Capítulo 18
✿︎KTH✿︎
Luego de aquella conversación con el rubio, me di cuenta de que, mis sentimientos hacia a ti apuntan a otro lado.
Luego de aquella fatídica noche, luego de mi ex novia.
Me di cuenta de que, a quien quiero de verdad es a ti.
Y es que contigo puedo ser yo mismo.
¿Recuerdas la primavera en donde nos conocimos?
Quiero atesorar ese día siempre.
Quiero atesorarte siempre.
...
Sábado.
—Creo que Jungkook le pedirá a Taehyung que sea su novio, me dijo algo asi hace un rato.—Yoongi le dijo a Seokjin con una sonrisa.
—¿De verdad? ¿Cuando? ¿Termino con Jihyo?
—Haces muchas preguntas y si, termino con la rompe hogares.—Yoongi volteo los ojos. Y Seokjin le acaricio el cabello.
—Que bueno la verdad, El solamente la idealizo, en realidad la chica es una mierda de persona.—Seokjin admitió con recelo.
—Lo bueno que ella ya no será una molestia. Ni para mi ni para Jungkook.—Yoongi dijo.
—Iremos a ver los fuegos artificiales también, ¿verdad?—Seokjin desvío el tema mirandole a los ojos.
—Pues claro, será un día especial.—Yoongi se acercó para besarle la frente al contrario.
—Sí alguien de la escuela se entera de que también puedes ser cariñoso, seguro no se lo creerían.—Seokjin le dijo con una sonrisa pícara.
—Pues más te vale no decirle a nadie, solamente puedo ser así contigo.—Yoongi le Amenazo de broma y ambos rieron.
Sin importar lo que haya pasado anteriormente, ellos siempre volverían a conectar sus ojos de manera romántica. Ambos se querían tanto, su amor era puro. Yoongi no sabia de lo mucho que se podía querer a alguien y Seokjin entendió que para poder ser feliz, tendría que ignorar los malos comentarios de su familia.
Porque, al final de todo, es su propia vida, y el decide con quien la pasara.
Se besaron gentilmente y tan suave, que era como si sus labios y ellos mismos estuvieran destinados.
Yoongi amaba a Seokjin.
Y Seokjin lo amaba de la misma forma.
Y eso era todo para que ambos pudieran ser felices, sin importar lo que digan.
...
La tarde había llegado, los fuegos artificiales comenzarían a las 8 de la noche.
—Jungkook, se que esto es repentino pero...—Taehyung apareció con una bolsa de regalo en sus manos frente al comedor en donde Jungkook estaba sentado.
El pelinegro le miró con curiosidad, esperando a que Taehyung continuará hablando.
—Toma.—Luego de unos segundos debatiendo consigo mismo, Taehyung le extendió la bolsa de regalo roja a Jungkook.
Este lo tomo y lo abrió.
—¿Es el perfume? ¿El mismo? ¡Wow, muchas gracias Taehyung!—Jungkook le Agradeció y aprecio el perfume en sus manos.
—Quería que estuvieras feliz.—Taehyung esbozo su sonrisa cuadrada.
Y Jungkook no lo dudo más, se acercó al chico y lo abrazo con fuerzas. Entre ellos ya no habían barreras.
—¡Gracias!
Se separaron y Taehyung le dijo que tenía que arreglarse para ir a ver los fuegos artificiales.
—Oye Taehyung, ¿Qué es esto?—Antes de que Taehyung se metiera al baño, Jungkook le mostró una carta que estaba en la bolsa.
—Léelo.—Taehyung le sonrió coquetamente y entro al baño.
Jungkook se sentía como un niño pequeño que había recibido un regalo por parte de sus padres.
Al abrir la carta, era la letra de una canción en japonés. Cuando vio el título de la canción, se quedó inmóvil.
Abajo de las letras decía "Me recuerdas mucho a esta canción ♡"
Era una canción del 79' Stay With Me de Miki Matsubara.
...
Se vio a sí mismo unos 11 años atrás.
Cuando su padre le extendió una caja envuelta con papel rojo y con un dibujo de Santa Claus.
—Ábrelo hijo.—Su padre sonrió.
—Wow, ¡Es el juguete que tanto quise! ¡Muchas gracias papá!—El pequeño se abalanzó a su padre para abrazarlo, mientras su madre le daba un regalo a su hermano mayor.
Un invierno, la canción favorita de su madre y su padre, la última Navidad donde creyó en Santa Claus.
Antes de que a su padre lo hecharan de él trabajo que siempre había querido, antes del alcohol que empeoró su vida, antes de aquello golpes, antes de los desquites con sus hijos.
Cuando tuvo buenos regalos, cuando su madre sonreía.
Entonces, dos meses después, su padre recibió una llamada antes de dirigirse a su trabajo, le habían despedido.
Escucho gritos en la sala, su hermano mayor le decía que no debía salir.
—¡Tenemos que ayudar a mamá!
—¡Mamá me dijo que nos quedemos aquí!
Y el pequeño Jungkook, salió de su habitación dejando solo a su hermano.
Presenció como su padre le daba una fuerte cachetada a su pobre madre que yacia en el suelo.
—Papá, ¿Qué haces?—Fue lo único que Jungkook pudo pronunciar. Su padre salió de golpe, azotó la puerta y fue a alguna parte con su carro.
Y desde ello, ese mismo año cuando cumplió los 7 años, su padre había dejado de ser cariñoso con el y con su hermano, cada que escuchaba el auto, era señal para que el y su hermano de encerraran en la pequeña habitación de ambos.
Jungkook, muchas veces quiso salir para ayudar a su madre.
Pero era tan pequeño en un mundo tan inmenso repleto de mierda pura.
Y no podía hacer absolutamente nada.
Más que aferrarse a los brazos de su hermano mayor.
...
Jungkook dejo de divagar por sus recuerdos cuando Taehyung salió del baño, lo que le indicaba que era momento de que entrará para tomarse una ducha, al menos eso haría que se relaje un poco.
Al entrar a la bañera, recordó todas las veces que, estuvo involucrado con chicos que ni siquiera recuerda sus rostros ni sus nombres, recordó en todo el tabaco que consumía para ser menos miserable.
Desde que conoció a Taehyung, su vida cambió, dejó de ir a esas fiestas que no le aportaba nada, dejo de fumar, sin embargo, también desde que conoció a Taehyung, a llorado más veces de las que le lloro a su padre cuando esté los abandono.
Que irónica es la vida, ¿no?
...
7:30 p.m
—¡Vamos Jungkook!—Taehyung le apuro.
—¡Voy!—Ambos salieron del departamento y vieron a Jimin bajando del tercer piso.
El rubio les miró con ¿desprecio? ¿preocupación? Taehyung enseguida recordó su conversación con Jimin, y la única que había tenido con el.
"Le gustas a Jungkook" "Y el me gusta a mi"
"Pero, quiero que lo rechaces, el planea confesarse el día sábado, en los fuegos artificiales"
¿De verdad Jungkook planeaba eso?
Ambos se subieron a un taxi, Taehyung miraba al chico junto a el de reojo.
Al llegar al lugar, que más bien era cerca del muelle qué apuntaba hacia el lago, se bajaron del taxi y habían demasiadas personas, pues ahí se vería muchísimo mejor el espectáculo de fuegos artificiales.
—¿Quieres comer algo?—Jungkook le pregunto al chico frente a él, estaba divagando sobre algo, Jungkook lo conocía bastante bien.
—¿Qué? Oh, claro.—Taehyung salió de sus pensamientos.
Ambos se dirigieron a uno de los muchos puestos que estaban ahí.
Pidieron algo y se sentaron en una de las bancas cerca del pequeño puesto.
—La noche se ve preciosa.—Taehyung rompió el silencio.
—Sí... faltan solo unos 10 minutos para que empiecen los fuegos artificiales.—Jungkook dijo.
Jungkook le observó fijamente, Taehyung mantenía la vista en las pocas estrellas visibles de esa noche.
El pelinegro pensó en lo lindo que se veía ahí, frente a él, disfrutando de la vista. El lago oscuro se mantenía impasible, Taehyung paso su vista hacia este.
¿Cómo era que Taehyung podía verse tan bien haciendo nada? Era uno de los pensamientos diarios que, desde que lo conocía, habían pasado por su cabeza. Jungkook esbozo una pequeña sonrisa. Ese chico era perfecto, con sus pequeños defectos, ante la vista de Jeon Jungkook, siempre seria perfecto y especial.
Porque mientras el exista, Taehyung siempre será amado aunque no puedo pronunciarlo en voz alta.
Aunque solamente fueran amigos y solo por ahora. O al menos eso pensaba hasta que el señor les coloco su comida en la pequeña mesa.
—Yo lo pago.—Taehyung le extendió unos billetes antes de que Jungkook pudiera sacar su billetera.
—Nunca había venido por aquí.—Taehyung le sonrió antes de comenzar a comer.
—Nunca te había traído.—Jungkook dijo divertido, aún pensando en la conversación que había tenido con cierto rubio.
¿Realmente tenia que confesarte en esa noche? ¿Era necesario? Después de todo, le pareció muy raro que su ex novio le hubiera dicho eso.
—¡Ya van a comenzar!—Taehyung se paro de su asiento.
—Pero no has terminado de comer-
—Ven, vamos cerca del lago.—Taehyung le interrumpió y le extendió su mano haciendo que este se sonrojara completamente.
Ambos se acercaron al lago, un poco lejos de donde estaba amontonada toda la gente.
Era el lugar perfecto, el momento perfecto.
Pero Jungkook no iba a hacerlo o... ¿si?
Gritos y voces comenzaron a inundar todo el lugar. Taehyung sonreía ampliamente con loa ojos fijos en el espectáculo.
Pero, para Jungkook, ver a Taehyung contemplando los fuegos artificiales era un espectáculo mucho mejor.
Taehyung le volteo a ver con una sonrisa también.
—¡Es increíble!—Voceo para que su voz se escuche.
—¡Si!—Jungkook le respondió.
—¡Oye Taehyung!—Jungkook volvió a hablar y el contrario le volteo a ver con curiosidad.
—Yo... bueno tu.. ehm—Comenzó a tartamudear y Taehyung estalló en risas.
—¿Qué dices?—Dijo divertido.
—¡No es nada!—Jungkook disimulo volteando a ver el cielo nuevamente.
—¡Dímelo!—Pero Taehyung le insistió.
Ambos se voltearon a ver al mismo tiempo y eso hizo que en el estómago de Jungkook hubieran fuegos artificiales igualmente.
No podía explicar el sentimiento que tenía cuando veía a Taehyung con su linda sonrisa.
Entonces tenía que hacerlo, tenía que perder el miedo, tenía que decírselo. Porque era seguro de que si no se lo decía en ese momento nunca lo haría.
Trago saliva, Inhalo y exhalo hasta que se volteo hacia el chico de sus sueños, quien estaba admirando los fuegos artificiales.
—Taehyung.—Pronuncio y enseguida le volteo a ver.
—¡No puedo dejar de pensar en ti!—Finalmente se confesó, no era una confesión directa pero, ¿que se pensaría cuando alguien te diga algo como eso?
Taehyung le observó durante unos segundos. El pelinegro trataba de no apartar la mirada del chico, su corazón palpitaba tan fuerte que pensaba que Taehyung podía escucharlo.
Pero Taehyung no dijo nada.
Todo paso tan rápido, Jungkook estaba quieto en su lugar, entonces observó como Taehyung se acercaba a su rostro para tomarse de la cintura y chocar sus labios contra los de el. Fue un momento tan mágico, con los fuegos artificiales testigos de aquella escena, Jungkook acaricio torpemente el cabello del contrario.
Era la primera vez que Taehyung le había besado. Le había besado el y no había sido un desliz de Jungkook.
Eso significaba solamente una cosa.
Que finalmente, su amor era recíproco y el corazón casi le estallaba. El beso fue tan suave, tan cálido que ninguno de los dos queria separarse. Querían fundirse entre sus brazos cálidos y sus besos. Ambos lo sentían así.
Rompiendo las barreras.
Sin importar lo que piensen.
Sin haber dicho un "Me gustas"
Pero ambos lo sabían y lo sentían, joder, después de tanto tiempo.
Finalmente se separaron y Taehyung se abalanzo a sus brazos para que Jungkook no le viera el rostro qué le ardía.
—Tampoco puedo dejar de pensar en ti.—Taehyung le susurró en la oreja y Jungkook sentía que se derretía por la voz grave de su chico.
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