«20»
Narradora POV.
—¿Cómo fue qué hice eso? ¿porqué lo hice?—murmuraba Twilight sentada en su cama.
—Basta, Twilight. No conseguirás respuestas atormentandote de ésta manera. —dijo Spike llegando a su lado.
—No lo entiendes Spike. Si pude hacer esa magia entonces significa que ella aún sigue adentro. —dice levantándose para irse a mirar al espejo—. Y quiere salir...
—Eso no lo sabes con precisión. Tal vez aún tenías esa magia porque estuviste en contacto con Equestria y---...
—No busques excusas, Spike. No puedo poner en peligro a las chicas, debo alejarme de ellas...—en cuanto dijo eso escuchó un ruido fuera de su habitación.
Fue a fijarse. Al abrir la puerta se encontró con su hermano.
—¿Shining? ¿qué haces aquí?
—Ah, yo vivo aquí. —respondió un tanto obvio.
—¡Nos estaba espiando!—dijo Spike levantándose.
—¡Deja de hablar, Spike!... Jamás pensé que diría eso, ha. —comentó con gracia.
—¿Porqué nos estabas espiando, Shining?—preguntó Twilight seriamente.
—No estaba espiandote... bueno sí. ¡Pero fue porque estaba preocupado! Ayer llegaste no muy bien que digamos y quería saber qué te pasaba... es todo.
—Estoy bien, ¿de acuerdo?
—Por favor Twilight, ¿crees qué no conozco a mi hermana? Sé que algo te pasa... y también sé que tiene que ver con esas chicas.
—No estoy de humor para esto de nuevo, Shining. —murmuró un poco molesta la menor.
—¿A quién te referías cuando que ella seguía adentro y quería salir?—preguntó.
Twilight rodeó los ojos.
SÍ los había espiado.
—Eso no te importa. Ahora dejanos en paz, y dejanos de espiar. —dijo apuntó de cerrar la puerta pero su hermano la detuvo.
—No me iré hasta que me respondas, Twilight. —dijo serio.
La mencionada lo miro con los ojos entre-cerrados y suspiró.
—Bien, te lo dire todo.
—Ah, Twilight...—dijo Spike no muy seguro de lo que la chica iba hacer.
—¿Quieres saber de quién hablaba, Shining? Pues lo sabrás. ¿Recuerdas lo qué me pasó en los juegos de la amistad? ¿y cuando me obsesione con ese libro? Que en realidad me obsesione con buscar cuál era la dimensión de donde habitaba la magia que tuve cuando me convertí en Midnigh Sparkle por primera vez.
—¿Midnigh Sparkle? ¿de qué hablas, Twilight?—preguntó el mayor confundido.
—Así se llama mi versión demonio o algo así. En lo que me convertí en ambas ocasiones queriendo ir a Equestria para conseguir toda la magia y tenerla para mí. Fue por eso que me obsesione con el libro... por la magia.
—¿De qué magia hablas? ¿de dónde viene?
—Hablo de la magia que viene del portal de la escuela Canterlot... o para ser más exactos, de la magia que viene de Equestria... de ahí viene la chica pelirroja que vino la otra vez. Y su magia; es la magia de la amistad.
—¿Magia de la amistad? Twilight, no entiendo nada. —dice aún más confundido.
—Shining, cuando era Midnight Sparkle hice muchas cosas malas... una de ellas fue ponerles un hechizo a esas chicas para que no pudieran derrotarme esa vez. Ellas actuarían en contra de su elemento para que no se pudieran juntar y usar su magia para derrotarme... pero el hechizo en ese momento no funcionó. Yo deje de ser Midnight Sparkle pero el hechizo... aún seguía.
—¿Aún... sigue el hechizo?—preguntó concentrado en sus palabras.
—Sí... y ya les ha afectado a todas, excepto a una... y creemos que hay una manera de evitarlo y por eso decidí ayudarlas... de todas formas; todo esto es mi culpa. —dijo yéndose a sentar a la silla más cercana de su habitación.
—Twilight, no...
—Pero no te preocupes. Me temo que no podré seguir ayudandolas más. Es peligroso para ellas que este cerca suyo... no voy a permitir que Midnight salga nuevamente y les haga de nuevo. —dijo con la cabeza agachado.
—No puedes hacer eso Twilight, ellas te necesitan. —dijo Spike.
—Es cierto. Midnight Sparkle ya no existe, sólo eres tú ahora. —dijo su hermano tomando el mentón de la menor para que lo mirara.
—P-Pero ayer yo... volví hacer su magia.
—Pero eso no por eso significa que sea algo malo, que sea ella. Escucha, Twilight, no sé mucho sobre esto pero sé que ya no eres como antes, y que ahora tienes más control sobre tus emociones aunque no creas eso. No volverás hacer lo que hiciste siendo Midnight Sparkle.
—¡Exacto! Tú eres Twilight Sparkle. Y sé que hay una explicación a eso de la magia, Sunset Shimmer podría ayudarnos. Además, no significa que sea algo malo.
—Tienes razón con lo de Sunset Shimmer, ella podría ayudarme. —sonrió un poco.
Su hermano mayor suspiro. No pensó que su hermana menor lidiará con ese tipo de problemas...
—Por cierto, Twily, tengo que confesarte algo. —sacó el libro de su bolsillo trasero. La menor y el canino lo miraron sorprendidos.
—¿El libro? ¿pero cómo? Dijiste que lo... —entendió todo—. Un momento, ¡¿mentiste?!
—¡Sé que te dije que lo habíamos destruido! La verdad es que necesitaba averigüar quién había escrito este libro pero no dice quien lo escribió y no encontré indicios de quien podría hacerlo. —se lo entregó—. Lo lamento, no debí mentirte, yo no quería---...
—¿Qué me pasará lo mismo otra vez?—preguntó bajando la mirada.
—Yo no quería que este libro te causará algún trauma o algo así... yo sé que no te volverá a pasar lo mismo, Twilight. Lo único que intentó hacer es protegerte pero en lugar de eso creo que te estoy haciendo mal...
La menor levantó la mirada y se le quedó mirando a su hermano por unos segundos. Sabía que se sentía mal y lo que decía era verdad.
Lo abrazó. —Tú no me estás haciendo ningún mal Shining Armor, sé que me estás protegiendo y apreció eso pero quiero que entiendas que ahora yo también puedo cuidarme a mi misma, aún así, gracias por estar siempre conmigo.
Él mencionado sonrió ante las palabras de su hermana y correspondió el abrazo.
Finalmente había entendido que su hermana ya no era la pequeña que protegía de niños, ahora ella podía protegerse... y eso lo hacía sentir en calma, sabía que nada iba a pasarle.
—Recuerda, Twily, aunque no entienda esas cosas de magia, aquí estaré para ti, si me necesitas.
—Gracias, Shining.
Spike miraba a ambos hermanos con una sonrisa.
[…]
Sunset Shimmer POV.
—¡3, 2, 1... quemados!—escuche a Applejack gritar.
Rainbow tomó la mayor cantidad de balones que podía sostener y comenzó arrojarmelos.
Era buena... demasiado.
Por lo que opte por refugiarme detrás de una de las cosas que estaban en el gimnasio.
—¡Vamos, Sunset, sal de donde te escondes! ¡no seas una cobarde!—grito Rainbow sin dejar de arrojar balones al azar.
¿Porqué había elegido este juego? ¿porqué no ajedrez? Ahí ganaría fácilmente.
La última vez que jugué quemados fue hace mucho, y cuando jugaba era muy brusca, no al nivel de Rainbow ya que cuando lanzaba los balones con el objetivo de lastimar a los demás cuando era... la de antes.
—¡No importa si te escondes Sunset, igual ganaré!—rodeé los ojos. Ya me estaba comenzando a ganar.
Si quería ganar tendría que ser igual de ruda, pero no demasiado, obviamente.
Tome la mayor cantidad de balones y salí de mi escondite.
—¡Hey, Dash, piensa rápido!—comencé arrojar balones a su dirección.
Los niños y las chicas se alejaron refugiándose de mis balones.
—¡Hey, eso era mío!—grito Dash al ver que prácticamente había copiado su 'truco'
—¡En la guerra y los quemados todo se vale!—grite como respuesta.
—Estoy segura de que así no era la frase. —opinó Applejack.
Dash no se quedó atrás he imitó mi acción, ahora ambas estábamos literalmente arrojando balones sin dirección aparente.
—Pensé que esto sería más gratificante. —comentó Fluttershy.
—¿Acaso esto va a terminar o seguirán así por toda la eternidad?—cuestionó Rarity.
—Buena rima, señorita. —la alagó uno de los niños.
Bien, esto me estaba aburriendo.
—¡Alto! ¡pido pausa!—grite alzando la mano en señal de "paz".
—¿Qué sucede? ¿te das por vencida?—preguntó deteniéndose.
—Tú más que nadie sabe que esto duraría mucho tiempo, ambas somos tenemos muchas habilidades y aunque yo no he jugado en mucho tiempo puedo llegar a igualarte y hacer que esto nunca acabe.
—Mmm... bueno, admito que me has sorprendido tu resistencia. Pero hay algo que olvidas, Shimmer.
—¿Qué cosa?
—¡Nunca bajar la guardia!—grita arrojandome el balón, el cual pude evitar a tiempo.
Debió arrojar primero el balón y luego decir su frase.
Aproveché yo y le arrojé el balón, sin darle tiempo de que lo esquivé.
—Y Sunset Shimmer es la ganadora, supongo. —dictó Applejack.
—¡¿Qué?! ¡no es cierto, fue trampa!
—Tú fuiste la que hizo trampa, Rainbow Dash. Sunset había pedido una pausa y tú seguiste jugando.
—Entonces, ¡significa que ella tampoco debía seguir jugando! ¡JA! ¡tampoco ganó!
—Bien. —murmure. Tome otro balón—. ¡Fuera pausa!—y, le arroje nuevamente el balón.
—¿Ya estás feliz?—cuestionó con el seño fruncido la rubia.
—¡ESTO NO ES JUSTO!—grito molesta—. ¡No me diste tiempo!
—Creo que el hechizo no le ha dejado de afectar. —murmuró con sarcasmo Applejack.
—Profesora, esta siendo una mala perdedora. Y nos dijo que no hay nada peor que eso... después de perder. —comentó una de las niñas. Los demás estudiantes comenzarán a murmurar cosas al respecto.
—¡No es... cierto. —pensó mejor sus palabras—. Bien, sí lo es. Lo siento, ganaste Sunset Shimmer.
—¿Eso significa qué...—comenzó a preguntar Fluttershy.
—Sí, iré con ustedes... ya que. —dijo con una mueca—. Niños, lamento informarles que dejaré de ser su maestra.
Los niños se quedaron en silencio hasta que uno grito con mucha emoción;
—¡SÍ!
Comenzaron a festejar entre ellos mientras Dash los miraba molesta.
—Igualmente nunca me agradaron. —se cruzo de brazos dándose la vuelta para abandonar el gimnasio—. ¡Vámonos, ya, chicas!
Yo reí en silencio ante eso.
Ahora que logré que Rainbow Dash vuelva con nosotros significa que podemos seguir.
« Vamos por ti, Pinkie Pie »
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro