Capítulo cuarenta y tres "Sacrificios"
—¿Sacrificios humanos? —alcé las cejas sorprendida.
—sí —asintió.
—¿Sacri...?
—¡Sí!
—¿Sa...? ¿Humanos?
—¿Estoy hablando en polaco o...? —me miró de reojo.
—pero es una locura —rodee los ojos.
—no lo es —negó —hay tres cuerpos con los mismos signos, uno es coincidencia, dos es casualidad y tres...
—es un patrón —terminé por él. —pero...es una locura.
—si, como Scott dándote un beso en la frente y que de repente se puso sobre protector contigo.
—bufé —acabo de salir de una relación, no planeo entrar en otra.
—si, pues no es lo que parece.
—vamos Stiles, me conoces —rodee los ojos —es Scott, nuestro hermano de distinta sangre.
—tú y yo sabemos que muy en el fondo aunque lo niegues, te sigue gustando como la primera vez.
—voltee hacia la ventana pensando en lo que dijo —es ridículo —murmuré.
—negación, primera fase —señaló divertido.
Voltee y le proporcioné un golpe en el brazo —cállate.
—¡au! Eso dolió —se quejó.
[...]
Al día siguiente iba conduciendo el jeep como en mucho tiempo no lo hacía, se sentía bien, puse un poco de música con mi celular.
—¿Taylor Swift?
—la adoras, no te hagas —dije mientras sonaba Shake it off de fondo.
—claro que no —negó pero a los minutos se encontraba cantando a todo pulmón. —You could've been gettin' down to this sick beat
My ex-man brought his new girlfriend
She's like, "Oh my God!"
but I'm just gonna shake
And to the fella over there with the hella good.
Won't you come on over, baby?
We can shake, shake, shake (yeah)
—oye ¿Ese no es Derek? —señalé la ventanilla de su lado, Stiles literalmente saltó volteando completamente asustado, rompí en carcajadas ante su reacción, había caído redondito.
—no es gracioso —habló luego de darse cuenta que le había jugado una broma.
—¡claro que sí! Debiste ver tu cara.
Una vez llegamos a la escuela noté a ese Camaro tan inconfundible estacionarse no muy lejos de la entrada, suspiré poniéndome los auriculares donde ahora sonaba Love Story.
Caminé hasta mi casillero siendo consciente de que Robbie me estaba siguiendo, cerré mis ojos con fuerza un segundo antes de voltear hacia él haciendo que retroceda un paso por la sorpresa, me quite los auriculares —¿Qué quieres?
—quiero disculparme, lamento que lo que te hice pero...
—te dije que no te quería cerca —gruñí viendo como Scott y Stiles pasaban por detrás de él observando todo.
—si claro, ¿es porque estás con McCall, ahora? No sé ni para qué lo intentó —rodó los ojos —seguro ya te estás revolcando con Scott. —mi mano voló a su mejilla volteandosela con fuerza. Mi hermano hizo un gesto de sorpresa tapándose la boca con su puño.
—eso debió doler —oí que murmuró.
—se lo merecía —respondió Scott de la misma forma.
—ahora sí Hale, lárgate de mi vida —gruñí —y por cierto, Scott sería mucho mejor novio que tú.
Salí corriendo de ahí y me adentré al baño, oí a mi hermano llamarme pero no me detuve hasta que estuve dentro de un cubículo donde me solté a llorar.
Narrador omnisciente:
Mientras Hannah se encerraba en el baño, ambos chicos voltearon hacia el Hale que aún permanecía junto al casillero de la Stilinski con la cabeza gacha, sin mencionar que en su mejilla comenzaba a marcarse la mano de la fémina.
—¿no te dije que no le hicieras daño? —preguntó Scott molesto.
—oye, deja en paz a mi hermana —dijo Stiles —si vuelves a lastimarla ¿Sabes lo que haré? Voy a tomar una rama de serbal envolverla en Wolfsbane,la pasaré por muérdago y te juro que la meteré en tu trasero peludo de lobo —amenazó.
—Stiles, quiero que lo intentes —sonrió.
—no me tientes —gruñó.
—¿Qué demonios pasó? Hannah está llorando desconsoladamente en el baño —dijo Allison acercándose a los tres hombres.
—sino fuera porque tienes huesos de acero y puedes romper mi mano, te golpearía —comentó Stiles mirando al rubio.
—vete —murmuró Scott —y por tu bien y el de ella, ya no la busques ni intentes arreglar nada con Hannah.
El rubio los miró antes de marcharse de la escuela.
—¡vamos! —los tres se dirigieron al baño de mujeres.
—Lydia está con ella —informó la cazadora.
Stiles tuvo intención de entrar pero su amigo lo detuvo —¿Qué haces? No puedes entrar ahí.
—es mi hermana, no me interesa si es el baño de mujeres o de hombres lobo, yo entraré.
Pov Hannah:
Mientas estaba en el baño llorando porque el idiota de mi ex prácticamente me trató como una zorra, la puerta se abrió.
—¿Annah? —era Lydia. —¿Estás bien?
—no, no lo estoy pero...quiero estar sola.
—sal de ahí y hablemos las tres—dijo Allison.
—no —negué.
—por favor Annah, habla con nosotras —insistió la pelifresa.
Salí del cubículo y las miré antes de romper en llanto otra vez, ambas me abrazaron con fuerza.
—está bien, sacalo —murmuró la cazadora.
—no lo entiendo —me separé.
—sino nos dices que pasó, no podemos ayudarte —la pelifresa me pasó un poco de papel para limpiarme el rostro.
—ya vengo —la cazadora salió del baño.
Tardó unos minutos en volver pero cuando lo hizo traía con ella a Stiles, el cual me abrazó con fuerza.
—ya Annieh, todo está bien —murmuró —ya nos encargamos de él.
—¿Alguien nos quiere decir que está pasando? —preguntó Lydia.
—Robbie le dijo que era una zorra, insinuó que se acuesta con Scott —me miró —no te acuestas con Scott ¿Verdad?
—¿En serio?
—¡lo siento! Se vale preguntar —se defendió.
—no —negué.
—¡es un idiota! —opinó la cazadora.
—el más grande de todos —Stiles estuvo de acuerdo.
—¿Stiles? —oímos a Scott desde afuera —tenemos atletismo —le recordó.
—ve —me separé —estaré bien.
—¿segura?
—si —asentí.
Salimos todos y cada quién hizo su vida, como tenía hora libre, decidí pasarme por los vestuarios de los chicos.
—absolutamente no, Deaton me hace tener relaciones con mis pacientes,nueva política —oí a Scott —no, no sé si era virgen ¿y por qué hablas como si ya hubiera muerto? Sólo está desaparecido.
—desaparecido y dado por muerto porque lo mas probable es que sea virgen, Scott —respondió mi mellizo —¿Y sabes quién más es virgen?, yo, soy virgen ¿Sí? ¿Y sabes lo que eso significa?Significa que mi falta de experiencia sexual amenaza mi vida, necesito tener sexo, en este momento con alguien ¡ahora! —se desesperó, tuve que morder mis labios para no reír —¡alguien debe tener sexo conmigo! —un casillero se cerró en ese instante.
—tranquilo, yo lo haré —aceptó Danny
—¡wow! ¿QUÉ?
—ven a mi casa a las nueve, quédate toda la noche, me gusta recostarme.
—¡ay por Dios! —exclamé.
—eso fue muy dulce ¿Es broma?
—si, bromeo —entré y pegué un salto colgándome de la espalda de Scott, tomándolo desprevenido.
—hola Scotty —sonreí.
—Hannah, me asustaste —rió.
—no juegues con los sentimientos de un hombre de esa manera Danny —dijo mientras lo veía irse —no es agradable —notó mi presencial —¿Y tú que haces aquí?
—ya sabes, oyendo como súplicas por sexo, es algo que nunca creí que harías —dije divertida.
—tú también deberías estar preocupada, eres virgen al igual que yo.
Me bajé de la espalda del castaño un tanto incómoda —no, la verdad es que...yo no soy virgen hace tiempo.
—¿perdona? —se sorprendió —¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Con quién? —Scott y yo nos miramos. —no puede ser...¿Ustedes dos?
—fue cuando teníamos trece años, fui a casa de Scott para ayudarlo con una tarea y...pasó lo que tenía que pasar —expliqué.
—¡¡¡TE ACOSTASTE CON MI HERMANA!!!
—Stiles, fue hace tres años —Scott trató de tranquilizarlo. —éramos unos niños en plena pubertad, no significó nada.
—¡vaya! Parece que hoy es día de romperle el corazón a Hannah —murmuré.
—¡Dios mío! ¿Significó algo para ti?
—por supuesto que sí, se supone que el chico del que estaba enamorada de toda la vida, me había hecho el amor —suspiré —ahora resulta que fui solo un revolcón para dejar de ser virgen.
—lo siento, creí que no había significado nada para ti porque para mí si significó —admitió —pero no quería quedar como imbécil creyendo algo en realidad no era.
—está bien, te perdono pero porque eres tú —sonreí.
—¿Es por eso que estuviste una semana caminando como pato?
—¡Stiles! —exclamé roja como un tomate.
El entrenador llegó por lo que decidí salirme del vestidor y dirigirme hacia la biblioteca donde me puse a leer un poco, cuando tengo una visión que involucraba a los gemelos.
Corrí hacia donde estaban los chicos.
—¿Han visto a Isaac?
—no ¿por qué preguntas? —Scott frunció el ceño.
—tuve una visión —ambos corrimos hacia el sendero del bosque que utilizaban para practicar atletismo y fue cuando lo vimos con ambos gemelos a sus espaldas, los dos salieron corriendo.
—¿Isaac? —el castaño lo alcanzó.
—son ellos —salió corriendo detrás de ambos chicos.
Ambos lo seguimos pero terminamos por perderlo —¿Dónde está?
—por aquí —tomó mi mano y me guió, al final lo encontramos, ambos lo tenían sujeto.
—Ethan, siempre se me olvida ¿Cuántos huesos hay en el cuerpo humano?
—no lo sé, ¡contemos! —cuando lo estaba por golpear, salí y lo golpeé con fuerza derribandolo.
—ese es uno —dijo Scott a mi lado, ambos gemelos se prepararon para atacar —Hannah, vete.
—por supuesto que no —todos se transformaron al mismo tiempo, yo incluida. Los cuatro parecían perros rabiosos hasta que oímos el grito de una mujer.
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