Una bella jovencita pelinegra se terminaba de arreglar para ir a la preparatoria mientras tarareaba una canción.

Minutos después:

La bella jovencita pelinegra bajo a desayunar junto a su padre antes de ir a sus estudios.

¿Qué tal te fue ayer en tu examen hija?, dijo el gigantesco hombre.

Bien papá, dijo la pelinegra sonriendo.

¿Y cuándo será su fiesta de despedida hija?, dijo el padre de la pelinegra.

Fin de mes papá, dijo la pelinegra.

¿Y ya tienes pareja hija?, porque el hijo de un amigo mío que estudia en tu misma preparatoria pero esta en otra de las aulas que también terminan este año me estuvo comentando ayer que fui a casa de su padre que le gustaría ir contigo, dijo el gigantesco hombre.

¿Quién es papá?, dijo Milk con curiosidad.

Freezer, dijo el padre de la pelinegra.

Aún no tengo pareja papá, pero si tengo pensado ir con alguien, dijo Milk.

¿Con algún amiguito de tu aula?, dijo el gigantesco hombre con curiosidad.

Si papá, dijo Milk, mientras pensaba: ojala y me entere quién es la persona que me escribe la carta pronto, si es una persona tan sensible al menos quiero saber quién es e ir al baile de fin de año con él, ya que la persona que me gustaría que me invitara nunca lo hará.

Minutos después: "Preparatoria Dragón"

Un atractivo jovencito de cabello alborotado entraba sigilosamente al aula y se acercaba al pupitre donde estaba la caja donde colocaban las cartas a dejar la carta de la pelinegra.

Gokú coloco su carta y salió rápidamente del aula hacia el pasadizo para esperar a sus amigos que recién llegaban.

Últimamente andas muy madrugador Kakaroto, dijo Vegueta riendo.

Yo siempre llego temprano cuando no tenemos entrenamiento, dijo Gokú sonriendo.

Si, dijo Vegueta irónico.

¿Vas a dejar tu carta?, dijo Gokú para cambiar de tema.

Esas tontas cartas, son una perdida de tiempo, dijo Vegueta.

¿No me digas que no trajiste carta?, dijo Gokú preocupado.

Claro que si insecto, pero ya encontré algo más práctico para no perder el tiempo escribiendo tonterías, dijo Vegueta.

¿Así qué?, dijo Gokú intrigado.

E comprado unas tarjetas ya escritas y esas se las enviare, acompañado de algo, para que luego no andes diciendo que no soy detallista, dijo Vegueta con molestia.

Entonces vamos a dejar nuestras cartas dijo Gokú mientras Vegueta asentía.

Mientras tanto:

Un grupo de chicas venían platicando por el pasadizo.

¿Entonces no solo iremos las tres?, decía Milk.

No, Milk es que Krilin y mi hermanito quisieron ir también, dijo Dieciocho.

Y son nuestros amigos no podemos decirles que no pero no son los únicos que irán, ya que Krilin me dijo que invitaría a sus amigos también solo espero que Vegueta no vaya, dijo Bulma.

Si es cierto, a mi también me lo dijo pero ya no te hagas Bulma que bien que quieres que vaya para que le pidas que vayan al baile de fin de año juntos, además ya les dije chicas si ellos no las valoran en la universidad conocerán otros chicos aunque mi hermanito quiere ir contigo Milk al baile, dijo Dieciocho.

Yo pedirle a ese cavernícola que sea mi pareja de baile, antes prefiero pedirle a Piccolo que sea mi pareja de baile, dijo Bulma.

Y en cuanto a tu hermano Dieciocho, yo aún prefiero esperar un poco para ver con quien iré al baile, dijo Milk.

Pero si mi hermanito te lo pide, ¿irías con él?, o estás esperando a que te lo pida otro, dijo Dieciocho sonriendo.

Prefiero esperar aún, no quiero que tú hermano confunda las cosas si acepto su invitación, dijo Milk.

Si tal vez tengas razón, dijo Dieciocho.

Chicas entremos ya, el profesor allá viene dijo Bulma mirando a su maestro aproximarse al lugar donde ellas se encontraban.

Horas después:

Lunch con molestia le entregaba a la bella pelinegra un sobre grande con su nombre.

Toma, dijo en tono envidioso, la rubia dándole un sobre a la pelinegra.

Milk como siempre, guardo rápidamente el sobre en su mochila pero Bulma que estaba junto a ella y aún no había recibido su carta se había percatado de un pequeño detalle.

Milk, ¿acaso Dieciocho hace unos minutos no te dio una carta ya?, dijo la peli azul despacio.

¡Eh¡ ¿me dio un sobre?, dijo la pelinegra fingiendo desconocimiento.

Si, dijo Bulma asintiendo con la cabeza.

A lo mejor se equivoco, dijo Milk abriendo su mochila fingiendo revisar los nombres de los sobres.

Es de la misma persona, seguro el sobre pequeño venía dentro del grande y se cayo de el, mira está abierto, dijo Milk abriendo un poco de un lado el sobre grande para que su peli azul amiga no sospechara.

Si, tienes razón se cayó de allí, de seguro Lunch con sus uñotas rasgo el pobre sobre, dijo Bulma, mientras la pelinegra sonreía por las palabras de su amiga.

Minutos después:

Una bella pelinegra junto a sus amigas abrían sus cartas sin darse cuenta que unos jovencitos las observaban.

Mira que lindo, decía Milk mirando la graciosa tarjeta en forma de oso que había recibido una de sus amigas.

Al menos esta vez se esforzó, dijo Bulma mirando su carta mientras Dieciocho mira la suya sonriendo.

Milk miro su pequeña carta que también contenía una tarjeta en forma de oso.

Creo que se pusieron de acuerdo, dijeron las tres jovencitas riendo al ver la coincidencia en las tres cartas.

Si, pero la mía viene con letra escrita a computadora, en cambio las de ustedes solo viene con el mensaje de la tarjeta, dijo Dieciocho riendo.

Vaya veo que no soy el único que compro una tarjeta escrita, dijo Piccolo riendo viendo al grupo de Lunch.

No amigo, la verdad yo también lo hice, dijo Gokú sonriendo.

Y todavía te burlaste de mí, cuando tú hiciste lo mismo Kakaroto, dijo Vegueta fingiendo molestia.

Como tú dijiste a veces no hay tiempo y me pareció práctico, por eso compre algunas, para cuando no me alcance el tiempo, dijo Gokú.

Pues yo también compre tarjeta echa, ya no tenía ideas para escribir en una carta, dijo Yancha riendo.

Bueno chicos no tiene nada de malo comprar una tarjeta y dársela a alguien aquí lo gracioso es la coincidencia, la mayoría de chicas del aula hoy recibieron una tarjeta echa por alguna industria, no echa por nosotros y para colmo todas son iguales, dijo Krilin.

Si, tienes razón, no lo había notado, dijo Ten mirando a sus compañeras que entre sí miraban la similitud de sus tarjetas.

Horas después: "Casa de Milk"

Una bella jovencita pelinegra guardaba la tarjeta en forma de oso junto a las otras tarjetas que le había escrito su admirador secreto. Luego abrió el sobre más grande que había sacado de su mochila y lo había colocado en su cama encontrándose con una bella tarjeta en forma de corazón y una cajita de bombones.

Vaya parece que hoy la mayoría optaron por comprar cartas ya echas hasta tú, dijo la pelinegra abriendo la carta en forma de corazón que para su sorpresa venía con texto escrito como siempre a computadora.

Carta

Mi bella Milk, cada día que pasa me entristezco más pensando que falta poco para separarme de ti y no volverte a ver más, no volver a ver más tu bello rostro, tus ojos negros como la noche, tu pequeña nariz, tus labios tan finos, tu bello cabello azabache largo, escuchar tu dulce voz, ver la forma como caminas, escuchar tu suave respiración cuando estás cerca de mi, todo es tan perfecto en ti mi niña bella que cada vez que te tengo cerca mi corazón parece estallar, mi cuerpo tiembla y soy un idiota completo a tu lado.

Siempre me estoy preguntando: ¿me darías una oportunidad si llegaras a saber quién soy?, me gustaría saber la respuesta pero siento que tú eres demasiado perfecta para mí y eso me impide acercarme aún a ti, cada día que pasa mi amor por ti va creciendo y estoy tratando de reunir el valor para pararme frente a ti, como te dije, me gustaría ir contigo al baile, ojala y aún nadie te lo haya pedido aunque eso es imposible siendo tan bella, más de una proposición has de haber tenido ya pero aún tengo la esperanza de que no sea tarde el momento en que yo decida pararme frente a ti.

¡Te amo mi niña¡ ¡eres lo más bello que me pasado en la vida desde que te conocí¡

Tú admirador secreto.

Milk doblo nuevamente su carta y se pregunto: ¿Quién eres?, ¿quiero saber de ti?, ¿quiero conocerte?, yo también quiero ir contigo al baile, ¿Quién de mis compañeros eres?, por lo que me escribiste hoy eres alguien que estás cerca de mi, ¿pero quién?.

Casa de Gokú:

Milk, mi bella niña, que hago, tal vez sea bueno aceptar la invitación de Krilin, ella irá también, allí podría intentar acercármele, pensaba Gokú mientras guardaba en una bolsa de papel un obsequio para su amada pelinegra.

Ojala y no se den cuenta, pensaran como la otra vez que la carta se cayó de la bolsa, pensó Gokú mientras sonreía.