Capítulo 25
Narra Betzabeth.
- Bien, señorita, puede seguir relatando los hechos.
Tomé agua y suspire para luego seguir hablando.
- Yo subí a esa motocicleta... Él manejó hasta cierto descampado y prácticamente me obligó a bajarme.
- ¡Está mintiendo! -Casi grita- Ella se bajó sola y lo que pasó fue consentido.
- Señor Londoño -Grito la jueza- Callese. Ya va a declarar usted. Ahora esta declarando la menor. -La jueza me miró- Siga, señorita.
Suspire.
- Emm... Bien... Comenzó a tocarme y destruyó mi uniforme de colegio. Yo trataba de soltarme, lo arañaba, empujaba pero no podia alejarlo. Gritaba, pedía ayuda pero él me golpeaba y decía que nadie me podría ayudar.
Empecé a llorar. Tomé agua.
- Después de que paso todo eso y me haya violado sin ninguna protección o algo así, se fue.
- O sea que después de la violación, se fue. -Asentí- ¿Tiene pruebas del hecho?
- Mi madre las tiene...
La señalé.
- Muy bien señorita. Puede volver a su lugar. Señor Aaron Londoño, pase al frente.
Bajé y fui con mi mamá. Él fue adelante y suspiró.
- Puede relatar como fueron los hechos.
Abracé a mi mamá.
- Bien. Lo haré breve. Ella me pidio que la pase a buscar, ella pidió que la lleve al descampado y que yo le quite la virginidad ahi. Listo, ya esta.
Mi papá se levantó y casi corrió para agarrarlo del cuello.
- ¡Eres un maldito mentiroso!
Lo sacaron de ahí y lo dejaron nuevamente al lado mío.
- Necesito pruebas de ello.
Mi mamá me dio las pruebas. Una era el vídeo que ella misma grabó y los exámenes que comprueban mi embarazo.
- ¿Que son?
Preguntó la jueza.
- El sobre blanco son pruebas médicas de mis daños físicos y algo mas... El otro se que son vídeos.
Me quede parada delante de la jueza.
- Bien... Leeré primero los papeles.
Los sacó y leyó.
- Hematomas en zona lumbar, lesión en ojo izquierdo, zona v dañada, sangrado y dolores corporales.
Sacó otro papel.
- Esto es de hace casi una semana... Feto muy pequeño, gestación semana y media...
La jueza miró a Aaron.
- Ah, encima la dejó embarazada.
Su rostro cambio por completo.
- Si, y su madre me cortó los genitales.
- Ahi esta el video de cómo paso -Dijo mi mamá- Tengo la prueba...
- ¿Usted le corto el miembro a el tío de su hija?
Mi mamá asintió. La jueza sonrió y aplaudió.
- La felicito. Eso hay que hacerle a todos los violadores.
- ¡Que no la violé!
- Pongan los videos, por favor.
Pusieron los videos en un proyector. Las cámaras del colegio y de la calle captaron como ha sido toda la situación. Incluso se ve claramente y se escucha como yo pedía ayuda y trataba de soltarme.
Luego lo que hizo mamá con Aaron. Es mas, él como pruebas mostró las fotos de sus genitales cortados y el informe médico. El cual dice que no puede tener ninguna actividad que incluya eso. Si lo hace, puede perderlo por completo.
Papá también habló. Contó como se enteró y tal. Obviamente mi mamá tambien tuvo que hacerlo.
- Señorita ¿Que hará con el bebé?
Preguntó la jueza.
- Quiero abortarlo si es posible.
- ¿Razones?
- Me violaron y no quiero producto de ello. No quiero ser madre en este momento y mucho menos estar con un bebé que no se si es mi hijo o mi primo.
Asintió.
- ¿Algo mas que agregar?
Silencio.
- Bien...
- De pie para el veredicto final...
Todos nos levantamos.
- De acuerdo con los testigos, víctima y pruebas del hecho, esta causa es caratulada violación ilícita...
Suspire.
- Se declara al acusado Aaron Jeremías Londoño, culpable de todos los hechos. Conllevará una condena de 45 años de prisión, penal de máxima seguridad en la ciudad de Medellin, Colombia. En cuanto a la víctima serán pagados todos los gastos de su decisión.
La jueza hizo sonar el martillo, o como sea que se diga eso.
Llegaron policías y le pusieron las esposas a Aaron. Me miraba con odio.
- Ojalá que vuelvan a violarte, hija de puta.
Me acerque y golpee sus genitales, a lo que gimió fuerte.
- ¡Aarg! Perra.
Los guardias se lo llevaron. Sentí a alguien abrazarme, era mi abuela.
- Tranquila... Ya no volverá a herirte.
- ¿No sabian de esto?
Negaron.
- Pensamos que habia sido por robo u otras causas que sabíamos que tenía. Pero no esto.
Suspire. La jueza se acercó a mi.
- ¿Te parece bien la condena?
Asentí.
- Gracias... Jueza.
- Con estos casos soy muy justa. Y se que lo pasaste mal y sigues asi. Con mas razón lo condene de esa forma. Y por cierto, tu mamá es muy valiente al hacer eso.
Sonreí.
- Espero que sigas bien y... Puedas hacer lo que dijiste.
- Si... Ire al médico.
- Los gastos estarán pagados para todo. Por un año, que olvidé decirlo.
La jueza sonrió.
- En todo caso, volveran a llamarte por esto. Es solo un aviso.
- Esta bien..
- Adios, que tengan buenos dias...
Nos despedimos de ella. Miré a mi papá, estaba llorando en una esquina del salón. Me alejé de todos y fui con él.
- Papá...
Lo abrace con fuerza.
- Que situación de mierda... -Suspiró- Tener que ver como se llevan a tu hermano preso...
- Papá eso es...
- Ya se... Pero al fin y al cabo es mi hermano y duele que haya pasado esto. Se que estás mal y opté por defenderte... ¿Que harías si Matt hace algo asi con tu hija? ¿A quien defiendes?
- A mi hija...
- Y si... Lo mismo me pasa a mi... Pero no importa, yo estoy bien -Sonrió- Sólo quiero verte feliz.
Sonreí y volví a abrazarlo.
- Vamos a casa... Ya todo se terminó...
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