Naruto se quito la venda de los ojos. Miro con sueño a Sasuke, que estaba a su lado, con voz ligeramente ronca pregunto:

-¿Llegamos? -

-Tráele el desayuno - Sasuke levanto suavemente la mano, indicando a la azafata que colocara el desayuno delante de Naruto.

Ahora mismo se encontraban viajando en un avión por ordenes de Madara. Ya había pasado una semana desde que renuncio a su trabajo y no se sentía mal por tomar tal decisión, necesitaba estas vacaciones.

Aunque llamarlo "vacaciones" esta de más, en realidad era un viaje de matrimonio.

Si, estaba a punto de casarse.

Naruto se apoyo en el asiento y se acomodo. Se froto las sienes adoloridas, aturdido mientras preguntaba -¿He dormido mucho tiempo? -

-Mmm - A diferencia de él , Sasuke estaba muy despierto y su camisa, se pregunto si seria de un tejido elegante, ya que no tenia ni una sola arruga.

"¿Como ha sucedido esto?"

Simple, la persona que estaba a su lado hizo todo lo posible para adelantar el matrimonio y por supuesto que su tío no se hizo del rogar. No querían que el bebé naciera fuera del matrimonio y tampoco querían que Fugaku se metiera en sus asuntos.

Naruto se alboroto el cabello y miro el desayuno occidental que la azafata había puesto frente a él. El desayuno estaba fuertemente aceitado y le empezó a provocar nauseas - ¿Puedes pedirme un poco de avena? -

Sasuke asintió, volvió a alzar la mano para que retiraran los platos y les pidió que prepararan un desayuno ligero.

-Gracias -

Naruto nunca había viajado en un avión y creyó que nunca iba a viajar en uno, pero el destino lo sorprendió.

Pero no entendía ¿Cuál era la emoción de viajar en un avión? Permanecer sentado era realmente agotador. Solo cuando se aburría miraba hacia afuera.

El cielo de la madrugada no era tan azul como había imaginado, era de un blanco pálido casi grisáceo, las nubes gordas que tenia a la vista eran como montones de algodón y la lineal del horizonte, muy lejana, estaba tenuemente cubierta por la mitad de un amanecer donde la luz dorada del sol se incrustaba con un halo de bordes rojos desde la lejanía, casi floreciendo.

Nunca había visto el sol así.

Naruto lo miraba con cierta novedad, cuando una oscuridad cayo repentinamente frente a sus ojos.

-Te vas a lastimar la vista - Sasuke dejo una bufanda frente a él y luego le tomo la mano.

-Oh - Naruto aparto la mirada y se adapto a la luz de la cabina por un momento antes de darse cuenta de la leve sensación de escozor en sus ojos después.

Se froto los ojos y le agradeció por segunda vez al azabache.

Sasuke sonrió ligeramente y le dio un beso en la mejilla.

El avión aterrizo a tiempo en el aeropuerto internacional.

Aunque había comprobado de antemano el clima local y había preparado la ropa para el vuelo, el clima frio y húmedo seguía incomodando a Naruto.

Subió la cremallera de su grueso abrigo de lana de cordero hasta arriba y metió sin miramientos la mitad de su barbilla bajo el suave y esponjosa bufanda mientras miraba al Uchiha - ¿Vamos directamente al registro? -

Mientras hablaba, una niebla blanca y fría se empaño frente a su cara. Sasuke no respondió a su pregunta, miro su nariz enrojecida y pregunto - ¿Tienes frio? -

Los hombros temblorosos de Naruto decían claramente que si, pero su cabeza tembló mientras respondía suavemente - Estoy bien -

Sasuke frunció ligeramente el ceño y se empezó a quitar su abrigo - No mientas -

Naruto alzo ambas manos - ¡Estoy bien! - agarro la mano de su prometido - No te quites el abrigo, solo con tomar tu mano me basta -

A Sasuke no le convencía la idea, pero al ver los ojos del rubio, desistió.

Empezaron a caminar hacia la salida del aeropuerto.

Madara les había contactado un chofer y un guía del país con antelación y los recogieron nada más salir del aeropuerto.

El chofer, un nacional del país, solo sabia que estaba recogiendo a un sobrino de un líder importante e inconscientemente ignoro a Naruto, que lo acompañaba.

Le entrego a Sasuke el café caliente que había preparado de antemano y le sonrió adulonamente - Hace frio aquí ¿Verdad? Debería calentarse primero -

Sasuke giro la mano para entregar el café caliente a Naruto, que se quedo atónito y se negó inconscientemente - Es cafeína, sabes que no puedo...-

-Lo se, es para que te mantengas caliente - Sasuke miro al chofer - Llévanos al hotel -

Naruto apretó el café y lo puso junto a su pecho.

El auto se alejo durante mucho tiempo.

De vuelta al hotel, Sasuke hizo una llamada telefónica y la atención de Naruto se centro en la nieve que se derretía fuera de la ventana y en el cielo gris, que parecía estar a punto de llover.

Tras permanecer un rato en la habitación, llamaron a la puerta, y como Sasuke estaba ocupado, Naruto se acerco y abrió la puerta.

El empleado del hotel le entrego la ropa - Esta es la ropa que necesita -

Naruto agarro la ropa y le dio las gracias antes de cerrar la puerta.

Sasuke seguía hablando por teléfono, así que le mostro la ropa con una seña y recibió como respuesta un asentimiento de cabeza.

Él puso la ropa en el sofá, pero al cabo de un rato no pudo reprimir las dudas en su corazón, pensando que el color y el estilo de ropa no se parecían al estilo que llevaría Sasuke.

Dudo en mirar la talla en el cuello de la ropa y como era de esperarse, era para él.

Cuando Sasuke termino la llamada, miro al rubio y le pregunto - ¿Te gusta? -

-Si -

Sasuke sonrió y después de pensarlo, pidió a alguien que le trajera una bufanda más gruesa y unos guantes a Naruto.

El clima aquí era más frio que en muchos otros lugares en invierno, por lo que el hotel siempre tenia a mano artículos de abrigo para los huéspedes que tenían miedo al frio.

Los dos se bañaron y se cambiaron de ropa.

Naruto vestido con un abrigo de lana y una bufanda gruesa se sentó en el asiento trasero junto al azabache.

El corazón de Naruto empezó a agitarse, estaba a punto de casarse, los nervios y la alegría invadieron su corazón. Y estaba claro que Sasuke también se sentía así.

-No me gusta que nos casemos por la civil -

Naruto sonrió y atrapo el brazo del Uchiha.

-Sabes que una boda grande, solo nos pone en peligro y además íbamos a engañar a Dios -

Sasuke alzo una ceja - ¿Por que íbamos a engañar a Dios? -

-Porque todavía eres menor de edad, gracias a tu tío podemos casarnos ya que pudo sobornar al juez -

Sasuke no respondió, pero estaba claramente molesto.