No fue una, ni dos, sino varias noches en que una linda muchachita de rizos venía a visitarme con una hermosa y radiante sonrisa en su rostro. Amélie es una agradable compañía, sin embargo no puedo y no debo bajar la guardia, ella sigue siendo un enigma para mí y además es la causante de mis pesadillas.

Las últimas pesadillas han sido realmente fuertes, que hasta he perdido un dedo, por qué caí en una piscina de pirañas. Es por eso que mi amigo se dió a la tarea de investigar a la chica, primero pensó en conocerla, pero está solo venía de vez en cuando, la mayoría de veces de noche o en las tardes y nunca se queda conmigo por mucho tiempo, luego trate de preguntar más sobre ella, ponía un rostro realmente triste y decía "Prefiero no hacerlo"; la primera y última vez que pregunte algo relacionado con su vida, me dolió mucho verla así y por ello, no volví a preguntar algo relacionado con su vida.

Ella se convirtió en mi vida.

{•••}

Cuando desperté nuevamente en una camilla de un hospital, otra pesadilla me había cobrado una tremenda factura en mi cuerpo.

El sueño era sobre una mujer que me manejo con cuerdas como si fuera títere.

Quién tiraba de esas cuerdas era mi primera novia, me causo un dañó. Es difícil tratar de resumirlo.

Yo antes me había enamorado de una chica que de cabello con unos hermosos rizos de color castaño y de grandes ojos. ¿Cómo olvidar el primer amor? Tan agradable y puro, no dejas de pensar en la persona, no me la sacaba de la cabeza. Está chica tan fascinante era la hermana mayor de mi mejor amigo.

Era fácil que esto pasara, mi amigo y su hermana tienen buenos genes, literalmente tenían un grupo de admiradores de muchos cursos y eran muy agradables, para mí eran como geniales que pudieran ser buenos para la escuela, tener tiempo para ser sociales y algunas travesuras y que además hablarán con alguien que apenas sobre salía en algunas clases. Desde que unos brabucones se iban a meter conmigo el me defendió y su hermana fue el dulce ángel quien atendió mis heridas.

Sin embargo jamás me atreví a decirle cómo me sentía con ella, además que mi amigo me había dicho que ella estaba saliendo de otra escuela. Me rendí con ella y entonces empecé a salir con una chica que desde un principio yo noté que le gustaba, era muy pesada dura y toda mi atención enfocada a ella. Era totalmente controladora y como no quería perderla, siendo mi primera novia a los 16 años, decidí obedecer a todas sus reglas y condiciones, que hubo un punto que pensé en cortarle su fea y gigante cabeza o bueno al menos arrancarle la lengua a la bruja criticona, porque para hallar defectos en mi era buenísima, pero nunca para ver sus propios errores.

Entonces todo detonó cuando llegó la hora de la prueba, demostrar que era un hombre hecho y derecho. Tener sexo, ya había hecho algunas cosas con mi amigo en privado pensando en algunas chicas o la hermana de mi amigo, sin embargo esa ocasión que tuve de estar con una chica de verdad no pude. Al principio todo fue de maravilla, me sentía caliente, pero comenzó a juzgarme por lo torpe que era cuando le quitada su sostén, cuando la besé por parte de su piel desnuda y la peor parte, me había quitado todo, yo ya me sentía preparado aunque muy nervioso y cuando ella me vio desnudo, ella se rió un poco y entonces lo hicimos pero llegué antes que ella, se enojo y se los contó a todas sus amigas. Fuí la burla de muchos chicos en mi salón, terminé con una severa crisis después de mi primer encuentro con una chica y resultó muy mal.

Mi amigo nunca me hizo a un lado, aún cuando dejé la escuela. Así que me enfoque en mejorar en mis escritos y en mis estudios en casa, a veces preferiría quedarme en casa antes que salir en cualquier lado y cuando trate de salir con otras chicas, solo eran exigencias y fuí juzgado en más de una ocasión por mi apariencia, trabajo y hasta sobre mis gustos, lo cual eso me hizo sentir terrible cuan cualquiera sobretodo con las chicas, era más terribles mi crisis y cada vez que salgo escucho la voces de estás mujeres y más de mi primer novia en mi cabeza.

Es por eso que en aquella pesadilla la titiritera era mi primer novia, quien me fue guiando hasta una ventana y lanzarme de un piso muy alto. Una caída terrible que me destrozó mis pies, una perdió una gran cantidad de sangre y la otra hizo que me pierna se torciera por completo, tanto que casi mi rodilla da un giro de 180 grados, si dolió, pero no tanto cuando está misma mujer corto las palmas de mis manos y me dió una cachetada mientras se burlaba de mí y de mi patético pene. Me hizo llorar como un niño pequeño.

Luego desperté, sin embargo mis piernas quedaron en tan mal estado que terminé en una silla de ruedas y mis manos totalmente vendadas, así que no pude seguir con mis escritos. Los médicos no daban crédito a lo que pasaba siempre que dormía, por ello después de aquella pesadilla ya no salí de ese hospital, me daban pastillas para mantenerme despierto. Tanto los médicos como yo sabíamos que si yo cerraba los ojos sería mi fin.

— ¿Al estás bien?

— ¿Ah?... Es verdad, me que absorto en mis pensamientos, lamento no haberte escuchado Lizz.

La chica sonrió candidamente — No te preocupes, ya te he dicho que sería mejor que tomarás un descanso, pero tú prefieres escuchar al idiota de mi hermano Thomas y prefieres quedarte todas las noches en vela, ya no estamos en esa edad.

Si cierro mis ojos moriré eso es seguro.

Sacudí mi cabeza antes esa idea tan terrible — Tranquila, trato y trato de tener buenos sueños y nada.

La chica se puso pensativa — Si descansarás más, te podrías mejor muy pronto y no te verías como si un muerto estuviera sobre tí — ella se levantó para acomodar mi almohada abrir la ventana —. Si te mejoras pronto, te llevaré a mi casa, tengo un jardín enorme con un columpio — la chica de los rizos se acerca a él con una bonita sonrisa en sus labios —. Mi marido tiene muchos deseos de conocer al escritor de tan lindas historias que le Lee a nuestro bebé cada noche.

Está señorita llamada Lizz, que estaba felizmente casada y que era con la única mujer con la cual puedo hablar tan naturalmente fue mi primer amor.

Que mal que ahora apenas hablemos y lo peor que me vea así de lamentable.

— Si quiero conocer a tu hijo, hace dos años que nació y yo nunca tuve la oportunidad de conocerlo — levanté mis brazos y trate de cerrar mis puños simulando mostrar mis inexistentes músculos —. Me repondre muy pronto e haremos un picnic todos en tu bonito jardín.

Ella se le iluminó su cara con total emoción y me abrazo enterrando su rostro en mi pecho. Yo me quedé perdido en su suave y bonito cabello lleno de rizos, pues me quedé perdido por un momento sin saber que hacer.

Ella levanto su mirada y me miró justamente a los ojos y yo me quedé ahí estático, sin pronunciar o hacer algo.

— ¿Otra vez te quedaste congelado, eh? — se volvió acurrucar en mi pecho —. Soy verdaderamente dichosa con mi familia que forje por mi misma, sin embargo siempre tuve la curiosidad de saber cómo hubiera sido mi vida a tú lado, si tan solo te hubieras fijado en mí...

¿Qué?

•••

Hubo un silencio incómodo y una tensión entre ambos amigos aquella tarde entre ambos amigos.

— ¿Que dijiste? — preguntó Marco sin siquiera ver a su mejor amigo

— ¡ERES UN MENTIROSO! — dice Al furioso, trata de calmarse, porque siente que perdería la conciencia en cualquier momento.

<<La cabeza me da muchas vueltas, el médico me pidió que no me exaltara por nada en el mundo>>

Respiro hondo y continúo: — Mentiste, a mi, a tu mejor amigo... Sobre Lizz y lo que realmente sentía por mí.

Marco decidió mirar a otro lado, ya no podía engañarlo más. El amor de su vida de Al, siempre fue Lizz, nunca se le confesó por miedo al rechazo y porque el hermano de esta, tanto amigo de él, le "confirmo" que su hermana jamás podría salir o estar con alguien como Al.

Marco siempre había creído que lo engañaría por siempre sobre esa verdad.

— La única chica que de verdad me gustó y tú me separaste de ella, sabiendo lo mucho que sufrí por ella — rompió a llorar.

Su miedo a las mujeres incremento a tal punto con sus malas relaciones, de abusos, gritos, insultos y hasta golpes. Donde cuando quería tan siquiera levar la voz, cada una de las de Al, lo hicieron callarse, le decían que era asqueroso, insensible y que siempre estaría solo.

En su última relación escaló a tal punto que ya incluso lo dejo sin energías de hacer nada, ya que ella le recordó el asunto, el terrible "accidente", que hizo su tío con él antes de cumplir los 10 años, como este siempre para agradar a las chicas era capaz de besar al piso con la lengua y de lo mediocre que era como escritor. Eso se lo hizo ver su última novia y cuando se aburrió de torturarlo, lo dejó, le robo algunas cosas de valor y lo abandonó.

Si hubiera salido con Lizz, en primer lugar nada de esto habría sucedido y sería un hombre con una vida normal de casado.

— ¡Tuviste que arrebatarme a Lizz!

— ¡¡SI!! ¡¡SI LO HICE Y LO VOLVERÍA HACER!! — Respondió Marco, encendido de enojó contra su amigo —. Siempre te estás lamentando, siempre andas suplicando por amor, no tienes una pizca de personalidad y eres patético. Por ello todas las chicas que querían algo serio contigo te dejaron, te aborreces de ti mismo, no asumes tus culpas, eres superficial, ¿recuerdas a cuántas chicas dejaste solo por ser algo llenitas o por tener gafas?

>> ¿Cuántas chicas dejaste llorando al olvidar compromisos importantes con ellas?, ¿la vez que engañaste a una con una de sus hermanas? Y luego te lamentas, chillas porque la vida es injusta y no reconoces tus defectos.

>> Culpas a los demás, que si hubo gente que se porto muy mal contigo, pero tú no fuiste bueno con la gente que de verdad te quiso brindar cariño.

>> ¿Crees qué quería eso, para mí hermana? ¿Qué al final sufriera por alguien que no lo merece?

¿Al final realmente fuimos amigos?

Ambos recordaron cuando ambos se la pasaban bien en compañía del otro, uña y mugre, así los llamo la madre de Marco cuando pequeños, no veías uno sin el otro chico. Y desde el incidente con su madre y su tío, Marco siempre estuvo ahí, aunque todos sus compañeros de clase le dieron la espalda y le molestaban, Marco lo defendió a capa y espada.

Al creyó en él, ahora lo veía como su enemigo, un doble cara.

Ya no creía en él.

¿Pero y Marco?

Al seguía siendo su amigo, de eso no había duda, sin embargo no sacrificaría la felicidad de su hermana, todo lo que ahora Liz tiene fue gracias a que su desastroso amigo no estaba con ella. Sí estuvo a punto de ser un cupido de ambos y juntarlos, pero su amigo no organizaba sus pensamientos y su vida se encargaba de hundirlo todavía más al igual que toda chica que se involucraba con él, sin asumir sus actos.

Jamás le haría pasar a mi hermana por ese calvario. No me arrepiento de haberlos engañado para que no surgiera nada entre ambos.

Ambos hombres se limitaron a mirarse, el que se encontraba en cama le miraba enojado, pero no dijo nada, al igual que el otro chico atractivo, quien mantenía la cabeza agachada y rascaba su nuca.

Sin decir nada más.

{•••}

Cuando al fin salió del hospital, decidió ir a un bar, para olvidar la discusión con su amigo, mientras manejaba.

Por la carretera para mantenerse tranquilo, soltaba un suspiro, Al se enfado tanto que lo echó del hospital a punto de gritos e insultos.

<<¡¡FUERA DE AQUÍ PEDAZO DE MIERDA YA NO QUIERO VERTE!!>>, ese sobresalto, la rabia que descargo en contra de Marco, vaya que resonaban en su cabeza. Las enfermeras trataron de calmarlo, pues si signo cardiaco escaló a un estado crítico.

Al se encontraba tan mal, pálido como un muerto, su labios se ponían morados como si un terrible frío pasará por ellos, sus pómulos se volvieron prominentes al no tener suficiente carne. Cuando le quitabas la bata del hospital, era un cadáver viviente, lleno de hematomas, rasguños y una vista clara y sobre saliente de su costillas.

Al, me importa un carajo si no me quieres volver a ver en tu puta vida pendejo, no dejaré que mueras por unos sueños.

Indagar, ¿es posible ser herido, lastimado en sueños? Buscado en algunas fuentes y casos médicos, no me dieron respuestas, me llevaron a libros escritos por estafadores, sobre el poder de la mente y demás idioteces. Hasta llegar a un foro, que se trataba solamente "Los sueños de la muerte", "Pesadillas Mortales" u otros que se llamaban "Parásitos de la muerte".

Al principio parecía una locura, hombres que murieron a causa de sus sueños, ataques, golpes, dañando cada vez más su cabeza.

Como si se tratará de un contagió que hasta la fecha nadie sabe cómo se propaga, sin embargo cuando lo hace, obtienes un sin fin de pesadillas, donde son lastimados gravemente heridos y que al despertar esos golpe siguen ahí, no solo si no que cada chico que cuenta su historia, dicen ver a una chica, la chica de sus sueños, en cada uno de sus sueños, siendo estás sus verdugos. Son los "parásitos".

Suena el celular de Marco que lo hace despertar de su trance, decide ponerlo en altavoz, no quería orillarse en medio de la carretera solo para contestar.

— ¿Bueno? — llamó una mujer desde el el altavoz del celular.

— Tammy linda, ¿qué sucede?, ¿lista para hablar lo que acordamos?

Tammy era una chica que era parte del foro de internet de Parásitos de la muerte. Hace años  perdió a su padre por esas extrañas pesadillas por las cuales pasa su mejor amigo.

— Después de hablarme por lo que pasa tú amigo Alvin en el chat que tuvimos hace poco, me doy cuenta que es por lo mismo que pasa mi papá salvo la chica.

— Alvin me dijo que se llama Amélie.

— Cada uno de los parásitos tienen un nombre diferente al igual que su apariencia y siempre escogen a un hombre para alimentarse de él.

— ¿Alimentarse?

— Por eso los llamamos parásitos. Un parásito es un organismo, habita en otro ser vivo, en un organismo más complejo, en un "huésped", en su interior pay alimentarse  a expensas del huésped.

— ¿A qué te refieres?... — tembló la voz de Marco.

— Hay una leyenda, que hace mucho me encargue de investigar.

>> Hace mucho tiempo, una época  donde el Imperio Británico Británico se hizo imponente  y la cúspide de la Revolución Industrial en dicho país, una época donde donde el avance de la ciencia se hizo notar y sonar en todo el mundo. Fue entonces que un científico en su búsqueda de la cura de una bacteria mortal, se encontró en uno de sus viajes con la mismísima muerte.

>> En carne y hueso, una hermosa  dama que se hacía llamar la muerte. En un principio no se lo creyó, aún así su belleza era algo sobrenatural e inigualable, además de su extraña aura, cada vez que ella quería mataba a quien fuera. Eso impresionó  al científico, ante tan misteriosa mujer, quedó prendado, obsesionado, la quería solo para él, en entonces en sus estudios por la biología fabricó el parásito de la muerte que al igual que ella era muy misterioso consumiendo a los hombres desde sus sueños, con la imagen de la chica de sus sueños.

— ¿Siempre la chica es diferente a pesar de que tengan un nombre?

— Nunca es igual, cuando tienden a ser similares es porque es por personaje en específico o un famoso, como el de un sujeto que solo con Sky Swan esa tan sonada actriz y cantante.

>> La cosa es que juegan con su mente y se alimentan de su amor y su rencor de aquellos hombres que caen ante los encantos y de su retorcida mente. Creados por un hombre que se obsesiono de la muerte y al no recibir su amor por parte de esta, su misma creación, un parásito tomó la forma de la muerte y devoró a su creador.

Esas palabras velaron la sangre de Marco. Es una leyenda, pero ¿en serio esas cosas se comieron a su creador?

— No tuve tiempo de contestar antes y solo te pedí que enviaras por medio de mensajes y fotografías el estado de tu mejor amigo.

— Si y te agradezco mucho eso, aún está grave de la última pesadilla que tuvo acerca de una carnicería humana, fue difícil hacerlo reaccionar, no me ha contado del todo lo que pasó en ese sueño, no lo he dejado dormir como me has indicado otra pesadilla así ya no dejaría ni probar ni un solo bocado.

— Deja de eso, cuando la pesadilla escala de tal magnitud, eso quiere  decir que si cuerpo y mente está listo para el parásito, se encuentra vulnerable y completamente débil, por ello no lo dejes solo.

Frenó Marco en seco en medio de la carretera — ¡¿Qué quieres decir?! — exaltado hizo la pregunta temiendo la peor respuesta por parte de su informante.

— ¿Estás conduciendo? — desde el otro lado de la chica maldijo y golpeó una cosa con tal fuerza que se escuchó un vaso de vidrio romperse y papeles caer —. ¡REGRESA AL HOSPITAL AHORA!

Marco arrancó el auto, se dio una vuelta rumbo para el hospital.

Se escuchó a la mujer maldecirlo por haber dejado solo a  su mejor amigo, mientras el mismo también lo hacía consigo mismo, mientras rezaba por llegar a tiempo.

— ¡Eres un estúpido! ¡TE LO DIJE UNA VES POR EL CHAT YA! — la mujer está fuera de sus casillas, creyó que Marco sería diferente  a todos ellos del foro, que tal vez él sería quien encontraría la cura de este parásito —. Creí que está vez lo lograría, poder tener un avance y acabar poco a poco con estos parásitos... — hablo tratando de estar más clamada, solto un suspiro —. Hasta la fecha no sabemos como es el contagio, por que medio se da, sin embargo hemos logrado un gran avance mientras más nos informamos de ellos... Estás chicas de en sueño, los parásitos, no son tontas y escogen gente que están pasando por una fuerte depresión. Todas las personas que se llevaron, eran hombres o jóvenes que pasaban por muchos problemas, sociales, de trabajo, escolares, familiares y hasta de pareja. Obtienen toda su energía vital como platillo principal y luego como postre se llevan su alma.

>> Si no llegas a tiempo Alvin será devorado por Amélie y los parásitos de la muerte, nuevamente nos habrán ganado.

{•••}

Al después de su fuerte pelea, la traición por parte de su mejor amigo, compañero su hermano de otra madre, ahora se encontraba solo en el hospital, y después de tanto tiempo el sueño le ganaba.

Días, paso más de una semana mantenerse despierto, fue un desafío, pero gracias a Marco fue muy sencillo, hubo pequeñas siestas de media hora por cierto número de tiempo en determinadas horas, así engañaba al cuerpo que descansaba lo suficiente, y así también no tenía pesadillas, además que ya no ha visto a Amélie desde hace un buen tiempo.

Estoy muy cansado, tengo un sueño. Cerraré un poco mis ojos, para descansar un poco y luego de treinta minutos, me despertaré. No necesito de Marco para hacerlo.

Alvin abre sus ojos, mira la hora de su celular, había pasado treinta minutos. Mira a su alrededor y seguía siendo noche, se estira como nunca antes lo hizo, se sentía fresco como lechuga.

Se quitó todos los cables, y tubos a lo que los médicos lo tenían conectado desde que lo ingresaron de su última pesadilla.  Se levanta después  de tanto tiempo de la cama, se dirigió al baño y se miró frente al espejo de verdad era un muerto en vida, sus ojos se habían hundido y sus ojeras lo empeoraba todavía más, nunca fue el galán de galanes, pero ahora causaba miedo con su nuevo aspecto.

Se escucha una traviesa risa, que Al reconoció al instante esa risa.

— ¿Amélie?

— Je je je ~  volvió a reírse en respuesta sin responder realmente.

De cierta manera se sentía sumar feliz de escucharla después de tanto tiempo. Salió del baño y volvió a llamarla.

— ¡Hey Alvin! — lo llamó la chica desde la puerta de la habitación quedaba al pasillo, en cuanto Al la vio está salto de alegría al notar que tenía su atención estiró su mano derecha y lo llamó —. ¡Ven aquí! ¡Ven! ~

La chica se fue hacia el pasillo del hospital, este hombre fue corriendo detrás de ella.

No importa si Amélie me hace algún daño, quiero estar con ella, por el resto de mi vida, tiene tanta vitalidad y alegría que la envidio, hace que quedé más encantado con ella de lo que ya estoy, estoy dispuesto a seguirla hasta el fin del mundo si hace falta.

— ¡Espérame Amélie! — suplico el joven entre lágrimas mientras esboza una sonrisa y corría detrás de la nombrada —. ¡Eres lo único que tengo ahora! ¡No quiero perder a ti también...

— ¿Alvin? — la voz de una mujer lo hizo detenerse a medio pasillo.

— ¿Lizz? — se giro ver a la chica estando completamente confundido de verla en el hospital a tan altas horas de la noche —. ¿Qué haces aquí?

La chica se sonrojo y se encogió de hombros — Marco me dijo toda la verdad... Sobre que tú estabas enamorado de mi.

— ¿Ah? — (¿¡Ese idiota le contó de eso!?)

— La verdad me emocioné muchísimo cuando me lo contó por mensaje, que no quise esperar para decirte esto — se acercó a Al para posar sus brazo alrededor de su cuello mientras fijaba su mirada en sus labios de aquel hombre.

— ¿L-Lizzy?

La chica están muy melosa con él y se restregaba entre ronroneos en el pecho del chico. Era mucho para él y poco le importo su terrible aspecto, tan solo deseaba besarla, lo necesitaba.

El besó nunca llegó.

La mujer suelta una risa, una muy desagradable, escupiendo en toda la cara del hombre mientras comenzaba a escalar esa carcajada has sonar como un cerdo fuera de control.

— ¡Ay que risa! — se tranquilizó al fin de reír —. Alvin...— se acercó a su oído —. Tu me produces un asco — lo empuja para tumbarlo en el piso y su sonrisa se deforma de tal forma que literalmente el extremo de una llegaba de oreja a otra.

— ¡Bien dicho hermana! — exclama Marcos que sale desde la oscuridad —. ¡No puedo creer que tenga a un amigo tan repugnante!

— Si ya te digo — se acercó otra chica de uniforme  escolar, para ir rodeando al hombre tan lamentable que ya hacía en el suelo —. ¡Alvin es el novio más asqueroso que pude tener jamás!¡Nunca tuvo ese cuidado en cuanto su aseo personal, su dientes siempre estaban amarillos y sus axilas! — giro su cabeza haciendo un sonido de disgusto, regreso su mirada a él y los ojos de la mujer crecieron desmedidamente inyectados de sangre —. ¡IUGH! ¡Era nauseabundo! ¡¡BLEH!!

— ¡Que asco! ¿pero sabes qué es peor? — se acerca otra mujer delgada joven —. ¡Este virgen fue capaz de decir que no tenía nada de tetas cuando tuvimos nuestro primer beso! — la mujer se estiró de forma retorcida hasta chocar con el techo y sus manos se convertían en garras.

No solo ellas más mujeres jóvenes, escolares, mujeres mayores vinieron a criticarlo. Posibles amoríos, amores platónicos, a las que nunca les dio una oportunidad, delas que rechazo y se burló en su cara de sus defectos físico y las ex novias que se habían vuelto como en la mente del hombre veía, una verdaderas monstruos.

<<¡Huele muy mal!>>, <<Nunca se preocupo por mi, me dejó sola cuando más lo necesite>>, <<¡Este estúpido me rechazo solo por mi peso!>>, <<Yo de verdad lo amé y fue capaz de engañarme con mi hermana>>, <<¡QUÉ BUENO QUE MI  HERMANO ME HIZO NO DARLE LA OPORTUNIDAD A ESE PERDEDOR!>>, <<¡¿ENSERIO SE CREYÓ QUE ERA SU AMIGO?! ¡JAJAJAJA!>>

— ¡¡PAREN!! ¡¡YAAAAAAAAAaaaaa!! — desgarro su garganta  clamando en un grito para que parasen.

— Ou, pobrecillo de nuestra pequeña rata — unos tacones se acercaban lentamente, (esas zapatillas, los reconocería en cualquier lado incluso entre un millón de zapatos) —. Siendo mi exnovio y verte en esta clase de escena, él verte retorcer cual gusano — aquella mujer de cuerpo curvilíneo, labios carnosos y ojos grandes y brillantes como las esmeraldas —. Hace que me emocioné demasiado...

No era nada más y nada menos que su última exnovia, la mujer que le hizo ver el lado más perverso de una mujer, no más bien, el lado más malvado de un ser humano.

Esta mujer morena le hizo conocer los más exquisitos y lujuriosos placeres que hay en el sexo, para luego patearle su orgullo, ocuparlo cada vez que quería, insultarle, hacer que compraste todo para ella y robarle todo cuando quisiese. Lo hizo renunciar a una increíble oportunidad de publicar una de sus novelas en un sitio de renombre, se burló de sus escritos una y otra, jugó con su orgullo, hizo que perdiera la dignidad obligandolo a qué limpiará sus zapatillas con su lengua en vía pública, lo engaño con mucho hombres en su misma cara, le pateo en la bolas uno y otra vez y muchas veces de forma literal también.

Alvin comienza a llorar, a berrear, la mujer tan solo se reía  a carcajadas del hombre quien se encontraba en el suelo, mientras los demás empezaron a patearlo pisarlo por todas partes.

— L-lo siento — dijo Alvin por fin — no tengo justificación, es por eso que les tengo miedo a las mujeres...

Todos se detuvieron, aprovecha para seguir hablando:

— Soy patético, débil, un fracasado que necesita orden en su vida — con dificultad logra ponerse sentado para ver sus caras a todas esas mujeres de su vida, quiso ponerse de pie, no pudo —. Lo lamento mucho, yo no tenía el derecho de hacerlas sufrir así, de hacerles sentir que valían menos, porque no es verdad, debo cambiar para el bien de los demás — se toca el pecho, tenía que sincerarse consigo mismo —. Perdonen, por nunca querer escucharlas realmente, por engañarlas con otras, por... Rechazarlas cuando se sinceraban conmigo, por todo, el cambio de o hacerlo conmigo mismo, por eso yo...

— ¡Pfft! — la última exnovia comenzó a reírse de el en su cara —. Perdona es que me das risa, alguien tan despreciable como tú, ¿realmente puede cambiar?

— Es una vergüenza como hombre — se acerca otra mujer vestida totalmente de negro y ojos vacíos.

— ¿Mamá?...

— Oh Alvin, me avergüenza sea todo lo horrible que puede tener un hombre — la mamá se cubre su rostro —. No puedo creer que haya parido a un ser como tú — Al se quebró con las duras palabra de su madre, ya no tenía deseos de seguir luchando.

Tienen razón, soy alguien repugnante un perdedor que escribe mediocridades, alguien patético que su tío se aprovechó, alguien asqueroso que solo se fija en físico y que no tiene deseos de seguir viviendo.

Cuando abre los ojos no hay nada, solo un limbo, sin ningún luz que se escape en ninguna dirección. Entonces de repente siente una mano muy fina sobre su mejilla delicada, suave.

— Amélie — la llamó y está sonrió.

Ahora comprende que nunca la podía odiar sus ojos eran tan bonitos, que le hacían sentir bien, recordar a los ojos de su madre cuando estos tenían brillo, su pelo rizado como el de las chicas que le gustan, castaño como el de Lizz, joven y risueña como la chica de secundaria de quién estuvo enamorado en sus años de escuela. La chica de sus sueños que siempre soñó desde muy joven.

— No me dejes solo...

Estira sus brazo para poder alcanzarla. La chica se levanta.

— Entonces alcanzame Alvin — ella comenzó a correr.

Sin pensarlo dos veces, se levanta y corre detrás de ella, yendo de aquí allá, cada paso más largo que otro. Cuando al fin siente que la tiene, ella está al borde de una ventana y sin pensarlo dos veces y sin mirar detrás de ella, porque tiene sus ojos fijo en Al, salta.

Alvin suelta un gemido y corre para tocarla y el también salta por la ventana.

La vista no daba crédito. La noche con el cielo estrellado como nunca antes, a pesar con las luces de la en todas direcciones que había de la misma ciudad, un  mundo completamente nuevo para él, con luz y color.

Amélie en el aire lo alcanza, y lo abraza desde el cuello — Felicidades, me alcanzaste — y lo beso en los labios mientras caen al suelo.

{•••}

— ¡Ya llegué! — sale Marco apresurado del auto en dirección para entrar al hospital antes de que sea tarde —. ¡Aún hay tiempo! ¡Aún...

¡SPLASH! Marco se detuvo en seco. Se oyó a una enfermera gritar de terror. Alguien se había aventado desde tan alto.

Marco se acercó lentamente a la escena y su temor se cumplió. Alvin, su mejor amigo se entraba en el suelo, sin moverse mientras sus ojos se mantenían abiertos miran a la nada y el suelo se encharcada en sangre.

El sujeto se tira al piso impactado,  se tocó la cabeza y niega una otra vez negando lo que sus ojos veían.

— ¡¡AAAAAAAAAAAAHHHHHHH!!

Se dice, que los forenses dieron el informe del caso de Alvin, ya que este había muerto antes de caer del 6 piso del hospital. Que su corazón, por una extraña razón dejó de latir antes de impactar contra el suelo.

Marco no pudo salvar a su mejor amigo Al de Amélie, el parásito de la muerte.