Cuando salgas de aquí iras directo a rehabilitación — le informó y tweek se extraño.

—¿Rehabilitación?

—Antes te hicimos una prueba de sangre, y claramente nos mostró que estuviste drogandote antes del accidente.

Tweek abrió sus con sorpresa y luego bajo su mirada apenado, ya hasta lo había olvidado, se sentía avergonzado. Christophe por su parte sintió molestia hacia el estúpido de Pete, era el culpable de eso.

—... ¿Y eso tomará mucho tiempo? 

—Depende de lo rápido que superes tu adicción.

—Disculpe que lo interrumpa doctor, pero es que tweek no consumió esa droga por decisión propia, el sólo fue víctima de...

—Si la consumí por decisión propia —  fue honesto el rubio y Christophe lo miró callado — Ngh, lo hacía antes de... de tener relaciones con el, así no podría estar en mis cinco sentidos mientras lo hacíamos.

—Tweek...

—Soy un asco lo sé... Pero haré todo lo necesario para no querer volver a consumir esa cosa.

—Bien... Aquí lo único importante es que quieras superar tu adicción. Por el momento sigue descansando, acabas de despertar y tu cerebro aún está muy sensible... Te haremos las pruebas mañana por la mañana.

—Está bien doctor, gracias.

—Hasta mañana, que descanses — se despidió el médico y después salió de la habitación.

—...

—Todo saldrá bien — le dijo el francés con voz calmada y sujetandole el hombro en señal de apoyo, por la mirada de su amigo podía sentir toda su tristeza y vergüenza, pero aún así lo ayudaría a superar toda lo que vivió.

                             **********

Dos días después, ya casi atardecia y craig estaba por terminar uno de sus tantos collares, este en su oficina especial para trabajar miró de reojo el reloj de pared y noto que ya faltaba poco para que oscureciera, lo cual significaba que tanto pip como damien cerrarían pronto su negocio, tenía que darse prisa. El Azabache parecía concentrado en su trabajo, pero en eso escucho la puerta abrirse y desvío su atención al inglés, quien se le acercaba con su típica sonrisa y sujetaba su chaleco.

—Craig, ya casi es hora de cerrar.

—Lo se, por eso me estoy dando prisa pip — le respondió tratando de seguir con su trabajo.

—No, no he venido a apurarte, sólo venía a decirte que lo dejarás así, ya mañana podras seguir con más calma.

—Me falta poco.

—Aún así se que te tomará tiempo, no te preocupes y continúa mañana, ya has hecho suficiente por hoy — dijo el rubio señalando hacia los demás collares sobre la mesa.

Craig suspiro, quizás pip tenía razón.

—... Está bien, voy a ordenar un poco antes de salir — le dijo.

—Muy bien, te esperemos afuera — sonrio y después salió del cuarto.

Craig detuvo el movimiento de sus manos y dejó su trabajo incompleto, luego empezó a arreglar todo y por último sujeto su chaqueta, ahora sí había oscurecido y al salir de la oficina escucho a pip y damien platicar.

—Y hablando de eso ¿ya te enteraste de lo que pasó con ese joven empresario? — dijo damien y craig escuchó con atención.

—Ehh no ¿A cuál joven empresario te refieres? — pregunto pip.

—A ese chico rubio, su apellido es tweak , sus padres son dueños de varias empresas en denver tengo sabido — dijo damien para sorpresa de craig, quien se sorprendió por el comentario.

—Oh, ya se de quien me hablas ¿que pasa con el? — pregunto curioso. Mientras el azabache seguía escuchando atento.

—Leí en un artículo de Internet que había sufrido un grave accidente, se cayó de las escaleras o algo así.

—¿Un accidente? — Pensó el desconcertado azabache y luego se acerco rápidamente a la pareja.

—Ah craig ¿ya estas listo? — pregunto pip mirándolo, pero a este le interesaba más seguir escuchando lo que decía damien.

—Damien, escuche que hablabas sobre un accidente... ¿Estás completamente seguro? — retomo el tema.

—¿El accidente de tweak? Si, aunque omitieron algunos detalles la página no suele hacer artículos falsos — respondió tranquilo.

—No... Pero, cómo es que ¿¡tweek esta bien!? — lo miró preocupado y damien levantó una ceja.

—No lo se, cómo te dije el artículo omitió todos esos detalles.

—...

—¿Que pasa craig? — pregunto el rubio sin entender su preocupación.

— Tweek... El... Yo lo conozco.

—¿Conoces a tweak? Que genial — sonrio pip.

—Necesito saber si esta bien, necesito ir a denver y verlo, necesito... — Craig dejo de hablar y en eso saco rápidamente su teléfono celular, de inmediato busco uno de sus contactos más confíables y luego lo escucho hablar.

—¿Joven craig? Que sorpresa ¿cómo está? — respondió el chófer.

—Sebastián ¿es verdad que tweek tuvo un accidente?

—... ¿Ya lo sabe?

—¿¡Saber que!? Apenas y me estoy enterado por terceros que tweek tuvo un accidente, por favor dime que no es verdad — dijo en tono preocupado.

—...

—¿Sebastián? ¡Respondeme! — pidió ya desesperado.

El chófer suspiro pesadamente y luego respondió.

—Es verdad... El joven tweek sufrió un accidente que casi le cuesta la vida.

—¿Que? Pero... ¿¡Por que coño nadie me lo dijo!? — frunció el ceño molesto.

—Recibi la orden de no contárselo a nadie, Lo siento mucho joven — explicó apenado.

—¿¡Tweek está bien!? ¿¡Que le sucedió!?

—... Su ex-socio, Pete... Intentó matarlo.

Craig se quedó sin palabras al oír eso.

—Creo que minutos antes el joven tuvo una discusión con sus padres y el, y luego... Ese delincuente lo empujó por las escaleras de la mansión.

—...

—El joven tweek sufrió una fractura de cráneo y tardo varios días en despertar, pero afortunadamente ya está estable.

—No puedo creerlo... Y nisiquiera lo sabía, Tsk, tengo que ir a verlo.

—Se oye muy preocupado joven.

—¡Por supuesto que lo estoy, Sebastián!

—Crei que usted y el joven tweek habían tenido una discusión en su último encuentro.

—... Si, el me confeso por lo que estaba pasando y pues... Desde entonces no he vuelto a saber de él, pero eso no me Importa ahora, quiero verlo y saber que esta bien, de lo contrario no podré estar en paz — dijo decidido y después miro a pip y damien.

—¿Podemos ayudarte en algo? — ofreció amablemente el inglés.

—... Si ¿podrían llevarme hasta denver, por favor?

Continúara...