Antes de que Winn pudiera explicar que ella era su esposa, una fuerte voz lo interrumpió. "¡Hola! Eres tú".

Lena se acercó a él y lo apartó a un lado antes de que este pudiera reaccionar.

Winn se quedó inmóvil y la miró con confusión. "¿Qué pasa, señora Zor-El? La señora Zor-El aún no la conoce, así que me gustaría presentársela".

Lena tuvo ganas de reírse en ese momento. Había estado casada con Kara durante tres años, pero aun así necesitaba que alguien más se la presentara.

"Gracias, Winn" , susurró mientras se inclinaba hacia él. "Pero no será necesario. Ya le pedí a Philippe que le diera el acuerdo de divorcio, así que no es necesario conocernos personalmente".

"¿Qué acuerdo de divorcio? ¿Piensa divorciarse de la señora Zor-El?" , murmuró Winn, tan sorprendido que retrocedió un paso mientras la miraba con asombro.

No pudo evitar preguntarse si esa mujer se encontraba mal de la cabeza. Kara era un mujer adinerada. ¿Por qué querría pedirle el divorcio?

Lena agarró el dobladillo de su vestido con una expresión tímida. "Sí, pero para evitar malentendidos innecesarios, me gustaría que lo mantuvieras en secreto".

Cuando Winn regresó, Kara acababa de terminar de pagar las cosas que Imra había comprado.

De repente, sus fríos ojos se posaron en el rostro de su asistente. Cuando recordó que Lena la había besado el día anterior, su expresión se volvió sombría. "Winslow, no me interesa cuál sea tu relación con ella" , anunció indiferentemente. "Pero quiero que la eches de inmediato de Kryptonopolis. Esa mujer no merece entrar aquí".

"Pero señora Zor-El..." , murmuró él.

"Winslow, la señora Zor-El te ha dado una orden. ¿Por qué no haces lo que acaba de decirte?" , interrumpió Imra con complacencia antes de que este pudiera continuar. Era evidente que estaba complacida con lo que Kara acababa de decir.

Pensaba que estaba echando a Lena por ella.

"Pero, señora Zor-El, ella es..." , insistió Winn.

Estaba en un dilema. La mujer a la que Kara quería que echara era su esposa. ¿Cómo podía hacer eso? Por lo tanto, se armó de valor para disuadir a su jefa, con la esperanza de que cambiara de opinión.

Sin embargo, no se atrevió a decir nada más cuando notó su mirada fría. Winn se volvió hacia los guardaespaldas que estaban detrás de él. "Pídeles que salgan lo más antes posible".

Estaba haciendo todo lo posible por seguir mostrándose cortés con Lena. No pudo evitar sentirse desafortunado al verse atrapado entre su jefa y la esposa de esta.

Como había estado escuchando su conversación, Lena no tardó en enterarse de que querían sacarla a ella y a sus amigos.

"No necesitas hacer nada. Nos vamos ahora" , respondió ella. De inmediato, agarró la bolsa de compras que le estaba dando la vendedora y salió de la tienda.

Kara la vio marcharse con un rastro de confusión en sus ojos oscuros.

Imra observó furiosamente la espalda de Lena, y luego ajusto su expresión. "Tengo hambre, señora Zor-El" dijo suavemente mientras la tomaba del brazo. "Vayamos al quinto piso de Fire Falls, ¿de acuerdo?".

Ella se volvió hacia Winn. "Muéstrame el camino" , ordenó.

Despejando todas sus dudas, su asistente se apresuró a guiarlas.

Mientras tanto, Lena y sus amigos ya se encontraban en la entrada de la Kryptonopolis.

De repente, Lena se detuvo y giró la cabeza para mirar a Jack y a Maxwell. "Muchas gracias por llevar nuestras bolsas de compras, chicos. Ahora vayamos a comer al quinto piso de Fire Falls. Yo invito".

Jack se quedó perplejo y se dejó caer dramáticamente en los brazos de Maxwell, quien estaba detrás de él. "Max... ¿Acaso Lena se volvió loca?".

En realidad, este también estaba confundido. Era un hecho que su amiga estaba teniendo un comportamiento bastante inusual. La comida en Fire Falls costaba un ojo de la cara. Eran pocas las personas que podían permitirse cena r en ese lugar.

Andrea le dio un codazo a Jack, tranquilizándolo. "El auto de Lena vale más de diez millones de dólares. Por supuesto que puede darse el lujo de comer en Fire Falls. ¿Acaso la estás subestimando?".

Jack pensó que ella tenía razón, así que se enderezó y arregló su ropa. Sin embargo, tal vez Lena podía invitarlos a Fire Falls, pero no era sencillo conseguir una mesa. Las personas tenían que hacer una reserva con antelación. "Es la hora del almuerzo, así que tal vez no haya una mesa disponible para nosotros" , refutó Jack.

Recordaba que cada vez que su padre invitaba a algunos clientes importantes a comer en Fire Falls, tenía que hacer una reserva con una semana, medio mes o incluso tres meses de antemano.

Sin embargo, Lena no lo escuchó en absoluto. Estaba demasiado sumida en sus pensamientos. Su esposa Kara estaba llevando públicamente a otra mujer de compras, y si no se equivocaba, cada una de las bolsas en las manos de Winn debían costar más de diez mil o incluso cientos de miles de dólares.

Kara le daba a Lena una enorme cantidad de dinero mensualmente, pero como seguía siendo una estudiante y no necesitaba tanto, solo tomaba una pequeña cantidad. Philippe guardaba el resto para ella, y Lena no preguntaba más al respecto.

Jamás había comprado cosas muy caras porque no quería despilfarrar el dinero de Kara. Pero esa mujer que la acompañaba logró que ella pagara todo lo que quisiera sin hacer nada. Si Lena era la esposa de Kara, ¿por qué debía conformarse con tan poco? ¿Por qué debía ser tan condescendiente con ella? No tenía que vivir austeramente, ¿verdad?

De todos modos, pronto se divorciarían. ¿Por qué no aprovechar esta oportunidad para disfrutar de una vida llena de lujos?

Lena se volvió para mirar a sus amigos, quienes seguían hablando sobre Fire Falls. Pensaba que valía la pena invitarlos a un banquete.

Entonces, sacó su celular y llamó a Philippe.

La llamada duró un minuto, y después de colgar, se volvió hacia ellos. Sus amigos interrumpieron su intensa discusión y la miraron atónitos.

"Vamos" , dijo Lena tranquilamente.

"¿A dónde?" , preguntó Samantha con cautela.

Lena esbozó una sonrisa. "Los invite a comer, ¿no?".

Luego, empezó a caminar y los demás la siguieron.

Unos minutos más tarde, llegaron a Fire Falls.

Lena estaba esperando que el mesero confirmado la sala privada que había reservado a su nombre cuando, de repente, el ascensor del quinto piso volvió abrirse.

La mujer que salió exudaba un aura tan poderosa que resultaba imposible ignorarla.

Lena se agarró el pecho con sorpresa. Cuando aún no consideraba divorciarse de Kara, sentía que ver a su esposa era más difícil que ir al cielo, pero desde que tomó esa decisión, ya se habían encontrado tres veces.

No podía evitar preguntarse si ella estaba apareciendo a propósito para llamar su atención y salvar su matrimonio.

"¡Échenla!". La voz helada de la mujer fue suficiente para que Lena recuperara el sentido.

El gerente del lugar se secó el sudor frío de la frente. "Señora Zor-El, estos son los invitados de Philippe" , explicó nerviosamente.

Kara observó a los estudiantes, y luego señaló a Lena. "Winslow, sácala a ella de aquí y deja que los demás se queden" , ordenó.

Imra, que había estado en silencio todo este tiempo, estuvo a punto de echarse a reír. Aún pensaba que Kara estaba haciendo todo eso por ella.

Por otro lado, Winn estaba muy confundido. Kara jamás había visto a Lena. ¿Por qué siempre estaba en contra de ella? Parecía odiarla demasiado.

Ya había pasado medio minuto, pero Winn seguía sin reaccionar. Kara perdió la paciencia y le dirigió a su asistente una mirada fulminante. "¿Acaso no puedes manejar un asunto tan trivial como este?" , preguntó.

Winn estaba aterrorizado. "No, señora Zor-El" , respondió. "No es eso. Es solo que ella es... En realidad, ella es...".

***

Como vamos, que les ha parecido la historia?

Posiblemente habrá una reconfiguración de las parejas que normalmente leemos y que nos gustan, será algo diferente.
Lo único seguro es que Kara y Lena son pareja de principio a fin.