Un atractivo jovencito de cabello alborotado desayunaba junto a su hermano mayor mientras platicaban.

Entonces ahora le estas dando pistas, decía Raditz.

Si, dijo Gokú.

Hay hermano, ustedes están jugando al gato y al ratón, yo en tu lugar la hubiera citado en un bello lugar y allí me la hubiese declarado, dijo Raditz.

Si eso haré cuando sea el momento, pero ahora quiero probar si mis cartas despertaron interés en ella, si ella hoy empieza a dejarse llevar por lo que le escribí empezará a querer saber de mí, dijo Gokú.

¿Y cómo sabrás si se interesa en tus cartas?, si ni siquiera cruzas palabra con ellas, dijo Raditz.

Por lo siguiente......, dijo Gokú comentándole a su hermano lo que le había escrito en la carta a la pelinegra.

Minutos después:

Vaya hermanito, me sorprendes, pero esa puede ser una arma de doble filo, porque ella podría sospechar de tus amigos también, dijo Raditz.

Lo sé, pero me bastara saber que ella siente interés en conocer de su admirador, para en la siguiente carta pedirle posiblemente una cita para que sepa quién soy dijo Gokú.

Bueno, hermanito espero y todo salga como lo planeas, ahora vamos, te llevo a la preparatoria, dijo Raditz.

Preparatoria Dragón:

Un grupo de chicas se encontraban sentadas en sus carpetas platicando.

¿Te pasa algo Milk?, desde que entramos al aula nos has dejado de observar al grupo de Vegueta y la persona que siempre miras aún no está ahí, dijo Dieciocho.

Eso ya lo sé, no lo busco a él, dijo Milk.

¿Ah no?, ¿entonces a quién?, dijo Bulma sorprendida.

Chicas ustedes saben si Ten o Yancha, ¿tienen novia?, dijo Milk dejando sorprendidas por su pregunta a la rubia y peli azul.

¿Por qué?, no me digas que piensas pedirle a alguno de ellos para ir al baile?, dijo Bulma incrédula.

Si, dijo Milk con firmeza.

La verdad, no lo sé, se que salen con chicas pero de allí a qué tengan algo serio con alguna de ellas, la verdad desconozco eso, dijo Dieciocho.

Pero averíguale a Krilin, si esos dos están libres Milk y yo podemos ser sus parejas de baile, dijo Bulma.

Bulma, sigues con eso, ¿dijiste que hablarías con Vegueta?, dijo Dieciocho.

Y eso haré a partir de hoy, dijo Bulma.

No de esa forma, dijo Milk.

Es la única forma que se me ocurre para no discutir, dijo Bulma mientras sus amigas la miraban con resignación.

Algunos minutos después el atractivo jovencito de cabello alborotado entraba al aula y se acercaba a su grupo, sin querer su mirada se dirigió al lugar donde una bella pelinegra se encontraba sentada junto a sus amigas platicando.

Gokú, ¿con quién irás al baile?, decía Piccolo.

Gokú, te estamos hablando, dijo Krilin.

¡Eh¡ disculpen estaba distraído, dijo Gokú.

Si, no nos dimos cuenta, dijo Vegueta irónico.

Luego hablamos de eso, el maestro ya llego, dijo Ten caminando a su asiento mientras se sentía observado por alguien girando su rostro para ubicar a la persona que lo miraba pero al no encontrar a nadie haciéndolo tomo asiento con resignación.

Aseguraría que alguien me estaba observando, dijo Ten despacio.

¿Tú también?, dijo Yamcha.

¿A ti también te observaban?, dijo Ten.

Si, dijo Yamcha.

Silencio, que empezare a repartir sus exámenes dijo el maestro.

Horas después:

Milk abría su nueva carta en el bus que la llevaba a su casa.

Me muero de curiosidad ya no puedo esperar a llegar a casa, decía la pelinegra desdoblando el papel de la carta mientras veía dentro del sobre una nueva rosa roja y una casa de chocolates.

Carta

Mi bella Milk, debes estar confundida con lo que te escribí, pero e decidido darte algunas pistas de mí antes de que yo me presente ante ti, como bien te dije el día de la playa yo formaba parte de tú grupo, es más hasta ahora somos parte de algunos grupos de los cursos que llevamos, bueno éramos parte, porque ahora a las justas nos vemos para los exámenes.

Mi bella Milk, me gustaría saber si te interesa saber de mí, para planificar el día en que nos encontremos, en el sobre te envió un prendedor, de ángel.

Escogí un ángel porque eso eres tú para mí el ángel más bello que llego a la tierra para iluminar mis días y llenarlos de dicha y felicidad, además ese será como un amuleto que te protegerá siempre pues lo escogí para ti con todo el amor del mundo.

Mi amada niña, si quieres saber de mí, colócate ese prendedor en tu ropa, en un lugar visible que yo alcance a ver a partir de mañana, si yo lo veo, te escribiré una próxima carta indicándote el lugar donde nos veremos.

Mañana te estaré enviando algo que hice para ti.

Esperare con ansias verte mañana con ese prendedor.

Tu admirador, quien te ama secretamente más de lo que puedas imaginar.

La pelinegra busco en su sobre el prendedor y se lo coloco inmediatamente mientras una sonrisa se tatuaba en sus labios mientras pensaba: Vaya que fuera el que fuese, es una persona muy detallista y romántica, sin duda terminara ganándose mi corazón por sus acciones, tal vez tú seas lo que necesito para olvidarme de él.

Por la tarde: "Gimnasio"

Un grupo de chicos terminaban sus entrenamientos.

¿Y esa sonrisota a que se debe?, dijo Piccolo mirando intrigado a Gokú.

A que tal vez pronto ya tenga con quién ir al baile, dijo Gokú.

Así ¿a quién de las dos invitarás?, dijo Yamcha con curiosidad.

¿De las dos?, dijo Gokú con inocencia.

¿Si a Marón o Lunch?, dijo Ten.

A ninguna de ellas, dijo Gokú.

¿Entonces piensas ir con Mai?, dijo Piccolo.

No seas acaparador Gokú, dijo Yamcha fingiendo molestia.

No se porque dices eso, pero yo no soy ningún acaparador, ellas solo son mis amigas, dijo Gokú.

¡Ah¡ picarón, ¿entonces si estás interesado en alguien?, dijo Krilin.

Pues si, dijo Gokú.

¿En quién?, dijo Ten.

No se los pienso decir, bola de chismosos, dijo Gokú con firmeza.

Bien dicho Kakaroto, ya era hora de que lo pongas en su lugar, dijo Vegueta riendo.

¿Y tú ya se lo pediste a Bulma?, dijo Krilin, mirando a Vegueta.

Ustedes no escarmientan metiches, no les diré nada, yo veré con quién voy y ustedes no tienen porque saberlo, dijo Vegueta.

No se enojen, solo preguntábamos, porque yo pensaba pedirle a Bulma o a Marón si Bulma no aceptaba ser mi pareja para la fiesta, dijo Yamcha.

Si, yo también pensé pedirle que fuera mi pareja de baile a Milk o Lunch, dijo Ten.

Y yo pensé pedírselo a Milk o Mai, dijo Piccolo.

Pues pídanselo a Marón, Lunch y Mai, pero con Milk y Bulma no se metan, dijo Vegueta con firmeza.

Vaya otro acaparador, dijo Krilin.

Tú cállate, que tú irás con Dieciocho, además yo lo único que quiero es evitarles un dolor de cabeza con ese par de mujeres, dijo Vegueta.

Qué buen amigo eres, dijo Piccolo irónico.

Pues yo si se ser buen amigo, pero si no quieren seguir mi consejo pídanselo para que los rechacen, dijo Vegueta.

Pues eso haremos, dijeron los jóvenes.

No, no lo hagan, ellas solo los rechazarán, dijo Gokú tratando de mantenerse calmado.

Tú también, dijo Piccolo sonriendo.

Por la noche:

Mañana lo usare, pensaba una bella pelinegra mientras miraba el pequeño prendedor de ángel que había recibido.

Al día siguiente:

Una bella jovencita pelinegra recogía su largo cabello negro en una coleta alta, mientras se miraba al espejo y pensaba: Ahora solo falta esto.

La pelinegra tomo el prendedor y lo coloco sobre su blusa, mientras pensaba: creo que allí podrá verte.

La jovencita tomo su mochila y bajo a desayunar junto a su padre.

Minutos después:

¿Y ese prendedor hija, no te lo había visto antes?, dijo el padre de la pelinegra mirando el ángel que llevaba puesto la pelinegra.

Es un regalo de mi amigo secreto, dijo Milk.

Vaya que tu amiguito secreto te salió muy regalón, dijo el padre de la pelinegra haciendo sonrojar a la pobre jovencita.

Papá ya te pareces a mis amigas, dijo Milk abochornada.

Vaya, entonces no soy el único que lo pensé, dijo riendo el gigantesco hombre.

Casa de Gokú:

Un atractivo jovencito de cabello alborotado salía de su casa con un solo pensamiento: ¿Milk se pondrá el prendedor?.