«35»
—¡Ya estoy aquí!—exclamó Twilight llegando con las chicas—. ¿Podrían explicarme qué paso? En la llamada no entendí nada por sus gritos, sobre todo los de Pinkie Pie.
—Lamentamos eso pero entramos en pánico y no sabíamos qué hacer. —Explicó Rarity.
—¿A qué se referían entonces?
—Es Sunset... —mostró su mochila—. Nuestras sospechas eran ciertas; ya le está afectando el hechizo. Por eso entró al portal con el libro que le diste.
—¿Qué? ¿¡porqué hizo eso!?
—Tuvimos una discusión acerca de devolverle el libro a Twilight así que decidió hacerlo ya.
—Y dijo que ya no sería nuestra amiga al volver. —contó la pelirosa con tristeza—. Yo no quiero perderla.
—No lo harán, pero tenemos que hacer algo.
—Tendremos que esperar, recuerden que la princesa Twilight nos contó que no pueden estar dos de nosotras en una misma dimensión o habría problemas en la misma.
—Por esos sus amigas de Equestria no podían venir con ella. —terminó de explicar Fluttershy.
—Entonces sólo tendríamos que esperar a Sunset...
—Sí pero es diferente, ahora que el hechizo le está afectando y es mala tal vez pueda hacer algo malo en Equestria.
—Por favor, ella no haría eso. Quizás esté cambiada pero no haría nada malo. —intento defenderla cruzandose de brazos.
Las demás de miraron dudosas.
—Applejack, ¿ahí adentro esta el diario?—Le preguntó Rarity señalando la mochila. Ésta se fijo y asintió—. Que bien, tenemos eso para comunicarnos con la princesa Twilight y asegurarnos de que Sunset esté bien.
—O más bien, de que todo esté bien allá con su llegada... —Corrigió Rainbow Dash.
—Vamos chicas, con la princesa Twilight allí, ¿qué cosa mala podría pasar?
—No sé y no quiero tener una respuesta. —contestó Applejack mirando el portal.
« Vuelve pronto, Sunset... »
【Equestria】
Una pequeña pegaso de cabello celeste se encontraba merodeando entre los pasillos del castillo de la princesa Twilight, con una pequeña mochila en su lomo que tenía unos libros.
—Este lugar es enorme. —murmuró molesta—. Agh, ¿dónde está su tonta habitación?
Continuó buscando por todas las habitaciones, sin mucho éxito. Llegó hasta una y pensó que era la correcta pero se equivocó.
Observó las fotos que había en un espejo; de una unicornio morada con sus amigas.
—Tampoco es aquí. —gruñó y se dio media vuelva dispuesta a irse, pero antes fijo su vista en una de las cometas que estaban en una esquina de la habitación—. Ojalá esto le guste, profesora. —sonrió con malicia.
Se acercó a las cometas y comenzó destrozarlas, saltando sobre ellas con ira.
Al terminar su trabajo salió de ahí satisfecha con lo que había hecho y siguió con su búsqueda.
Sólo se detuvo momentáneamente cuando escuchó unos ruidos y un sonido extraño cerca de allí. Curiosa decidió averiguar qué era yendo a la habitación donde había escuchado todo eso.
—¿Hola?—habló asomando su cabeza por el marco de la puerta para ver de qué se trataba.
Cuando vio a una unicornio amarilla batallando para recoger un libro del suelo con su magia entró por completo, miró con asombro el espejo y todo lo que lo conectaba.
—¿Quién eres tú...?—Se atrevió a preguntar cuando ella la miró, después de lograr tomar el libro con su magia.
Hubo un pequeño silencio antes de que decidiera hablar también.
—¿Dónde está Twilight Sparkle?
—En... ¿la escuela?—Contestó, pero más que una respuesta sonó a una pregunta—. ¿De dónde saliste? ¿quién eres?
La pelirroja la examinó con la mirada para después observar todo el lugar.
« Así que lo de su castillo era cierto, ja... »
—Llévame con Twilight, ahora. —ordenó colocándose enfrente de ella.
—Ni siquiera sé quién eres, no pienso llevarte a ningún lado.
—Agh, claro... Me llamo Sunset Shimmer, soy amiga de Twilight.
La pequeña pegaso abrió los ojos con sorpresa.
—¿Tú eres Sunset Shimmer?
—¿Me conoces?
— La-La princesa Twilight nos ha hablando de usted en varias clases. —titubeó sin poder creerlo. Siempre pensó que nada era real.
—Por supuesto... —murmuró—. Ya sabes quién soy, ahora llévame con ella.
La contraria no respondió por estar viendo el espejo.
—Llegaste por ahí, ¿no?—sonrió con malicia y giró a ver a Sunset, en cuento vio que la miraba con una ceja alzada borró su sonrisa he hizo ojos de cachorro—. Digo... ¡te llevaré con la directora Twilight!—se dio la vuelta y salió de la habitación.
Sunset se dio cuenta que no era de fiar por sus expresiones, nadie podía engañarla, pero aún así la siguió porque no tenía ni idea en donde estaba.
Todavía llevaba consigo ese estúpido libro.
Cuando se lo diera a Twilight finalmente todo terminaría.
(. . .)
La pequeña la llevó hasta la escuela, más precisamente a la dirección en donde se encontraba Twilight.
En el camino Sunset observaba todo con una expresión aburrida.
No recordaba que la princesa morada le haya contado o al menos mencionado alguna vez sobre esta escuela pero le daba igual, no le era para interesante.
—¿Eres de la edad de la directora Sparkle?—se atrevió a preguntar en su caminata.
—¿Eso a ti qué te importa?—soltó bruscamente.
—Es que como ella nos ha hablado de ti y de tu historia siempre me quedé con la duda de si eras tenías la misma edad que ella o eras más grande.
—Mejor métete en tus asuntos y termina de llevarme con Twilight, niña.
—Está bien, no quise molestarte. —sonrió tiernamente antes de mirar nuevamente al frente y cambiar su expresión a una molesta mientras susurraba "engreída."
La guió hasta la dirección, donde ella entró primero.
—¿Directora Sparkle?—se asomó por la puerta.
—Hola Cozy Glow. —saludo con una sonrisa—. Las clases ya terminaron, ¿necesitas algo?
—En realidad, le traigo una sorpresa para usted. —abrió la puerta dejando ver a la unicornio amarilla.
La alicornio abrió la boca claramente sorprendida.
—... ¿¡Sunset!?—voló hasta ella con emoción y la abrazo—. ¿¡Qué haces aquí!? ¿¡cuándo llegaste!?
—Hola también Twilight. —contestó algo incómoda—. Vine aquí para entregarte el libro del que tanto hablabas. —se lo entregó rápidamente y ella lo tomo con su magia.
—¿El libro?—revolvió algunas de sus páginas—. Pero todavía no acordamos una fecha para que vinieras a entregármelo.
—Si bueno... —pensó en una excusa—. Quise darte una sorpresa, tenía tanto tiempo libre y las chicas insistieron taaanto en que te lo trajera que debía hacerles caso. —rodó los ojos disimuladamente.
—Eso es muy lindo de tu parte pero debiste avisarme, así yo habría estado ahí esperándote. Seguramente cuando saliste no había nadie... Oh, ¿cómo fue que te encontraste con Cozy Glow?—giró a verla.
—No sé, ella entró a la biblioteca cuando salí del espejo. —contestó con indiferencia.
—¡E-Es que quería devolver unos libros que me presto de su biblioteca personal!—se excuso rápidamente.
—Pudiste devolvermelos a mi, Cozy.
—S-Sí pero ya está muy ocupada con la escuela y no quise molestarla. —sonrió nerviosa.
—Aww, que tierno gesto. Muchas gracias.
Sunset alzó una ceja.
Se notaba tanto que mentía pero Twilight era una ingenua y ya debía estar acostumbradas a sus mentiras.
Sin duda esa chiquilla no le daba buena espina pero no era su problema así que solo la ignoraria.
—Bueno, ya te di el libro así que ya me puedo ir. —se dio vuelta dispuesta a salir de allí.
—¡Espera Sunset! Sé que solo viniste para traerme el libro pero hace tanto que no nos vemos... y es la primera vez que nos vemos aquí que me gustaría enseñarte y contarte tantas cosas que no te he podido contar en el diario. También quiero que hablemos más de como les ha ido a las chicas y a ti... ¡No puede ser! ¡puedes conocer a nuestras amigas de aquí!
—Eh...
—¡Es genial! ¡ellas querían conocerte y esta es la oportunidad perfecta para que lo hagan! ¿qué dices?
Recordó lo que sucedió con las chicas antes de entrar al portal. Realmente no quería volver y tener que soportarlas...
Podía quedarse por unas horas, sería suficiente para que se calmara y que con suerte ellas también lo hicieran.
—Sí, claro. —aceptó.
—¡Que bien!—con su magia la llevó hasta afuera de la habitación, sin dejar de llevar el libro consigo.
Cozy las observó irse con duda.
Si Sunset venía de otra dimensión entonces solo vendría hasta acá para darle algo muy importante a la tonta de Twilight... y debía ser ese libro.
Después lo investigará, antes tenía que investigar ese raro espejo por el que vino y si le era útil, añadirlo a sus planes.
Mientras que Twilight llevaba a Sunset con las chicas decidió iniciar una conversación.
—No puedo creer que estés aquí, es tan emocionante... ¡Oye, podríamos ir hablar con la princesa Celestia ahora que estás aquí!
Sunset se detuvo.
—Wow, no nos apresuremos.
—¿Qué? ¿no quieres verla?
—Ella y yo no terminamos en buenos términos cuando me fui de aquí.
—Pero eso puede cambiar ahora que estás aquí.
—No lo creo, algunas cosas están mejor si no hacemos nada para cambiarlas. Piensa en lo que me haría si se enterará que estoy aquí.
—Lo dices como si Celestia fuese una mala pony.
—Tenemos perspectivas diferentes de ella sin duda... Pero como decía, es mejor que no se enteré de que estoy aquí. Tanto como ella y yo no queremos tener la dicha de volver a vernos jamás así que mejor dejamos las cosas como están.
—Pero-.
—Mejor hablame de esta escuela. —pidió comenzando a caminar de nuevo.
—Okey...—murmuró dudosa y la siguió—. No te lo había podido contar pero las chicas y yo abrimos una escuela para llevar la amistad por toda equestria.
—¿Enserio?—cuestionó.
—Sí, ¿porqué? ¿no te gusta la idea?
—Es que... creí que la amistad no se podía enseñar y se podía aprender por si sola.
—Así es pero también se le puede enseñar a ponys y criaturas que no lo sepan... ¡Fue como tú te hiciste nuestra amiga! ¿recuerdas? Las chicas te enseñaron lo que puede ser la amistad.
—Sí, eso hicieron... —«es una lástima que se haya arruinado» pensó—. Pero me sigue pareciendo una idea ridícula.
—Ah, pues... —no supo responder a su respuesta, no esperaba que dijera algo como eso—. ¡Que bueno que estás aquí! Te podré mostrar lo bien que funciona para los estudiantes... pero primero, vayamos son las chicas. —la siguió guiando con una sonrisa falsa al ver que su expresión aburrida no había cambiado.
—¡Twilight!—la saludo una de ellas.
Estaban reunidas en el patio de la escuela, con Starlight con ellas.
—¡Chicas, chicas!—las llamó—. No sé si recuerden a Sunset. —la señaló con una sonrisa.
—¿¡Sunset!?—se acercaron a ellas con asombro.
—Ah, hola.
—Es un placer poder conocerte al fin, querida.
—Aunque ya te habíamos conocido, cuando robaste la corona de Twilight. —recordó Pinkie con una sonrisa.
—Sí jeje... ¡ella es Starlight Glimmer! Es mi otra estudiante, o al menos eso era. El año pasado se graduó.
La pelirroja abrió los ojos sorprendida mientras la nombrada se acercaba a saludarla con una gran sonrisa.
¡Sabía que lo de "mi más antigua estudiante" significaba algo!
—También es un placer conocerte, Sunset Shimmer. Twilight me ha hablado mucho sobre ti y sobre donde vienes. —declaró Starlight observándola con emoción.
Sunset no respondió y la miró con indiferencia, cosa que hizo a la unicornio morada borrar su sonrisa.
—¡Es cierto! ¿es verdad que allá hay otras versiones de nosotras?—interrogó con la misma emoción la pony rosada.
—Sí, pero diferentes... muy diferentes...
—¡Entonces si allá somos amigas entonces aquí también podemos serlo, ¿no?!—se acercó y la abrazo.
—Ah... se podría hacer el intento, sí. —se removió incómoda.
—¿Podrías contarnos como somos todos allá?
—Lo haría pero mejor no, no quiero alterar sus mentes con descripciones que no entenderán y que podrían resultarles agobiantes. Ojalá pudieran ir allá para comprobarlo pero no pueden...—fingió estar triste.
—Es verdad, malas cosas podrían pasar y esas boberías. Que mal... —se quejó la pegaso azul.
—No son boberías, son asuntos importantes. —regaño la princesa—. Pero lo que dice Sunset es cierto... Bueno, nos podemos conformar con que nos cuentes cómo les van a ti y a la chicas.
—Pues como sigues insistiendo tal vez lo haga, jaja. —sonrió falsamente.
Starlight frunció el ceño ante eso.
—Mejor vayamos a comer algo mientras nos cuentas, ¿qué les parece? —propuso Starlight y las demás asintieron estando de acuerdo.
—Ohw, es una lástima que no pueda hablar de como eres en el otro mundo, y no solo porque no sea correcto si no porque nunca te visto. —esta vez su sonrisa fue real y fue una burlona—. Pero puedes quedarte a escuchar, supongo.
Y parece que solo la unicornio morada notó eso porque las demás guiaron a Sunset hasta la salida.
Llevaba unos minutos de conocerla y ya sentía que su relación no sería buena, esa no era buena señal...
—¿Vienes Starlight?—le preguntó Twilight al ver que no se movía.
—¿Ah? Sí, ya voy. Por cierto, ¿qué es eso?—señaló el libro que seguía sosteniendo con su magia.
— ¡Cierto! Con todo esto lo olvidé. Es el libro que le pedí a Sunset que trajera, por eso está aquí.
—Eso ya tiene sentido. —asintió levemente.
—Sí, que bueno que fue Sunset quien encontró el libro en una biblioteca, no me imagino que hubiera pasado si algún pony, digo... persona, lo tomaba.
—¿Qué sería lo peor que podría pasar si eso pasaba?
—Buena pregunta capciosa. Como sea, ahora que volvió debería hablarle a Starswirl para que lo sepa. —hizo desaparecer el libro.
—Estoy de acuerdo. Me sigue pareciendo intrigante como fue que desapareció pero supongo que quedará como un misterio. —comentó y observó que la pony morada no le estaba poniendo atención—. Ah, ¿Twilight...?
—Lo siento, no te escuché. Pensaba en que ahora que Sunset está aquí ¡podría conocer a Starswirl! Cuando le conté que había regresado por diario preguntó por él en mayúsculas así que obviamente en su fan. ¡Que gran idea!
—Sí, lo es...
—Dile a las chicas que en un rato las alcanzo, debo buscar a Spike para que le mande la carta a Starswirl. Y no digas nada, será una sorpresa. —se teletransportó.
—Hoy todo está siendo una sorpresa... —susurró.
(. . .)
Cozy Glow observó de cerca los artefactos que se conectaban al espejo. No tenía idea de cómo funcionaba ni de a donde iba pero le parecía muy intrigante que quería averiguarlo.
Pero no entraría, no eran tan tonta como para ir a un lugar el cual jamás ha ido y que podría ser peligroso.
—Tienes toda esa magia y ahora esto en tu poder, Twilight... pero pronto todo será mío. —monólogo en voz alta.
Se alertó cuando escuchó pisadas afuera de la habías, así que como no encontró en donde ocultarse voló hacía techo esperando que no la vean.
—Es increíble que no hayas escuchado nada, Spike. Tu habitación está cerca. —se quejó abriendo la puerta con su magia para que entraran.
—Estaba tomando mi siesta de la tarde.
—¿Hablas de la siesta que tomas después de la sienta de la mañana?
—¿Cómo crees que conservo mis escamas?—presumió.
—Creo que pasas mucho tiempo con Rarity... —murmuró—. Como sea, es hora de mandarle la carta a Starswirl.
—¿Starswirl? ¿ese tonto barbón?—susurró Cozy Glow confundida.
—¿Escuchaste algo?—preguntó mirando a sus lados, eso hizo que Cozy cubriera un poco su rostro con sus cascos.
—Solo a mi cama llamándome por otra siesta. —se estiró mientras bostezaba.
—¿Seguirás durmiendo?
—No, tengo una competencia de vuelo con Smolder y si la vuelvo a posponer se enojara. —volvió a bostezar y preparo su pluma para escribir—. Comencemos.
La pequeña pegaso rodeó los ojos y se aseguró de que estuvieran distraídos para volar hacía la salida, aprovechando que habían dejado la puerta abierta.
Tenía otras cosas que hacer así que tendría que regresar cuando no hubiese nadie.
[. . .]
Las chicas habían llevado a Sunset cerca de la escuela para almorzar, Twilight se les unió un poco después, y querían que les contará como iba todo en el mundo humano pero cambió el tema disimuladamente para que mejor ellas le contarán lo que ha sucedido desde la última vez que Twilight fue la escuela Canterlot.
Y vaya que habían pasado muchas cosas, le sorprendía y molestaba que Twilight no se las haya contado antes... excepto la parte de la escuela, eso le parecía muy aburrido.
Empeoró cuando entre las historias había una en donde su queridisima alumna nueva rescataba a las princesas y a las chicas de toda una manada de cambiantes.
—Estaba muy asustada, pero con la ayuda de Trixie, Discord y Thorax me sentí mejor porque sabía que todavía había en quien confiar.
Sunset rodeó los ojos irritada.
« ¿Enserio ésta es la tan apreciada alumna que ya se graduó? Por favor, si yo he aprendido más y también he pasado por miles de cosas más peligrosas que esas... ¡Y nunca he alardeado de ello! »
Aclaró la garganta queriendo llamar la atención de todas.
—En verdad me impresiona tanto lo que has logrado, Starlight. —mintió—. No me sorprende teniendo a Twilight como profesora, incluso yo que ha sido mi maestra también a la distancia he pasado por... tanto. —comenzó su ataque indirecto.
—Es cierto, Twilight es una excelente maestra. Tanto en el ámbito de la amistad como en el escolar.
—Ohw, muchas gracias Rarity. —sonrió enternecida.
—Y también, —volvió a llamar su atención hablando entre dientes—. Me asombra escuchar por todo lo que han pasado, sobretodo la parte en la que han salvado Equestria cientos de veces.
—Prácticamente ya es algo de nuestro día a día. —comentó Rainbow con una sonrisa—. ¿Verdad, cariño?—se dirigió a la de melena rubia, la cual asintió sonriendo también.
—¿Ustedes son... pareja?—preguntó confundida.
—Sí, ¿qué allá no lo somos también?—ésta vez preguntó Applejack.
—No, las cosas suceden de manera diferente que aquí... pero ya me dio curiosidad así que después investigaré si algo pasa entre ustedes allá.
La pareja rió ante eso.
—Vaya que las cosas han cambiado tanto. Todavía recuerdo nuestra primer aventura después de regresar luego lo de la batalla de las bandas, con el mapa guiándonos con Starlight.
—Sí, no tenemos que recordar eso. —ríe un poco incómoda.
Sunset sonrió levemente.
—¿Con Starlight? ¿y eso porqué?—fingió interés.
—Es que antes era un poco malvada... ¡como Trixie y como tú! Si ellas pudieron ser amigas tal vez ustedes también puedan, ¿qué les parece?—propuso alegremente sin notar que la unicornio mirada bajaba la cabeza avergonzada.
—Entonces también solías ser "¡malvada!"—imitó a Pinkie Pie—. Y terminaste siendo la alumna de Twilight. ¿Quién diría que tenemos tanto en común?—preguntó entre dientes.
—Si bueno, las dos ganaron el derecho de ya no ser recordadas de esa manera. Y a pesar de lo que hicieron, ahora tengo a dos excelentes amigas.
—Gracias Twilight. —sonrió agradecida.
—Y gracias al mapa también, el que las lleva a misiones, ¿no?
—Misiones de amistad, sip. —asintió—. El árbol de la armonía lo debió agregar cuando creó el castillo.
—¿Árbol de la armonía?
—Allí es donde están los elementos de la armonía.
—¿Enserio? Pensé que los tenían ustedes todo el tiempo, ¿qué no son los que usan para salvar equestria?—interrogó con interés.
—Sí los usamos pero lo que le da poder es nuestra amistad en si, con eso siempre logramos vencer. Además, el árbol los necesita para seguir con vida o-.
—¿Cosas malas sucederán?—alzó una ceja y Twilight asintió—. Lo imaginé. —recordó lo que leyó de Equestria en el libro y a su mente vino cuando robó su corona—. Y... ¿dónde está ese árbol?
—Convenientemente en el lugar más peligroso de Equestria.
—¿El tártaro?
—No tanto. Está en lo profundo del bosque Everfree. —terminó de tomar de lo que pidió.
—Que interesante, me gustaría verlo alguna vez...
Starlight la miró confundida. Le pareció extraño la manera en la que lo dijo.
—Por cierto, no nos han porqué Sunset está aquí.
—¡Es verdad! Aunque para ser sincera todo paso de la nada, fue Cozy Glow la que trajo a Sunset a la escuela porque justo ella estaba en el castillo cuando llegó por el espejo.
—Sí, debí avisar pero todo el asunto de venir aquí fue muy rápido.
—¿Qué no era una sorpresa para mi?—cuestionó confundida.
—A... eso me refiero. —bebió del café que había pedido—. Como sea, solo vine a darle un libro a Twilight.
—¿¡El de Starswirl que es muy peligroso!?—interrogó la pelirosa.
—¿Saben de qué es?
—Twilight nos contó. —contestó Fluttershy—. Que bueno que fuiste tú quien lo tenía y lo trajo.
—Tranquilas, ahora está en un lugar mejor.
« Genial, ellas también lloriquiaban para que lo trajera. Quizás las cosas no sean diferentes que en Canterlot. Aquí también solo les importa ese estúpido libro »
—Bueno, ya me usaron como paloma mensajera así que quizás debería regresar ya. —sin mucho entusiasmo se levantó de su asiento—. Adiós Twilight, hablaremos en unos meses, supongo.
—¿Qué? ¿de qué hablas Sunset?—se teletransportó para detenerla.
—Oh, ya sabes. Estás tan ocupada viviendo tu vida de ensueño que te volverás a olvidar de mi y de las chicas.
—Yo jamás me olvidé de ti ni de ellas, ¿porqué piensas eso?—preguntó preocupada.
—¿Lo dices enserio? Vengo y me entero de todo lo que ha pasado, de que incluso tienes otra alumna que ya se graduó sin que me lo hayas contado antes. Y cuando me hablas solo es para traerte ese libro.
Twilight bajo la mirada sin saber que decir.
—Ah... ¿¡quién quiere más postre!?—intentando aligerar el ambiente, Pinkie preguntó.
—Yo quiero. —respondió la pegaso amarilla.
—¡Vamos entonces!—sin esperar la arrastró hasta la tienda.
Applejack estaba por hablar pero Twilight se le adelantó.
—¿Podrían dejarnos un momento a solas por favor?
—Claro. —Rarity respondió y ella junto a la pareja entró a la tienda.
Starlight las miró por última vez con preocupación antes de entrar también.
—¿Sabes? Las chicas tienen la tonta ilusión de que algún día vuelvas.
—No es tonta, yo no lo sé, aunque me duela yo creo que... en algún momento no podré ir a verlas más y tendremos que seguir adelante.
—Lo sabía... ¡sabía que tu vida como princesa es más importante que tus supuestas amigas!
—¿Eh? ¡eso no tiene que ver! ¿porqué dices eso?
—¡Porque te quieres deshacer de las amigas que hiciste allá después de lo que han hecho por ti!
—Claro que no, no quise que sonará como que quiero abandonarlas. Pero con el tiempo eso será algo inevitable.
—Por supuesto, como el que solo me hables cuando quieres algo... Porque no te importamos ni un poco. —desvío la mirada molesta.
—Yo... enserio lo lamento Sunset, no quería hacerte sentir así. Sabes que eres mi amiga y no querría lastimarte, tampoco a nuestras amigas de Canterlot. Casi siempre estoy ocupada y mucho más ahora, es por eso que no te he podido contar nada y sé que no es excusa. No quise ocultarte nada, sé que tú jamás me ocultarías nada.
—...
—No quiero que las chicas ni que tú se sientan olvidadas por mi, ustedes siempre serán una parte importante de mi.
Ella siguió sin responder.
—Te prometo que haré lo posible por seguir comunicándome contigo y en ir a visitarlas. Me retracto de lo que dije, ustedes son mis amigas y las amigas no se abandonan.
Finalmente, ella giró a verla.
—Eso quería escuchar, gracias Twilight. —se acercó abrazarla para sorpresa de la princesa, quién lo respondió.
—No quería decírtelo porque iba a ser una sorpresa pero... ¡Starswirl vendrá a PonyVille!—exclamó con emoción al separarse.
—¿Es... enserio!?
—¡Sí! Le mandé, o más bien Spike mandó una carta, contándole lo que pasaba. El problema es que lo más pronto posible que vendrá es mañana.
—Está bien, me puedo quedar.
—¿Segura? ¿y que hay de las chicas?
—No hay problema con ellas, saben lo tan fan que soy de Starswirl que lo entenderán. Tampoco es que me estén esperando o algo así.
—¿No preferirías asegurarte hablándoles por el diario? Puedo traerlo para que-.
—¡No!... Ellas no tienen mi diario, está en mi casa. Pero está bien, Twilight, lo digo enserio.
—Okey, si tú lo dices te creo.
A diferencia de ella, las palabras, como muchas que había dicho Sunset desde su llegada eran falsas.
Había dejado de creerle a Twilight.
[. . .]
Al atardecer, Twilight invitó a Sunset a quedarse en el castillo, cosa que ella aceptó.
Le mostró donde se quedaría y también decirle donde estaba su habitación por si necesitaba algo.
Aprovecho para contarle y mostrarle algunas cosas, entre ellas la corona y los collares donde iban los elementos de la armonía.
Twilight seguía hablando pero ella no dejaba de observar la corona.
Pensar que hace años regresó para robarsela he idear un tonto plan para apoderarse de Equestria.
Que vergüenza le daba su yo del pasado.
Un poco más tarde, Sunset se despidió dando la excusa de que ya estaba muy cansada y que quería dormir. Twilight le creyó y le deseo buenas noches.
En medio de su camino, se encontró con su pony menos favoritas.
—Hey, ¿qué tal?—preguntó con una sonrisa nerviosa al toparse con ella.
—¿Qué haces aquí?
—Vivo... aquí.
—Que mal. —la rodeó queriendo seguir su camino.
—¿Disculpa?—giró a verla—. Estoy confundida, ¿acaso te caigo mal? Apenas nos conocemos y me has dado esa impresión.
Ella se detuvo y la miró.
—Debes creerte tanto, ¿no?
—No sé de que hablas... Y de hecho, ya no soy la alumna de Twilight porque-.
—Ya te graduaste, claro. —terminó lo que iba a decir con una expresión molesta.
—Mira, no entiendo porque no te agrado pero yo quería conocerte después de lo que Twilight me ha hablado de ti.
—Entonces te ha hablado de mi, es curioso que ella jamás me haya contado de ti. Eso dice lo tan importante que eres para ella... a pesar de haberte graduado. Debí saber que aquí la mejor soy yo. —dijo burlonamente antes de alejarse de una vez de allí.
—Mmm...
—¿Qué pasa Starlight?—preguntó la princesa llegando a su lado.
—Hola Twilight, ¿qué haces?
—Después de lo que pasó hace rato le conté a Sunset que Starswirl vendría mañana en la mañana y se me ocurrió una fantástica idea.
—¿De qué hablas?
—Quiero organizar una graduación para Sunset. Me di cuenta que ella ya ha aprendido mucho de amistad y ha crecido como pony, o persona más bien, —ríe un poco—. y todo lo ha hecho sola. Yo misma lo confirme cuando la vi enfrentarse a las sirenas en esa batalla de canto.
—Eso es muy lindo de tu parte Twilight.
—¿Crees que le gustará?
—Eso creo, digo, por supuesto que lo hará...
—No suenas muy convencida, ¿qué te sucede?
—Bueno, yo creo que no lo agrado a Sunset.
—No, no es posible. Estaba molesta porque no le conté nada pero su enojo era conmigo, no contigo.
—Parece que también lo es conmigo...
—Debe ser un malentendido, hablaré con ella. —comenzó a alejarse pero ella la detuvo.
—¡No! Así está bien, debe ser un malentendido como tú dices. Ya estás muy ocupada como para preocuparte por eso, mañana lo aclararé con ella...
—¿Segura?
—¡Claro! No hay ningún problema. Tú ve a descansar también, mañana será un largo día.
—De acuerdo, pero aquí estoy para lo que necesites. —sonrió.
—Okey, jeje. —soltó un suspiro mientras la veía irse.
Todo esto lo daba una mala espina.
Y tenía razón, porque Sunset tenía planeado irse esa misma noche.
Ya le daba igual conocer a Starswirl, solo quería largarse de allí.
Mientras regresaba a la habitación que Twilight le había dado pensaba en el mejor momento para hacerlo.
Se iría cuando estuviesen dormidos, sin duda.
Espero pacientemente a que cada pony y dragón se fuera a dormir, ya un poco más tarde salió de su habitación con cuidado de no hacer mucho ruido. Al mirar las cientos de puertas que había sabía que tardaría en encontrar la habitación del espejo.
Se tranquilizó he intento pensar en algo.
—Eso es... —murmuró cuando se le ocurrió algo—. Espero no estar tan oxidada.
Su cuerno comenzó a brillar.
Quería teletransportarse a esa habitación usando el recuerdo que que tenía cuando estaba ahí.
Tardó un poco por haber pasado tantos años sin usar esa clase de magia de nuevo, pero lo consiguió.
Sonrió un poco y se aproximó al espejo. Escuchó un ruido extraño pero no le tomo importancia y continuó.
Las cosas no salieron como esperaba, y nada sería lo mismo a partir de ahora.
Tanto como con sus amigas como con Twilight.
Lo había perdido todo por tener que devolver ese libro, ahora no le quedaba nada.
Gruñó.
Ya quería decirle a todas lo que su adorada amiga había dicho, sobre no volver a verlas más para después cambiar sus palabras convenientemente.
Era claro que no tendría tiempo para ellas jamás siendo una estúpida princesa, si no lo tenía para escribirle de vez en cuando menos para ir a verlas.
Si le quitarán eso no sería nada...
Tiene a su poder los elementos de la armonía, deben contener de la magia más poderosa de toda Equestria si fue capaz de construir un castillo y ayudarlas a ganar siempre.
Miró la puerta con una expresión seria.
Ahí tomo una decisión.
Sin más, se teletransportó a donde estaba otra vez y se dirigió a la habitación de la princesa.
Con sigilo entró a la habitación alumbrando todo con su cuerno.
Se aseguró de que estuviera dormida y buscó el libro entre sus cosas. También busco el diario pero no lo encontró, por suerte el libro sí.
—Te lo quitaré todo, Twilight... —susurró antes de irse de ahí.
«... tal como tú lo hiciste al ir a buscar tu estúpida corona... Ese será el peor error que hayas cometido »
[. . .]
En lo profundo del bosque everfree era donde se supone que se encontraba el árbol.
Tenía que estar atenta y ser inteligente para encontrarlo, ese bosque estaba lleno de los peores monstruos de toda Equestria.
O se suponía que fuera así.
Porque todo su viaje había sido muy tranquilo.
Eso quizás sea otra prueba de que hace mucho que no estaba en Equestria, las cosas han cambiado tanto que le sorprendía.
Dejo de pensar en eso y se concentró en su búsqueda.
No pensaba que encontrarlo sería tan difícil, pero jamás había estado en el bosque everfree así que se le dificultaba saber a donde ir.
Con su magia traía consigo el libro y por supuesto... La corona y los collares que Twilight le había mostrado.
Que tonta era, le había dado todo para poder lograr su cometido. Era como si quisiera que robara los elementos de la armonía.
Y lo cumpliría.
Tardó más de lo pensado pero terminó llegando a ese árbol, no se le dificultó encontrarlo pues resplandecía y eso en un lugar donde solo hay oscuridad llamaba la atención.
« Con que los elementos de la armonía... pensé que serían más lindos. Si no supiera de su poder no tendría intenciones de robarlos »
Estaba por acercarse para tomarlos pero un ruido la detuvo.
Era el mismo ruido que escuchó cuando estaba en la habitación del espejo, lo sabía porque era el ruido de un revoloteo.
—Sal de donde sea que estés. —ordenó sin darse la vuelta—. Sé que estás aquí.
Pasaron unos cuentos segundos cuando sintió la presencia de alguien más detrás de ella.
Se giró y se encontró con la primera pony que vio al llegar aquí.
—¿Sabes que seguir a alguien he ir a un lugar desconocido puede ser peligroso? Deberían habértelo enseñado en la escuela.
—Ahí solo aprendo lo que yo quiero. —Cozy Glow respondió con una expresión seria—. Y este no es un lugar desconocido para mi.
—No pero yo sí. —sonrió—. ¿Porqué me sigues, niña?
—Tenía sospechas de ti desde que llegaste y me doy cuenta que fueron verdaderas. No eres de fiar. —afirmó mirando la corona y los collares de los elementos de la armonía que sujetaba con su magia.
—¿Y con qué derecho me dices eso tú?
—¿Qué?
—Tampoco eres de fiar, se nota a kilómetros pero todos aquí son muy fáciles de engañar, sobretodo Twilight. Pero a mi no puedes engañarme.
—Ya veo... Entonces nos parecemos en eso, solo que yo soy mucho más lista que tú.
—¿Eso piensas? Explica porqué.
—Con lo que vas hacer no solo harás que la tonta princesita ya no confíe en ti si no que servirá de nada. —Sunset alzó una ceja—. Es verdad que los elementos de la armonía son de las piezas más poderosas de Equestria, pero solo pueden ser usadas por los elementos de la armonía en si, que son Twilight y las otras. Si intentas usarlas no funcionará, y también nos pondrás en peligro porque ese árbol es el que nos protege del bosque everfree.
—Si pusiste atención a la escuela, ¿verdad? Muy bien por ti.
Cozy la observó molesta.
—¡Solo pongo atención a las cosas que serán esenciales en mi plan! Y si quiero que todo Equestria este a mis cascos que el bosque everfree lo destruya no me ayudará en nada.
—Entonces también quieres conquistar Equestria, ¿eh?. Me gustaría saber cómo planeas hacerlo sin magia.
—¿Quién dijo que lo haría sin magia?—sonrió—. La magia me ayudará más de lo que crees, pero eso no es asunto tuyo.
—Ahora moriré de la intriga, uhh. —rodeó los ojos—. Aún no respondes mi pregunta; ¿porqué me seguías? ¿acaso quieres detenerme para ganarte más la confianza de Twilight o qué?
—Eso ya lo tengo resuelto. —dijo engreídamente y comenzó a caminar a su alrededor—. Quería investigar ese raro espejo y fui para hacerlo pero te vi salir así que quise seguirte.
—Que entrometida resultaste, niña.
—Escúchame. —ordenó irritada—. Ambas tenemos metas similares y ahora con lo que te acabo de decir seguramente pensarás más en tu tonto plan. Te propondré algo; ser aliadas. Tú quieres poder y yo también, y ahora que sé la existencia de ese espejo portal y de que hay otras dimensiones quizás con tu ayuda y con lo que sabes podamos apoderarnos de su magia también. ¿Qué dices? Seríamos las ponys más poderosas de Equestria y de todo el mundo.
Sunset miró de reojo el libro, que sostenía con su magia en su lado derecho.
Lo pensó por unos segundos y miró nuevamente a la pequeña.
—... Yo solo quería quitarle todo a Twilight, tal como ella lo hizo conmigo. Pero ahora, me acabas de dar una meta más interesante.
—¿Eso es un sí?
—Sí, lo haré... Pero solo puede haber lugar para la pony, o en mi caso, humana más poderosa del mundo.
—¿Qué? ¡dijiste que lo harías!
—Lo haré yo sola, no puede haber lugar conmigo para una simple pegaso como tú.
Ese último comentario hizo endurecer a la de melena celeste.
—¿¡A QUIÉN LLAMAS SIMPLE PEGASO?! ¡SOY MUCHO MEJOR QUE TÚ!—sin dejar de gritar voló a una altura considerable para atacar a Sunset.
Ésta la observaba con una sonrisa.
—¿Ya te enojaste? Es tan típico de los pegasos, no controlan su temperamento. Es por eso que las unicornios somos mil veces mejores que ustedes.
—¡YA VEREMOS QUIÉN ES MEJOR QUE LA OTRA!
Antes de que pudiese bajar volando para atacarla Sunset la atrapó con su magia, soltando las demás cosas que traía. La atrajo hasta su altura mientras ella trataba de moverse.
—¿¡QUÉ HACES!? ¡SUÉLTAME!
—¿Qué pasaría si le dijera a Twilight todo lo que me dijiste? Sería una pena que alguien tan joven como tú terminará en el tártaro, ¿no crees?
—¿¡Enserio piensas que confiara en ti después de robar los elementos de la armonía!? ¡No solo eres una tonta por creer eso, si no por pensar que funcionarán contigo!
—Dejame hacerte otra pregunta... ¿Qué pasa cuando traes un elemento de la armonía a un mundo alterno?
Ella se le quedó viendo con confusión, no sabía que responder.
—Hace años robe la corona de Twilight y me convertí en un ser muy poderoso... pero con un tonto plan. Ahora imagínate en lo que me convertiré si porto todos los elementos de la armonía allá... Seré la persona, o en tu caso, pony más poderosa que jamás haya existido, superando incluso a Starswirl y a ese demonio raro llamado Discord.
—¡No permitirán que cruces por ese portal con los elementos de la armonía y si lo haces irán a buscarte!
—Será muy tarde para cuando se den cuenta... y si llegan a ir se tendrán que enfrentar conmigo. Ya estarán muy distraídas tratando de que el bosque no lleve a Equestria a su fin. Lo que quiero decir es... Gracias por darme mi nueva meta, con el plan que hiciste y que ya es mío tendré más poder aún. —levantó el libro con su magia y lo atrajo a ella—. Todo gracias a este libro y a ti... solo por eso no te haré tanto daño.
—¿¡C-Cómo dices!?
—Debes aprender una lección, te portaste muy mal. —dejo el libro en el suelo de nuevo y se concentró en ella—. Las alas son todo para los pegasos, ¿verdad? Me pregunto que pasaría si desaparecieran...
—¡ALÉJATE DE MI, NO TE ATREVAS HACERME ALGO!
—No las desapareceré, no soy tan mala. —sonrió falsamente—. Pero sí haré algo para que aprendas tu lección.
Cozy abrió los ojos asustada.
—Lo siento, pero solo puede haber una número uno aquí y esa seré yo...
El dragón del castillo dormía tranquilamente cuando un sonido cerca de su habitación lo despertó.
Se levantó molesto mientras se tallaba los ojos, salió para averiguar que era pero no encontró nada.
—Twilight...
Una voz desconocida decía ese nombre una y otra vez.
Asustado corrió a la habitación de la nombrada.
—¡Twilight, creo que han llegado por ti! ¡fue un verdadero placer conocerte!—exclamaba lanzándose a su cama.
Esto la hizo despertarse de inmediato.
—¿Qué pasa Spike? ¿de nuevo comiste muchos dulces antes dormir?
—¡Sí pero ese no es caso! Hay alguien allá afuera que no para de decir tu nombre, seguro es un fantasma. —se ocultó debajo de las sábanas asustado.
—Ay Spike, los fantasmas no existen. —prendió la luz y se levantó—. Debe ser Starlight, ya sabes que ella es sonámbula. O quizás sea Sunset
—¡Hace meses que Starlight no se ha levantado dormida en medio de la noche y esa voz no sonaba a Sunset!
—Entonces debe a ver otra explicación.
—Okey, ve, como quieras. —dijo sin dejar de temblar.
Rodeó los ojos con una sonrisa y salió de su habitación.
Camino por el pasillo hasta escuchar, como dijo Spike, a alguien llamarla. Frunció el ceño al no reconocer esa voz, sin duda no era la de Starlight o Sunset.
Fue hasta el origen de esos llamados y lo que se encontró la sorprendió.
—... ¿Cozy? ¿¡estás bien!?—preocupada voló hasta ella para cargarla—. ¡SPIKE, VE Y BUSCA A STARLIGHT!
La pequeña tenía un ala rota.
—Twilight... —una vez más la llamó.
—Tranquila, no hagas esfuerzo, te ayudaremos.
—Twilight... Necesito...
—¿Eh? ¿qué dices? ¿cómo fue que pasó esto?
—Sunset Shimmer me hizo esto... —la mayor la miró sorprendida—. También hizo otra cosa...
—¿Q-Qué hizo?—preguntó estando atónita.
—Ella...—le susurró antes de cerrar los ojos para intentar descansar, aún con el dolor.
Twilight abrió los ojos sin saber que decir.
—¿Qué pasó aquí, Twilight?—interrogó Starlight llegando junto a Spike sin entender lo que sucedía pero lo entendió un poco al mirar a Cozy—. ¡Ay no! ¿¡qué le paso!?—la sujetó con su magia.
Twilight no respondió y se teletransporto a la habitación de Sunset, sin encontrar rastro de ella. Después fue al lugar en donde guardaba la corona y los collares de las chicas y tampoco había rastro de ella.
Sin más, volvió con los demás.
—¡Habla y di qué pasa, Twilight!—exigió Starlight.
—Sun... Sunset Shimmer paso. —titubeó.
—¿De qué hablas?—preguntó Spike preocupado.
—Ella le hizo esto a Cozy... y también robó los elementos de la armonía...
La unicornio y el dragón se vieron entre si preocupados.
—¿Enserio lo hizo?
—Sí... lo hizo.
【Canterlot】
—¿No ha respondido?
La pelirosa negó ante la pregunta de la modista.
Ésta suspiro mientras se cruzaba de brazos, abrazándose a si misma por el frío que hacía.
—Abrigate, Rarity. —le puso una chaqueta en sus hombros.
—Gracias, Applejack. —le agradeció con una sonrisa mientras se ponía la chaqueta.
Las seis y Spike habían estado ahí desde que Sunset se fue, esperando a que volviera.
A pesar de que casi amanecía ellas seguían allí.
Twilight y Fluttershy descansaban un poco junto a Spike mientras las demás seguían despiertas.
Pinkie seguía esperando a que la princesa Twilight respondiera a su mensaje sobre Sunset.
Su curiosidad le ganó y también estuvo leyendo las otras páginas, se dio cuenta que el diario estaba por acabarse y de que en este tiempo Twilight y Sunset casi no hablaron.
En unaa cuentas páginas ambas hablaban de lo ocurrido en los juegos de la amistad y habían pasado más de tres años desde eso.
—Chicas, ¿ustedes creen que... fuimos muy duras con Sunset?
—¿Porqué lo dices?
—Porque... es cierto que mintió y se comportó de manera grosera, pero qué otra cosa podemos esperar si está siendo controlada por el hechizo. Sé que en el fondo ella no haría eso, para nada. —cerró el diario y las observó—. Incluso cuando le contamos lo del hechizo fuimos bruscas.
—La situación allí nos sobrepaso y perdimos el control. —admitió la peliarcoiris—. Fue por eso que Sunset decidió entrar al portal de esa forma.
—Cuando vuelva le pediré disculpas por eso, y tal vez así... quiera seguir siendo nuestra amiga.
—Lleva allí casi un día y la princesa Twilight no ha respondido el diario. No quiero sonar negativa pero eso no pinta para nada bien... —opinó la rubia.
—No debe de estar pasando nada malo, quizás la princesa Twilight está ayudando a Sunset y por eso no ha podido responder. Puede haber miles de razones más que algo malo esté pasando allá. —respondió un poco molesta.
—Yo solo espero que vuelva pronto. —bostezo—. No sé si mi sueño de belleza valga todo esto.
Flutteshy comenzó a despertarse y a moverse, despertando a Twilight también.
—¿Qué hora es?—preguntó una de ellas aún adormilada.
—Las cuatro de la mañana.
—Que bien, me levanté una hora antes. —se estiró un poco y busco sus lentes para ponérselos—. ¿Spike?—lo llamó pero seguía dormido.
—Debo ir al baño de nuevo, préstame las llaves Rarity. —le pidió Pinkie.
Ésta las sacó de su bolsillo y se las entregó, al mismo tiempo en que ella le daba el diario.
—Aún no puedo creer que enserio Celestia te haya dado unas llaves para poder entrar a la escuela. —comentó Rainbow observando a Pinkie ir a la escuela.
—¿Qué puedo decir? Soy muy persuasiva. —alzó la cabeza orgullosa de si misma.
Pasaron unos minutos cuando Flutteshy se levantó después de estirarse un poco. Se quedo viendo de frente la estatua, o más bien portal, y subió la mano para tocarlo pero se detuvo de la nada y se alejo.
—¿Sucede algo, querida?—preguntó Rarity al verla hacer eso.
—El portal se mueve... creo viene alguien.
Twilight también se levantó con Spike en sus brazos y se acercó a las demás, quienes veían a su amiga y el portal con preocupación.
Sus sospechas resultaron siendo ciertas porque no paso mucho tiempo para que una figura conocida saliera del portal.
Ella cayó al suelo junto a las cosas que traía.
—... ¿Sunset Shimmer? ¿estás bien?—preguntaba Applejack acercándosele para ayudarla a levantarse.
Pero ella se negó a recibir su ayuda.
Se levantó y recibió a las chicas con una sonrisa calmada.
—Perdonen, ¿tardé mucho? Estaba ocupada arreglando unos asuntos.
Estando confundidas, las demás se dieron cuenta de las cosas que estaban en suelo.
—¿Ese es el libro? Y... ¿qué son esas cosas?—Rainbow se agachó para tocarlas pero Sunset se lo impidió dándole un golpe.
—Eso es mío. —habló con una voz firme, un cambio repentino a su voz cálida de hace un momento.
Tomó la corona y los collares, dejando el libro en el suelo.
—Chicas... es la corona de la princesa Twilight. —Rarity se cubrió la boca.
La Twilight de allí al escuchar eso la observó temerosa.
—Al principio quería darle una lección a la Twilight de allá, pero una querida amiga me hizo ver que podía hacer mucho más que eso.
—Sunset, ¿q-qué harás con eso?—Fluttershy preguntó temerosa
—Ya verás, querida... Ésta sería una buena oportunidad para darles una lección a ustedes también. —se colocó los collares en el orden en el que las chicas tuvieron el hechizo; honestidad, generosidad, amabilidad, lealtad y risa.
—¡Sunset, no hagas esto! ¡es mi culpa que estés actuando así por favor no hagas nada de lo que te vayas arrepentir por mi!—gritó Twilight acercándosele—. Sé que esto no te convencerá ni me creerás pero si no lo haces por mi hazlo por ellas, ellas siempre han estado para ti y te quieren... por favor no lo hagas. —susurró soltando pequeñas lágrimas.
—Blablabla, siempre escucho eso de ti. —ríe falsamente—. Todo era perfecto, hasta que llegaste tú Twilight. Tú eres la responsable de todo y ciertamente me cansé de defenderte diciendo que no tienes la culpa cuando sí la tienes. No estaban siendo controlada como ellas, tú siempre has estado loca...
—¡Ya basta, Sunset!
—¡CIERRA LA BOCA!—gritó enfurecida a Rarity y volvió su vista a Twilight—. Tú serás la primera en ser castigada por lo que les hiciste... por lo que me hiciste. Y si todo sale bien, tal vez considere volver a ser su amiga. —finalmente se puso la corona.
—¡SUNSET, NO!
Cuando eso pasó una ráfaga de viento empujó a las chicas hacia atrás y los elementos alzaron a Sunset mientras la hacían brillar.
Pinkie salió rápidamente de la escuela asustada por el ruido que escuchó.
Cuando miró lo que sucedía solo retrocedió un poco mientras tragaba saliva nerviosa.
—Mal momento para haber ido al baño...
•Sunset Shimmer ❌
『¡lista completa!』
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