Capítulo 3
Apenas corté tiré el celular a la cama, me puse las dos manos en la cabeza y pensaba sin cesar: << ¡Oh Dios mío! ¡NO PUEDE SER! O sea ¿Me ha estado gustando un gran patán?, ¿Eso será verdad o será solo una mentira mentira? >> Mientras me torturaban mis pensamientos mis padres estaban vuelto locos arreglando la casa, y cocinando. De repente mi madre toca la puerta desesperadamente para decirme que me arreglara que ya era un poco tarde, y yo le dije que pasara que me estaba comenzando a arreglar para la cena (Bueno kike arreglarme), ella me dijo que acababan de llegar... Que ya ellos estaban aquí en la casa, así que la miré y le dije:
Diles que no voy a bajar todavía mamá, mírame como ando.
Okey hija pero ¡APÚRATE! – Dijo mi madre – Te espero allá, ¡NO TARDES POR FAVOR!
Luego de haber pasado 20 minutos de eso, mi papá subió nuevamente a buscarme y sinceramente yo no quería bajar para allá ya que sabía que Alejandro estaría allí y de verdad me da coraje verlo y más por lo que me acaba de decir Yeray; tocó la puerta y le grité: ¡YA VOY PAPÁ! ¡AÚN NO ESTOY LISTA VALE! y me dijo que estaba bien pero que me apurara porque me estaban esperando para comer.
Narrador: mientras samanta pensaba que hacer, como va a hacer para llevar la fiesta en paz para que sus padres y los míos no se dieran cuenta de que algo pasa, a Alejandro se lo comían las ganas de ver a Samanta y cometer toda clase de fechorías con ella, así que se le ocurrió una idea que para el era BRILLANTE:
Discúlpeme señor Toussaintt – Dijo Alejandro interrumpiendo la conversación – ¿Dónde queda el baño? Necesito ir a lavarme las manos.
Mi hermano no deja de ser fresa – Pensaba Enmanuel.
Bueno está arriba en la segunda puerta, mano derecha – Contestó el padre de Samanta.
Es que en realidad si iba a ir al baño, pero también iba a aprovechar de buscar a Samanta, entró al baño (que casualmente estaba al lado del cuarto de Samanta), el padre de ella había abierto la puerta cuando fue y ella no la cerró porque ya iba a salir, él pasó por allí y la vio mirándose en el espejo mientras se peinaba su cabello largo y laceo, entró sigilosamente cerró la puerta con seguro y sin pensarlo dos veces, se le fue encima y le tapó la boca; Samanta estaba atónita porque obviamente no lo veía venir, de repente Alejandro le dice al oído: << Ya es tiempo de que seas mía por completo Samanta y vas a colaborar porque sino vas a ver lo que te va a pasar >>, ella lo miró ahora si por el espejo y se le escapó una lágrima.
Narra Samanta: estaba en una situación crítica con Alejandro, ¡No sabía que hacer!, él empezó a besuquearme el cuello, yo solo escuchaba en mi mente las palabras de Yeray diciéndome: "Él solo quiere SEXO contigo" y yo no sé de donde fue que saqué tanta fuerza pero lo empujé y le dije muy molesta:
¡BASTA ALEJANDRO! no quiero que vuelvas a tocarme porque te va a pesar – Alejandro se puso las manos en la cintura mirándome de una forma perversa.
¡Ja! – Dijo Alejandro de forma sarcástica – No cuentes con ello Sam, y es mejor que bajemos antes de que sospechen algo – Samanta lo mira enojada.
¡Termina de irte ALEJANDRO! – Gritó.
Samanta: Bajamos y todos me quedaron viendo. Supongo que sería por la cara que llevaba de "TRÁGAME TIERRA". Me sentía muy rara. Pero igual... tomé asiento al lado de mi mamá y uno de los hermanos de Alejandro, tomé mi teléfono y le escribí a Yeray disimuladamente:
"Brother está pasando, ¡Tu primo quiso violarme! O almenos eso parece"
"Sam, yo te lo dije, pero descuida Alejandro se las verá conmigo, se metió con mi Sis y le va a ir muy mal"
"Gracias Bro, ¡TE QUIERO UN MONTÓN!"
"yo igual princesa"
Habiendo escrito eso y calarme mi regaño por tener el celular en las manos mientras estaba en la mesa, mi mamá sirvió la cena y todos nos pusimos a comer, y Alejandro me miraba con cara de "PERVERTIDO", así que le dije a mi mamá de la siguiente forma:
No quiero más mamá – Dije – ¿Puedo retirarme?
Si tesoro, guarda eso en el microondas – Asintió – Y sube a tu habitación.
Cuando mis padres y los padres de Alejandro terminaron de cenar, ellos junto con los hermanos de Alejandro salieron al patio a conversar un rato, bueno todos menos Alejandro, él dijo que iba a ir al baño "Otra vez" a lavarse las manos. Yo estaba hablando con Yeray por mensaje cuando Alejandro entró otra vez a mi cuarto y me lanzó nuevamente a la cama y comenzó a besarme y a tocarme de una manera impropia y sucia; pero lo que Alejandro no sabía era que Yeray estaba a punto de llegar , ya que cuando estaba mensajeando en la mesa, le había dicho que viniera (Por medidas de seguridad), ya luego de unos minutos cuando él me había quitado la blusa, llegó Yeray y apartándolo de mí, lo golpeó, luego lo agarró por el cuello de la camisa y le dice:
Tú te le acercas nuevamente a Samanta y te mato Alejandro – Lo amenaza – ¿Me escuchaste bien no?
Yeray, ¡Relájate! Solo juego un poco con ella es todo... – Dijo – Espera... ¿Por que reaccionas así? no será que... ¿Te gusta Samanta?
Yeray se queda callado mirando hacia el piso y luego de un momento, le respondió:
Sí, sí me gusta y no solo eso ¡Estoy enamorado de ella! – Dijo Yeray – Pero más que sea no soy un PERRO como tú que estas intentando violarla desgraciado – Lo empuja.
*Alejandro se acomoda la camisa y se va al baño*
Yeray me miró con algo de vergüenza, y yo lo miré mientras me ponía nuevamente la camisa y le pregunté:
Oye, ¿Eso es cierto lo que dijo ese?
Si – Contestó – Si lo es, pero, sé que yo nunca te voy a gustar Samanta.
Me siento a su lado y le digo:
Yo no tenía idea de que te gustaba Yeray – Dije – Yo, ¡Te hubiera hecho caso desde un principio!
Me acaricia la mejilla y se acerca:
Te amo Samanta más de lo que crees, estoy enamorado de ti desde primer año – Dijo Yeray mientras yo lo miraba a los ojos.
¡Solo déjate llevar Sam! – Dijo y me besó.
Mientras Yeray me besaba, yo tenía la sensación de que Alejandro nos estaba observando y en realidad si era así, y no solo eso sino que también se le salían las lágrimas al vernos de esa manera; él no comprendía que era lo que a él le pasaba conmigo, y al verme con Yeray algo en él se rompió por completo.
Oye Samanta – Dijo Yeray – Sé que esto te sonará algo apresurado pero es lo que siento... ¿Quieres ser mi novia? – Preguntó – Si no tienes una respuesta ahorita, lo piensas y después me lo dices.
Iba a decirle que no porque... O sea ¡NO! Yeray es como un hermano para mí, aunque si me gustaría salir con él pero... En estos instantes no, miré hacia la puerta por un momento y vi a Alejandro, luego de eso fue que le respondí a Yeray:
Si Yeray, si quiero ser tu novia – Le doy otro beso mientras observo la expresión en el rostro de Alejandro.
Narrador: Alejandro, apenas vio la escena en la que Yeray y Samanta andaban, se dio cuenta de que le estaba gustando enserio Samanta, y que ya iba dejando de ser un simple juego pero, él no quería aceptarlo; él todavía quería acostarse con ella pero ya no por diversión, esta vez era porque le estaba gustando en pocas palabras le tenia ganas; pero estaba en el dilema de que sabía que si llegaba a tocarla nuevamente, su primo lo mataría y sabía que Yeray lo que promete lo cumple así que no sabía qué hacer.
Samanta: Yo solo acepté ser novia de Yeray para olvidarme de lo poco que siento por Alejandro, y porque quería hacer feliz a Yeray, además él se merece que le dé esta oportunidad, no es un mal chico, quizás hasta me llegue a enamorar de él algún día, también acepté porque yo sabía que andando con Yeray, Alejandro no me tocaría más. O al menos, ¡Eso pensaba yo!
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