Capítulo 8
Narra Thianna.
Una semana después...
- Juan... ¿Estas bien?
- Si.
Siguió mirando la pared de la oficina.
Hace dos días está así. Distraído. No presta atención en nada, ni a nadie. Creo que esta pasando lo que dijo Marlli, y me da algo de miedo. No se porqué.
Terminé de acomodar lo que pidió y seguí viéndolo.
- ¿Necesitas algo mas?
- No. -Me miró- ¿Te pasa algo?
- No, nada, estoy Bien. Tú estas raro.
- ¿Yo? No, estoy bien. Genial.
Empezaba a levantar su voz.
- Okey, solo decía...
Me senté y me cruce de brazos.
- ¿Qué? ¿Te vino?
- Por si sabias, las embarazadas no menstrúan. Por ende no.
Rodó los ojos.
- Ya, vamos a casa. Mañana seguiré.
Agarró sus cosas y salio de la oficina. Suspire cansada y salí tras él.
Narra Juan.
Me tire en la cama y suspire.
Tengo miedo.
Ya se que me estoy comportando extraño. Lo se. Pero no lo puedo controlar. No se como reaccionar a ciertas cosas y no puedo ser yo. Cambio drásticamente y me asusta. No quiero que se vaya por mi actitud, es lo que menos quiero.
Escuche un fuerte estruendo y pegue un salto de la cama. Mire la ventana y vi la lluvia caer junto a los relámpagos. Un trueno me hizo sobresaltar de nuevo.
Me levante y fui abajo. Thianna miraba la lluvia por la ventana de la cocina y tomaba algo humeante. Un trueno hizo que se sobresaltara. Volteo en mi direccion, pero luego tapó su rostro. Me acerque, quite la taza de sus manos y voltee el rostro para que me mire.
- ¿Que pasa?
- Nada.
Sequé sus lágrimas y la abrace.
- Dime que pasa...
- Le tengo terror a la lluvia... Creo que ya te dije porqué.
- Se que no es eso... Es algo mas.
Suspiro y se alejó de mi.
- Te comportas raro y se que yo soy la razón. Siento que estoy molestandote y...
Me acerqué rapidamente y la besé, interrumpiéndola. El beso era lento, suave. Puse mis manos en su cintura, atrayéndola a mi. Sus manos fueron a mi cuello, también tironeando mi pelo.
Me separe de ella rapidamente. Se quedo viéndome.
- Yo... Lo siento
Me fui arriba casi corriendo y me encerré.
¿Por qué huí así?
Volví a bajar corriendo y volví a besarla. No se que me pasa.
- Juan ¿Estas bien?
- Ni yo se que me pasa -Mordí su labio- Pero dejame besarte.
Bajé a su cuello y deje besos húmedos junto a algunas mordidas. Gimió bajo.
- No quiero que... No quiero sexo.
Dijo entre gemidos.
- Son sólo besos.
Reí.
- Igual. No quiero que llegues ahí.
Acaricie su feminidad. Tenia puesta una bata de seda, y debajo su ropa interior.
- ¿Seguro? Estas húmeda.
- Si... Seguro.
Me besó de nuevo. La subí a la encimera, levantando la bata. Abrí sus piernas, corrí su ropa interior y pase mi mano por su feminidad.
- Dije que...
- No vas a perder la virginidad con esto, tranquila.
Me arrodille delante de ella.
- ¿No va a doler ni nada...?
- Tranquila... Sólo dejate llevar.
Empecé a lamer su intimidad. Gritó bastante fuerte.
- ¡Juan!
Tironeo mi pelo. Acaricie sus piernas mientras seguía con mi trabajo. Se retorcía de placer, y esto no es tanto. Pero bueno, dicen que las embarazadas tienen las hormonas por las nubes, así que supongo que sera eso.
- Voy a... Llegar.
Acarició mi mejilla con una mano, con la otra seguía tironeando mi pelo. Pasaron unos dos o tres minutos y se corrió.
- Juan...
Dejo de tironearme para acariciar mi cabeza. Limpie todo y me levanté. Las piernas me fallaron pero me sostuve de la encimera.
- Dios... Eso ha sido increíble.
- Y no es nada. Hay mejores cosas.
Sonrió.
- ¿Por que se te dio por hacer eso?
- Quise hacerlo y ya. Hace mucho no hacia eso, debió ser un asco.
- No se... Se sintió bien.
Se sonrojo. Sonreí y bese su mejilla.
- Mejor vamos a dormir, es tarde.
Bajó de la encimera, tome su mano y nos fuimos arriba.
- Duerme conmigo hoy...
Me miró.
- Por favor. Además le tienes miedo a la lluvia y creo que puedo protegerte.
Se sonrojó.
- Esta bien...
Fuimos a mi habitación.
- ¿Me puedo quitar esto?
- Si, duerme cómoda. O sino cambiate y ven a dormir.
- No, tengo flojera -Rió- Dormire así.
Se quitó la bata, quedando en ropa interior. Me acosté , ella a mi lado. La abrace y me quede profundamente dormido.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro