Narra Darien
Quien lo diría la gran y querida pediatría Serena terminaría mareada por la cerveza.

Nos fuimos de la fiesta, obviamente no sé dónde vive Serena así que decidí llevarla a mi departamento.

-Serena camina bien- intentaba caminar sola pero literal casi se caía

-Shoo pueo- decía enojada, dándome ligeros golpes con su puño cada que intentaba ayudarla

-deja que te ayude- le pedía

-que shooo pueso- reclamaba molesta

-hay ajá Serena pero si ni hablar puedes-

-ahhy onde me trahajiste hee qduhe quierhs hacer conmighuo-

-vamos a dentro te das un baño y vemos okey-

Entramos al departamento la lleve al baño y puse el agua fría ella se reía y me quería pegar decía que la emborrache que me aproveche y cuando menos me lo espere comenzó a llorar

-hey colega ¿Por que llora?-

-eres un estúpido me emborrachaste y luego me hiciste hacer el peor de los osos-

-ven ya cálmate-

-nooo que esa no fue mi intención-

Le prepare algo de comer pero con mucho picante para que se le terminará de quitar la borrachera.

Terminé por prestarle una camisa blanca ya que su ropa se mojó, ella comió los chilaquiles y ya estaba más tranquila

-ahora ya no piensas que me aproveche de ti-

-hay no es que ve eso de emborracharme no es nada bueno donde quedo mi imagen de la mejor pediatra-

-no se preocupe por eso mi buen colega su secreto esta a salvo conmigo- se rió, sonreí al menos la hice reír.

-jajaja muy gracioso colega, de casualidad no eres payaso en tus ratos libres- entre risas negué

Ella comenzó a bostezar y parecía cansada

-emm ven puedes dormir en mi habitación si gustas-

-gracias Darien

La lleve a la habitación, ella se acostó en la cama, la vi taparse y salí de la habitación.

Me quedé pensando en nuestras aventuras, me pareció súper cómico todo lo que sucedió.

Me recosté en el sillón pero apesar de todo me sentía incómodo, la ropa no me sentaba muy bien como para dormir.

Entre a la habitación tratando de no incómodar a Serena pero fue inútil cuando termine de cambiarme, ella me miraba.

-oye Darien estás bien durmiendo lejos de la cama-

-si claro-

-amm puedes dormir en tu cama si gustas, sobra mucho espacio-

-esta bien

Me acosté a lado de ella, entonces mire al techo y ella tomó una de mis manos y la metió por debajo de la camisa.

-y que dices, tendrías sexo nuevamente con una extraña-

-puede ser, además no eres una extraña eres una colega- ella se rió pero la detuve -estas segura-

-no pierdas el tiempo colega- introdujo más mi mano debajo de la camisa y perdí el control

Me enloqueció su piel, era tan suave y después su propuesta no pude negarme esta noche la haría mía.

Comencé a desabrochar la camisa para encontrarme con su piel descubierta, que era igual se clara que la de su rostro, comencé a besar su abdomen y subir por sus senos.

Ella daba ligeros suspiros y gemidos, arqueando su espalda pero me sorprendió una cosa.

Cuando intenté besar sus labios ella puso su mano en mi boca impidiendo mi beso

-no Darien, besos en los labios jamás-

-pero.... Serena que pasa por que no-

-te diré, un beso transmite secretos del corazón- guardo silencio para luego agregar -solo tendremos sexo no hay amor ni nada de eso-

-esta bien- bese su mejilla derecha y seguí besando su cuerpo

Besé su cuello incluso le daba cortos besos húmedos en la cuenca de su hombro, ella solo suspiraba al tiempo que arqueaba su cuerpo

-ahhhhh- decía cada que dejaba besos en su cuello y masajeaba sus pechos intenté perderla en el placer, para así poder aprovechar para besarla pero no lo lograba.

Cada que intentaba besarla, se giraba o ponía su mano

-no insistas o no podremos continuar-

-dame una razón por la cual no puedo- comencé a acariciar su intimidad estaba húmeda, tantos roces la habían excitado

-esos besos son solo con el que haga el amor-

-hay tenías que ser cursi-

Ella me miró mal pero cuando creí que pararía todo, me comenzó a masturbar aún con la ropa.

-podemos divertirnos sin necesidad de besos-

Poco a poco mi ropa desapareció y ambos estábamos piel con piel, su piel de ella era cálida pero tanto calor me hacía desear ya hacerla mía.

Pero sabía que debía hacerla llegar al orgasmo primero. Así que la recosté y comencé a jugar con mis dedos  simulando penetraciones.

Ella gemía dejando escapar algunos suspiros.

Después no pude contenerme, separé sus piernas coloqué mis manos en sus muslos para que no se moviera y me dejara continuar.

Su mirada reflejaba lujuria y deseo, la miré como pidiendo autorización

-solo hazlo- la escuché decir, así que me comencé a acercar al comienzo de su intimidad, con suaves besos me fuí abriendo paso entre sus labios menores y  con mis dedos masajeaba su clítoris, ella se movía de forma irregular se arqueaba y dejaba escapar varios suspiros.

Vaya estaba tan húmeda y su sabor me gustaba, muy pocas veces me atrevo a practicar sexo oral con las mujeres pero tuve las ganas de hacerlo desde que sentí que la vagina de serena estaba húmeda lista para recibirme.

Después de unos minutos logré mi objetivo Serena había alcanzado un orgasmo. Subí la vista para verla y estaba roja de la cara, algo sudada y agitada.

-me toca recompensarte colega-

-por favor has lo que tú creas conveniente- respondí

-siempre eres tan carismático Darien-

Ella comenzó a masturbar mi sexo con sus manos subía y bajaba masajeando

Entonces comenzó se aparto el cabello hacía atrás de la espalda, y se inclinó abriendo lentamente su boca, comenzó con un húmedo beso en la punta de mi miembro, luego comenzó a lamer desde arriba hasta la parte baja también poco a poco a chupar, subía y bajaba. Su boca me hacía sentir maravillas

Por instinto la tomé de la cabeza y la hice hacerlo más rápido, de pronto me había corrido en su boca.

-vaya me llenas de cerveza y ahora de semen- dijo riendo limpiando con sus dedos los restos de semen que quedaron en su mejilla

-continuemos te parece- respondí

Ella accedió y tanto deseó me ganó, besé sus mejillas al igual que sus senos, luego la ví mirarme mientras me colocabs un condón. Ella mordía de forma coqueta su labio inferior la jale ha mí y sin más la penetre, empecé lento poco a poco me fuí abriendo paso en su húmeda y tibia vagina, ella sonrió, juntos comenzamos a intensificar el ritmo.

Entraba y salía rápido de ella, a lo que  ella con sus piernas me apretaba para penetrarla más

Decidí darle embestidas más fuertes

-ohhh si Darien....ahhhh más-

Levanté una de sus piernas y la coloqué en mi hombro, volví a embestirla pude sentir como entre un poco más en ella

-ahhhhh....sii papi más-

Nuestros cuerpos seguían como en una danza de placer, ella a unos minutos más llegó a su orgasmo y dejo oír un gran gemido.

Unas embestidas más me corrí, ella acarició mi mejilla y dijo

-fue el mejor sexo de mi vida-

Aproveché lo satisfecha que estaba que bese sus labios ella en lugar de corresponderme me mordió, sentí que casi me arrancaba el labio.

De un momento a otro ella se encontraba arriba de mi y me dio un pico y pensé había cedido entonces una cachetada me trajo de vuelta a la realidad.

-recuerda algo Darien acepte tener sexo contigo pero no me vuelvas a besar o - y sus uñas se clavaron en mi miembro - te juro que te dejo sin huevos-

-esta bien esta bien-

Se acostó jalo la camisa blanca que tenía antes y me dio la espalda para después darme cuenta que ya estaba dormida