Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 17: "Descubrimiento y aceptación"

Un atractivo jovencito de cabello alborotado que se encontraba sentado con una rosa roja en la mano en una de las mesas de una heladería miraba impaciente el reloj que se encontraba en la pared del local mientras pensaba con tristeza: Ya pasaron 30 minutos no vendrá.

Preparatoria Dragón:

Un grupo de chicas se encontraban platicando en los pasillos.

Que pasa Milk, desde que llegaste te noto nerviosa, dijo Dieciocho.

Es que no se que hacer, dijo Milk con tristeza.

¿Qué te pasa?, ¿estás así porque ya acabamos la preparatoria?, dijo Bulma.

No, no es por eso, si me da tristeza, pero no es por eso, dijo Milk.

¿Entonces?, ¿es por qué ya no verás a Gokú?, dijo Dieciocho.

Tampoco, ya me resigne a ello, dijo Milk.

¿Entonces?, dijo Bulma.

Lo que pasa es que....................

La pelinegra les comento a sus amigas la cita que le había propuesto su amigo secreto.

Pero, ¿por qué no vas?, es tu oportunidad para que sepas quien es, dijo Dieciocho.

Es que no quiero darle falsas ilusiones, dijo Milk.

Milk, ese pobre muchacho debe estarte esperando en esa heladería ve, dijo Bulma.

Si yo estoy de acuerdo con Bulma, dijo Dieciocho.

Minutos después: "Heladería"

Creo que será mejor ir a buscarla, dijo Gokú cuando vio entrar a su amada pelinegra a la heladería.

El joven de cabello alborotado sintió su corazón latirle a mayor prisa y su cuerpo temblar, entonces decidió tomar asiento y tomar la rosa roja en una de sus manos para que lo reconociera, tal como le dijo a la pelinegra en uno de sus mensajes.

Milk desde la puerta miraba las mesas del fondo, cuando distinguió en una de las mesas a una persona que tenía una rosa roja en la mano, pero al descubrir quien era sintió desmayarse, para evitar hacerlo se apoyo del umbral de la puerta mientras pensaba: Esto es una broma, no permitiré que se burle de mí.

La pelinegra no entro a la heladería hecho a correr ante la mirada de tristeza del joven de cabello alborotado que rápidamente coloco su obsequio en su mochila, se paro de la mesa y con la rosa y mochila en sus manos, salió corriendo tras la bella jovencita pelinegra.

Minutos después:

La bella jovencita pelinegra corría por las calles sin rumbo fijo sin darse cuenta que muy cerca de ella venía también corriendo el atractivo jovencito de cabello alborotado.

Milk llego hasta un paradero, se paro allí a esperar su bus, cuando sintió unos fuertes brazos rodearla de la cintura mientras una dulce voz le decía al oído: Por que huyes de mí, porque me rechazas a si mi niña bella, con lo que me ha costado reunir el valor para pararme frente a ti.

Milk bajo la mirada a ver las manos que rodeaban su pequeña cintura y pudo ver que el joven aún tenía en la mano la rosa roja.

Al menos hablemos Milk, dijo Gokú cerca del oído de la pelinegra haciendo que la pobre pelinegra sintiera su cuerpo desfallecerse entre los brazos del joven.

¿Para qué?, no tiene caso, ¿por qué te burlas así de mí?, decía Milk con lágrimas en los ojos.

Yo no me estoy burlando ¡yo te amo¡ ¡te ame desde que te vi¡ desde que llegaste a la escuela, decía Gokú soltándola y colocándose frente a ella tomándola de las manos.

Milk, no sabía que decir, solo sintió que las personas que se encontraban cerca de ellos los miraban entonces dijo: ¡Vamos a otro lado¡.

¡Vamos¡ dijo Gokú tomando impulsivamente la mano de la pelinegra.

Milk al sentir la mano del joven de cabello alborotado tomar la suya quiso impedir que el lograra su cometido, pero más pudo su corazón y llevada por el sentimiento que ella sentía hacia él, entrelazo sus dedos con los del atractivo jovencito de cabello alborotado que al sentir ello sonrió dulcemente.

Minutos después: "Heladería"

Milk y Gokú llegaron a la heladería donde hace unos minutos ellos habían estado. Ambos jóvenes se sentaron en la misma mesa que el jovencito de cabello alborotado había apartado.

Ahora si explícame porque estas jugando así conmigo, dijo Milk que se encontraba frente al joven de cabello alborotado.

Ya te dije que yo no estoy jugando contigo Milk, ¡yo te amo¡ todo lo que te escribí en las cartas es cierto, decía Gokú cuando su plática fue interrumpida por una mesera que se acerco a tomar el pedido de ambos.

Minutos después:

La mesera dejaba sus copas de helado sobre la mesa y se retiraba dejando nuevamente solos al par de pelinegros.

Milk, mi niña, yo nunca jugaría contigo, yo no haría nunca nada que te lastimara, dijo Gokú tomando las manos de la pelinegra sobre la mesa.

¿Por qué hasta ahora me confiesas tus sentimientos?, ¿por qué todo este tiempo me trataste como si no existiera?, dijo Milk con tristeza.

Por tonto mi niña, tenía miedo a tu rechazo, en un comienzo no entendía que me pasaba contigo, siempre quería verte, hasta soñaba contigo, cuando escuchaba tu voz mi corazón latía tan fuerte que me asustaba de lo que tú provocabas en mí, cuando me di cuenta que lo que sentía era amor, quería decírtelo aprovechando que compartíamos grupos de trabajo juntos pero siempre terminaba no haciéndolo por temor al rechazo, para evitar que mis amigos se burlen de mí al ver como me ponía de nervioso cada vez que tenía cerca preferí mostrarme indiferente contigo, pero no era porque no sintiera nada por ti, dijo Gokú.

¿Y porqué hasta ahora te atreves a confesarme tus sentimientos?, dijo Milk.

Porque me da miedo no volverte a ver, al menos quiero tu amistad e ir al baile contigo, dijo Gokú sonrojándose.

Mi amistad, dijo Milk con tristeza.

Si, no quiero forzarte a nada, al menos así puedo seguir viéndote. Te decepcione ¿verdad?, dijo Gokú con tristeza.

Me sorprendiste, nunca hubiese imaginado que tú estuvieras tras esas bellas cartas y obsequios, dijo Milk.

¿Irías al baile conmigo?, dijo Gokú aún tomando las manos de la pelinegra.

Sí, dijo Milk sonriendo dulcemente.

Entonces, ¿aceptas mi amistad?, dijo Gokú.

Si una amistad es todo lo que quieres si, dijo Milk con tristeza.

¡Gracias mi niña¡ yo sabre ganarme tu amor, dijo Gokú sonriendo.

Es que aún no te das cuenta, dijo Milk ya no dispuesta a callar más sus sentimientos.

¿Cuenta de qué?, dijo Gokú sin comprender.

De mis sentimientos, de lo que tú provocas en mí, dijo Milk sonrojándose.

¿Tú el ángel más bello del universo sientes algo por mí?, dijo Gokú sonriendo.

Sí, ¡te amo¡ ¡te amo desde hace mucho tiempo en secreto¡ dijo Milk sonrojándose.

No lo puedo creer, todo este tiempo e podido ser feliz contigo y por mis temores no hemos podido ser felices, dijo Gokú sonriendo.

No solo por tus temores también por los míos, pues nunca te dije lo que sentía, dijo Milk.

¿Entonces me aceptarías como novio?, dijo Gokú.

Sí, eso es lo que más desee desde que te conocí, ser tú novia, dijo Milk.

Gokú solo sonrió y acerco su rostro al de la bella pelinegra para darle un dulce beso, el cual era su primer beso para ambos.

Luego de algunos minutos ambos jóvenes se separaron y sonrieron.

Creo que deberíamos de comerlos ya, los pobres se están derritiendo, dijo Milk mirando los helados.

Si tienes razón, pero antes toma, esto es para ti, dijo Gokú dándole la rosa y una bolsita de papel.

¡Gracias¡ dijo Milk sonriendo.

Esto me parece un sueño, dijo Gokú.

Pues no es un sueño, es realidad, una realidad que espero y sea para siempre, dijo Milk.

Así será, dijo Gokú.

Gokú, ¿te puedo hacer una pregunta?, dijo Milk.

Sí dime, dijo Gokú mientras comía su helado.

¿El número del que me enviaste los mensajes, es tú nuevo número de celular?, dijo Milk.

No es el celular de mi hermano, el me lo presto y me estuvo dando ánimos para declararmete, dijo Gokú.

¿Tú hermano lo sabía?, dijo Milk sonrojada.

Sí, mi hermano es un buen tipo, ya lo conocerás, dijo Gokú sonriendo.

Los jóvenes siguieron platicando mientras comían sus helados, luego tomados de la mano caminaron por las tiendas de la ciudad.

Horas después:

El atractivo jovencito de cabello alborotado acompaño a la pelinegra a su casa y se despidió de ella con un dulce beso.

Nos vemos mañana, dijo Gokú sonriendo mientras la abrazaba.

Estaré contando los minutos para volverte a ver, dijo Milk.

Yo también, dijo Gokú sonriendo.

La bella jovencita pelinegra ingreso a su casa con una sonrisa tatuada en sus labios mientras pensaba: Este ha sido mi mejor regalo en vísperas a la navidad.

Mientras tanto:

Un atractivo jovencito de cabello alborotado caminaba hacia su casa con la sonrisa tatuada en sus labios cuando su celular timbro. El joven saco su celular de su bolsillo y al ver el nombre de su hermano sonrió.

Raditz, dijo Gokú sonriendo mientras contestaba la llamada.

¿Cómo te fue hermanito?, disculpa pero la curiosidad me gano y no pude esperar hasta que llegues, decía Raditz sonriendo.

Tenías razón, ella me corresponde, ya somos novios, dijo Gokú feliz.

Días después: "Casa de Milk"

La noche buena llegó una bella jovencita pelinegra se encontraba preparando la pequeña cena para ella y su padre, cuando el timbre sonó.

La bella pelinegra se dirigió a abrir la puerta encontrándose con un gigantesco ramo de rosas rojas que cubrían el rostro del atractivo joven de cabello alborotado.

Gokú, dijo Milk abrazándolo.

Son para ti, dijo Gokú entregándole a la pelinegra las rosas.

¡Gracias¡ pero pasa, dijo Milk mientras colocaba las rosas en un florero.

¿Estás sola?, dijo Gokú.

Si papá aún no llega del trabajo, dijo Milk.

Entonces te haré compañía hasta que tú padre venga, dijo Gokú.

Minutos después:

El padre de la pelinegra llego, Gokú les propuso a ambos que fueran a pasar la noche buena en su casa.

El padre de Milk acepto la invitación. Milk llevo lo que había preparado para la cena a casa de su novio, en donde conoció a la familia de él y la familia de este conocieron a la bella jovencita que había cautivado a su hijo y a su padre.

¡Bienvenidos¡ pasen, dijeron los padres de Gokú.

¡Buenas noches¡ dijo Milk saludando a los padres y hermano de Gokú mientras colocaba el pastel que había preparado sobre la mesa.

Eres más bella de lo que mi hermanito me dijo, dijo Raditz.

Si, eres una niña muy bella, dijo la madre de Gokú.

Entre pláticas y risas cena transcurrió, luego Gokú y Milk salieron a caminar tomados de la mano por las iluminadas calles de la ciudad que se encontraban decoradas con luces navideñas e imágenes de muñecos de nieve, Santa Claus, entre otras imágenes representativas de la navidad.

Gokú y Milk llegaron hasta un arco lleno de luces de colores y se tomaron una foto cerca de el.

¡Feliz navidad¡ dijo Milk sonriendo.

¡Feliz navidad¡ mi niña, dijo Gokú abrazando a Milk mientras luces de colores se formaban en el cielo anunciando que la navidad había llegado ya.



Nota:

Este es el antepenúltimo capítulo de esta bella historia de amor GoChi navideña.

¡Gracias por seguirla, votar y comentar¡

Con mucho cariño.

PrincesaLirio.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro