-- Como ya sabes quién soy, .... Te presento a Taiki, .... Ambos somos los organizadores de tu espectáculo aquí en Delhi, .... Y como sabrás, hay mucha expectación en la ciudad por tu estilo de música fusión, .... Todas las entradas se venderán por adelantado, .... Hemos reservado un hotel para ti y tu compañía, .... Para que puedan estar a gusto en sus ensayos, pruebas y demás, .... Dime, ¿Eso esta bien para ti? _ Hablo Endimion, mientras caminaban por el aeropuerto.

-- Está muy bien, .... Muchas gracias por todo lo que están haciendo _ Respondió Darien.

-- Dime ¿Te gustaría ir a algún lugar o hacer algo? _ Pregunto Taiki, mientras se giraban en dirección contraria a donde se encontraba escondida Serena.

La rubia al ver que su ex novio, estaba cerca se fue hacia una librería y se escondió detrás de un libro.

Pero con lo que no contaba era que Darien y los organizadores, pasarían delante de la librería.

Muy nerviosa, bajo un poco el libro para observar al morocho.

-- Darien, puedes llamarme a mi teléfono móvil, siempre que sea necesario, .... O que se te ofrezca algo _ Dijo Taiki.

-- Te aseguro que todo saldrá muy bien Darien, .... Los conciertos que darás en la India, serán simplemente un éxito rotundo _ Demando Endimion.

El cantante asintió en silencio, para luego marcharse.

Serena que había escuchado todo, no sabia que hacer; su mente y sus sentimientos estaban en un completo caos, ya que, si bien había empezado a querer a Seiya, ella muy en el fondo aun amaba a Darien.

Observo melancólica el lugar por donde había estado antes su amado Darien unos segundos.

Resignada a su vida de casada y madre de una niña, dejo el libro en el lugar que lo había tomado, y luego se marchó.

Estuvo caminando por los pasillos del aeropuerto triste, sin saber que alguien la observaba

-- ¡Serena! _ De pronto se escucho la voz seductora de Darien.

La rubia al escucharlo, se detuvo abruptamente y giro su cuerpo dándole la espalda.

-- ¡Qué no se acerque!, ¡Que no se acerque! _ Suplicaba Serena en su mente.

-- Serena, ¿Acaso te estas escondiendo de mí?

La rubia sin saber que hacer, comenzó a jugar con sus manos nerviosamente.

Darien que la conocía muy bien, se acerco a ella, que aun continuaba de espaldas.

-- ¿Por qué te escondes, Serena?, .... ¿Qué es eso tan malo que has cometido que no te permite mirarme a los ojos?

Serena, al escucharlo giro su cabeza y lo miro directamente a los ojos.

Darien, emocionado por volver a ver a su amada después de años se quito los lentes oscuros, para contemplarla mejor.

-- Por fin, .... Después de muchos años de agonía y miseria, nuestras miradas se cruzan nuevamente.

Muy nerviosa por aquellas nuevas palabras, Serena intentaba mantener su postura de mujer casada.

-- ¿A quien has venido a despedir?

Muda como desde el inicio del encuentro, Serena solo lo observaba, pero con aquella última pregunta sus ojos se pusieron llorosos.

-- ¡Ya veo!, .... ¡Ahora recién entiendo todo!, .... Viniste a despedir a aquel tipo, por el que me dejaste, .... ¿No es así Serena?

La rubia al escucharlo, decidió marcharse.

-- ¡Espera! _ Demando Darien, deteniéndola.

La rubia conteniendo sus lágrimas, y reprimiendo sus sentimientos; espero a que el pelinegro le hablara.

-- Deseo, necesito y quiero verte, Serena _ Demando Darien, a un lado de ella, mirándola minuciosamente.

La rubia al escucharlo, paso saliva de forma temerosa, pero no dijo nada.

-- Tú también lo quieres, ¿No es así?

Serena que sabia muy bien que Darien tenía razón, no dijo nada.

La observo por unos segundos, y se pregunto que era lo que pasaba por su mente para tenerla así; ya que se notaba a kilómetros la guerra interna que tenía.

-- Serena, .... Le darás una oportunidad a un viejo amigo, .... ¿Verdad?

La mencionada, soltó el aire que estaba conteniendo y siguió con su postura de silencio.

-- ¿Sabes?, Desearía poder olvidarte de una buena vez, .... Borrarte para siempre de mis pensamientos y corazón, .... Como tu lo hiciste conmigo, .... Como tu te olvidaste de mí, .... Pero _ No pudo continuar, porque la voz se le quebró al pelinegro.

La rubia al no soportar más aquellas crueles palabras, volteo su mirada llorosa hasta él y lo contemplo en silencio unos segundos.

-- Me darás al menos una oportunidad, ¿No?, .... Yo te estaré esperando Serena, mañana en el Templo del Norte .... ¿Tu vendrás?, ¿No es así?, .... Te estaré esperando toda la mañana, Serena.

Serena que ya no soporto mas las palabras de Darien, se retiró de ahí con los ojos llorosos, y una gran duda en su ser.

Darien que conocía muy bien a su amada Serena, sabía que ella iría al encuentro de mañana.

Se quedo unos segundos, ahí parado viendo como la figura de Serena se perdía entre las personas.

-- ¿Darien?, .... ¿Acabaste de hacer ese asunto privado? _ Pregunto Taiki, llamando su atención.

-- Si, gracias Taiki, .... Pero ahora necesito pedirte otro favor.

-- ¿Otro?, ¿De qué se trata?

-- Necesito, .... Me urge estar libre todo el día de mañana, y tal vez pasado mañana.

-- ¿Ah?, .... ¿Te choco el viaje?, ¿Te sientes más?, ¿Te duele algo?

-- No es nada de eso, .... Solo que se presentó, un pequeño milagro, .... Nada más.

-- ¿Pequeño milagro?

-- Si, así como lo oyes, .... Un pequeño milagro.

Taiki, lo observo durante unos segundos en silencio; preguntándose que era lo que pasaba por su mente.

-- ¿Aceptas?, ¿O no?

-- Hm, .... Será un poco complicado, .... Pero, creo que esta bien, .... Tendrás esos 02 días libres, .... Solo espero que no hagas nada malo, que pueda dañar tu imagen y carrera.

-- No tienes nada de que preocuparte, .... Te aseguro que seré muy discreto y no hare nada que pueda perjudicarme.

Taiki asintió y luego lo guio hacia el vehículo que los esperaba.

Dentro, los esperaban los demás integrantes de la banda de Darien.

-- ¿Qué paso? _ Pregunto muy curioso Zoicite.

-- Encontré la inspiración, que me faltaba _ Respondió Darien, colocándose los lentes.

-- ¿Qué? _ Dijeron en una sola voz sus amigos, muy sorprendidos.

-- Así como lo oyen, encontré la inspiración que me faltaba, .... Y mañana escribiré una canción muy inspiradora _ Hablo Darien, para sorpresa de su banda.

-- Así que después de muchos años, .... Al fin lograste encontrar nuevamente tu inspiración _ Dijo Jedaite.

Darien, solo asintió y prefirió mirar por la ventana.

-- Sin ofender, pero si todo este tiempo Darien ha escrito exitosas canciones sin inspiración, .... No me imagino, como serán en las que se ha inspirado _ Hablo Taiki, sin entender realmente el verdadero significado de la palabra Inspiración.

Los demás, solo asintieron a las palabras del castaño; siguiéndoles la corriente.

Los minutos fueron pasando y mientras Darien se acomodaba en su hotel, en compañía de sus amigos; Seiya estaba a la mitad de su viaje, planeando y pensando en como enamorar y recuperar el tiempo perdido con Serena.

-- Lo mejor será, no decir a nadie sobre el verdadero origen de la madre de Chibi Chibi, .... Al final de cuentas, mi pequeña solo esta con su verdadera familia, .... Lo que, si será muy necesario, es reacomodar mi agenda, y pasar mas tiempo con Serena, enamorarla y al fin ser una verdadera familia modelo, .... Y para finalizar, tener muchos hijos con Serena _ Pensaba muy alegre Seiya, mientras revisaba unos documentos.

-- ¿Señor?, .... ¿Se le ofrece algo del carrito? _ Pregunto una aeromoza.

-- No, gracias, .... Estoy muy bien.

-- Como guste, .... Con permiso.

-- ¡Siga!

Y el vuelo siguió su curso.

Serena por su parte, aún seguía confundida.

Su mente le decía que no debía de ir a verse con Darien, ya que este formaba parte de su pasado, y que ahora su presente eran la pequeña Selene y Seiya, su familia.

Pero su corazón le pedía, a gritos volver a verlo; que ya habían sido demasiado egoístas con ella; ya que desde que su hermana falleció, ella había tenido que renunciar a sus estudios, sus sueños personales, sus amigos y sobretodo a su gran amor; y todo lo tuvo que hacer para casarse con su cuñado y darle una madre a su sobrina.

-- ¡Señora, ya llegamos a la Mansión!

-- ¡Bien!

Se bajo del auto aun con los ojos llorosos, y se dirigió a la habitación matrimonial.

Los empleados que la habían visto llegar un poco decaída, pensaron que su jefa estaba triste por la partida de su esposo, ya que este se había marchado nuevamente por un largo tiempo.

-- ¿Cuánto tiempo crees que este fuera el señor? _ Pregunto la Señora Mimet.

-- Dijo que estaría fuera un mes como mínimo _ Respondió Tomoe, el chofer.

-- ¡Tanto tiempo!

-- Si, .... Eso mismo me digo yo, que es mucho tiempo fuera.

-- Con razón la Señora Serena se ve tan triste, tan decaída.

-- Si, .... Por eso el Señor Kou, me dijo que, para alegrarla, la podría llevar a donde ella quisiera, .... Y si ella deseaba privacidad, que lo haga.

-- ¡Vaya!, .... ¿Me pregunto por que te dio esas órdenes?

-- No tengo ni idea, .... Yo solo me limito a cumplir con mis obligaciones.

-- Como todos lo hacemos Tomoe, como todos lo hacemos.

Y mientras ellos se dirigían a la cocina, hablando sobre la situación de sus jefes, Serena en el segundo piso se debatía si ir al encuentro de mañana con Darien o no.

-- ¿Qué sabes tu de todo lo que sufrí y sufro Darien?, .... ¿Qué sabes tu de mi dolor?, .... ¿Qué sabes tu de todo lo que estoy viviendo y he vivido durante todos estos años? _ Dijo Serena en voz alta, mientras las lágrimas cubrían libremente sus mejillas y su imagen se reflejaba en su espejo.

La rubia estaba tan sumida en su dolor, que no se había dado cuenta que su móvil había estado sonando desde hace varios minutos atrás.

Hasta que sintió unos golpes en su puerta.

-- ¿Qué es lo que desea Mimet?, .... Ahora no la puedo atender.

Los golpes siguieron, pero esta vez mas insistentes.

La rubia, muy incomoda por la bulla se puso de pie, se limpio las lágrimas, se arreglo el maquillaje dañado, y se fue hacia la puerta.

-- Le dije que no tengo .... ¿Tú?, ¿Aquí? _ Serena que estaba enojada, cambio su semblante a uno sorprendido, por la persona que vio.

-- ¡Si, soy yo! _ Dijo muy serio y preocupado el recién llegado.

En otro lado, en un elegante hotel, Darien llegaba en compañía de su equipo de trabajo y amigos.

A la entrada del gran edificio, estaba un considerable grupo de mujeres, pertenecientes a su club de fans, de dicho país.

-- ¡Darien Te Amo!, .... ¡Eres el mejor!, .... ¡Por favor cásate conmigo!, .... ¡No, mejor cásate conmigo! _ Eran algunas de las frases típicas que el moreno escuchaba siempre, en sus giras.

-- ¡Hola!, ¡Hola!, .... ¡Gracias por venir!, ¡Hola!, ¡Hola!, .... ¡No ustedes son las mejores! _ Respondía Darien, siempre con una sonrisa, mientras se tomaba fotografías, firmaba autógrafos, regalaba saludos y abrazos a sus fans.

-- ¡Darien!, .... ¿Dinos que te parece la India? _ Pregunto de pronto una periodista.

-- Magnifico, .... Simplemente magnifico.

-- ¡Wow!, .... ¿No te choco el viaje?, ¿O tuviste algún inconveniente?

-- No, nada de eso.

-- Me alegra escuchar eso, .... Pero ya en preguntas mas personales, .... ¿Darien, hay alguna fémina que haya cautivado tu corazón?

Todos los presentes al escuchar la pregunta, se pusieron muy atentos y ansiosos de la respuesta.

-- Ja, Ja, Ja, .... Creo que, .... Ja, Ja, Ja, .... Eso es parte de mi vida privada.

-- Pero Darien, .... Hay algunos rumores que dicen, que desde mucho antes de iniciar tu gran carrera y fama internacional, tu corazón ha sido cautivado por una mujer, .... Pero de un momento a otro ella desapareció, y que por eso te hiciste una estrella a nivel mundial, para poder encontrarla nuevamente, .... ¿Eso es verdad o solo son rumores?

Las fans que estaban ahí, comenzaron a murmurar que también habían escuchado ese rumor, y no sabían si era cierto o no.

-- Ja, Ja, Ja, .... Solo diré que es la primera vez que escucho ese rumor, y de verdad me sorprende lo cuan informada esta usted Señorita, .... ¿Me dice su nombre?

-- Tendo Saori.

-- Bueno Señorita Saori, solo le diré que me sorprende cuan enterada esta acerca de mí y mi vida privada.

-- Es mi trabajo saber todo lo que se dice, se hace y se relaciona con las personas famosas.

Darien al escucharla, solo sonrió y luego se despidió de sus fans y la reportera.

-- ¡Tal parece que alguien hizo muy bien su tarea! _ Dijo de Fiore, después de cerrar la puerta de la suite.

-- ¿Por qué lo dices?

-- Porque hizo una muy buena labor de investigación, contigo cariño.

-- ¡Fiore!, .... Te dije muchas veces, que no me gustan esos juegos tuyos.

-- ¡Hay, que aburrido!, .... ¡Uno que solo quiere demostrar su amor, y lo desprecian a uno!, .... ¡Luego no te quejes, cuando acabes solito y arrugadito!

-- Créeme que eso no pasara, .... Eso no pasara.

-- ¡Hm!, .... Te conozco muy bien, .... Tan bien, como si hubiéramos compartido útero y luego haber nacido juntos, .... ¡Hm!, Deja de reírte y habla de una buena vez, .... ¿Qué paso?

-- ¿Qué?

-- Nada de ¿Qué?, .... Y mejor dime de una buena vez, ¿Qué paso?, .... ¿Por qué estas tan sonriente?

-- No me pasa nada, solo estoy muy feliz de volver a mi tierra.

-- A otro perro con ese hueso, .... Te conozco Darien cariño, .... Así que dime de una buena vez que te paso, .... O me vere obligado a contratar los servicios de esa periodista, para saber que te paso.

El moreno al escuchar la amenazada de su amigo, prefirió retirarse de la sala e irse hacia la ducha.

Fiore, al observar la actitud poco colaboradora de su amigo, decidió interrogar a alguno de los chicos.

-- ¡Jedaite!, ¡Jedaite!; .... ¡Jedaite tienes exactamente 10 segundos para aparecer ante mí! _ Demando muy serio Fiore.

-- ¿Qué te pasa ahora Fiore?, .... ¿Acaso estas en tus días sensibles? _ Pregunto muy cómicamente Kunzite.

Fiore lo observó por unos segundos de manera amarga, para luego acercarse hasta él, agarrarlo del cuello de su camisa y llevárselo a su cuarto.

-- ¡Auxilio!, ¡Auxilio!, ¡Auxilio!, .... ¡Fiore me quiere quitar mi pureza! _ Gritaba Kunzite, mientras se reusaba a entrar a la habitación.

-- ¿Pureza?, ¿Pureza?, .... ¡Por favor Kun, hace mucho pero mucho tiempo, que tu ya no cuentas con eso!

-- ¡Me ofende ese comentario y pensamiento tuyo!

-- Decir la verdad, siempre ofende.

El peliblanco lo observo con los ojos abiertos, por unos segundos; para luego volver a su postura seria.

-- ¿Qué es lo que deseas saber?

-- Vez que no era tan difícil entendernos.

-- Pregunta de una buena vez, que es lo que deseas saber Fiore, .... Aunque no lo creas, no tengo mucho tiempo.

-- Bien, .... ¿Por qué Darien esta tan contento?, .... Y no te atrevas a negarlo, porque yo mismo vi la sonrisa que trae muy tatuado en su cara, ... Así que habla de una buena vez.

-- Bien, .... En resumidas palabras, Darien encontró su inspiración, .... ¿Contento?

Fiore al escucharlo, se quedo en shock por unos segundos, y cuando reacciono comenzó a agitar al peliblanco, exigiéndole que le diga la verdad y que no se juegue con ello.

-- ¡Es la maldita verdad!, .... Cuando veníamos para acá, Darien mismo nos dijo que su inspiración había vuelto.

-- ¡No lo puedo creer!, ¡No me lo creo!, .... ¡Después de varios años buscándola, al fin la encuentra! _ Grito muy eufórico Fiore.

Kunzite que ya estaba libre, no perdió tiempo y se fue hacia su propia habitación.

-- ¡Ahora que por fin se volvieron a ver, de seguro que volverán a estar juntos, y ahora nada ni nadie los podrá separar! _ Exclamo muy feliz Fiore, mientras daba vueltas en su sitio.

Mientras que, en otra habitación, se encontraba Darien con el cuerpo recién mojado; evidencia de que había tomado una ducha.

-- ¡Hm!, .... Creo que le pediré a Fiore que me ayude con esto, total el sabe muy bien mi historia con Serena _ Decía Darien, mientras observaba indeciso que ropa escoger para mañana.

Paso unos minutos más intentando escoger la mejor combinación, hasta que recibió una llamada de su representante.

Mientras que en la Mansión que vivía la Familia Kou, Serena se encontraba un poco aliviada luego de haber hablado sobre su dolor.

-- ¿Y qué piensas hacer ahora?

-- ¡No lo sé Nanami, la verdad que no lo sé!

-- ¡Hay mi reina, de verdad que no deseo estar en tu lugar!

-- No me animes mucho amigo.

Nanami, al escucharlo solo se limito a abrazarla y acariciarla el cabello.

-- ¡Serena, mi reina!, .... Desde que llegaste a la India, años atrás; siempre tuviste esa mirada triste y melancólica; .... Y siempre me pregunté el motivo de tu dolor, pero cuando por fin te decidiste a ser sincera conmigo, entendí muchas cosas y una de ellas es el dolor de tu mirada, .... No, no bajes la cabeza, que tu no hiciste nada malo.

-- Tu eres el único que sabe todo lo que pasé, viví y sentí; desde que mis padres me obligaron a casarme con Seiya.

-- Si, .... Y la verdad que hasta ahora me pregunto, ¿Por qué no te negaste?, .... Ósea, no era tu responsabilidad cuidar a tu sobrina, tu solo eres la tía, ¡No eres la madre!

-- ¡Lo sé, lo sé!, .... Pero cuando Chibi Chibi, comenzó a llorar sentí un gran dolor en mi pecho, que no pude controlarlo, hasta que sentí a mi niña en mis brazos y ella se calmó, .... Desde ese momento supe que mi vida ya no sería igual.

El peliceleste, al escucharla suspiro derrotado, ya que sabia muy bien de lo que su amiga hablaba.

Pasaron los minutos y la señora Mimete toco la puerta, anunciándoles que ya casi era hora de ir a recoger a la pequeña.

Serena se limpio las lágrimas, luego se fue hacia el baño para lavárselas.

-- ¿Qué harás ahora?, ¿Iras a verlo o no?

-- ¡Sabes muy bien que no puedo hacerlo, soy una mujer casada y con una hija!, .... No estaría muy bien visto encontrarme con Darien.

-- Es verdad, .... Eres una mujer casada, en contra de su voluntad, tienes una hija que no nació de tu vientre, .... Y aunque lo niegues aun amas a Darien con la misma intensidad que hace años.

-- ¿Qué es lo que pretendes Nanami?

-- Lo que pretendo es que seas feliz, .... Que dejes ya, esa mirada triste y melancólica que te acompaña desde el día en que murió tu hermana y tus sueños.

Serena al escucharlo, bajo la cabeza y se quedó en silencio.

Nanami, se acercó hasta ella y la abrazo por la espalda.

-- ¡Estoy casada!, Y aunque me duela aceptarlo, .... Desde que me case con Seiya, mis sueños e ilusiones pasaron al olvido.

-- ¡Eso paso porque tu así lo quisiste Serena!, .... Jamás luchaste por Darien, jamás le diste el lugar que se merecía, y no te atrevas a negarlo, porque tu misma me dijiste, que nunca les dijiste a tus padres sobre tu relación con Darien, .... A pesar que él, te lo suplico muchas veces, y no hay que olvidar que hasta la misma Kakyuu te dijo que tus padres necesitaban saber la verdad.

-- ¡Ya lo sé!, ¡Ya lo sé!, .... Sé que el mejor momento para decirles a mis padres sobre Darien, fue antes de que mi hermana partiera, .... Pero lamentablemente eso no pudo ser, .... Y los planes que teníamos, cambiaron drásticamente.

-- ¡Y aunque lo trates lo negar!, ¡Tú aun amas a Darien!, .... ¡Por que, con Seiya, solo estas por la niña!

Serena al escuchar a su amigo, bajo la cabeza y se quedó en silencio.

Nanami, que la conocía desde que ella llego a la India, sabia que, si su amiga estaba así, era por algo.

-- ¿Serena, acaso te gusta tu esposo? _ Pregunto muy asustado.

La rubia al escuchar la pregunta de su amigo, no dijo nada.

-- ¡Serena, responde la maldita pregunta!, .... ¿Estas empezando a sentir algo por tu esposo?, .... Porque si eso es así, déjame decirte que todo cambia.

-- La verdad que no lo sé, no se lo que siento por Seiya.

-- ¡Por todos los dioses Serena!, .... ¿Cómo es eso que no sabes lo que sientes por Seiya?

La rubia no dijo nada y en cambio bajo su cabeza.

Nanami, al ver la reacción de su amiga, no dijo nada y decidió guardar silencio.

Estuvieron en esa situación por algunos minutos, antes de que llegara la ama de llaves, y le indicara que ya era hora de ir a recoger a la pequeña.

Serena como de costumbre se arregló, y le pidió a su amigo que la acompañara, el cual acepto muy gustoso.

Las horas fueron pasando, los pensamientos, sentimientos y nervios, se hacían presente cada vez más.

Darien, con cada hora que pasaba, sonreía más y más; ya que sabía muy bien que su amada, iría al encuentro.

-- ¿Y a este que le pasa? ¿Por qué sonríe como tonto? _ Pregunto Neprhite.

-- Encontró su inspiración _ Respondió muy tranquilo Jedaite.

El peliblanco al escuchar solo asintió y siguió con lo que hacia.

Y mientras el morocho estaba contando las horas para ver nuevamente a su rubia amada.

Serena con cada hora que pasaba, se ponía más nerviosa y más indecisa.

-- ¿Qué hare?, ¿Qué hare?

Eran las preguntas que se hacia la rubia, frente al espejo.

Y mientras la rubia estaba debatiendo que hacer o no; en una suite elegante, llegaba un cansado pelinegro.

Dejo su portafolios sobre el sillón, luego a pasos lentos se fue hacia el baño, en el camino se deshizo de su corbata y saco.

Al observar la tina, decido llenarla con agua tibia, y mientras esta llegaba a la altura requerida el pelinegro se desvestía.

Cuando ya estaba todo listo, Seiya se metió a la tina.

-- ¡Bombón!, ¡Bombón!, .... ¿Me preguntó que estarás haciendo ahora?, ¿Estarás pensando en mí, así como yo pienso en ti?, .... ¡Ja!, ¡Ja!, ¡Ja!, .... Si eso llegara a pasar, sería el hombre más suertudo de todo el universo, ya que sin querer yo me enamore de ti, desde el primer momento en que te vi, .... Jamás negare que a Kakyuu, le tuve un cariño muy especial, pero a ti Bombón, a ti te amo desde el primer instante en que mi mirada cruzo con la tuya, .... ¡Que irónica la vida!, ¡Ya que, si alguien me llegara a escuchar, diría que jamás sentí nada por Kakyuu! _ Se decía Seiya, mientras estaba recostado en la tina.

Estuvo en aquella posición por unos minutos, pensando en todo lo que había vivido hasta el momento, y en como su vida había cambiado desde que conoció a Serena días antes de su matrimonio con Kakyuu, hasta ese momento.

Las horas fueron pasando, y el manto de la noche se hacía cada vez más claro, dándole a si la bienvenida a un nuevo día.

Seiya que se había acostando tarde, se levanto a duras penas, y se alisto para irse a una nueva junta.

Como era su costumbre, se alisto con un conjunto sastre en color negro, camisa gris y corbata negra.

Antes de salir, se admiro unos segundos en el espejo, aprobando su imagen.

-- ¡Buenos días Señor!, ¿A dónde lo llevo? _ Pregunto el conductor del taxi.

-- ¡Buenos días!, .... A la Torre, Central, y que sea rápido _ Respondió Seiya.

-- Como diga.