Capítulo 37: Mal comportamiento
Los días habían transcurrido con una normalidad y tranquilidad que sólo ponía más nerviosos a todos, especialmente a WooMi. JiHyo y JungKook regresarían a Seúl como habían acordado, ambos habían estado en constante comunicación con sus abogados y una vez en la ciudad se reunirían con ellos para aclarar las condiciones del divorcio, pues al ser un matrimonio las cosas debían quedar a la mitad, también debía verse cuidadosamente las visitas de JaeYoon con ambos padres. JungKook había pasado por el restaurante para despedirse de todos, JaeYoon se despidió de SongHa llamándola "hermanita", desconocía que sus padres se divorciarían, JiHyo y JungKook habían hablado de eso y como se lo explicarían al niño.
La señora Jung le recordó una vez más a JiHyo que siguiera pensando con claridad las cosas y no se dejara llevar de nuevo sólo por unos minutos de pasión, a la misma WooMi le sorprendió ver que intercambiaron número.
Gahyeon y Momo se despidieron de JungKook esperando que todo saliera bien para él. WooMi lo esperó afuera del local queriendo tener cierta privacidad, todavía era incómodo tener a JiHyo cerca, no eran las mejores amigas pero no existía guerra entre ellas. WooMi abrazó el cuello de aquel pelinegro y éste la levantó del suelo rodeando su cintura.
—No me extrañes mucho, será rápido—prometió.
—No hagas más promesas—reprochó.
— ¿Por qué la sobria WooMi no me deja ser romántico?—bromeó sacándole una risita. Fue ella que acarició sus mejillas depositando un corto beso en sus labios, JungKook seguía sin bajarla al suelo.
—Si quieres ser romántico puedes besarme ahora—propuso.
El chico no lo pensó, no fue un beso largo pero si preciso además de dulce. Algunas risitas se escaparon entre los labios cuando JungKook se rehusaba a dejarla en el suelo por unos segundos. Fue difícil para ella tener que verlo subir al auto para irse de nuevo, quería decírse así misma que esa vez las cosas serían diferentes pero...¿Lo serían? ¿Por qué las inseguridades la estaban atacando así?
El auto se alejó dejando sólo algo de polvo, WooMi respiró profundo teniendo sus manos en los hombros de su hija. Su madre le sonrió un poco rodeando sus hombros brindándole algo de apoyo.
●|●|●
La noche había caído en el pueblo, el restaurante había cerrado temprano al no tener muchos clientes, la señora Jung estaba cansada y quería dormir temprano. SongHa estaba sentada en las escaleras sintiendo las ganas de abrazar a JaeYoon que solía andar a su lado todo el tiempo, pero al recordar que Cooky estaba con él tuvo algo de consuelo. La puerta se abrió dejando ver un chico alto, de espalda ancha y cabello oscuro.
— ¡Appa!—SongHa salió corriendo hacia él.
—Aigoo, mi princesa—la llenó de besos abrazándola fuertemente.
Las chicas no esperaban esa "sorpresa", se miraron nerviosas pero la señora Jung mantuvo la calma.
— ¿Qué haces aquí, muchacho? ¿No dijiste que serían dos meses?
WooMi no quería salir de la cocina, su corazón latía con fuerza, estaba a punto de tener un ataque de pánico. Inconscientemente recordaba lo sucedido hace tres años en la discusión que tuvieron, su celular estaba en el bolsillo de su delantal, escuchó las voces de los demás aprovechando de escribir un mensaje.
WooMi:
EunWoo acaba de llegar, no me llames ni me escribas. Yo te avisaré.
Borró los registros de llamada junto a los mensajes.
—No pude ayudar mucho en el caso, mis superiores lo pasaron a otro grupo—explicó con una sonrisa—Estaba ansioso de volver con mi princesa—hizo cosquillas a SongHa notando un detalle— ¿Dónde está Cooky?
WooMi salió de la cocina situándose junto a Gahyeon. La mirada que le dio EunWoo le hizo temblar, él sabía, ya lo sabía todo, estaba segura de ello. ¿Qué derecho tenía a reclamarle cuando hacía lo mismo?
—Ya no está, le di vacaciones.
— ¿Enserio?—sonrió besando su mejilla dejándola en el suelo.
—Ah, EunWoo, ella es Lee Gahyeon—presentó WooMi intentando desaparecer su repentino miedo—Trabajó conmigo en Seúl, vino a pasar sus vacaciones aquí, está quedándose conmigo.
—Creo que te he visto en el spa.
—Sí, señor—hizo una reverencia.
—Bueno, espero que no te moleste, pero esta noche quisiera estar con mi esposa—sonrió con cierta malicia que supo disfrazar—Tenemos mucho de que hablar, WooMi.
—Claro, ahh...—miró a su madre— ¿Puede Gahyeon quedarse contigo esta noche?
La señora Jung pensó en una táctica. No iba a dejar que SongHa estuviera allí.
—Haremos una pijama, ¿Qué te parece SongHa?—propuso—Haremos palomitas de maíz.
— ¡Yo quiero!—dejó que su abuela la cargara.
—Momo también debería venir.
Si EunWoo armaba un escándalo saldrían corriendo a ayudar a WooMi sin pensarlo.
●|●|●
EunWoo dejó sus dos maletas en la habitación, WooMi había escuchado a su madre decir que estarían alertas de cualquier ruido y que si era necesario que gritara. La chica respiró profundo mirando a su esposo desde el marco de la puerta.
—No me llamaste para decir que vendrías.
—Me quedé sin batería en el camino—mintió—Mis padres preguntan cuando irán a verlos.
— ¿Estuviste con tus padres?—fingió no saber nada.
— ¿Dónde más podía quedarme?—se sentó a orillas de la cama quitándose los zapatos. WooMi se encontró con su mirada y él sonrió de una forma que no le gustó—¿Dónde está el peluche de SongHa?
— ¿Qué?
Aquella pregunta la desorientó.
—Es raro que no lo tenga.
—Los niños crecen—se encogió de hombros. EunWoo la miró de pies a cabeza esperando notar algo diferente, recordó las fotos que Rocky le envió junto al vídeo, había visto ese vídeo varias veces sin creer que ella le hubiera dicho a ese idiota que lo amaba.
— Rocky me dijo que te vio en el pueblo con SongHa.
WooMi se enderezó cruzándose de brazos.
—Sí, estábamos con Gahyeon—aclaró su garganta— ¿Quieres que te sirva algo de comer?
—Me encantaría.
WooMi salió de la habitación dirigiéndose a la cocina. Respiró profundo varias veces manteniendo la calma, tenía un gran debate sobre cómo pedirle el divorcio, sabía que una vez que lo dijera las cosas se pondrían peor de lo que estaban. ¿Y si en vez de lastimar a JungKook llegaba a lastimarla a ella? Dio un respingo cuando unas manos se posaron sobre sus hombros.
—Tranquila—escuchó su risita— ¿Hiciste algo malo en este tiempo que estás tan tensa?—susurró en su oreja.
—No.
—WooMi—una de sus manos fue a su cuello acariciando la piel expuesta—Dijimos que seríamos honestos—entonces sus dedos hicieron una ligera presión en su cuello. La castaña tragó con dificultad, EunWoo respiraba en su oreja presionándola contra el mesón de la cocina— ¿No quieres contarme sobre tu nueva amistad?
—No sé de que estás...
—Sabes de que estoy hablando—apretó el agarre en su cuello. WooMi llevó sus manos a su cuello intentando liberarse, EunWoo estaba ahorcándola—JiHyo y tú hicieron amistad después de todo, yo creía que la odiabas por acostarse conmigo, ¡Oh!—la chica golpeó su mano intentando respirar—No olvidemos esa frase que le dijiste a JungKook—escucharlo decir su nombre por primera vez fue desesperante—Te amo.
—Eun...Woo—golpeó sus manos. Él la soltó tomando su brazo con fuerza quedando frente a frente, WooMi tocó su cuello viéndolo con miedo—Si me golpeas...las chicas vendrán...—advirtió.
—No te golpearé si me respondes con la verdad.
—Ya sabes la verdad. No tienes derecho alguno de reclamarme—escupió viendo sus ojos oscuros—Fuiste infiel y seguiste siéndolo incluso cuando JungKook y yo dejamos de vernos, deja de ser un maldito hipócrita.
El impacto en su mejilla llegó, llevó su mano a la zona del golpe mirando a EunWoo con ira. WooMi no sabía como se había enterado de esos detalles pero sin duda alguna alguien tuvo que decirle.
— Vuelves a golpearme y seré yo la que no responda.
EunWoo levantó una de sus cejas jalando su cabello que sin mucho esfuerzo hizo que el moño que tenía se arruinara. La cabeza de WooMi se inclinó hacia atrás y ella jadeó de dolor.
—Vaya, vaya, incluso te has cortado el cabello—sonrió con burla— Te vuelves loca por ese imbécil, ¿No?—WooMi volvió a quejarse cuando él jaló más—Intenta golpearme.
La castaña intentó rasguñar su rostro sin lograr mucho, EunWoo la empujó al suelo y WooMi se golpeó la frente viendo estrellas por unos segundos, el golpe la dejó aturdida sin saber por unos segundos donde estaba. EunWoo revisó en los bolsillos de ella tomando su teléfono, al pedir una clave se agachó a su lado.
—Dime la contraseña.
WooMi intentaba incorporarse sin mucha fuerza, todo le daba vueltas y escuchaba a lo lejos. EunWoo rodó los ojos teniendo paciencia, la castaña escribió la clave y entre sus contactos estaba lo que buscaba.
— ¿Qué harás?
—Vas a llamar a tu amante para decirle que irás a Seúl—en su bolsillo buscó su teléfono donde tenía la dirección escrita—Le dirás que se verán allí mañana por la mañana.
—No haré eso.
—Te conviene hacerlo.
—No.
EunWoo sonrió inclinándose a ella.
— ¿Quieres que SongHa permanezca a aquí o quieres que te deje inconsciente y me la lleve?—se sintió superior viendo el miedo en los ojos de su esposa.
—Mi...mi madre no dejaría que tú...
—Ya disparé una vez por error, la segunda vez no será un error exactamente—amenazó—Puedo bajar y dispararle a las demás para llevarme a SongHa—tomó su barbilla lastimándola—Llama a tu amante y haz lo que te digo.
WooMi tragó con dificultad obedeciendo, acercó el teléfono a su oreja pero EunWoo lo colocó el alta voz. Casi al instante JungKook respondió.
— ¿Estás bien?
WooMi intercambió una mirada con su esposo. Los dos estaban sentados en el suelo, la castaña sentía que algo se deslizaba por su mejilla, un hilo de sangre caía desde su frente y otro aparecía debido al golpe contra el suelo.
—Sí—parpadeó varias veces. Todo estaba dando vueltas de nuevo—Necesito que consigas un papel y un lápiz, iré a Seúl a primera hora de la mañana.
— ¿Qué? ¿EunWoo está ahí?
—No, está...dándose un baño. Necesito que tomes nota de esta dirección, es muy urgente, JungKook.
—De acuerdo.
EunWoo permitió que diera la dirección y no alcanzó a despedirse, colgó la llamada en el instante que WooMi se había desmayado.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro