Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capitulo ¿único?

El frío intenso quemaba sus pulmones aspirar era tan doloroso como caer de un acantilado...

Sujeto su abdomen con fuerza intentando retener el enorme dolor que lo acompaña, caminaba recto y sin rumbo, su brazo izquierdo dolía, no tenía ningún tipo de fuerza de voluntad, su respiración estaba al borde del colapsó, ¿pero la razón?, era mejor no pensar aún...

Después de tantos años en ebriedad e inconsciente de sus acciones, todo había caído de golpe, su cabeza lo mataba y sus labios estaban tan secos anhelando saciar aquel horrible vicio.

Hace mucho que su cuerpo no dependía de sí mismo, estaba perdido en sus problemas que se olvidó de sí mismo y las personas a su alrededor pero había alguien de quien no se olvidaría ni aunque estuvieran en el estado más lamentable de ebriedad...

Esos preciosos y pequeños ojitos castaños, como olvidar su lindo cabello ondulado y oscuro, su piel acaramelada y su bonita voz de Angelito...

Taehyung recuerda muy bien a la persona que lo hizo darse cuenta de que el amor a primera vista si existe

Y no para de lamentarse por dejarla, por hundirse tanto en su miseria y no tener la capacidad de protegerla.

Sus pies ya no respondían, parecían tomar una dirección por si solos y se encontró frente donde menos se espero estar, no de nuevo, no en ese lugar que le hacía sentir la necesidad de quemar su garganta con el amargo sabor del alcohol...

Tomo asiento frente a la lapida de su difunta esposa tomo una copa de vino que estaba en esa asquerosamente rica tumba, le jodía que fuera tan adinerada asta en su muerte, la humildad nunca fue un sentimiento que formará parte de aquella mujer que ya reposaba bajo sus pies, pero lamentablemente la amo tanto y se embriagó en sus encantos, pero ahora solo lo embriagaba el amargo sabor de vino...

-Sabes... -Taehyung servía su vino en copa lentamente mientras sus labios continuaban secos, su voz sonaba áspera y tan lenta que podría arrullarte en un sueño profundamente triste...

-Eres una maldita perra caprichosa, moriste y aún no dejas de joderme....- Termino de servir su copa y la revolvió lentamente prestando total atención a el movimiento del vino..

- Me alejaste del amor de mi vida, del único que realmente lo fue...-

-Me alegra no ver tu maldito rostro manipulador, me alegra que esos insensibles labios no existan más para seducirme...- tomo aire lentamente y levanto la mirada, recargando se mejor en el piso.

-Pero.... ¿Por qué estoy tan jodido?, ¿Por qué estoy tan jodido si tú ya no estás?...-

-Todos piensan que acabe contigo... Pero los dos sabemos que prefiero estar jodido contigo que sin ti, da igual ¿no?, La diferencia es que ahora no está aquí. -

-Amor, ahora me llaman asesinó, yo no sería capaz de hacerle daño a mi maldita caprichosa, nunca te hice daño... Nadie logro conocerte tanto como yo... - Taehyung entre una lluvia de pensamientos se cuestióna si estaba condenado a sentir aquel amargo sabor, uno muy semejante a los labios rosados de su ex amada...

Necesitaba realmente ese sabor tóxico, aunque su piel se viera opaca y medio muerta, aunque su cabeza doliera al día siguiente, aunque olvidará hasta su propio nombre.

Rozo la copa entre sus labios intentando contener las ganas de probar aquel amargo sabor del vino tinto y por fin en mucho tiempo la fuerza de voluntad volvió...

Tiro la copa al suelo y acarició sus propios labios dándose cuenta del horrible estado en qué estaba...

Quería ver a su estrella...

-Ni siquiera la muerte pudo separarnos.- dijo antes de salir de aquel lamentable lugar.

Sus pasos insertos ya habían trazado un camino, necesitaba recuperarse, necesitaba salir de ese horrible agujero, por un momento visualizó la sonrisa de aquel ser tan lindo...

No paraba de avanzar a pesar del horrible balance de su cuerpo, sus ojos se cerraban rechazando el esfuerzo, sus manos acariciaban si cabellos constantemente, la gente a su alrededor lo miraba en lamentos, "Es tan joven" se limitaban a decir llendose asustado por su lamentable apariencia, nadie estaba dispuesto a ayudarlo...

Cuando sus pies se detuvieron frente a esa casa sus ojos volvieron a brillar, su corazón a latir y su cuerpo empezó a sentirse vivo...

Se atrevió a acercarse a tocar la puerta, pudo escuchar ruidos alegres provetenir de la cálida casa, era el hogar de su niña. Tocó la puerta de nuevo esperando alguna respuesta no la hubo a pesar de que lo hizo repetidas veces, decidió ser sensato e irse después de todo su brazo malo volvía a doler de nuevo, cuando volvió a tomar rumbo a las calles de la ahora fría noche la puerta se abrió...

La cuestión no fue esa, si no quien la abrió era su niña, su pequeña niña la cuál no había visto en un año...

¿Se acordará de él?, ¿Se asustara al verlo?, ¿Lo odiaría?...

No estaba para nada presentable, no estaba listo para darle la cara a aquella pequeña de seis años...

- Hola, S-senor, que quere?.-

No lo recordaba, la pequeña no la reconocía, pero aunque le doliera el alma, no podría hacer nada, estaba conforme con admirar aquella dulce voz y ver su linda carita aunque solo una vez...
Quería llorar, se sentía desfallecer pero aún así sonrió dulcemente...

-¿Esta tú tío Jin?, Pequeña. - Taehyung quería rozar sus cálidas mejillas con sus dedos, quería estrecharla en sus brazos, pero se limitaría a ver su dulce carita...

- El no tá, pero polemos esperalo, .-

Taehyung suspiro mientras asintió, ella era tan linda e idéntica a él, le sorprendía bastante, Observo dentro de la casa, miro el aviente totalmente hogareño perfecto para su princesa, había muchas juguetes regados por el lugar, suponía que la niña era una pequeña bolita de imperactividad.

-No deberías abrirle la puerta a extraños pequeña. - vio como la pequeña frunció su rostro achicando sus ojos, justo como solía hacerlo su madre...

-Tú no, ¿estaño?, estás la foto.- está vez el extrañado era él.

Se agacho a la altura de la pequeña observando su mirada llena de luz que tanto lo derretía, ella estaba tan bien sin él... No sabía cómo sentirse al respecto...

-¿Cuál foto linda?. -Pregunto dulcemente admirandola por qué probablemente está sería de las últimas veces en que se vieran, ni siquiera recordaba el dolor en su brazo o el frío en su pecho, todo estaba tan bien ahora en esos míseros segundos él se sentía con vida otra vez sin la necesidad del amargo sabor a alcohol..

La pequeña se retiró corriendo rezonando sus pasos, parecía muy contenta y eso lo ponía feliz a él...

Aspiro el frío viento con una sonrisa, aún más sobrio de lo que pudo haber estado estos últimos seis meses...

Decidió tomar asiento frente a la puerta de la casa para esperar a la pequeña, cuando escuchó sus pequeños pasos acercarse hacía él giro su rostro a la entrada encontrándose con la adorable pequeña extendiendo un marco con una foto...

Acaricio con sus pulgares aquel retrato añorando regresar a ese tiempo, era él sosteniendo a su pequeña hija y su esposa a su lado con su cara amargada de siempre, recuerda tan bien el hermoso milagro que esa niñita significó para él una persona tan destruida.

Su esposa era una alcoholica asquerosamente rica con problemas de atención, le gustaba que la tratarán como si fuera el centro del el universo y él fue un estúpido en enamorarse de ella, él solo era un chico universitario qué fue a una pasantía en la empresa de los padres de su en ese momento futura esposa él recuerda haberse topado con la mujer más materialista del mundo, pero de alguna manera su corazón latió añorando ser su acompañante deporvida, se casó con ella y a pesar de sus caprichos, infelidades y discusiones el la amaba intensamente y podría decirse que en los pocos segundo de sobriedad de su esposa ella correspondía sus sentimientos...

Todo tomo un rumbo distinto cuando una pequeña vida empezó a crecer en el vientre de su mujer materialista, todo mejoro en sobre manera y más cuando la pequeña nació él y su esposa quedaron completamente enamorados de esa pequeña bebé, todo era amor y felicidad, hasta que pasaron tres años y su esposa fue asesinada después de tener una discusión, había sido algo realmente estúpido tanto que él salio de casa junto a la bebé mientras ella se tranquilizara, cuando regreso había un cuchillo enterrado en su cuello...

Para su mala suerte el primer acusado fue él, eso lo devastó bastante, lo alejaron de su niña y la llevaron a casa de Kim Seokjin hermano de su difunta esposa, duro un año tras la rejas por falsas especulaciones de su cuñado, al no encontrarse pruebas fue liberado, pero después de varios estudios declarado nada apto para cuidar a su bebé, le rogó a Jin verla en repetidas ocasiones pero ninguna dio resultado...

Empezó a beber de ese horrible y costoso vino solo para volver a sentir la añorada calidez de su esposa, quería ahogar todo y morir de una vez, no resistía volver a su antíguo departamento, no cuando ahí fue dónde se marcó el fin de su felicidad, no cuando sabía que estaría solo en él..

A sus veinticinco años ya estaba harto de respirar, de mantenerse vivo, lo único que lo impulsaba era ver a su bebé cuando pasaba por aquella calle.

Siendo tan feliz... Feliz sin él....

Y a pesar de que al principio dolió decidió aceptarlo, mientras ella estuviera bien.

-Es una linda foto, ¿De donde la sacaste? - La pequeña intento tocar las mejillas de Taehyung, pero una persona inesperada interrumpió tan lindo recuentro.

- ¿Que haces tú aquí? - dijo Jin tomando rápidamente a la pequeña niña.

- S-solo quería verla...- Dijo Tae en un estado lamentable, no pudo resistir más el mar de lágrimas que lo asechaban, así que levantó su mirada llorosa para admirar a su hija por última vez.

SeokJin lo miro con desprecio, se sentía amenazado cada vez que miraba a Taehyung, no quería que le quitará a la pequeña bebé, amaba a esa niña ya no estaba dispuesto a perderla.

-SeokJin porfavor... Tú sabes cómo se siente no pode-...-

- Cállate. - interrumpió Jin, suspiro profundo y abrazo a la niña que ahora se encontraba totalmente asustada.

SeokJin jamás había podido tener hijos, así que cuando empezó a cuidar a su linda sobrina no pudo evitar tener ese sentimiento egoísta.

-No eres apto para cuidarla..-murmullo antes de tomar caminó hacia la casa.

-S-solo déjame verla, te juro que estaré apto cuando la vea, yo me recuperaré, porfavor Jin....- lloró Tae desesperado.

-No. -dijo serio sin siquiera verlo.

-SeokJin, Juro que no te la quitaré yo solo quiero verla crecer...-

-¡¡No Taehyung!!, Cierra la maldita boca y retirate, ella está muy bien sin ti.- Vio como la pequeña se aferraba a los brazos de Jin asustada, decidió que era mejor parar.

-E-es mi hija...- murmullo antes de verlo cerrar la puerta.

Solo lloró, estaba destruido, no tenía nada más que hacer ahí, así que levantó su cuerpo adolorido dirigiéndose de nuevo a ese solitario apartamento.

Estaban tan perdido en su dolor que no pudo notar los dos ojitos brillantes que le observaban por el gran ventanal...

-Papá...- llamo la pequeña esperando que el hombre diera la vuelta y la llevará con él, no lo hizo, no dio la vuelta....

Cuando llego a su departamento lo único que hizo fue desmayarse sin saber cuándo despertaría, pero esperaba que no fuera muy pronto, esperaba que no lo hiciera nunca.

Después de todo los años pasarían y el moriría sin volver a verla, sin volver a abrazarla, con la culpa que nunca le perteneció y el horrible sabor amargó a vino tinto...






Gracias por leer.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro