Capítulo 10: Amantes
Canción del capítulo: G-Eazy ft. Halsey - Him & I
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JungKook despertó con la alarma que había colocado en su teléfono, restregó sus ojos viendo que eran las seis de la mañana, debían volver temprano por petición de WooMi, la castaña dormía profundamente tan desnuda como él debajo de las sábanas, JungKook la abrazó por detrás besando su cuello y escondiendo su rostro allí. WooMi suspiró dormida todavía, habían hecho el amor repetidas veces en la mayor parte de la noche hasta que sus cuerpos cedieron al sueño, habían visto las luciérnagas y JungKook la había grabado, había grabado la expresión sorprendida de WooMi, parecía una niña viendo aquellos pequeños animales iluminarse.
—Woo, debes despertar—susurró cerca de su oído—Debemos irnos.
La chica fue despertando poco a poco deseando quedarse allí, se sentía cansada y JungKook igual. Habían gastado mucha energía durante la noche, desde que llegaron a esa cabaña para ser exactos. Comenzaron a vestirse en silencio, Woo esperó en el auto mientras JungKook entregaba las llaves de la cabaña en recepción. El día iniciaba con el sol en el cielo pero los ánimos de la pareja no estaban acorde al clima.
JungKook condujo por la autopista de nuevo viendo a WooMi con la cabeza recostada de la ventana y sus ojos cerrados, de nuevo se había quedado dormida. El chico la cubrió con su saco colocando el aire acondicionado no muy alto, suspiró en medio del silencio esperando que la situación de ambos mejorara.
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EunWoo se servía algo de café con su ropa de dormir todavía, había pedido el día libre en el trabajo, estaba de mal humor ese día. Su madre entró a la cocina dándole los buenos días, SongHa apareció ya vestida para la guardería.
—Buenos días, princesa—EunWoo cargó a la niña besando su mejilla— ¿Dormiste bien?—ella asintió—Tienes que responder, SongHa.
—Omma.
—Tu madre no ha llegado todavía.
— ¿Le has escrito?—la señora Cha había guardado algo de merendar para la pequeña en su mochila rosada. SongHa tenía una cinta en su cabeza con su cabello suelto, con sus ojos miraba alrededor buscando a su madre extrañada de no verla desde ayer por la mañana.
—No, ya la llamaré—dejó a SongHa en el suelo—Se buena niña, ¿De acuerdo?
—Dile adiós a tu padre, SongHa.
La niña sólo movió su manito despidiéndose. Unos cortos minutos después fue que WooMi entró por la puerta con cara de pocos amigos. EunWoo dejó la taza en el mesón acercándose para verla, la chica traía su cabello suelto y despeinado.
— ¿En dónde pasaste la noche? Parece que no dormiste nada.
— En casa de una amiga—miró alrededor.
—SongHa acaba de irse con mi madre, le pedí a mamá que pasara unos días aquí, así podrá ayudarte con la niña.
—Está bien—WooMi no tenía ganas de discutir. Quería dormir. EunWoo la hubiera dejado ir pero tomó su brazo notando algo en su cuello, era una marca, era...
— ¿Qué demonios es eso?
— ¿Qué te pasa?—se soltó.
—Tienes una marca en tu cuello, luce como un moretón—volvió a tomarla del brazo— ¿Dónde pasaste la noche, WooMi?
Para entonces el sueño había desaparecido. JungKook no solía dejar marcas por eso mismo y cuando EunWoo las dejaba en ella el sexo quedaba para otro día, tanto a JungKook como a WooMi les molestaba esas marcas en el otro sino eran provocadas por ellos mismos.
—Ya te dije que en casa de una amiga—se soltó molesta—Ese moretón es reciente, te dije que me había golpeado con unas cajas en el trabajo—no sabía que inventar—Se nota que me pones mucha atención.
Se apresuró en subir a la habitación siendo seguida de él. EunWoo no era idiota.
— Si pasaste la noche en casa de tu amiga dime quien era.
"Mierda"
— ¿Ahora debo darte explicaciones de lo que hago?—volteó a verlo encarándolo.
El chico rubio avanzó peligrosamente, la posibilidad de lo que estaba pensando comenzó a hervirle la sangre.
— No veo que te hayas llevado ropa para dormir allá—se cruzó de brazos mirando aquella marca en su cuello, entre su cuello y su hombro—La posición de esa marca es poco probable que sea de una caja, ¿Dónde demonios estuviste ayer, WooMi?
— Ya te lo dije...
—Seamos honestos, ¿Quieres? No somos niños.
Su teléfono vibró con un mensaje, la castaña lo tomó encontrando un mensaje de...
— ¡¿Qué demonios te pasa?!—intentó recuperar su teléfono de las manos de su esposo. EunWoo la empujó a la cama revisando aquel celular— ¡Ya! ¡EunWoo!—golpeó su pecho.
— ¿Dónde está? ¿Quién es?—exigió saber. Woo dio un salto tomando su teléfono— ¡¿Dónde está?!—la chica se asustó cuando él tomó su cuello mirándola con ojos oscuros, EunWoo estaba fuera de sí.
—Eun...
— Me estás engañando—la empujó a la cama de nuevo—No puedo creer que hagas esto a nuestra familia.
—Estás loco, eres un maldito loco—escupió ella. Su corazón se agitó de miedo cuando él tomó su rostro con una de sus manos lastimándola, estaba asustada.
—Dímelo, dime la verdad mirándome a los ojos.
WooMi mantuvo la mirada sin decir nada. Estaba asustada, estaba paralizada, EunWoo estaba dejando ver un lado que no conocía, todos tenían su lado oscuro pero ella no esperó ver el suyo.
—No estoy mintiendo.
El chico la soltó chasqueando la lengua, lo próximo que WooMi sintió fue el golpe en su mejilla, el impacto la dejó aturdida. Tocó el lugar del golpe conteniendo las lágrimas cuando al tocar su labio encontró dos gotitas de sangre.
— Dime quien es—al escuchar un clic se levantó de inmediato. La adrenalina apareció cuando EunWoo sostenía su arma, ésta no tenía el seguro puesto, se lo había quitado.
— ¿Vas a asesinarme? Anda, dispárame, dejarás a tu hija sin su madre y jamás sabrás con quien me acosté—sonrió tocando su labio inferior—Estuve con otro hombre, follamos toda la noche, lo hicimos toda la tarde y él si sabe hacerme sentir mujer, es mucho más hombre de lo que tú puedes ser—Se acercó burlándose—Él si me escucha, si se preocupa por mí e incluso por SongHa, ¡¿Qué vas a hacer ahora?!
EunWoo la tomó del cabello, WooMi lo golpeó mordiendo su brazo, forcejearon con el arma, ella para hacer que la soltara y él para intimidarla pero como era de esperarse.
El disparo se escuchó.
La bala se introdujo en uno de los dos, WooMi y EunWoo se quedaron inmóviles viéndose aterrados a los ojos sin saber que habían hecho, ya era muy tarde para arrepentirse.
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— ¿No irás a trabajar?—preguntó JiHyo cuando JungKook salió del baño con una toalla en su cintura.
—Después del mediodía.
—Se supone que hablaríamos como familia...
—Y tuve que quedarme por cosas de trabajo—ni siquiera la miró. Tomó la ropa formal para el trabajo, JiHyo lo miró sospechando, algo no estaba bien, su sexto sentido se lo estaba advirtiendo—Esta noche hablaremos—fue lo que dijo prefiriendo vestirse en el baño para no tener que verla. JiHyo miró el teléfono de su esposo en la peinadora, se levantó tomándolo sin dudarlo.
La contraseña fue simple de adivinar pues era la fecha de nacimiento de JaeYoon, al entrar revisó los mensajes y las llamadas, no había nada raro, cuando entró a la galería de fotos encontró el vídeo.
Una chica de cabello castaño y largo vestía con sólo la camisa de su esposo, JungKook le hablaba preguntándole por las luciérnagas, la chica emocionada respondía pero JiHyo no podía escuchar nada. Sus manos apretaron el teléfono, JungKook salió vestido del baño arrebatándole el teléfono más que molesto.
— ¿Desde cuándo revisas mis cosas?
— ¿Quién es ella?—quiso saber.
— ¿Quién?
— ¡No me veas la cara de estúpida, JungKook!—levantó la voz—Estás engañándome, maldito miserable—golpeó su pecho—Por eso querías el divorcio.
JungKook tomó sus muñecas sentándola en la cama. El chico no iba a negárselo, sería mejor que lo supiera desde ya.
—Sí, estoy engañándote desde hace seis meses, la chica que viste en el vídeo es la mujer que me trae loco por ella y por la que suspiro cada noche—la soltó retrocediendo. JiHyo estaba roja de la ira— ¿Ahora me darás el divorcio?
Sonrió con malicia levantándose.
—Me alegra que te diviertas con ella pero no eres el único en tener diversión con alguien más.
— ¿Qué?
—Estoy engañándote desde hace seis meses también, JungKook—se echó a reír—¿Ahora quién ríe más?
— Estás loca.
— ¿Quieres un nombre? Se llama Cha EunWoo, es policía, detective específicamente—JungKook palideció. Debía ser una maldita broma, aquella discusión fue interrumpida cuando el teléfono de JiHyo recibió una llamada, ella no vio quien era pero respondió.
— ¿Qué?—JungKook vio como su esposa cambiaba su expresión a una asustada— ¿Qué hiciste?
Intenté hacer un poco realista la reacción de EunWoo, les recuerdo que esto es ficción, se que los personajes en la realidad no son así, no intento dañar la imagen de nadie.
Lo repito porque a algunos se les puede olvidar.
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