# 10.
[ Lunes a la noche ]
[ Martes ]
[ Unas horas más tarde ]
Una de sus clases se había cancelado y por ende, llegó a su casa mucho más temprano de la hora que le había dicho a Changbin.
No sabía que era pero tenía una sensación extraña, como un presentimiento de que algo malo iba a pasar. Pero lo estuvo ignorando durante todo el día porque no era de llevarse por sus instintos.
Abrió la puerta y se sorprendió al no ver a su novio en el living. Le restó importancia pensando en que tal vez ya se fueron o al final no fueron a su casa.
Se sacó su campera, la colgó en el perchero junto a su mochila. Fue hacía la cocina, tomó un poco de agua y luego se fue hacía su habitación.
No obstante, oyó un ruido extraño y pensó que escuchó mal, pero el ruido se oía más claro cuando se acercaba hacía la habitación.
Eran gemidos.
No quería pensar lo peor, quería creer que solo era su novio sastifaciendose a sí mismo, pero el sonido que se genera con el choque de pieles también estaba presente.
Cuando llegó a la puerta se frenó. Los sonidos se escuchan con claridad.
Sabia que podía encontrarse detrás de esa puerta, y sabía que eso podría destruirlo, a pesar de ello, quería enfrentarlo y aunque no se sentia del todo preparado no podía hacer oídos sordos.
Abrió la puerta de golpe, encontrándose con una situación que los desmorona. Sus ojos se llenan de lágrimas y su pecho se aprieta.
Su novio, su amado estaba en la cama que compartían teniendo relaciones con otro, siéndole infiel.
─¡Jisung! ─exclama sorprendido Seo, sacándose de encima al chico.
Han se queda paralizado, sin poder moverse ni decir nada, viendo la situación sin creerlo.
Quiere llorar, pero las lagrimas no salen.
Changbin rápidamente se acerca hacía él, agarrando un pantalón y poniéndoselo a las apuradas.
Jisung reacciona cuando ve que su novio quiere acercarse a él y sale corriendo para el living.
─¡Jisung, espera! ─grita el mayor─. No es lo que vos pensas, perdón, él....
─¡Cállate! No te quiero escuchar, ¡mentiroso!
Jisung se detiene, y se voltea para encararlo, porque la tristeza que tuvo hace unos segundos ahora se transformo en bronca, en irá y enojo.
─No es lo que vos pensas, amor, vos...
─¡Estás garchando con otro! ¡En la cama que compartimos!
─Pero, Jisun...
─¡Cállate! No te quiero escuchar, sos una mierda, y una rata, no sos capaz ni de pagarle un telo.
─¿Podemos hablar más tranquilos?
─¡No, no podemos! Te detesto.
Se da vuelta y agarra su mochila junto a su campera para macharse. Changbin no lo sigue, lo deja ir simplemente.
• • •
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro