✐ Pov. Narrador

El clima era cálido y la luz del sol era una buena compañía para todo ser que lo disfrutaba.
La casa estaba vacía, no había mucho que hacer, todo se encontraba en su debido lugar, bien ordenado y limpio, por lo que sólo le quedaba disfrutar de su tiempo libre en su habitación charlando desde su celular con el sujeto que alguna vez besó e hizo algo indebido.

Lo ocurrido era algo ciertamente extraño y vergonzoso, desde el almuerzo que tuvo con la familia de Timba dónde descubrió que Derek era el padre de este, él había conseguido su número para consultarle si se podía llegar a repetir lo hecho aquella noche en el club. Al no entender exactamente a lo que se refería, el hombre mayor le contó lo que había ocurrido en realidad y era algo mucho peor de lo que él pensaba o se podía llegar a imaginar.
No sólo lo había besado sino que también tuvo las agallas de hacerle una felación a aquel sujeto.
Definitivamente estaba perdido y se vió en la obligación de ir a una iglesia a confesarce por más absurdo que parezca. Al final pudo dejar las cosas hasta ahí con el hombre de cabello azulado, sin embargo siempre hablaba con él, pues tener a alguien con mucha más experiencia, conocimiento y sabiduría a Rius le servía, por lo que solían tratar temas serios o delicados.

En fin, agradecía que el padre de Timba fuera alguien paciente cómo para soportar sus problemas infantiles y comprensible cómo para aceptarlo y ayudarlo en algunas situaciones. Por supuesto también agradecía que no le haya dicho nada a su hijo, no se quiere ni imaginar la reacción de Timba si se llegara a enterar que su amigo/ex acosador había besado y echo una felación a su padre. Esa amistad que anhelaba mantener (por más que le doliera aún un poco), se echaría a perder para siempre.

A parte de los involucrados, otras personas que también sabían aquello eran Mayo y Víctor, claro omitiendo el detalle de quién era en realidad el hombre.
Víctor le mostraba apoyo y Mayo... Él sólo se burlaba de él. Pero bueno, aún así lo sigue queriendo.

Tras una larga charla se despidió de su nuevo amigo debido a que saldría con los anteriores mencionados a una discoteca.
Suspiró y se levantó de su cama para mirarse en el espejo, algo bueno de toda esta situación es que no pensó mucho en Timba, casi nada, al menos no en la manera en la que solía hacerlo, era un gran avance a su esfuerzo de querer superar ese sentimiento amoroso para él.

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Era muy tarde y la música estaba en un volumen demasiado elevado, apenas podía escuchar la interesante charla de sus amigos, aunque no importa de qué hablaran o chismosearan, él mantenía una mirada fija en la nada misma sin ninguna expresión de interés alguno.

Víctor: ¿Qué pasa, Rius? No te ves muy animado.. - Agradecía la preocupación de su compañero aunque no habría ninguna razón para estarlo - ¿No te gusta el lugar? :<
Mayo: No te nos vuelvas exigente, pollo. - Se tomó todo la bebida de un trago para luego darle toda su atención - Es lo que hay luego de que nos hayas dicho que no querías ir más a los clubs, ¿acaso quieres que te consigamos a alguien? Luego de esa noche te veo medio urgido.
Rius: ¿Qué? No, claro que no!.. Sólo.. No sé qué hacer, ando un poco aburrido..
Mayo: Necesitas más acción en tu vida y en todos los aspectos, Rius. Eres joven, somos jóvenes, en vez de estar lamentandote sobre un amor no correspondido, deberías estar por ahí divirtiéndote. No sé, viajes, salidas, una vida nocturna, fiestas, alcohol, chicas.. O hombres en tu caso~

Mientras ambos volvían a retomar su conversación, él se quedó pensando y reflexionando lo que le había dicho Mayo y es que tenía razón, nada ni nadie puede impedirle disfrutar de su juventud, ni el mismo, ni su mente ni corazón.
Lo meditó un poco más y decidido se levantó de su asiento bruscamente dando un golpe en la mesa bajo la atenta mirada de sus amigos, viéndolos con determinación y una sonrisa en su rostro.

Rius: Mayo, tienes razón, saben qué? Estoy harto de todo esto, de mí mismo y mi actitud preocupada y tonta. Tomen, esto es para ustedes.. - Agarró su billetera y dejó una buena cantidad de billetes en la mesa acercándolos a ellos - No me esperen, me quedaré toda la maldita noche y no me busquen mañana en todo el día en mi casa, ¡No estaré ahí!

Aclarado eso se tomó todo su trago y se dirigió al centro, en la pista de baile, ya no le importaba nada de lo que fuera a suceder, estaba listo para divertirse cómo lo hacían los jóvenes de su edad.
Víctor y Mayo lo vieron irse a paso firme hasta perderlo de vista, sus miradas se posaron en el dinero para después verse uno al otro fijamente.

Víctor: ¿50 y 50?
Mayo: 60 y 40, yo doy los buenos consejos aquí.. - Agarró más de la mitad cómo lo había dicho contando cuánto era - Aporto más que tú!
Víctor: No vale, lo guías por el camino del mal, eres una mala influencia para él >:( Tengo un mal presentimiento respecto a esto.
Mayo: Denle un pañuelo a la niña. Deja de llorar.
Víctor: :(

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│❝ Más Tarde... ❞

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No sabía cuánto tiempo había pasado ahí y mucho menos qué hora exacta era, pero si de algo estaba seguro es que su nivel de alcoholemia debía estar muy elevado, veía un poco borroso y se movía algo torpe, pero aún en ese estado podía mantenerse de pie y estar consciente de todo y todas sus acciones o decisiones.. Todavía.
Estaba muy apegado a un sujeto del cual ni siquiera le había preguntado el nombre y es que eso no le importaba, sólo se había acercado y lo llevó a bailar. Al principio no se veía convencido pero luego de un rato rozando y frotando ambos cuerpos de manera caliente en cada movimiento de baile se decidió por quedarse con él.

En algunas ocasiones su cuerpo se estremecía por los besos y lamidas que le daba en su piel pálida, en las partes donde sus prendas no lograban cubrir todo, ya sea porque eran más flojas y cortas, o porque se las había sacado a voluntad propia.
Sólo se quedó con su blusa corta que parecía más un top masculino color negro, dejando expuesto su cuello y hombros. Claro y su pantalón ajustado, no pensaba sacárselo en un lugar público con mucha gente presente.
¿Su camisa y chaqueta? Se la había sacado y no tenía ni puta idea de dónde estaban, las tiró por ahí, seguramente alguien ya se lo habrá quedado pero no le importaba, de hecho el pensar que alguien podría estar usando su ropa le parecía de cierta forma divertido.

De un momento a otro dejó de sentir el calor corporal que tenía por parte del hombre con el que estaba muy apegado y de los otros que estaban a su alrededor, un pequeño dolor invadió su muñeca por lo que alzó la vista para ver quién lo había sacado de ahí de manera apresurada encontrandose con aquellos ojos azules diamantes, eran una verdadera joya. Con una sonrisa boba se acercó al contrario y acarició su cabello divertido apoyando su cabeza en el pecho del más alto sin dejar de verlo.

Rius: Hola Trolli~ No sabía que estabas aquí, vienes a buscarme? No quiero irme.. Me estaba divirtiendooo.. - Cerró los ojos y se acomodó en el azabache abrazándolo, estaba muy borracho y no sólo lo delataba su actitud, su caminar y torpeza, sino que también el olor a alcohol que desprendía de su boca. Aunque no era el único - Esos hombres.. Son buenos.. Partidos.. ¿Bailamos? Esta música es lenta y sensual.. Me gusta~..
Trollino: Mejor no digo nada.. Woow~.. - Soltó una leve risa juguetona, pues con el peso del menor estaba apunto de caer al suelo. Sonrió y lo sujetó bien mientras apoyaba su barbilla en la cabeza del contrario haciendo caso a la petición de este - Rius, estamos en una discoteca borrachos.. Bailando una canción que es para las parejas.. ¿Acaso esto es una señal del universo?
Rius: Mmmmh.. No sé.. Mayo y Víctor dicen.. Dicen que busque una habitación.. Dijeron; "vive y disfruta tu vida", en resumen, toma alcohol con libertad, ve de fiesta y baila con desconocidos, y por último, llévate al primer hombre que veas a la cama más cercana.. ¿De..Deberíamos hacer eso? - Se dió media vuelta sin despegar ni un centímetro su cuerpo del otro, el calor que sentía en el momento le parecía muy agradable, especialmente el aroma a colonia que tenía el oji azul, era una fragancia exquisita que quería tener impregnada en todo el cuerpo - Vamooos~...
Trollino: Dame de lo que te fumas..
Rius: Yo no hago esoOo..

Pasaron un rato hablando de tonterías y bailando apegados cómo si separarse fuera un pecado o un delito que no se atreverían a cometer.
De un momento a otro el calor empezó a invadir ambos cuerpos y los besos no se hicieron faltar al igual que los suspiros del mayor y los jadeos del menor. Estaban contra una de las paredes del lugar besándose con deseo y desesperación, el azabache no dejaba de ver el rostro rojo del albino con los ojos cerrados y un hilo de saliva cayendo por la comisura de sus labios mientras lo besaba con fervor y lujuria introduciendo su lengua en la boca del otro explorando cada rincón de esta sin dejar de verlo con frustración. Deseaba mucho más que sólo besarlo o tocarlo, lo tenía arrinconado contra su cuerpo sin oportunidad de separarse o escapar (aunque a decir verdad, Rius no tenía mucha intención de hacer alguna de esas dos cosas), pronto rozó su entrepierna con el trasero del menor mientras pasaba sus manos por debajo de la ropa de este acariciando cada parte de su cuerpo, su cadera, su cintura, vientre, recorriendo su abdomen hasta llegar a su pecho dónde empezó a jugar con los pezones rosados, cálidos y ya duros del oji bicolor, disfrutando de las reacciones que ocasionaban sus toques.

Rius: Trollino~
Trollino: Sólo encárgate de disfrutarlo, ¿sí?

Su piel era suave y pálida, las mordidas y chupones que fue dejando en su cuello, hombros, brazos, abdomen y pecho, serían bastante notables, pronto los colores morado y rojizo le hicieron buen acompañamiento a su pequeño cuerpo. Le había dado la vuelta quedando frente a frente volviendo a atacar los labios ya rojos del albino mordiéndolos sin piedad mientras levantaba una de las piernas de este a la altura de su cadera y empezaba a frotar su entrepierna con la del ajeno escuchando sus gemidos ahogados en medio del beso.

Sí, definitivamente buscaría una habitación o se lo llevaría a casa.

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Mike: Mira, Dafne estrena nuevo vestido, a que le queda bien! - Con una muñeca en su mano izquierda, la acercó al rostro de su amigo gatuno, quién se había quedado en su casa gracias al permiso de su padre y amigo, Trollino y Víctor, pues ambos mayores habían salido por lo que quisieron hacer una pijamada sólo los dos juntos en su casa - Trolli lo compró en una tienda que se dedica a hacer ropa para muñecos :>
Acenix: No está mal, supongo.. Oye, no deberíamos estar durmiendo? Si Trolli nos descubre despiertos se va a molestar mucho, no quiero ser regañado por él.
Mike: No te preocupes, dijo que llegaría muy tarde, posiblemente a altas horas de la madrugada asi que todo bien!
Acenix: (Pero si ya son las 02.45am..) Yyy.. A dónde fue? - Dejó la muñeca con la que jugaba para darle toda su atención al perro amarillo - Víctor salió con Mayo y Rius de fiesta.
Mike: ¿Y no invitan? :< Son malos.. Pues dijo que sólo iría a caminar por ahí y que posiblemente se quedaría a dormir dónde Timba, por lo que no me preocupa :D
Acenix: Cómo tú digas, mi amigo perruno.

Siguieron con su juego y charla animadamente hasta que, sin querer, Acenix perdió una de las coronas de las muñecas, alterando a Mike quien se puso cómo loco a buscar por toda la habitación. En cuestión de segundos ya estaban peleando e iniciando una discusión insultándose sin parar, ofendiéndose cada vez más.

Mike: ¡Todo esto es tu culpa, gata! Trolli ahora me va a regañar, posiblemente me quede sin mis chocolates por una semana.. - Se agarró las orejas cubriendose la boca imaginándose lo peor.
Acenix: ¿DISCULPA? Tú eres el que quizo seguir jugando a la búsqueda de objetos perdidos, perra, no creí que se perderían de verdad, a parte no creo que lo note, sólo es una coronita, tienes millones de esas >:(
Mike: Cómo te atreves.. NO es sólo una "coronita", es LA corona, sus gemas son verdaderas, sabes lo que cuesta esa "coronita"? No, claro que no, tu familia pobre no lo entendería.
Acenix: ¡OYE! Ofendes a mis padres adoptivos, con ellos no te metas, ¿acaso quieres pelear? ¡Soy cinta negra en karate!
Mike: Tú no sabes karate, ni boxeo y mucho menos alguna que involucre el cuerpo a cuerpo.
Acenix: Creo que olvidas que Víctor y Rius son mis padres.
Mike: Rius no sabe karate y no es tu padre, sólo Víctor y por lo que tengo entendido ellos no son pareja o algo por el estilo cómo para que lo llames así!
Acenix: ¡Sólo sientes envidia porque yo sí tengo dos padres y me quieren mucho más de lo que el tuyo puede llegar a hacerlo!

Toda la habitación se quedó en silencio absoluto por un largo rato, rato en el que el de pelaje grisáceo observó cómo la mirada de su amigo cambiaba rápidamente de una de enojo a una de tristeza, con lágrimas a punto de caer en sus ojos dando a entender que lloraría.
Pensó un poco en lo que le había dicho y al captar todo, se acercó a él y lo abrazó, por más que los abrazos no sean algo suyo, pues no le gustaba mucho el contacto físico sólo con los de la familia.
Pero en fin, Mike era una excepción a todo.

Acenix: No llores, no lo decía enserio, sabes que Trollino te quiere más que a su propia vida, tú siempre estarás por delante de todo para él :(
Mike: ¡Quiero a mi mamá!
Acenix: (Sí Trollino se entera de esto me matará, seré comida china!) Mmmh.. - Lo consoló abrazándolo y dándole mimos mientras pensaba en cómo hacer para que dejará de llorar - Ya sé! Podemos compartir padres!
Mike: ¿Q..Qué?.. ¿C..Cómo es eso..? - Había dejado de llorar para verlo confundido y curioso aún con algunas lágrimas.
Acenix: ¡Podemos compartir a Víctor!
Mike: Pero ya tengo un padre.. No quiero otro, a parte no es por nada pero.. Víctor no tiene mucha pinta de ser siquiera un buen padre..
Acenix: Me ofendes, aunque es un poco cierto (sólo es un poco bobo.. y algo distraído), en ese caso compartamos a Rius! Es un buen papá y mamá :>
Mike: Pero es un hombre.. Y ya tengo a Trolli cómo papá..
Acenix: Si una mujer puede ser padre y madre para su hijo, por qué un hombre no?

El de capa verde se secó las pocas lágrimas que tenía con una pequeña sonrisa adornando su cara, cosa que hizo sentir mejor al contrario quién movió su cola de un lado a otro lentamente, victorioso por lograr aquello.

Mike: Creo que tienes razón.. - Lo miró sonriente enseñando sus colmillos alegre, ocasionando un pequeño rubor rosado en las mejillas del gato.
Acenix: Si sí, siempre la tengo!.. - Se puso más colorido al sentir cómo el contrario se acurrucaba en su pecho, no pudo evitar sonreír insconcientemente haciendo que desvíe rápidamente la cabeza al otro lado, alejándolo de él con un empujón que lo hizo caer al suelo - B..bueno, ya es suficiente! Odio los abrazos, no me vuelvas a tocar! >:(
Mike: ¡Okey! :D

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Se lamenta el retraso, he estado enfermo esta semana. Se les deja estos dibujos cómo medida de disculpa. Todos pertenecientes a Derek para darse una mejor idea mental de cómo es en realidad.
En un principio se llamaría Zack y ocuparía otro roll en la historia cómo hermano mayor de Rius, pero fue cambiado a último momento.