Miré el dibujo un largo rato intento averiguar que significaba, decidí mostrárselo a Stiles.

—¿Ojos de alfa?

—eso parece ¿Verdad? —asintió —¿Qué crees que signifique?

—no lo sé —se encogió de hombros.

—¿Y este logo? ¿Te suena?

—nope, nunca lo había visto en la vida —hizo una mueca.

Antes de que la maestra entrará de nuevo tomé el cuaderno y lo dejé sobre mi mesa.

—oye, ¿A dónde se fue Scott?

—no lo sé hermanita, aun no leo mentes —rodó los ojos. —ni escucho a través de las paredes.

—pues espero que este...—Robbie tomó sus cosas y las guardó en su mochila —¿Qué haces?

—es Isaac —explicó poniéndose en pie —luego hablamos ¿Sí? —besó mi frente y salió del salón.

—como que me dieron ganas de ratearme yo también —bromeó stiles.

—te aguantas, no creo que a papá le haga mucha gracia.

—¡que aguafiestas! —exclamó.

La maestra regresó y miró el espacio vacío junto a mí con el ceño fruncido —¿En dónde está Hale? ¿Señorita Stilinski? —alzó una ceja.

—no lo sé —negué —él solo tomó sus cosas y se fue.

La mujer sólo fue a su escritorio y siguió dando la clase, todo iba normal hasta que un pájaro chocó ferozmente contra la ventana cayendo muerto, su sangre había quedado impregnada en el vidrio.
Abrí los ojos a tope al ver una bandada de pájaros acercarse al edificio, teniendo el mismo destino que el anterior pero la cosa fue empeorando porque comenzaron a romper la ventana y entraron al salón.

Tuvimos que tirarnos al suelo, Stiles se acercó junto con Lydia e intentó protegernos a ambas con su cuerpo.
Por suerte un buen rato después todo se calmó, pero el salón había quedado destruido.Inmediatamente luego de lo sucedido llamaron a la policía.

—¿Estás bien? —me acerqué a mi amiga pelifresa.

—si, ¿Y tú?

—estoy bien...solo recibí unos pequeños rasguños, nada grave. —miré mi brazo donde había un pequeño raspón.

Allison estaba con su padre por lo que preferí no molestar.
Pero papá tenía otro plan porque se acercó a hablar con el señor Argent.

—¿Le dijiste a papá que Argent es un cazador? —murmuré mientras escuchábamos la conversación.

—si, pero nunca le dije su especialidad.

Ni bien pudimos salir del salón, Stiles llamó a Scott para informarle sobre lo sucedido en lo que yo me comunicaba con mi novio para lo mismo.

—casa de Derek —dijimos a unísono al finalizar nuestras respectivas llamadas.

Salimos y nos subimos al jeep con dirección hacia la reserva.
En cuanto llegamos tuvimos una larga conversación sobre lo que estaba sucediendo.

—¿Lo vas a tatuar? —miré a mi cuñado, él asintió —no lo sé, no estoy muy segura de esto.

—no te va a tatuar a ti —me recordó mi hermano.

—¿Por qué te preocupas por él?

—Robbie, cariño, Scott es como un hermano para mi, ya lo hablamos. —lo miré de reojo.

Derek miró su brazo con sus ojos de alfa —si, ya veo, son dos bandas ¿Cierto? —el beta asintió —¿Qué significa?

—no lo sé es...solo algo que trazé con los dedos —lo representó en el polvo del mueble.

—¿Por qué es tan importante para ti?

—¿sabes lo que significa la palabra tatuaje? —inquirió.

—marcar algo —respondió Stiles.

—bueno eso es en Taitiano —hablé.

—en samuano significa...herida abierta, sabía que quería tatuarme al cumplir los dieciocho, siempre he querido uno, solo que decidí hacerlo ahora porque sería como una recompensa —explicó.

—¿Por qué?

—por no llamar a Allison todo el verano —bufé y recibí miradas de todos los presentes.

—¡ay ya! Es un pesado —rodee los ojos. —puedes seguir.

—aunque en realidad quería hacerlo, a veces...fue difícil no hacerlo, quería darle el espacio que ella quiere —suspiró —ahora, cuatro meses después aún duele, es como...

—una herida abierta —reflexioné.

—si.

—el dolor va a ser peor de lo que nunca lo has sentido —advirtió mi cuñado.

—¡ah! ¡Que bueno! —golpeé el hombro de mi hermano.

—hazlo —asintió el beta, en ese momento Derek prendió un soplete.

—eso es demasiado para mi, así que es la  señal para que me vaya, los espero afuera —Stiles tuvo intención de irse pero el Hale lo detuvo.

—no, tu vas a sostenerlo.

Cuando estuvo preparado me puse junto a él y tomé su mano desocupada.
Empezó a quemar su piel y no faltaron los gritos de dolor hasta el desmayo.
Unos minutos después Scott recobró la consciencia y lo primero que hizo fue mirar su brazo.

—funcionó.

—y te queda igual de sexy que la primera vez —sonreí.

Un gruñido sonó cerca nuestro —hermanita, calma a tu perro ¿Quieres? —solté una pequeña risa —me pone nervioso.

—no deberías, si tú también tienes a tu perro guardían —señalé a Scott. —de hecho, tienes dos —miré de reojo a Derek.

—McCall, no sé qué magia haces con ella pero debes parar.

—estás loco Hale, yo no le hago nada —rodó los ojos —pero si me busca a mí, será por algo ¿Verdad? —lo provocó.

Sus ojos brillaron y se lanzó sobre Scott rabioso. —yo la atiendo muy bien, quizás va contigo porque te tiene lástima, no dejas de llorar por los rincones a causa de Allison.

—¡no la metas en esto! —lo empujó sacándoselo de encima. —mira Hale, voy a decirte algo que debí habértelo dicho antes —brilló sus ojos —cuida a Hannah porque si le haces daño...—sonrió —ni Derek podrá salvarte de la patada en el trasero que te daré.

—no me das miedo, McCall —lo enfrentó.

—deberías —sonrió de lado.

—bueno, ya basta —me interpuse entre ambos apoyando mis manos en su pecho, tanto de Scott como de Robbie. —demasiada testosterona por hoy.

—¿Tú no pensabas haces nada? —Stiles volteó hacia Derek.

—¿Por qué? Hannah puede con ambos.

—tomé la camiseta de Scott y se la lancé —vístete, nos vamos.

—si mamá —respondió divertido mientras comenzaba a vestirse.

—cariño, lamento si te molestó que estuviera apoyando a Scott —besé su mejilla.

—está bien, es tú amigo...Tú no sientes nada por él, ¿verdad?

—am...no, no siento nada más que amistad. —aseguré.

—¡auch! —exclamó el susodicho.

Ambos chicos se adelantaron a la salida aún hablando sobre el tatuaje.

—pintaron la puerta —notó Scott cuando la abrió para salir. —¿Por qué pintaron la puerta? —miró a los Hale.

—porque el marrón nos cansó —respondió sarcásticamente mi novio.

—ve a casa, Scott —habló Derek.

—¿Por qué solo de un lado? —sacó sus garras y comenzó a quitar la pintura.

—Scott —mi cuñado intentó detenerlo.

Pero fue inútil porque el castaño comenzó a pasar las garras con más fuerza y rapidez quitando todo hasta dejar al descubierto un símbolo bastante grande pintando en la puerta.

—Hannah —mi hermano me miró —pasame tu libreta —de mi cartera saqué lo que me pidió y se lo di, buscó lo que habíamos hecho hoy —mira —comparó mi dibujo con el de la puerta —es el mismo.

—¿Qué significa?

—Scott comenzó a sacar conclusiones —¿Cuántos son, Derek?

—una manada, una manada de alfas.

—¿Todos lo son? —preguntó Stiles —¿Cómo funciona eso?

—supimos que hay un especie de líder, se llama Deucalion —explicó Robbie.

—sabemos que tienen a Boyd y Erica, Peter, Isaac, Robbie y yo los hemos buscado durante cuatro meses.

—y si los encuentran ¿Cómo van a enfrentarlos? —preguntó Scott.

—con toda la ayuda posible.

—¿En dónde está? —Isaac despertó —¿En dónde está la chica?

—¿Qué chica? —inquirí.