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Capítulo 18: "Un suceso inesperado"

Tras una gigantesca carpa, una rubia de cabello ondulado escuchaba atentamente lo que un joven de cabello verde le decía.

Y esa es la idea que se me ocurrió, ¿no te parece extraordinaria?, decía el joven de cabello verde con una amplia sonrisa en su rostro.

Sí, es una gran idea sin duda, pero no comprendo cómo le harás para colocar eso en el alimento de esos mugrosos felinos, recuerda que el único que tiene acceso a ellos, que se encarga de su alimentación y cuidado es el hermoso Gokú, solo él lo hace, y sin no logras colocarles ello pues tú plan no podrá llevarse a cabo ya que los mugrosos felinos adoran a la estúpida chiquilla, aun no comprendo como ella pudo entrar a esa jaula sin problemas, respondió con molestia Lunch.

Los mugrosos felinos perciben la bondad de ella, por eso no la atacan, además saben lo importante que es ella para el chiquillo, dijo Cell con rabia.

¿Tanto odias a Gokusito que no te importa hacerle daño a la chica que supuestamente te gusta con tal de lastimarlo a él?, respondió Lunch con una ligera sonrisa en su rostro.

Si, lo odio, el chiquillo estúpido me quito mi puesto, por culpa suya baje telonero, ¿no crees que es suficiente motivo para odiarlo?, en cuanto a la bella Milk, lo lamento por ella, pero también tiene que pagar, ella me ha despreciado por culpa del chiquillo, por ello no me importa el daño que le puedan causar esos animales salvajes, ese será su castigo a su desprecio, ¿y en cuanto a cómo le haré para que esos animales salvajes reciban su dosis de maldad?, la respuesta es sencilla Lunch, tú me tienes que ayudar, dijo Cell.

¿Yo?, ¿cómo?, respondió la rubia de cabello ondulado.

Sencillo, tú solo tienes que encargarte de distraer al estúpido chiquillo, mientras Freezer y yo colocamos la droga en los alimentos de los felinos, dijo Cell.

Bien, ello es sencillo, pero quien se encargara de llevarle los alimentos es Gokú, no la niña estúpida,......, decía Lunch siendo interrumpida por el joven de cabello verde.

No, será ella quien lo lleve, tú tienes que encargarte que Gokú esté tan ocupado que no tenga tiempo para ir a alimentar a sus felinos, entonces casualmente Milk que será llevada por Dabura y Majim boo, al lugar donde Gokú este contigo apoyándote en algo que solo él puede hacer, se ofrecerá a apoyar a su amado, ya sabemos cómo es ella de colaboradora, no será difícil que ella se ofrezca a apoyar a su adorado noviecito, respondió en tono molesto el joven de cabello verde.

Pues si lo dices así, se ve sencillo, pero ¿qué tengo que inventarme para hacer que Gokusito hermoso le encargue su tarea a la niña boba?, dijo Lunch con rabia.

Eso es tarea tuya, tú ve que te inventas Lunch, eso sí, tiene que ser lo antes posible, no lo olvides, respondió Cell.

Bien, empezare a pensar que invento, dijo Lunch.

Entonces en cuanto tengas la idea, me lo comunicas para poner en marcha el plan, acoto Cell, mientras un joven de tres ojos caminaba hacia ellos.

Lunch, te andaba buscando, el señor Bills, quiere que vayas a apoyarlo a sacar unas cuentas...., decía Ten mientras se acercaba al lugar donde estaba la rubia.

Bueno, me retiro, me avisas, dijo Cell antes de marcharse.

¿De qué hablaban?, pregunto un intrigado Ten al llegar frente a la rubia.

De cosas que no son de tú interés, dijo la rubia, haciendo una pausa para decir: Voy con el señor Bills.

Están muy extraños, pensaba Ten mientras veía alejarse a la rubia.

La rubia camino hacia el interior de la carpa, al entrar a está detuvo sus pasos al tiempo que empuñaba sus manos al ver que a unos metros suyos un apuesto jovencito de cabello alborotado envolvía en sus brazos a su bella novia, tras haberla atraído hacia él con un listón, mientras le daba besos en el rostro a la jovencita que empezaba a reír dulcemente.

No la soporto, pero pronto tú maldita belleza solo será recuerdo, pensaba la rubia de cabello ondulado mientras continuaba su camino, dejando al par de enamorados jovencitos continuando con su ensayo.

Lo haces muy bien, decía Milk mientras miraba dulcemente a los ojos de su amado.

¡Gracias¡ pero nunca lo haré mejor que tú mi bella niña, respondió Gokú antes de posar sus labios sobre los de su amada para besarla dulcemente.

Días después:

Una rubia se acercaba a un grupo de jóvenes que estaban platicando, tras su presentación, fuera de la carpa.

Ya podemos poner en marcha el plan, dijo la rubia.

Te has tardado mucho Lunch, pensé que te habías arrepentido, respondió Cell.

¿Arrepentirme?, no, eso nunca, si lo que más deseo es que esa niña desaparezca de mi camino, eso sí para que mi plan funcione, tú plan original tendrá que tener algunos cambios, dijo la rubia de cabello ondulado, mirando al joven de cabello verde.

Eso no importa, lo importante es que resulte, acoto Cell.

¿Y cuál es tú plan?, pregunto Freezer, mientras los otros jóvenes asentían.

Pues el siguiente, aprovechando el buen corazón de Gokusito hermoso........, decía Lunch, mientras los jóvenes la escuchaban atentamente.

En tanto:

Otro grupo de jóvenes platicaban cerca del escenario principal, mientras veían el número que se estaba presentando.

Es increíble como esos felinos pueden sentir el amor que se tienen, decía un joven de pañoleta blanca.

Sí, es cierto, acoto un joven calvo.

Es porque su amor es tan grande que hasta ellos pueden sentirlos, además recuerden que esos felinos son como una familia para Gokú, por ello si Milk es su felicidad, pues los felinos la aceptan como parte de su familia también, respondió Dieciocho, mientras veía a su amiga pelinegra impulsarse desde el lomo de uno de los tigres para dar un doble salto en el aire y luego terminar en los brazos en su amado novio, quien la miraba embelesado, mientras el público estallaba en aplausos.

No sé cómo puede resistirse a no besarla, yo no sé si podría resistirlo al estar en esa situación, decía un joven de cicatriz, mientras el joven de cabello alborotado bajaba de sus brazos a su amada para que juntos agradezcan al público.

Es que Gokú es muy profesional, además no se vería bien que hiciera ello, el señor Bills, pondría el grito en el cielo, dijo Ten sonriendo.

Sí, es cierto, aunque así no se besen, su amor se percibe, al tal punto que incluso el público ya ha notado ese amor, respondió Dieciocho sonriendo.

Bueno, vamos a ayudarlos, dijo el calvo, mientras los otros jóvenes asentían.

Minutos después:

Buen número, dijo Dieciocho al llegar junto a su amiga.

¡Gracias¡ respondió Milk.

Ahora a premiar a nuestros amigos, dijo Gokú con una sonrisa en sus labios mientras miraba a su amada.

Si, dijo Milk.

Al día siguiente:

Tras haber desayunado junto a su familia circense un par de pelinegros se dirigían a la salida de la carpa.

El momento llego, dijo Cell despacio mientras grupo de malvados amigos asentían y empezaban a dar marcha a su plan.

Gokú, Gokú, decía Lunch mientras caminaba tras los pelinegros haciendo que ambos detengan su andar.

¿Qué sucede?, dijo intrigado el joven de cabello alborotado girando a ver a la rubia de cabello ondulado.

¿Me podrías hacer un favor? , dijo la rubia, ignorando a la pelinegra.

¿Qué favor?, respondió confundido el apuesto jovencito.

Es que el león esta extraño, la verdad, no sé qué le pasa, y yo no me atrevo a entrar a su jaula, y a su domador no lo encuentro por ningún lado creo que pidió permiso para ir al pueblo, Gokú después del señor Sango, tú eres el único capaz de entrar a las jaulas de los felinos, decía Lunch.

Pero Gokú nunca ha entrado a la jaula de Samy el León, decía Milk con dulzura y preocupación a la vez.

No, pero él sabe cómo domar a los felinos, y Samy el león es un felino, además lo veo extraño, que tal si está enfermo, no podemos esperar hasta que el señor Sango regreso, decía Lunch, mientras el par de pelinegros se miraban entre sí.

En tanto:

Tres jóvenes que estaban dentro de una pequeña carpa, colocaban algo en unos trozos de carne.

Y si no resulta, dijo uno de ellos.

Sí, no resulta, pues el que sufrirá el ataque de sus propios felinos será él, decía el joven de cabello verde, haciendo una pausa para decir: Roséale más, hasta el recipiente debe estar impregnado de ello, la idea es que ese olor se impregne incluso en sus manos.

Si, tienes razón, lo más importante del plan ya está hecho, dijo Freezer mirando los recipientes que contenían los alimentos de los tigres de bengala.

Salida de la carpa:

Está bien, vamos con Samy el león, dijo Gokú, haciendo una pausa para decir dulcemente: ¿Milk, podrías llevarle sus alimentos a Cambo y a los demás?.

Claro, no te preocupes, yo se las llevo, tú solo ve que le pasa a Samy, dijo Milk preocupada, mientras su novio asintió y la rubia de cabello ondulado sonrió de manera disimulada.

Todo salió como lo pensé, ahora solo a contar los minutos para ver destruida tu belleza, pensaba Lunch, mientras ocultaba su felicidad.

Vamos, dijo Lunch.

Vamos, respondió Gokú.

Una vez que el joven de cabello alborotado y la rubia de cabello ondulado se alejaron del lugar, la pelinegra se dirigió al lugar donde estaban las raciones de alimentos de los felinos.

Minutos después:

Yo lo veo bien, pero de igual manera es mejor entrar, para confirmar si en verdad está bien, decía Gokú mientras miraba a un león desde fuera de la jaula.

Si Gokusito, mejor entra, respondió Lunch mientras pensaba: ¿La estúpida chiquilla ya abra entrado a la jaula o estar por entrar?, sea como sea, hasta hoy serás la más hermosa del circo, si corres con suerte quedaras desfigurada niña estúpida.

En tanto:

Una bella pelinegra, tomaba unas llaves que estaban junto a una jaula para abrir la misma, a los pocos minutos Milk abrió la jaula y entro a está, al hacerlo, los tigres que estaban acostados se pusieron de pie y empezaron a rodearla.

Aquí les traigo su comida, Gokú no pudo venir hoy conmigo, pero vendrá por la tarde, decía Milk con dulzura, mientras colocaba los recipientes en el piso, al tiempo que los ojos de los tigres se tornaban oscuros conforme empezaban a comer sus alimentos.

Bueno, ya voy saliendo, disfruten su comida, más tarde regreso con Gokú para que....., decía la pelinegra que ni acabo de pronunciar palabras cuando los tigres se abalanzaron contra ella.

¿Qué les pasa?, decía Milk, mientras trataba de librarse del ataque de los feroces felinos que le respondían con enfurecidos rugidos.

En otro ambiente del circo:

No, no tiene nada, a lo mejor e confundiste Lunch, pero Samy está bien, ¿no amigo?, dijo Gokú mientras acariciaba la cabeza al feroz león que ante el joven parecía un manso gatito.

Pues que bueno entonces, respondió Lunch, al tiempo que Gokú llevaba una de su manos a la altura de su corazón, al tiempo que unos gritos incremento su angustia.

Auxilio, auxilio,......, escucho el joven de cabello alborotado.

¡Milk¡ dijo Gokú saliendo a la velocidad de un rayo de la jaula.

Si, parecía ella, respondió fingiendo preocupación la rubia, mientras cerraba la jaula del león para luego echar a correr tras el apuesto joven.

Los minutos le parecieron eternos al joven de cabello alborotado, mientras corría hacia la jaula de los tigres de bengala.

Al llegar al lugar, lo vio rodeado de sus amigos circenses, quienes con rostros desencajados del temor y angustia miraban hacia la jaula.

¿Qué paso?, decía Lunch mientras miraba a las personas que estaban allí.

Parece que la atacaron, respondió una de ellas.

¡Milk¡ ¡Milk, mi niña¡ ¿cómo pudo suceder?, ¿cómo pudo suceder?, decía Gokú desesperado al ver el cuerpo de su amada; ensangrentado, lleno de mordiscos y rasguños, mientras abría la jaula para entrar a ella, al tiempo que los presentes retrocedían.

Una ambulancia, pidan una ambulancia, gritaba Bills.

Acabo de pedirla, respondió Dieciocho con voz entrecortada, mientras miraba al joven de cabello alborotado arrodillarse para tomar el frágil cuerpo de su amada en sus brazos.

¿Qué le hicieron?, ¿por qué lo hicieron?, ella es su amiga, su familia, yo la amo, como pudieron olvidarlo, como, decía Gokú con lágrimas en los ojos mientras se ponía de pie, con el cuerpo de su amada, al tiempo que los felinos bajaban la cabeza.

Perfecto, todo salió perfecto, nadie sospechara nada, sin duda esa droga, fue estupenda, ahora esos mugrosos felinos han vuelto hacer los de antes, pensaba Cell.

A los pocos minutos Gokú salió de la jaula, al tiempo que la ambulancia llegaba al lugar.

Se suspende la función de la noche, no abra funciones hasta que Milk, no se encuentre estable, decía Bills, mientras veía a la pelinegra ser llevada en una camilla, siendo seguida por su novio.

¿Cómo pudo suceder?, no es la primera vez que ella entra sola a la jaula, dijo Whiss.

No sé lo que haya pasado, pero si existe algún culpable de esto, ten por seguro Whiss que lo pagara, acoto Bills, antes de ir hacia la ambulancia, mientras los jóvenes involucrados que habían oído todo se miraban entre sí.

No hay forma de que prueben nada, dijo despacio Cell para tranquilizar a sus complices.

Horas después: "Hospital"

Un hombre de bata blanca salía a dar información sobre el estado de la pelinegra.

¿Cómo está?, dijo Gokú con dolor en su voz.

Su estado es delicado, algunas heridas han sido muy profundas,......., decía el médico mientras el joven de cabello alborotado entristecía.

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