Samanta: Todavía no entiendo de dónde sacó Yeray eso de que yo había terminado con él, si yo lo que le dije fue: "Si sigues ocultándome cosas de esa magnitud... Esta relación no va a funcionar" ya si él se lo tomó mal, es problema de él, porque, díganme ustedes, si su novio les oculta algo de esa magnitud, también reaccionarían de la misma manera... Pero, con todo y eso, es cierto lo que me dicen mis amigas, no debo de dejarme llevar por el orgullo... O Perderé a Yeray.

Tomé el teléfono y busque el número de Yeray... Y cuando estaba a punto de marcarle... Me retracté, es que... Este tipo de cosas se hablan mejor en persona, así que esperaré a mañana para arreglar esto.

Amo profundamente a Yeray y por eso me duele todo lo que está pasando, y el que me oculte cosas, no me parece correcto.

Al día siguiente, tome mis cosas luego de haberme arreglado para irme a clases, estaba muy distraída, pensaba en cómo me iba a disculpar con Yeray por la forma en que lo traté... Debí haberlo escuchado. Fiorella me guardo el puesto que se lo pedí, Yeray todavía no llegaba a clases (Estoy ansiosa, ya quiero que llegue) – Pensaba. Pasaron unos 20 minutos y llegó, todo ojeroso y pálido – ¿Qué tendrá? – Comentaba Fiorella.

Se ve muy mal – Le dije – La verdad que se ve muy mal.

Se sentó al otro lado del salón junto a un chico que se llama "Terry" el casi nunca se sienta junto a él y tampoco saludo a Fiorella... Algo malo le pasó a Yeray, y no precisamente lo que pasó conmigo.

Fiorella – Le dije – Puedes decirle a Yeray que venga... Quiero hablar con él.

Con que al fin le pedirás disculpa por tu mal trato del otro día – Dijo bromeando un poco.

Si y no solo eso – Decía – Quiero que me explique sus razones sobre porque me lo oculto, ya escuche la de los demás pero, ahora quiero escucharlo a él.

Bien, ya voy – Dijo y fue a buscarlo.

Para mi sorpresa, Yeray, no quiso hablar conmigo... Dijo que después, Fiorella lo intentó convencerlo y nada – Dale tiempo Samanta – Dijo poniendo su mano sobre mi hombro.

Pasé toda la tarde viendo a Yeray... Y él ni una mirada me daba, ya me estaba preocupando... Al salir de clases lo seguí para arreglar el asunto y cuando estaba a punto de llamarlo, mi corazón... ¡CASI SE PARA! Al ver a una chica corriendo a abalanzarse a los brazos de Yeray y él la cargaba de una manera que... No sabría explicarles... Solo sé que su sonrisa no era la misma, parecía más feliz.... Ya veo porque no has ido a buscarme – Pensaba – Tenías otra y... Y yo... Yo me trague el cuento de que... Era importante para ti.

Estaba tan sorprendida que no hice más que correr en dirección contraria, quería estar sola... Otra vez me han lastimado el corazón, soy una tonta.

. . .

¡Primo!, ¿cómo estás?, ¿Qué tienes? – Preguntaba Carley.

Estoy un poco triste – Contestó Yeray – Tengo problemas con la persona que amo.

Espero que lo soluciones pronto Yeray – Decía – Vámonos, quiero saludar a Perlys.

. . .

Llegué a nuestro sitio especial, y comencé a llorar... No creía lo que acababa de presenciar, Yeray... Con otra, y hace una semana me juraba "Amor ETERNO", eso no existe por lo visto, yo soy muy orgullosa para pedir perdón y sin embargo por él, POR ÉL iba a dejar todo ese orgullo para que estuviéramos bien y así me paga, le di confianza le di lo mejor de mí... Y ahora no tengo es NADA, ¡NADA!, Yeray... Espero que cuando te des cuenta de lo que estás haciendo... No sea muy tarde... Porque nadie va a jugar con mis sentimientos otra vez.

Fiorella: estuve casi toda la tarde buscando a samanta por todas partes ya que llame a su casa y en su casa tampoco estaba, me estaba preocupando, ¿Será que Alejandro tiene algo que ver?, pues iré a averiguar sobre eso... Y Yeray me va a acompañar sea como sea. Media hora después, ya estaba de vuelta por el barrio y me dirigí a casa de Yeray, llame varias veces a la puerta y no atendía nadie, cuando toque la última vez, fue que salió Yeray junto con una jovencita muy bonita por cierto, ella estaba pegada a él como un chicle, no me contuve y lo abofeteé, la chica me reclamó por la bofetada – ¡CÁLLATE!, ¿Cómo te atreves a serle infiel a Samanta Yeray? – Él y ella se miraron entre si y luego soltaron una larga y tendida carcajada – ¿Qué les parece gracioso? – Dije furiosa.

No Fiorella – Decía Yeray – Ella es mi prima Carley, vino de visita.

Mucho gusto – Dijo Carley – Disculpa el malentendido, es que como soy muy "Pegoste" con mi primito todos piensan eso.

Gracias por aclarar – Dije – Yeray, estoy aquí porque... ¡Samanta no aparece por ninguna parte!

¿CÓMO? – Dijo Alarmándose un poco – ¿Desde cuándo no la encuentran?

Desde la tarde – Dije preocupado – Te vine a buscar para que me acompañes a casa de Alejandro, quiero descartar que sea él.

Vamos – Dijo – No perdamos tiempo.

Como dijo Yeray, no perdimos tiempo, corrimos a la casa de Alejandro y tocamos la puerta de una manera violenta, luego de tocar varias veces salió su hermano y le preguntamos en tono acelerado – ¡Donde está Alejandro! – Él nos dijo que nos calmáramos que Alejandro estaba dormido a esta hora, e incluso nos dejó pasar a confirmar. Ahora si nos desesperamos todos, porque allí sí que no teníamos idea de donde podría estar Samanta, la cuestión es que debemos encontrarla pronto porque quien sabe qué clase de locuras podría estar cometiendo en ese estado de ánimo que ella ha estado teniendo últimamente.

Yeray: esto me pasa por no arreglar las cosas a tiempo... Quien sabe que le habrá pasado a Samanta como para escaparse así, debo de encontrarla pronto... Samanta... ¡POR FAVOR!, no hagas nada que pueda perjudicarte, no quiero perderte mi amor – Pensaba – Necesito explicarte todo... TODO...

Tome la camioneta y junto con Perlys y las demás fuimos a otras partes a buscar a Samanta... Tenemos que encontrarla pronto...