Notas del cap:

Como cuando tengo duda existencial si seguir escribiendo o ponerme a publicar... mejor publico algo para mostrar que sigo viva, igual, quiero acabar este año varios fics para ver si comienzo otros nuevos XP así que nada

¡A leer!

13 - Serás mío

Pego un brinco y dio un paso hacia atrás, sus ojos se habían abierto de golpe, y miraba a todos lados confundido. De nuevo, un bosque nevado, con ramas secas y muertas y delante suyo, un hombre dando una respetuosa reverencia a su persona y hablando aun a mitad de su reverencia

—Lo hemos atrapado Third Reich, hemos conseguido acorralar al countryhumans Francia, pero tal parece se encuentra con otro countryhumans que no podemos reconocer debido a que el countryhumans Francia lo está protegiendo con su cuerpo y no lo suelta —se explica el hombre. Nazi abre sus ojos con cierta sorpresa que lucha por que no sea demasiado obvia, asintiendo a las palabras del hombre con tranquilidad

—Llévame a ellos —ordena, observando el rápido asentimiento del hombre así como velozmente lo guía. Nazi se mantiene en silencio, caminando con un porte más serio de lo normal, pensando en lo que había recién ocurrido, sintiendo el suave golpetear del reloj sobre su pierna en su bolsillo

Estaba más que seguro que había logrado volver el tiempo atrás antes de morir, incluso, estaba seguro que alguien le había disparado, pero aún más importante, era el saber que había muerto México otra vez por su culpa ¿Qué podía hacer? Si volvía a tratar de ayudarlo o explicarle las cosas, seria asesinado por Urss ¿Cómo apartaba a Urss del camino y mantenía a salvo al mexicano? Se preguntó, aun cuando sintió, junto a una ventisca fría, un dolor acunarse en su pecho... ¿Así se sentía una bala en el corazón? Sonrió prepotente. Dolía mas ver por segunda vez la muerte de México y el no poder hacer nada para evitarlo

¿Pero qué hacer? ¿Cómo mantenerlo a salvo del comunista y de su estúpido vecino el americano? No es como que pudiera encerrarlo en una jaula de cristal y mantenerlo a su lado hasta que la guerra acabara. Un momento

—¿Señor? —escucho el llamado dudoso de sus hombres, Nazi noto que se había detenido a mitad de camino, ya solo faltaban un par de pasos para ver al grupo de alemanes que apuntaban sus armas en dirección de Francia. Nazi negó un momento, volviendo a reanudar su avance para con el grupo que le guía, descubriendo de nuevo, la escena delante suyo, la misma escena que esta vez, iba a cambiar

----------------

Su caminar es lento, pausado y determinado; tan pronto sus hombres le abren paso, permiten ver a Francia, de nuevo, con una mirada fiera y determinada, abrazando con fuerza el cuerpo inconsciente de México, determinado a protegerlo. Nazi sonríe. De los dos countrys ahí presentes, era más que seguro para Nazi saber, que sin lugar a dudas, quien más determinado está a proteger a México, es el alemán

—Buenas tardes, Francia —saluda cortes aunque frio. Francia afila la mirada desconfiado, en especial cuando descubre la mirada de Nazi fijándose con un brillo extraño en el country que el tanto protegía con su cuerpo, gruñe por lo bajo, observando como Nazi sonríe, mostrando delante suyo una mano y, tras un simple chasquido, observar cómo sin piedad un grupo de 4 hombres corren hacia Francia sujetando sus brazos detrás de su espalda, obligando a que libere al joven que yace inconsciente y que cae en la nieve

Nazi observa por escasos segundos el silencio que se crea, Francia se queja por la brusquedad y de pronto, aun antes de que nadie pueda ver lo que sucede, el sonido de una bala, un cañón disparado, sangre salpicando a los hombres y al country inconsciente y de pronto, Francia está muerto, con un hueco sangrante en su frente

«Ya he vivido esta escena las suficientes veces para saber lo que ibas a hacer después Francia», piensa, observando al country aun inconsciente y como uno de sus generales apunta su arma en dirección del country inconsciente

—¿Qué cree que está haciendo general? —pregunta con amenaza al hombre que se estremece a la pregunta hecha con oscuridad de parte de su country, el hombre baja el arma y con temor en su voz habla

—Mi señor, pensé que sería recomendable... acabar con este country también —susurra asustado, sin embargo, Nazi suspira con fastidio ¿Acabar con él? ¿Ese estúpido humano sabia por todo lo que había tenido que pasar Nazi para poder tener a ese tricolor? Era claro que no, así que, soltando un suspiro de enfado, observa a sus hombres

—Espósenlo, no quiero que trate de escapar por ningún modo ni motivo —susurra, dándoles la espalda, pero girando un segundo para verlos de un modo afilado—, y aquel que se atreva a lastimar de más a este country, será ejecutado en el momento —amenaza, volviendo la mirada hacia su general— y usted, comiencen la invasión, acaben con todo, no quiero que quede ni una sola alma viva en estas tierras —sentencio ante el hombre que, luego de dar un saludo respetuoso marcha corriendo para comenzar a dar ordenes

En menos de lo esperado, Nazi ya tiene entre sus manos a México inconsciente, cargando con su cuerpo con delicadeza, aun cuando lo tiene atado con esposas en sus muñecas detrás de su espalda y otro par en sus tobillos para evitar su movimiento. Nazi lo observa, cuidadoso, frágil, inconsciente

Esta vez se iba a asegurar de protegerlo

-----------------

—Huuuggg... mi cabeza —se queja el tricolor en cuanto cree estar lo suficientemente consciente del dolor en todo su cuerpo y sus heridas; descubre un techo de maderas. Sus ojos parpadean confundido de lo que encuentra, su cuerpo logra moverse hasta estar sentado en la cómoda cama donde se encontraba bien cubierto por varias cobijas que le permitieron mantener el calor de su cuerpo y no pasar por fríos. Cuando gira su mirada hacia la única ventana, alcanza a percibir una suave nevada y eso le parece curioso. Él no era bueno con las nevadas y mucho menos que menos con los fríos ¿Cómo es que estaba tan cálido? Incluso, al girar su mirada a las cobijas que cubren su cuerpo, realmente reafirma que son varias las que están sobre su cuerpo, como si hubieran sido especialmente cuidadosos de su salud—. ¿En dónde me encuentro? —tal vez esa fuera la pregunta que necesitaba responder para saber quién había cuidado tanto de su presencia, se dijo

Otra cosa a tener en cuenta era precisamente saber que había pasado antes de haber perdido el conocimiento. Soltó un quejido cuando recordó que su cuerpo aún seguía herido por sus propias batallas y bajó la mirada descubriendo vendajes nuevos y limpios sobre sus heridas ¿Qué había pasado? Hasta donde recordaba, había sido invitado por Francia a sus territorios con la idea de convencerlo de que se uniera a los aliados para la segunda guerra mundial, algo que por más que obvias razones el latino había negado. Recuerda entonces... tal vez una sirena, el jalón de las manos francesas mientras lo lleva ente el bosque en dirección a sus territorios en busca de escapar... recuerda balzos y de pronto, tras sentir que es empujado hacia adelante, no puede recordar nada mas ¿Alguien lo habría salvado?

—¿Pero quién? —se preguntó, poniéndose en pie, descubriendo ropas que no le pertenecían a forma de pijama. Maldijo por lo bajo, no tenía su propia ropa, igual no tenía armas y, por más que su olfato buscaba, el aroma del lugar donde se encontraba no le ayudaba a reconocer donde es que se encontraba o si conocía el lugar

Camino entonces, con cuidado, descalzo al no ver pantuflas o siquiera sus zapatos; avanza intrigado, descubriendo a un niño pequeño avanzando con un pequeño osito de felpa entre sus brazos, hablando un idioma curioso que comprende aun así con velocidad

—Buenos días padre —saluda el pequeño pasando de una escalera hacia otra habitación, sin ser consciente de la presencia del mexicano que mira sorprendido la escena. Hay silencio, México siente un aire frio... si bien, es verdad que no sabía si Urss, uno de los principales involucrados en la guerra tendría hijos, lo que si sabía es que al menos (hasta donde él sabía) Uk y Francia no tenían y muchísimo menos el americano. Así que, si uno más uno significaban dos y dos más dos era igual a un pez... ese niño debía de ser de alguno de los del eje... y, hasta donde sabia, Imperio Japonés, su amigo, no tenía un hijo con negro, rojo y amarillo en su bandera. Ya había tenido la oportunidad de ver al pequeño Japón y era blanco con una esfera roja simulando al sol... entonces, ese niño, debía de ser de Nazi o de Italia Fascista... aunque, por el idioma, era Nazi. Debía de ser de Nazi, se dijo con miedo

—Ay la madre... —susurro asustado el latino, avanzando más despacio, cuidando que sus pasos no fueran ruidoso y en especial, confundido de suponer que es lo que ocurre a continuación. Avanza, asomando tímidamente la cabeza sobre el muro en dirección de la habitación donde el pequeño niño había entrado. Siente un escalofrió muy humano corriendo por su espalda cuando descubre a Nazi sirviendo un plato de comida al pequeño niño «No, ya valí madres», piensa preocupado el latino de observar en la cintura de Nazi una pistola que no estaba para nada cubierta. Al buscar con la mirada otro camino para poder escapar, su cuerpo se tensa al escuchar una voz que no debía de sonar

—¿Piensas seguir escondiéndote o vendrás a la mesa a tomar el desayuno, mexicano? —la pregunta de Nazi hace saltar al latino y por fin (sin notar ese tono divertido en la voz de Nazi), de un modo tímido y totalmente desconfiado, salir despacio desde su escondite para mirar al German que, con una sonrisa tranquila y afilada, le da cierta tranquilidad. Si, se siente descubierto con las manos en la maza, pero no se sentía precisamente en peligro, menos cuando el alemán le da la espalda para volver a la cocina, siendo ahora visto curioso por el pequeño niño curioso

—¿Quién es el, padre? —pregunta el pequeño Alemania acomodando sus grandes lentes de bolita, Nazi ríe por lo bajo; México mira la escena confundido ¿Por qué estaba en la casa de Nazi? Bueno, al menos no es su enemigo. Cierto era que era neutral en esos momentos pero ¿Por qué estaba ahí en primer lugar? Si él estaba ahí, ¿Dónde estaba Francia? Lo peor de todo, es que en cuanto cae en cuenta de la ausencia de Francia, también cae en cuenta que Francia es enemigo de Nazi, por tanto, si México estaba ahí, luego de un ataque de parte de Nazi a Francia, lo ms seguro es que en estos momentos Nazi lo este tomando como su enemigo y, en el peor de los casos, aun si supiera que sigue siendo neutral, se imagina que será obligado a participar de su lado en la guerra

Ho mierda. Cualquier opción iba de mal en peor...

—Su nombre es México, un país neutral —habla Nazi, interrumpiendo aun los pensamientos del mexicano que, solo siendo un espectador de la escena, observa al pequeño Alemania viéndolo junto a su padre curioso, preguntando la razón de la estadía del latino en su hogar. México también tiene la duda, Nazi se gira por fin para ver a ambos countrys, dejando dos platos más en la mesa, siendo, delante de un plato que Nazi se siente, a la espera de que el latino se siente delante del otro plato, permitiendo que sea Nazi quien este delante de su hijo y, a la derecha del German, encontrarse el latino—. Eso dependerá del señor México, si será tomado como un invitado o un prisionero, será algo que tendremos que discutir más tarde —sonríe a su hijo, volviendo la vista al latino y señalando el asiento donde debe de encontrarse el mexicano —Pero por ahora, centrémonos en el desayuno —sonríe tranquilo, concentrándose en su propio platillo y comenzando a comer

Mexicano no se siente para nada a salvo, pero avanza dudoso, descubriendo sorprendido que lo que hay en su plato son un par de quesadillas (sabría dios de donde saco la tortilla el alemán) y un huevo a la mexicana junto a un pequeño frasco con salsa que al probar por curiosidad, descubre deliciosamente picante. Sus ojos se abren sorprendido de semejante manjar de sus tierras, casi juraría que es de sus tierras y ahora, hasta el pequeño Alemania mira curioso la comida que hay en el plato del latino, diferente a la suya

—Disculparas que no tenga tortillas de maíz o de harina, pero al menos pude conseguir esto para ti —susurra Nazi luego de notar el gesto sorprendido del latino al probar la comida que efectivamente, sabia como si la hubiera preparado el mismo (aunque algo diferente)—. Tengo entendido que esta es comida de tus territorios ¿cierto? —pregunta con soberbia de saber que hay un brillo de alegría en los ojos latinos tras descubrir su comida y comenzar a comer habida mente con alegría aunque en silencio y lo más educado recuerda que le enseño España

... ... ...

Para sorpresa del latino, el desayuno en tierras germánicas pasa tranquilo. Se sorprende de la amabilidad de alguien como Nazi he incluso de la curiosidad del pequeño Alemania que de un modo educado (pero inocente y curioso como todo niño) pregunta por su comida, por su cultura y tradiciones que, con alegría, por supuesto que el latino responde, preguntando también un poco sobre la cultura de esas frías tierras y como el pequeño Alemania habla tan alegre y con tanta admiración de su padre

El desayuno pasa algo lento debido a una sobre mesa y la sorpresa tanto de Alemania como de México al descubrir un atole de chocolate (un champurrado) hecho de manos de Nazi para darles una agradable sorpresa. Además de ver con ojos confusos y sospechosos a Nazi... sabia demasiadas cosas de sus tierras y eso le pareció extraño, sabiendo que al menos, él no lo había visto en su vida. ¿Habrían mexicanos viviendo en tierras alemanas? Bueno, no lo sabe con exactitud y no cree que tenga la oportunidad de preguntar

Para cuando termina el desayuno y el pequeño Alemania parte a sus clases particulares, México es guiado por Nazi hasta la oficina de este. Siendo invitado de un modo serio a sentarse por parte de Nazi, siguiendo con sigilo cada una de sus acciones con cierto nivel de suspenso que trata que no sea notado, aun así, cuando Nazi se sienta en su propio asiento, un aura de tensión se crea en el ambiente, incómodo y silencioso que pone lentamente nervioso al latino. Nazi por su lado, estaba preocupado ¿Cómo debía de abordar este tema con el latino? La vez, que quiso ser directo, Urss le disparo y acabo con su vida ¿Cómo podría mantenerlo a salvo de la guerra y que no entrara en esta? Algo era claro, para estas alturas, México aún era neutral ante la guerra, además, lo había secuestrado luego de acabar con Francia y conquistar; ahora ¿Qué pasaría ahora que ha cambiado los hechos de las dos guerras anteriores?

—¿Qué planeas hacer conmigo Third Reich? —escucha la voz de México sacándolo de sus pensamientos, una voz seria y confusa pero que denotaba que en esos momentos no estaba jugando. Nazi lo observo, tan hermoso y tan lleno de vida, con un brillar aguerrido pese a que estaba herido. Su amado no cambiaria nunca, se dijo enamorado, tomando una pequeña bocanada de aire y recargándose en su asiento con pesadumbre que trata de que no sea demasiado obvia; agradece que el tricolor a veces solía ser despistado en algunas cosas

—Solo quiero que no te metas en la guerra, si te soy honesto —suspira, sacado de su escritorio una botella de wiski y dos vasos, sirve uno al latino y otro para él, dando un pequeño trago y viendo hacia el techo de su oficina—. Entre más lejos te encuentres de Urss y de América, será mejor para el mundo —dice con alivio. El problema es que, mientras que el piensa en cómo proteger al latino para que no ocurra nada malo. México comprende las cosas de un modo equivocado...

Notas finales:

Dado al tipo de redacción, el capítulo anterior se me hizo muy chico y trate de cambiar eso en esta siguiente parte, así que, espero que los que vienen, sean igual de entretenidos y que no acabe todo en un solo capitulo y darle más drama XD no sé, habrá que ver cómo queda todo esto

Datos extras:

*Obligadamente, todos los humanos deben de hablar con respeto a un countryhumans aun si no es perteneciente de ese país, por eso el hombre habla con respeto a Francia, haciendo hincapié de su nombre completo "countryhumans Francia" así es la forma respetuosa en la que un humano debe referirse a un country sea o no de su país

*Por si no quedo claro, Nazi asesina a Francia apenas este suelta a México ¿Por qué? Porque, si no recordaran, la primera vez, luego de que Francia se ve obligado a soltar a México, cuando Nazi trata de tocarlo, Francia logra soltarse y lo aferra, amenazando su vida después con un arma hacia el inconsciente latino. Nazi, que sabía esto, no lo iba a permitir, por eso, aun sin que nadie sepa que estaba pasando, mata a Francia

*Esto de que Nazi haya matado a Francia da para un nuevo fic y una historia alterna cabrona... pero ni Nazi ni yo estamos interesados en la guerra en estos momentos, solo en México y lo que pueda ocurrir a base de esta situación que se ha generado

*Una cosa es obvia al 2x1. Primero, un humano (En este fic) no puede matar a un countryhumans, pero supongamos que el general de Nazi y en especial, yo, lo olvidamos XD. La segunda cosa, es que el general también llego a la suposición de que, si estaban matando a los countrys, el tricolor también debería de morir (más que nada, sabiendo únicamente que es un country y sin saber su bando, era obvio que pensara que era enemigo) pero como quedo más que claro, las cosas no iban a ir así

*Me imagino que quedo claro que Nazi como que no es bueno con las palabras tratándose de sus sentimientos. Digo, será una chingoneria para las palabras y convencer a la gente, pero cuando esta con México como que se le olvida hasta respirar y pues... de pronto el que mejor sabe convencer hablando, se le olvida pronunciar correctamente las palabras, así que, sin querer, ha dado a entender mal las cosas

*Solo para los que han leído a detalle. La comida que prepara Nazi para con México, es la primera comida que prueba Nazi una vez esta "encerrado" en tierras mexicanas ¬u¬ no sé, se me hizo un detalle tan lindo, en especial que Nazi lo recuerde

*Nazi no quería que México fuera un prisionero de sus tierras, pero se le olvida que ese México que tiene delante todavía no lo conoce lo suficiente para entender su humor, así que el latino ha comprendido todo más que mal

¿Les ha gustado?

Que tengan lindo día

¡Comenten!