Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 46 : Caricias y abrazos nocturnos

Harry soltó una risa -Me haces cosquillas.


"Me encanta escuchar tu risa, mi pequeño".


- Pareces un perro -le dice con burla y rápidamente comienza a correr de nuevo fuera del alcance de la pantera.


Mientras corría detrás de su pequeño, se transformó en humano de nuevo, cogiéndole entre sus brazos- Te pille- Le dio un beso en la nariz.


- Humm Sev, estás desnudo jeje


- Es lo que tiene que aún no haya aprendido a controlar del todo mi transformación en animago- Respondió Severus sin soltarle, estrechándole más entre sus brazos.


-Pero la otra vez llevabas los bóxer- Le recordó Harry levantando una ceja divertido.


- Pues, esta vez he decidido que me daba igual estar desnudo, porque estoy con mi maravillosa pareja.


- Oh ya veo -le acaricia el pecho - Eres hermoso.


- Tú lo eres mucho más que yo Harry, todo tú, eres hermoso, por dentro y por fuera.


-Yo te sacaré poco a poco la oscuridad- Aseguró Harry sonriéndole.


- Ya lo estás haciendo- Lo besó en los labios.


- ¿De verdad? -lo abraza y deja que lo coja en brazos.


- Sí, claro que sí, mi pequeño, tú eres mi cura- Lo abrazó mientras lo sostenía entre sus brazos.


- ¿Cómo estás tan fuerte, Sev?


- Hago ejercicio- Le guiño el ojo- Además, he estado practicando contigo.


- Eso es fantástico, ¿me enseñarías a nadar?


- ¿No sabes nadar? - Se asombró Severus.


- No, nunca me enseñaron.


- No te preocupes, yo te enseño cuando quieras.


- Gracias Sev, te lo agradezco.


- De nada- Le revolvió el pelo.


- ¿Tú cuando aprendiste?


- Me enseño mi madre a los siete años.


- ¿Y te costó?


- No mucho, mi madre era buena maestra.


- Seguro que era muy buena y siempre te animaba - Se puso triste al pensar que si sus padres no hubieran muerto le habrían enseñado muchas cosas como montar en bicicleta , nadar entre otras .Le empezaron a salir lágrimas.

Severus le limpió las lágrimas con sus pulgares- ¿Qué te pasa, mi pequeño?



- Nada, solo pensaba.


- ¿En qué? Para ponerte así, debió de ser algo importante.


- Me imaginaba con mis padres sonriendo en una playa y mi padre enseñándome a nadar.


- Siento que no hayas podido tener esos momentos, Harry, lo único que puedo hacer ahora es vivirlos contigo, llevarte a esos sitios donde no pudiste estar con tu familia o hacer lo que habrías hecho con ellos de haber podido- Aseguró Severus acariciando su cabello.


''Hijo estamos en tu corazón ''-dice el espíritu de Lily sonriendo.


- Lo sé mamá, pero no dejo de pensar en lo que podría haber pasado si hubieseis estado conmigo.


-Ahora Severus puede enseñarte esas cosas y nosotros lo veremos.


- Me parece una buena idea, todo lo que haga con Sev, estará bien.


- Perfecto hijo, parece que Snape se está volviendo algo travieso, menudo susto habéis dado a Sirius - sonríe James divertido.


- Ha sido una pequeña bromita de nada- Rieron ambos.


-Ya lo hemos visto - se ríen ambos Potter.


- Están durmiendo ya, ¿verdad?


- Lo están, aún no estaban preparados para hacer digamos sus cositas-dice James.


- Es normal, era demasiado para un día- Asintió Harry- Además, les hemos cortado el rollo.


- No, es que estaban muy cansados


- Bueno, les dejamos descansar, vamos a dejar de armar bulla- Rió Harry.


Luego ambos soltaron un bostezo y los Potter se rieron.


- ¿Tengo que tomarme alguna poción antes de quedarme dormido, Sev?


- Me temo que sí, es vital para que te recuperes. ¿Te sientes mejor que otros días?


- Sí, solo me he cansado cuando estábamos en Hogsmeade, que he empezado a perseguir a mis amigos, mientras ellos huían de mí y me he cansado mucho- Murmuró frustrado agachando la cabeza.


-Eso es normal, te vas curando.


- Sí, pero es muy frustrante, no va tan rápido como quisiera.


- Esto lleva tiempo, Harry.


- Lo entiendo ... pero eso no quita, que mi recuperación sea muy pesada. De verdad espero que esta vez no me dé por vomitar.


- Ya verás cómo te curarás, ahora a dormir mi pequeño león.


- Me tienes que dar la poción antes, aunque no me importaría irme a dormir sin tener que tomármela.


- Si no te la doy, mañana te tendrás que tomar dos.


- No, no. Me la tomo ahora- Aseguró Harry horrorizado con la idea de tener que tomarse dos pociones de un tirón, con lo mal que sabían, sentía que su lengua se haría insensible a cualquier sabor si seguía así.


-Muy bien, ahora la traigo espera un momento - Miró con la cara algo roja como Severus se levantaba y dejaba a la vista su hermoso y fuerte trasero.


- Sev, te recuerdo que sigues desnudo- Afirmó sin poder evitar mirarle, aunque estaba haciendo lo posible por no hacerlo.


- Estoy con mi pareja, además ya me has visto desnudo muchas veces - Fue hasta el baño y regresó como si nada con la Poción sentándose de nuevo en la cama en la que estaba Harry con el pijama puesto.


- Toma, mi pequeño- Le pasó la poción dándole un beso en la frente.


- Gracias - se toma la Poción de un trago.


- ¿Cómo te encuentras? - Estaba atento a cualquier reacción de él.


- Mejor, gracias.


- De nada, ¿no tienes ganas de devolver?


- Pues ahora que lo dices - Se mareó y mirando al lado contrario de Severus vomitó.


- ¡Harry! - Se sobresaltó Severus, acercándose más a su lado y acariciándole la espalda mientras apartaba las sábanas.


-Ya, ya estoy mejor.


Utilizó un hechizo limpiador y atrajo a Harry hacía su pecho, aún acariciando su espalda.


- Gracias, creo que cuanto más vomito, me siento mejor.


- Tampoco es bueno vomitar demasiado, mi pequeño, pero ya se te pasará. Puedes dormirte ya, si te sientes cansado.


- Mucho -suelta un pequeño bostezo y pestañea somnoliento.


- Duérmete mi pequeño, mañana será otro día- Le acarició el pelo.


- Hummm, sí, Sev.


- Duérmete tranquilo, esperaré hasta que te duermas.


-- Te amo


- Yo también te amo, pequeño- Le besó en los labios y volvió a acariciarle la espalda.


Entre caricias y abrazos finalmente Harry se quedó dormido con una sonrisa.


- Que duermas bien, pequeño- Lo siguió acariciando hasta que él también sucumbió al sueño.


__En la habitación de Draco y Regulus__


- Bueno, ¿cómo quiere dormir el principito? - Le preguntó Regulus con burla apoyándose en el marco de la puerta.


- En la cama obviamente, no soy un criado -Responde con arrogancia.


- Pues entonces tendremos que dormir juntos, porque yo no pienso dormir en el suelo.


- Y yo mucho menos, soy de la realeza mágica. Un Malfoy

.

- Y yo un Black.


- Ponte tu pijama y vamos a dormir, renacuajo.


- Tengo 13 años, no soy un renacuajo y... ¿que es eso?


- ¿El qué? ¿Un renacuajo?


- Sí, eso- Afirmó Draco fulminándole con la mirada por si acaso se le ocurría burlarse de él, porque no lo supiese.


-La cría de la rana.


- ¿¡Me estás llamando rana!?- Exclamó incrédulo e indignado.


- No, renacuajo se usa para decir que eres pequeño.


- Yo no soy pequeño- Se cruzó de brazos y frunció el ceño.


-Soy más mayor que tú, tengo 32 años-se cruza de brazos divertido.


- Me da igual, yo ya soy mayor.


- Mayor de edad, no.


- Da igual, pero no soy un crío- Se enfadó Draco.


- Estas haciendo pucheros como un bebé.


-Los Malfoy no hacemos pucheros 


- Sí, ya, deja que me lo crea .Anda a dormir, Draco.


- Ahora no quiero dormir- Dijo como un niño pequeño que tiene una rabieta cuando no le compran el juguete que quiere.


- ¿Necesitas un cuento de buenas noches?


- ¿Te estás burlando de mí? - Alzó la ceja deseando estrangular al mayor.


-No, espera, cogeré el cuento de La bella y la bestia y te lo leeré.


- Te he dicho que ya no soy un niño- Se sonrojó a más no poder.


- Pero leer ayuda a dormir- Respondió Regulus extrañado al escuchar las negativas del pequeño.


- Como quieras- Asintió sin estar muy convencido.


- Pues te leeré ese cuento.


- De acuerdo- Se tumbó en la cama esperando a Regulus.

Regulus fue hasta su estantería, Draco vio que movía unos libros de pasta oscura seguro que de Artes Oscuras, metió la mano al fondo y sacó unos pequeños libros que pensó, que seguro que eran cuentos de esos que leen los muggles.


- Mamá no me ha leído muchos cuentos.


- ¿No te ha leído mágicos?


- Sí, claro que me ha leído, pero hace tiempo que no me lee, mi padre dice que es hora de que madure y que sea un hombre hecho y derecho y eso lo dijo cuando yo tenía cinco años, así que imagínate.


- ¿A los cinco años dejo de leerte cuentos?


- Así es, solo recuerdo algunos- Suspiró mirando hacia otra parte- Tengo que aprender a ser el patriarca de la familia.


- Pero los cuentos no son tontos, tienen enseñanzas, ¿conoces estos? - Le pasa un libro que pone ''Cuentos de Beedle el Bardo ''.



-Solo algunos , pero no me acuerdo del todo 


- ¿Cuáles conoces?


- El cuanto de los Tres magos era mi favorito.


- Ah ese es el favorito de muchos magos, también es el de mi hermano Sirius y el mío.


- Creo que solo me ha leído el libro entero una vez, porque me aficione tanto a ese cuento, que no quería que me leyese otro.


- Es que es muy bueno, ¿cuál es tu parte favorita?


- Cuando dice que el tercer hermano le dio la capa a su hijo y la muerte lo acogió como si fuese una vieja amiga.


- Entiendes la moraleja, ¿verdad?


- Así es, ¿y la tuya?


- Por supuesto. Amo las Artes Oscuras no lo niego, pero nunca he soñado con ser inmortal.


- Pues léeme el cuanto que prefieras- Le sonrió Draco.


- ¿Cuál es tu objeto preferido?


- No lo sé realmente, creo que la capa de invisibilidad, siempre me ha llamado mucho la atención.


- Escogiste sabiamente, muchos habrían dicho la varita- Comentó Regulus orgulloso de aquel pequeño.


- Lo sé, pero a mí, por mucho que me lo haya querido inculcar mi padre, no me atrae el poder.


-Precisamente por esa varita se dice en las leyendas que muchos han matado, ¿te lo puedes creer? ¿¡Por una varita!?


- Hay mucha gente avariciosa por el mundo.


- Mucha, muy cierto. Voldemort era una de esas personas- Aseguró Regulus, él había visto sus intenciones demasiado tarde, aunque había hecho todo lo posible por remediarlas.


- Ya, supongo que sí- Murmuró acurrucándose en la almohada, mientras se tapaba mejor con la manta y sábanas.


-Bueno pues te leeré la Bella y la Bestia, o si prefieres lo lees tú, yo me cogeré otro libro, uno de Hechizos.


- No, léelo tú, por favor.


- ¿En serio?


- Sí, por favor- Le suplicó con ojitos de corderito degollado.


-Y luego dices que no eres un renacuajo - se ríe -Venga te lo leeré. Este libro, lo tuve que esconder de mi madre, se llega a enterar de que tengo libros muggles y no sé que hubiese pasado conmigo, por eso le tenía tan escondido- Le contó como si fuese un secreto mientras le ponía una mano delante del oído y se lo susurraba en este.


- No pasa nada, que quiera serlo por unos segundos, ¿no? Vaya, ¿de verdad tu madre te habría hecho algo por ello? - Preguntó realmente intrigado, el mayor parecía un gran misterio, que Draco quería desvelar a toda costa y no sabía de dónde venían tantas ansias por conseguirlo, pero le daba igual, quería hacerlo costase lo que costase.


-Pues no. Respecto a mi madre, nunca se sabe por dónde podía salir, pero posiblemente me hubiese dado una buena somanta de palos si se hubiese enterado- Suspiró Regulus y cambio rápidamente de tema, para no pensar en ello y para que Draco no le preguntase nada más sobre el tema- Bueno empezó, ''Érase una vez ...


Draco no insistió más al ver que había cambiado drásticamente de tema a propósito, ya lo averiguaría más adelante, de eso estaba seguro, cuando Draco se proponía algo, lo conseguía sin importar de lo que se tratase. Por instinto, mientras Regulus le iba leyendo la historia, se fue acercando a él para entrar en calor, al no entrar en calor ni por sí mismo, ni por las mantas en las que estaba envuelto como si de una nube de azúcar se tratase, tanto fue así, que prácticamente tenía la cabeza apoyada en su hombro. Poco después, se escuchó su respiración pausada y relajada.


''Se ha dormido, bueno mejor dormimos ''


Dejo el libro a un lado y se tumbó, aportándole algunos mechones de pelo de la cara.


-Que descanses , mocoso renacuajo 


Draco solo suspiró, pero no se despertó.


-Sí, está dormido - y después él también se quedó dormido.


__En el cuarto de Ron y Hermione__


- Ron, deberíamos dormir ya, sino mañana no habrá quien te levanté- Le recordó la castaña.


- Tienes razón, pero ¿en que lado duermes?


- Me da igual, realmente no tengo un lado concreto de la cama, ¿y tú?


- No, porque tengo un cuarto para mí.


- Entonces, dormimos como quieras.


-Vale, elije tu primero- Respondió como si se tratase de una conversación telefónica entre dos enamorados, con la que nunca quedaba claro quien colgaría primero.


- Pues este lado mismo- Dijo Hermione sentándose en el lado derecho de la cama.


-Pues yo el izquierdo, mejor si te pones el pijama en el baño - Miró a otro lado sonrojado.


- Eh, sí claro- Cogió su pijama y se cambió en el baño, para luego salir y meterse con rapidez en la cama.


-Ahora me toca a mí - se encierra en el baño aún sin quitársele el color rojizo de sus mejillas, las cuales estaban compitiendo con su cabello pelirrojo.


Cuando Ron vuelve a su habitación se tumba a su lado, pero sin tocarla.


- Buenas noches -dice Hermione tapada con las mantas hasta casi no dejar ver ni una sola porción de su rostro.


- Buenas noches Herms- Apagó la luz.


Esa noche, Severus no dejaba de moverse en su cama soñando que era un niño y que su padre Tobías lo perseguía.


- No, déjame, yo no te he hecho nada- Suplicó cada vez moviéndose más y más frenético.


Harry ante los movimientos y los murmullos se despertó sobresaltado, mirando a Severus con preocupación


- No, no me pegues, no ha sido culpa mía, el libro se ha movido solo, por favor- Imploró teniendo una expresión horrorizado.


- Amor- Le acarició la mejilla- Él no está aquí, estás conmigo. Shhh tranquilo- Le dio besos por toda su cara y lo abrazó como pudo intentando calmarlo- No es real, él ya no te va a hacer más daño- Le susurró acariciándole el pelo mientras le seguía abrazando.


Severus se despertó sobresaltado, sudando y jadeando, le corría algunas lágrimas de los ojos.


- Sev, cariño, ¿me escuchas? - Le limpió las lágrimas- Él no está aquí, solo estoy yo, mírame- Le acarició la mejilla.


Le miró a los ojos y lo abrazó - Pensarás que soy débil, tenerle todavía miedo cuando ya soy un adulto – Sollozó tapándose la cara con las manos.


- No, Sev, no, nunca pensaría que fueses débil. Es normal, nuestra mente nos juega malas pasadas. Has tenido una pesadilla con él, como yo las tengo con mi tío. No es nada extraño, ni mucho menos de débiles, solo de personas que hemos sufrido mucho-Le apartó las manos de la cara y le devolvió el abrazo, dándole un beso en la frente- Conmigo estas a salvo.


- Mi pequeño, eres tan comprensivo como siempre- Le quitó algunos mechones de su cabello que le tapaban sus ojos- Te estás dejando el pelo largo- Se los puso detrás de la oreja.


- Todo el mundo me dice que soy muy comprensivo, como mi madre


- Lo eres mi pequeño, ya te lo he dicho muchas veces, pero ahora con mayor razón. Gracias, si no llega a ser por ti, no me habría tranquilizado.


- No es nada, por cierto ¿qué hora es? - Vuelve a recostarse en su pecho.


- Por lo que veo, aún es pronto, podemos dormir un poco más, si quieres. Son las cuatro de la mañana.


-Mejor sigamos durmiendo- Dijo Harry sin separarse ni un segundo de su lado.


- Está bien- Le dio un beso en su cabello- Aunque no sé si podré conciliar el sueño.


- Pues yo no me voy a dormir hasta que lo consigas- Le sonrió Harry incorporándose y poniéndose a un lado- Anda, ven aquí- Le pidió que recostase la cabeza en su pecho, cuando Severus lo hizo, acarició su cabello, dándole todo su apoyo y calmándole en el proceso.



Mientras tanto en Hogwarts, Pansy Parkinson y algunos de su pandilla se las habían ingeniado para conseguir un libro que por fin respondería a sus dudas respecto a su profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras. Cuando encontró la respuesta, sonrió de manera maliciosa - Chicos, esta información nos va a resultar muy útil, creo que es hora de mandar una carta a mi padre.



¿QUE ESTARÁ TRAMANDO AHORA ESTA CHICA ?¿QUE OPINÁIS ?




Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro