Me desperté y suspire, me levanté de mi cama y palpe el escritorio al lado mío para sentir donde estaban mis coderas, casi nunca me quito mis rodilleras ya que esas me cuestan mucho trabajo ponérmelas, pero cuando me quedo dormido en el sillón con mis hermanos uno de ellos siempre me trae a mi cuarto y me quita todas mis protecciones

En cuanto terminé de ponerme mis coderas del mismo escritorio tome un palo de metal, Donne me lo hizo, la verdad en mi casa no lo necesito, pero se alteran si no lo tengo en mis manos

Salí de mi cuarto y fui a la cocina, fue muy fácil ya que la comida que hace Mikey huele delicioso, en cuanto puse pie en la cocina escuché las voces de Leo y de Donne peleando por el plan de Leo para atacar una de las bodegas de mutágeno que tienen los extraterrestres

-¿Cuantas veces más debo repetirlo? Debemos ir para escuchar y si es necesario debemos pelear, y no podemos dejar que Abril se involucre

-Pero porque solo debemos ir a escuchar?

-Debemos hacer eso porque si sabemos que planean será más fácil idear como detener a los Kraangs

Tal parecía que ellos no se dieron cuenta que yo ya había llegado a la cocina, estaba por irme, pero sentí la mano de Mikey, supuse que era él ya que seguía oyendo a Leo y Donne pelear

-Quédate a desayunar, o ¿Prefieres que desayunemos juntos en tu cuarto?

-¿Ellos no van a desayunar?

-Ya les dejé sus platos, pero no los verán hasta que dejen de pelear

-Creo que ya se cómo parar los ¿Me ayudas a ponerme en medio de ellos?

Las manos de Mikey me movieron de lugar, sonreí de forma traviesa y alargue mi bastón y con el les pegue a mis hermanos, al instante dejaron de discutir y sus gritos de dolor además de las carcajadas de Mikey sonaron en el lugar

-¡¿Porque nos pegas?!

-¿Y se atreven a preguntar? Es de mañana y ustedes solo pelean enfrente de Mikey, un día donde ustedes dos no discutieran sería muy sencillo

-Es fácil para ti decirlo, no ves nada a sí que no tienes nada por que vivir

La voz de Donne se hizo presente y un gran silencio se hizo presente, sentí como mis otros dos hermanos me voltearon a ver, yo solo suspire y pedí a Mikey que me llevara a mi asiento, el resto del desayuno estuvo inundado de un silencio algo incomodo, podía sentir como constantemente mis hermanos me volteaban a ver, yo solo comía mi cereal y cuando acabe fui al dojo donde nuestro padre se encontraba meditando

Me senté en un cojín cerca de una esquina del lugar a esperar que mis hermanos terminaran su cesión de entrenamiento pasados unos minutos ellos fueron llegando al dojo

-Hijos míos, hoy Raphael entrenara con ustedes

-¿Pero porque sensei? Lo podemos lastimar

-Este será parte de su entrenamiento, él debe probar que puede pelear cuerpo a cuerpo aun a pesar de no ver a su oponente, y ustedes que son capaces de enfrentarse a su enemigo con todas sus cualidades, Raphael acércate a mi

Eso hice, me levante y me acerque a donde escuchaba la voz de mi padre, tomo mi hombro y me dio la vuelta, yo creo para que estuviera frente a mis hermanos

-Sensei esto no es justo, tendremos que medir nuestra fuerza para no lastimarlo

-No, ustedes pelearan igual que siempre, los tres contra Raphael, quiero que hagan su estrategia

Suspiraron y se alejaron, mientras yo hablaba con mi maestro

-Padre ¿Estás seguro que puedo pelear cuerpo a cuerpo con mis hermanos? Qué tal si pierdo contra ellos

-Debes confiar en ti mismo Raphael, no siempre estarás aquí, yo sé que un día podrás salir a la superficie con ellos, les hace falta tu presencia haya arriba, y es mejor que te acostumbres a enfrentarte a ellos de vez en cuando, para probar tu intuición y probarte a ti mismo que eres capaz de mucho

Jamás he sabido como lo hace, pero logro darme confianza, caminé unos pasos y me puse en posición de ataque, sentía brisas pequeñas chocar contra mí y venían de tres direcciones diferentes, entonces deduje que estaban alrededor mío

-¡Hayime!

Alguien se acercaba detrás de mí así que me voltee y bloquee el golpe sujetando el puño y lo lancé, después escuche un grito, reconocí la voz de Mikey arriba así que me agache en el momento justo y sentí como pasó de largo, estando aun agachado una patada me quitó de mi lugar, di una vuelta y me levanté rápido, sentía las pisadas de los tres que venían en mi dirección, choque con el tronco del árbol que decían había en el dojo, cuando presentí que estaban cerca de mi di un salto que calculé y caí de pie atrás de ellos, no les di tiempo y les di una patada a cada uno y el suelo bajo mis pies retumbó cuando ellos cayeron al suelo

-¡Yame!

Me puse de rodillas en mí mismo lugar y escuche los quejidos de mis hermanos, creo que los lastime y me sentí mal

-Chicos lo siento no quería lastimarlos

-No te preocupes hermano, nosotros te subestimamos- hablo Mikey

-En verdad que eres bueno ¿Como supiste que los tres veníamos en bola asía ti? De verdad me sorprendió como usaste el tronco del árbol para caer atrás de nosotros y darnos una paliza- reí ante el comentario de Leo, creo que si le sacudí su cerebro con mis golpes

-Bueno no lo sé, sentía las vibraciones de sus pisadas cada vez más cerca de mí, además de que escuchaba sus respiraciones desde el principio, por eso supe dónde estaban

-Buen entrenamiento hijos míos, pueden retirarse

-Hai sensei

Todos hablamos al unísono, Splinter me ayudo a levantarme y me llevo hasta la salida para que yo supiera ubicarme y a si lo hice, después de muchos años me sabía todo mi hogar, me dirigí a mi cuarto para poder estar solo, aun me dolía lo que me dijo Donne, a veces no se si me odia por ser ciego, o me quiere ayudar

Cerré la puerta de mi cuarto y estaba por sentarme en mi cama, pero alguien toco mi puerta

-¿Quién es?

-Soy Donne ¿Puedo pasar?- me dirigí a la puerta y la abrí

-¿Qué necesitas Donatello?

-Quiero disculparme contigo, lo que dije en el desayuno se me salió, no pensaba en que estaba diciendo

-No te preocupes, sé que no querías hacerme sentir mal por mi falta de vista

-No lo digas, me siento culpable por no haberlo notado desde niños que no nos podías ver, después de que nos dijeras entendí porque no podías escribir, y porque no entrenabas con notros al mismo ritmo

-Jm ya es rutina para mí- mi labio se curvó para dedicarle una sonrisa

-Amm oye sé que no te gusta, pero hoy no puedes salir de tu cuarto

Deje de sonreír -¿Pero por qué? ¿Otra vez vienen sus amigos?- no me gustaba que me escondieran, era como si yo.... les diera pena

-Si, Abril, Karai y Casey vienen otra vez a la alcantarilla, así que debes estar en tu cuarto, por favor hermano

Yo solo suspire con tristeza, asentí levemente y me metí en mi cuarto para acostarme en mi cama; todos los días desde hace ya bastante tiempo era lo mismo, ya me cansé de ser como soy, ojalá fuera diferente

[Fin del capítulo]