Capítulo 7: La sombra de la dudaNathaly se encontraba en una encrucijada emocional. Por un lado, quería confiar en Rengoku y en su aparente compromiso con el zoológico, pero por otro lado, las sospechas y rumores que circulaban a su alrededor la mantenían en constante alerta. Cada pequeña inconsistencia en los informes financieros o en la ejecución de los proyectos era como una piedra en su zapato, recordándole que algo no estaba del todo bien.A medida que pasaban los días, Nathaly se encontraba cada vez más dividida entre su deseo de creer en la integridad de su compañero de trabajo y la creciente evidencia de que algo turbio podía estar ocurriendo a sus espaldas. Intentaba mantener una actitud profesional y enfocarse en su labor en el zoológico, pero la sombra de la duda la perseguía a cada paso.Los empleados del zoológico también comenzaron a notar las mismas irregularidades que inquietaban a Nathaly. Algunos se acercaban a ella en busca de respuestas, pero ella se limitaba a tranquilizarlos sin poder ofrecer una explicación convincente. La confianza en Rengoku se tambaleaba, y la tensión en el ambiente laboral era palpable.A pesar de sus esfuerzos por mantener una fachada de normalidad, Nathaly no podía sacudirse la sensación de que algo estaba mal. Las noches se volvieron inquietas, con pensamientos turbulentos que la mantenían despierta. ¿Qué estaría tramando realmente Rengoku? ¿Era posible que sus intenciones no fueran tan nobles como aparentaban?La incertidumbre se convirtió en una compañera constante para Nathaly. Cada interacción con Rengoku estaba teñida por la sombra de la duda, y sus conversaciones se volvieron más cautelosas y cargadas de insinuaciones. A pesar de todo, ella se aferraba a la esperanza de que todo fuera solo producto de su imaginación exagerada, de que Rengoku fuera simplemente un colega dedicado y comprometido.Pero a medida que las semanas pasaban, las sospechas se volvían más persistentes y difíciles de ignorar. Nathaly sabía que debía actuar, que no podía permitir que la incertidumbre y la desconfianza minaran la integridad del zoológico. Sin embargo, el miedo a lo desconocido y las posibles repercusiones de sus acciones la mantenían paralizada, atrapada en un dilema moral del que no sabía cómo salir.Así, el capítulo  de esta historia se cerraba con Nathaly en un punto de inflexión, enfrentando la difícil decisión de seguir adelante con sus sospechas y confrontar a Rengoku o mantenerse en la penumbra de la incertidumbre, temerosa de lo que podría descubrir. La verdad, aún oculta en las sombras, esperaba ser revelada en el siguiente acto