NOVIEMBRE - 2018

"Hola, he visto esto en una tienda, no pude evitar comprarlo. ¿crees que le gustará? O ¿podría odiarme por ello?"

La foto mostraba un diminuto conjunto para bebé, obviamente del Capitán América. Sería difícil ignorar la emoción que Chris mostraba cuando hablaba del bebé. Una absoluta mentira negar que, de algún modo; Louis sentía que compartir con el rubio era algo prohibido, aquello debería ser una conversación con el padre, un ligar que Chris ganaba poco a poco.

Sí, es como si ese pedacito de cielo que crecía en el vientre de Lottie ya fuera suyo también, tal vez era porque nunca había desechado la idea de ser padre, o quizás era porque el castañito, era la otra pieza de una familia.

"No quiero que cuando sea adolescente me recrimine"

Una onza de angustia se vació en el pecho de Louis cuando comprendió el peso de ese mensaje. Chris se veía con ellos en un futuro a largo plazo, el actor no se miraba a sí mismo como alguien temporal y eso, sacudió su sistema.

Después de todo, desde que conoció a Harry, imaginó un futuro, quizá 30 años más tarde donde ambos estuvieran bailando en la boda de su hijo, todavía podría tener eso, solo que; existía la posibilidad que la mano que lo sostuviera fuera entonces de Chris, no de Harry.

Dejó su teléfono en la mesita y se hundió entre sus sábanas. Una mano cálida peinó su cabello, exhaló debajo de las mantas, incapaz de mirar a su madre.

—Mamá, ¿Crees que Chris podría estar como...confundiéndose?

—¿En qué sentido?

—Bueno, él...—tomó una respiración antes de continuar porque todavía se sentía extraño traer a Chris en el mismo plano que Harry había estado por años— ¿y si piensa que yo, es decir; que él y yo...tú sabes.

La sonrisa de Janine le tranquilizó, tomó su mano para dejar un beso en ella y comenzó a calmar una de las muchas tormentas de su interior.

—No, creo que la vida nos pone a las personas que están destinadas a conocerse, eventualmente se encontrarán.

—Pero ¿y si yo no estoy listo? Es decir, seguro no lo estoy. Además, prefiero quedarme en este punto antes de joderla.

—Imagina que el camino a tu corazón está lleno de advertencias, todas esas actitudes, esas palabras que le han advertido que el último inquilino dejó desastres y que está en reparación, si todavía así Chris quiere conducir por ese camino, déjalo, tal vez él sea el especialista que puede ayudar a repararlo... deja la puerta abierta al amor, Cariño.

—No necesito un novio.

Janine sonrió en complicidad antes de su respuesta.

—No mencioné una relación amorosa, pero necesitas amor.

Bajó la mirada y se escondió de nuevo entre las sábanas intentando ocultar el sonrojo de sus mejillas, tal vez esa idea loca comenzaba a tomar forma si la sonrisa que se formó en la comisura de sus labios era un indicador.

Su teléfono vibró con un nuevo mensaje.

"Te echo mucho de menos, Bonito. Me encantaría estar contigo justo ahora".

Los ojos de Louis brillaron con algo que temía reconocer, aun en contra de su voluntad su sonrisa no se borró.

DICIEMBRE 2018

Louis no estaba seguro por qué, pero se sentía como un desastre, tenía nervios absurdos cada vez que Chris lo miraba al otro lado de la estancia.

—¿Todo bien? —le preguntó, alardeando por dentro cuando atrapó a Louis mirando sus bíceps, por debajo de la tela de su camisa —¿Te gusta lo que ves?

Louis no estaba seguro si algún día se acostumbraría a mirarse en ojos azules, no estaba seguro si alguna vez se haría a la idea y se convencería a sí mismo de enamorarse de Chris, había amado el verde por decisión propia, casi sin oposición, el cambio significaba más de lo imaginable.

Eran años de un amor maltratado por magnates de la industria musical, un amor que lo había subido al cielo y liego lo había arrojado sin alas, estrellándolo contra todo, lo habían roto y casi habían apagado su luz, pero era un amor fuerte que lo hizo sentir invencible hasta aquel día, cuando dos líneas indicaron el único "positivo" que nunca esperó, dos simples rayitas que destruyeron sus sueños y lo alejaron de la posibilidad de una familia con Harry.

—Muévete —resopló —nos faltan muchas cosas.

Liam y Niall entraban con las piezas faltantes, aquel día estaban preparando la habitación del bebé, Chris, encargado de armar la cuna y con cada movimiento de sus brazos, Louis sentía un escozor en sus ojos, el rubio era sumamente atractivo, el porte elegante y la naturalidad con la que encajaba en sus vidas tenían a todos encantados, incluyendo al castañito.

—¡Hey fangirl platinado! —gritó Liam, refiriéndose a Niall— ¿y la pintura?

—Todo a su tiempo, soy experto en todo tipo de pinturas.

—Tu cabello no opina lo mismo.

—¡Hey! ¿Por qué no le dices lo mismo a Evans?

—Porque él sí es rubio natural —rodó los ojos.

Chris rió con la escena, jamás imaginó que ese par fuera tan desquiciadamente adorable.

—Bueno, ahí lo tienes, —se acercó a Louis y señaló al otro rubio — no me iba a perder de ver a Niall con pintura en el cabello.-

—No es como si alguna vez lo hubieses visto sin pintura, ese chico ha permanecido aferrado al tinte casi igual que a la cerveza"—bufó Liam.

Liam recibió un golpe en el brazo con la brocha empapada con pintura.

—¡Aleja tus manos de mí, ingrato mal teñido! — y dirigió el golpe al rubio cabello dejándolo blanco. Chris —se quejó Niall— ¿cantas? Estoy pensando en llamar a la banda, pero prescindiré de algunos —miró por el rabillo a Liam— necesito otra cara bonita.

—Evans ¿te interesa un grupo conmigo y con Louis? —sugiere.

—Sí quiero.

—Estás fuera Neil.

—¡Oh púdrete Payno! Tengo a Zayn todavía ¿recuerdas?

Liam tragó duro cuando lo escuchó porque por supuesto, estaban hablando de Zayn, "su" Zayn.

—Te lo advertí— masculló antes de tomar una brocha y sumergirla en el bote. La tarde terminó con pintura derramada por todos lados y un Chris muy pegado al castañito, protegiéndolo de todo.

—Hueles muy bien —susurró detrás de Louis, apenas notó el ligero salto que dio el cuerpo de éste ante sus palabras —perdón, no pude evitarlo.

—G-gracias.

—¡Chris! —Liam lo sacó de sus pensamientos —¿cierto que RDJ es más alto que Louis?

—Todo mundo es más alto que Louis —resolvió Niall con una sonrisa amplia —es tamaño bolsillo.

—¡Vete a la mierda Neil!

—Es tamaño "perfecto" —intervino el actor, se mordió el labio inferior mientras escondía sin éxito su rubor —¿Cierto Bonito?

—¿Cierto que Louis es más bonito que RDJ? —preguntó entonces el mejor amigo, Liam estaba demasiado ilusionado con la presencia del actor, tenía la firme convicción de que su presencia menguaría los efectos del paso de Harry por sus vida —¿Chris?

El rubio miró a Louis y lo interrumpió cuando éste trató de responder él mismo.

—Cierto, él es más bonito que todos.

—Uy tienes suerte de que seamos nosotros los que te escuchemos, una vez Harry casi golpeó a Liam porque "accidentalmente" él y Tommo se besaron en el escenario ¿puedes creerlo?

El lugar quedó en silencio por un instante ante la mención de Harry, tenían una regla tácita entre ellos, no mencionar al rizado por obvias razones. El ambiente se volvió pesado sin que nadie pudiera evitarlo.

Louis se tensó en cuanto escuchó su nombre, Liam lo miró como si fuese un criminal, y Niall realmente lo lamentó. Louis sintió un calor en su pecho recordando aquella discusión que les llevó más de dos días completos para aclarar, su sonrojo creció ante la mirada de los tres hombres en la sala y su estómago ardió cuando recordó la reconciliación que los dejó a ambos agotados y con la piel de la espalda lacerada por las uñas del contrario.

—Los celos pintan cuadros más graves de lo que realmente son —dijo Chris, sus ojos se desviaron hacia Louis que todavía no se atrevía a mirarlo —pero la envidia no lo hace mejor, ¿cierto Liam? Justo lo que estoy sintiendo ahora mismo.

—No lo sé amigo, Louis es como mi hermano.

—Sí, un hermano al que ya le comiste la boca.

—Cállate Neil.

Louis no se atrevió a mirar a Chris, podía sentir su mirada sobre él pero aquello lo hizo sentir mareado.

Chris, por su parte, sentía la necesidad de tocar a Louis, ral vez solo una ligera parte del dorso de sus manos, o la piel de sus mejillas. Se acercó un paso, la misma distancia que un segundo después Louis se alejó.

El corazón del rubio decayó un poco ante la distancia, era escasamente medio metro pero se sentía como miles de kilómetros y el aire que se colaba entre sus cuerpos era frío, tanto como el rechazo que su corazón experimentó, pero Chris era un hombre paciente y la perseverancia genera frutos.

—Bonito, la pintura aún está fresca, vayamos a la sala.

—Claro, solo un minuto.

Cuando todos se retiraron, Louis tomó su teléfono y abrió la cámara. El punto rojo y el temporizador debajo de éste indicaron que el video comenzaba a correr. Hizo una toma de la habitación y luego se enfocó a sí mismo, con las paredes recién pintadas, en el fondo.

—Hola amor, quiero mostrarte algo...

(...)

Era la noche del cumpleaños de Louis, Chris colocaba entre sus manos un enorme arreglo de flores, la cena íntima que terminó siendo familiar, estaba llegando a su fin, la noche era fría y el castañito se volvía casi endeble ante las temperaturas.

Suspiró una pequeña oleada de aire fresco, su cerebro presentaba las imágenes una y otra vez, trayendo a la memoria manos que sostenían su cuerpo, pies enredados y cuerpos calurosos bajo sábanas azules, su memoria evocó la voz de Harry susurrando contra su cuello por quinta vez que ya debía levantarse.

Extrañaba sus mañanas perezosas que podían terminar en una buena sesión de sexo mañanero, el favorito de Harry y el más riesgoso de Louis porque su cerebro tardaba apenas un par de segundos en despertar, aunque su cuerpo no actuaba igual y estaba listo incluso antes de comenzar.

En su bolsillo, su móvil emitía el peor de los sonidos para alguien que espera por un mensaje: silencio absoluto.

—Basta Liam, esto no es necesario, —bufó Niall, tratando de hacer entrar en razón al chico más alto — ¡deja de actuar como un idiota egocéntrico!

—Por favor Niall, sé lo que hago y no puedes impedirme nada.

—Eres como la maldita lactosa: intolerante!

—¡Y tú eres como el peor dolor de culo!

—¿Y tú cómo sabes cómo se siente el peor dolor de culo? Eh?

—Voy a golpear tu estúpida boca.

—¿Con qué? ¿Tu culo adolorido?

—¡Bastardo! Voy a romper tus perfectos dientes-

—¿Pueden decirme por qué discuten ahora? —intervino Louis, su ceño fruncido no dejaba de ser tierno y amenzante a la par.

—¡Liam es estúpido y me tiene harto!, ¡quiere ponerle Leeroy al bebé porque ese fue su personaje, por Dios ya supéralo!

—¡Mira quién lo dice! ¡El mismo que quiere que mi sobrino se llama Patricio solo porque es irlandés!

Podrían continuar con la absurda discusión si Louis no la detenía, sabía que no pasarían de eso, pero Liam era sensible, todavía recordaba la época donde tuvo serios problemas de ansiedad y depresión, Louis lo había encontrado una noche cuando trataba de acabar con su vida, nadie más lo supo porque lo dejaron como un asunto entre ellos, pero desde entonces el castañito se mantuvo muy cerca de él, y lo apoyó cada vez que volvió de las redes recibiendo mensajes de odio y aunque él fingía que no le afectaban; Louis sabía que cada vez que leía esos comentarios donde lo menospreciaban, Liam se encerraba a llorar.

—Ustedes —los señaló con el ceño fruncido —¿quieren dejar de discutir? a Kevin no le gustará saber que sus tíos pelearon por su nombre.

—¡¿Qué?! —gritaron al unísono, sabía que así dejarían de discutir entre ellos —¡de ninguna manera, no le pondrás el nombre de tu estúpida paloma de plástico!

Louis caminó tranquilamente hasta llegar al sofá, encendió el televisor intentando ignorar las voces de sus amigos, el vaso de cristal que sostenía entre sus brazos crujió ante el impacto contra el suelo, sus manos débiles apenas pudieron sostenerlo cuando se afianzó al respaldo del sofá y su corazón palpitó ante e dolor de lo que sus oídos captaron en el televisor de fondo:

"El cantante Harry Styles fue captado esta mañana con su esposa Candice Row, ella luce espectacular con su embarazo, está por concluir la semana 40 y al parecer la pareja planea que su primogénito sea británico ya que según fuentes cercanas a la pareja, ellos esperaran a que nazca en Londres"...

Se quedó inmóvil, sus ojos observaban la pantalla, habían transcurrido siete meses desde la última vez que lo vio y en esa ocasión Harry estaba casi tan devastado como él.

Ahora, el hombre que veía en pantalla estaba tomado de la mano con una mujer, "su esposa".

Un monstruo se enroscó en su mente y apretó el corazón de Louis hasta sofocarlo, porque él quiso, quiso ser ella y sostener a Harry.

Sus piernas temblaron como hojas secas ante el viento del norte, un abismo negro se abría bajo sus pies y el eco de una sola palabra le estremeció el alma: esposa.

Un título que se derritió en sus manos antes de atraparla.

El corazón quiere lo que quiere, pero aquella vez Louis sintió que quería lo equivocado, y el universo gira y le muestra un lado que antes no había conocido.

Algo más grande que él mismo estaba por llegar.

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"Es una tortura estar aquí en medio, mientras me amas y me dejas"... War is love.

Fue mi primera fic, más inexperta e ingenua que la vez que me dijeron que tenía que aprender el máximo común divisor. Así que...

22-09-22 (editado y resubido), es mi cumple.

¿Ya leyeron "Sin créditos para Louis? o "Llámame Harry"? son preciosas y están completas en mi perfil.

Besos.

MAKI<3