↝ Capítulo cinco.
"Me tocó ver cosas que me dolían y hacer como si no me importaban, y eso me dolió el doble"
》•• ━━━━━ ❥❥❥ ━━━━━ ••《
Los chicos salieron del bar para ir caminado hacia el trailer de la rubia, y así poder limpiar esas heridas que el traía.
—¡Mierda!— murmuró Betty viendo como los Bulldogs aún no se iban del sur.
—¿Que pasa?— pregunto al verla dejar de caminar.
—Esos imbeciles todavía no se fueron— se quejó viendo que el equipo de fútbol la vio y comenzó a caminar hacia ellos —Demonios, vienen para acá, date vuelta— ordenó viéndolo.
—No servirá que me dé vuelta— negó este y la rubia suspiro teniendo una idea en mente.
—Confía— murmuró acercándose a él
—Porque debería con...— este no termino de hablar cuando la rubia se acercó a él retirando su gorro para sostenerlo en la mano y tomarlo del cuello para besarlo.
Los Bulldogs que caminaban hacia ella vieron la escena, Betty había dejado a Jughead de espalda, de modo que ellos solo podían ver que era una serpiente, no sabían quien era. Archie bufo rodando los ojos.
Jughead se sorprendió al principio pero después siguió el beso, posó sus manos en la cintura de la rubia mientras la apegaba más a él. Estos sintieron los pasos del equipo alejarse de ellos pero aún así no se separaron.
Cuando sus pulmones rogaron por un poco de aire estos se separaron levemente mientras recuperaban el aliento.
Betty rio levemente para dejar el gorro de el sobre su pecho, este sonriendo lo tomó para volver a colocárselo.
—Buena jugada— se rio colocándose nuevamente el gorro.
—No te ilusiones— bromeó esta guiñándole un ojo para retomar su camino hacia el trailer, este río para apresurar y alcanzarla.
(...)
—¿Puedes quedarte quieto?— pidió limpiando las heridas de su rostro.
—Si, lo mismo digo contigo—dijo el ya que está estaba sobre su regazo para poder desinfectar mejor.
—Piensa en la biblia Jones— se rio Betty pasando un algodón sobre una de las últimas heridas.
—Créeme que no estoy pesando en eso— negó este divertido mientras acariciaba la cintura de ella.
—Mantén tus pensamientos sucios a raya querido— se burlo para levantarse y caminar hacia el botiquín —Sácate la remera— pidió mientras dejaba un algodón y buscaba uno nuevo.
—Oh, claro— se rio este para retirársela y dejándola a un lado. Betty río mientras negaba y ponía agua oxigenada en un algodón.
Esta volvió a darse la vuelta y hacer una mueca viendo la herida de su abdomen.
—Es profunda, ¿Te lo hicieron con navaja?— lo miro y este asintió.
Betty se puso de cuchillas para poder desinfectar la herida.
—Ah no, pero si tú quieres torturarme— negó este soltando un gruñido. La rubia rio por lo bajo siguiendo con su trabajo.
—Te callas y te aguantas— este suspiro tirando su cabeza hacia atrás, aburrido
—Oye, tendrás que elegir— esta levantó su cabeza para mirarlo y este bajo la suya para mirarla.
—¿El que?— frunció el ceño.
—La herida es profunda, o vas a un hospital o te suturó aquí— hablo levantándose.
—¿Que? ¿Tu?— levantó una ceja.
—Tranquilo, ya lo he hecho, conmigo y con Toni... y con Sweet Pea— agregó ladeando su cabeza.
—Bien, hazlo— acepto.
Esta sonrió para colocar el hilo en la aguja y acercarse a él.
—No tengo anestesia porque no tengo una enfermería aquí, te golpeo y te dejo inconsciente?— propuso sonriendo.
—Solo hazlo— pidió impaciente.
Esta se encogió de hombros para acercarse a él y comenzar a cerrar la herida mientras este hacía muecas de dolor.
Al cabo de cuatro puntos al rededor de toda la herida está se levantó para ponerle un parche arriba de esta.
—Listo— aseguró mirándolo.
—Gracias— este se levantó sin colocarse la remera y acercarse a Betty quien estaba de espaldas guardando todo.
Este la rodeo por la cintura mientras comenzaba a besarle el cuello y ella se inclinaba hacia atrás pero sin dejar de guardar las cosas.
Cuando termino de hacerlo se dio vuelta seria pero antes de que pueda decir algo, este capturo sus labios y está no dudo en seguir el ritmo de el, dando pasos hacia atrás.
—Jug...— murmuró sin dejar de besarlo.
—Sh, calla— susurro este y ella le hizo caso rodeándolo con sus brazos.
El toco el sofá para sentarse en el y dejar que la rubia pasara una pierna a cada lado de las suyas.
—¿Dos veces en un día?— murmuró ella riéndose.
—No sería la primera vez— respondió el tirando del labio de la rubia.
Jughead aún besándola bajo sus manos hacia la blusa negra de encaje que esta usaba bajo la chaqueta, se la retiró lanzándola por ahí.
Este sonrió coqueto para besar su cuello e ir bajando hacia sus pechos, esta tiraba su cabeza hacia atrás soltando suspiros.
Con sus pulgares fue recorriendo las curvas de ella para llegar hacia su short, desprenderlo y sacárselo.
Este pasó su mano por encima de las bragas de Betty para sonreír a medias al verla cerrar sus ojos y apretar su labio inferior.
—Estas mojada nena— susurro a su oído estimulándola aún más.
Esta suspiro para sentir como el le sacaba la última prenda interior y pasar sus manos por la cintura de ella.
Volvió a suspirar dando a entender que quería más.
—¿Que quieres nena?— preguntado observado su cuerpo.
—A..ti— murmuro mirándolo a los ojos viendo ese color negro de lujuria en ambos.
El sonrió, sabiendo el poder que tenía sobre ella, que con tan solo hablarle o susurrarle algo ella caía rendida a sus pies, y a Betty le encantaba eso, porque ella también podía volverlo loco todo lo que quisiera.
Bajó sus manos hasta las piernas de la rubia, le acarició el muslo hasta llegar a su feminidad donde paso sus dedos para después escuchar un gemido de ella al entrar con un dedo.
Este iba aumentando su movimiento y agregando dedos hasta que ella se corrió gritando su nombre.
Luego de pasar lo que quedaba de la tarde entre suspiros y jadeos, ambos quedaron dormidos en el sofá de la rubia, abrazados, algo raro ya que no eran pareja y ninguno sentía celos por el otro al verlo con diferentes personas, bueno, no que lo demuestren, pero ellos sabían que desde un principio para el otro eran especiales, solo que en ellos quedaba decidir de que forma lo eran.
》•• ━━━━━ ❥❥❥ ━━━━━ ••《
Buenos días jaja.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro