XXIV
Después de colocarme la pijama, salí hacia la cocina, cuando llegue ella se quedó estática mirándome como si algo estuviera mal.
-Ahora me vas a decir que tampoco cuadra está ropa, verdad?, Que tengo que ir a cambiarme de inmediato?.
Ella solo sonrió y se levantó, camino hacia donde estaba parado y me rodeo el cuello con los brazos.
-No, de hecho te iba a decir que, si me podía quedar a dormir esta noche aqui contigo?.
Yo le sonreí y asentí, la cogí por la cadera y la alcé, ella enredo las piernas a mi cintura y empezamos a besarnos como si la vida dependiera de ello.
Empecé a caminar hacia mi cuarto, en cuanto llegue cerré la puerta con dificultad, sin dejarla caer, me senté en la cama y ella me rodeaba con las piernas, sentía la humedad de su sexo sobre el mío que ya estaba listo para cualquier cosa, le empecé a meter la mano bajo la camisa, mientras le besaba el cuello, mientras tanto ella solo movía la cabeza y gemía en mi oído, cosa que me parecía erótica.
Me moví un poco para sentarme mejor, por la posición en la que ella estaba la punta de mi miembro, hacia presión en la intimidad de ella, cuando me di cuenta de eso, empecé a moverme un poquito, saque la mano de la camisa y la cogí del borde de la camisa y se la quiete despacio, la tire lejos de donde estábamos, le empecé a besar el nacimiento de los pechos, mientras tanto ella me besaba el cuello, le quite el sostén y le besé los pezones que ya estaban erectos, los empecé a lamer y morder muy suave, ella gemía y se aferraba a mi camisa, en un momento sentí como se movía en círculos sobre mi miembro, la levanté despacio y la acosté sobre la cama, ella temblando empezó a quitarme la camisa, ya sin camisa me quedé quieto, viéndola.
-Estas...segura?
Le dije con dificultad para respirar, viéndola a los ojos, ella asintió y vi que estaba sonrojada.
La seguí besando, le empecé a quitar el pantalón, ella levantó la cadera y se lo quité, lo bote y me quiete la pantaloneta, ella se quedó viendo hacia mis boxer, el bulto que ya se notaba, se sentó y fue moviendo la mano hacia ese bulto, me quedé quieto viendo cada movimiento que hacía, puso la mano y yo le puse la mano sobre la de ella.
-Es...m...muy...gra...grande?
Solo alce los hombros y ella quitó la mano, se volvió a acostar y yo sobre ella, empecé a bajar la mano por su vientre y la metí en sus bragas, sentí la humedad, moví un dedo desde su clítoris hasta la entrada, estaba muy mojada y cuando quite la mano de ahí, me levanté y le quite la bragas, empecé a besarle desde el cuello hasta llegar a la cadera, me levanté y la vi, con cuidado y siempre viéndola a los ojos le levanté la piernas, y empecé a darle besos en la intimidad, ella solo gemia y se aferraba a las sábanas, me quedé viendo como se mordía el labio inferior y suspiraba, volvi a lo que estaba haciendo, le empecé a lamer los pliegues de su intimidad, chupaba el clítoris, cuando vi que estaba empezando de temblar, la penetre con la lengua, probando el sabor dulce que tenía, la veia de vez en cuando, en el momento que sentí que estaba a punto meti uno de mis dedos lo más suave posible y empecé a chupar de nuevo el clítoris, en el momento que se corrió, saque mi dedo, subía a su boca y la bese estaba cansada y se notaba.
—Pequeña, puedo empezar? —le pregute acariciando su rostro.
Ella asintió en señal de respuesta, me levanté y me quiete el boxer, mi miembro ya estaba duro, y dolía un poco, me acosté sobre ella y le abrí las piernas suavemente, puse la punta en su entrada y solo la veía para que me diera la aceptación.
—Er...Erick...me...va...a...a...doler? -hablaba con dificultad.
-Mami, prometo que no te va a doler, si algo te molesta me dices?
Ella asintió y yo empecé a adentrarme en ella, estaba muy apretada y húmeda para recibirme, a medida que entraba se dilataba y me abría paso, en cierto punto, sentí esa barrera que tanto enloquecía a un hombre, la bese y me adentre por completo en ella, se aferraba de mi espalda rasguñando, me quedé quieto, hasta que sentí como empezaba a moverse de a poco, comencé a embestirla despacio, a medida que ella se movía me pedía más, le besaba el cuello y los senos, en medio de los besos sentía los gemidos, después de un rato, sentí como sus paredes, me apretaban y aplicaban un buen ajuste a mi miembro, la dejé llegar al clímax primero y antes de terminar salí de ella, se quedó viéndome.
-Princesa, no tenemos protección, no quiero que quedes en embarazo, ya vuelvo.
Me fui al baño y terminé alli, cuando volví la vi acostada de medio lado, destapada y desnuda, en medio segundo mi amigo estaba listo para volver a iniciar, la alce y corrí las sábanas, la acosté y la tape, recogí la ropa, y me puse el boxer, me acosté al lado de ella, se dio la vuelta y se acostó sobre mi pecho, le di un beso en la cabeza y me quedé dormido.
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