Quiero contarles una historia.

Me gradué de la universidad hace diez años y fui entonces a mi primera entrevista de trabajo. La primera compañía para la que firmé un contrato fue para la del señor Wang Yibo. En ese momento, el reconocimiento de la empresa era mucho menor que ahora. Yibo no era lo que es en la actualidad.

A menudo veía al joven Zhan, una persona muy cuidadosa y gentil que nunca se enojaba con nadie. Alguien que tenía un trato amable con el personal, que era eficaz y muy disciplinado. Hizo un muy buen trabajo en la compañía y siempre tuvo que trabajar más duro que nadie para ayudarle a Wang a pagar un montón de deudas inexplicablemente extensas.

Una vez, cuando accidentalmente los vi besándose en el salón de té a mitad de la tarde, me di cuenta de que en realidad mi jefe era un hombre gay. No había nada inaceptable en eso porque eran muy buenos conmigo. El ambiente era cordial y no provocaban que las personas se sintieran incómodas. Eran realmente adorables el uno con el otro, y algunas veces incluso sentía envidia de lo que veía. Es admirable, ¿verdad? Poder caminar junto a una persona a tal grado, ya sea del mismo sexo o del sexo opuesto.

Podía ver que Yibo amaba mucho a Zhan. Sus ojos entusiasmados no podían engañar a las personas y, por lo tanto, nunca trataron de ocultarse. Cada vez que su mirada caía en Xiao, era cálida y cariñosa. El genio de Yibo era muy pesado y cuando se enojaba conmigo, tenía que ir por Zhan para que me ayudara a controlarlo. Lentamente, Wang Yibo aprendió a no ser tan estricto a mi lado. Incluso podía hacer bromas con él. Le pregunté una vez:

- ¿Cómo fue que cambió tanto, señor Wang?

El castaño dijo:

-Me temo que cuando estás bastante tiempo con A-Zhan, es inevitable cambiar.

Por un tiempo sentí que Yibo era encantador y tuve celos de Zhan.

La compañía comenzó a mejorar cada vez más. El Estado tenía más políticas de apoyo y entonces, el señor Wang comenzó a firmar muchos pedidos grandes. Compraron un edificio de oficinas completamente nuevo y reclutaron a muchas personas nuevas también. Pero de repente descubrí que Xiao Zhan había dejado la compañía.

Realmente no sé lo que sucedió. Le pregunté a Yibo unas cuantas veces, pero contestaba cosas simples como: - Zhan se quedó en casa porque tiene otras cosas que hacer -. Wang en ocasiones me decía que estaba demasiado cansado como para trabajar afuera.

Me sentí triste por Zhan. El pobre hombre estaba cuidando su casa mientras esperaba a que el otro regresara... Y parecía no tener la intención de hacerlo. Yibo estaba cada vez más insatisfecho. Todavía podía pretender tener un aspecto cariñoso y vergonzoso cuando Zhan estaba rondando por allí, pero expuso a fondo su puño de hierro, su fuerza incuestionable y su actitud horrenda. Nuestra relación estaba enajenada también. Antes podíamos hablar y reír como si fuéramos amigos de toda la vida, pero de la nada, pasé a ser solo otro subordinado más.

La primera vez que me encontré con Yibo comiendo con un joven, fue hace tres o cuatro años. El chico definitivamente no había sido el primero en hablar con Wang de esa manera tan íntima. Es extraño decirlo, pero todavía no sé por qué Yibo comenzó a salir con otros tan descaradamente. Desde ese momento, me di cuenta de que el Yibo que conocí, había cambiado por completo. Todavía pensaba de forma estúpida y creía que era una etapa... Pero continuó una y otra vez, y no podía hacer nada más que observar a la distancia.

Durante ese tiempo, mi jefe estaba particularmente loco por el sexo y los hombres y mujeres se apilaban tras su puerta sin descanso. Lo más ridículo fue que tenía a tres compañeros diferentes en un mismo día, por semana. Pasaron algunos meses hasta que me di cuenta de que el mismo joven de antes había llegado a la compañía para encontrarse con él. Cuando Yibo estaba a punto de irse, recibió una llamada telefónica de Xiao Zhan. A-Zhan rara vez llamaba a Yibo y esta vez había sido en un mal momento... Miré en secreto a Wang para ver sus reacciones aturdidas y luego, se abrió paso rápidamente a la distancia para contestar.

Cuando Yibo conectó la llamada de Zhan, dijo con voz suave:

-Tengo que trabajar horas extras, ya sabes. No puedo ir a casa hoy. -

Yibo se quedó en silencio un rato después de colgar el celular. El chico supo lo que estaba pasando y parecía honestamente confundido por eso. – Ge -, hizo un gesto con su mano y lo rodeó por la cintura. -Vamos, ya no va a molestar. -

Nunca pude entender al Yibo, a ese que no tenía sentimientos de culpa sobre el pelinegro. Más tarde, se emborrachó y en ese momento conoció a un artista recién graduado, en un simposio universitario. Él era el amante favorito de mi jefe, un estudiante simple y hermoso. Después de acostarse con él, ya no buscó a nadie más.

Supe siempre que había muchas cosas que eran conocidas por Xiao Zhan... Sin embargo, él nunca pareció tener problemas con eso, porque toleraba a Yibo como si sintiera que se lo mereciera.

¿Saben?, voy a admitir que cuando supe por primera vez que Zhan había dejado a Yibo, di un suspiro de alivio. Me alegré por él y dije: ¡Bien hecho! Así que al final, no importa lo doloroso que sea todo para Wang, a lo sumo solo le tengo lástima. Nunca he sentido compasión.

La última vez que vi a Zhan fue para llevarle albóndigas. Estaba nevando ese día y hacía mucho frío. Cuando se abrió la puerta, vi a la persona delgada y descuidada que había creado Wang. Creo que la casa estaba más fría que la nieve de afuera. Yibo no sabía dónde estaba, ni cuál era su aspecto... Solo me había mandado con una caja de comida que había perdido su temperatura durante la noche.

Yibo comenzó a partir de sentimientos profundos: Su amabilidad le dio paso a la posesividad. El amor se convirtió en celos y al final todo terminó en pena: Con su amante a su alrededor, las mentiras en el teléfono, la decepción de un verdadero amor.

La partida de Zhan se convirtió en un viaje completo. Personalmente observé a Yibo ser tragado por la completa oscuridad. Su dolor y su desesperación, ese desgarrador dolor, la manera en la que bebía copa tras copa hasta sangrarse el estómago. «Necesito a mi pequeño Zhan». El dolor de Wang era verdadero, el remordimiento era verdadero, pero no puedes borrar los errores que cometiste durante años con la autocompasión.

Antes del cumpleaños de Zhan, compré un Akita en la perrera para Yibo. Este cachorro más tarde acompañó al castaño durante sus momentos más atormentados. El odio de Wang por los animales se desvaneció gradualmente gracias a esto. Una vez fui a su casa para enviar la información necesaria de las negociaciones del día siguiente, él mismo me pidió que abriera la puerta. Cuando entré, vi al mayor sosteniendo al Akita entre sus brazos, había crecido muchísimo. Estaba mirando la película "Siempre a tu lado" con la luz apagada. La película era oscura y estaba grabada en las pupilas del hombre. En ese momento, lo vi llorar. La película llegó al final. El señor que vende hotdogs le dijo a Hachiko: «No esperes, no volverá...». Fue el instante en que Yibo estaba tan triste y tan destrozado como el perro. Después de encender las luces, las lágrimas de Wang habían desaparecido, dejando solo cansancio en su rostro. Se puso de pie y el Akita estaba muy feliz de correr para morderme los zapatos.

Yibo fue a tomar una cerveza de la nevera, me preguntó si quería una. Tenía que conducir de regreso así que lo tuve que rechazar. Él bebió y dijo:

-He estado pensando mucho en los años en que llegué por primera vez a Beijing. - se volvió para ver por la ventana y ocultó perfectamente sus emociones-. Necesito a alguien, que pueda cuidarme... pero tú no, HanGeng tampoco... -

No pude evitar sonreír.

-No diga eso, yo siempre estoy dispuesto a cubrir sus asuntos personales, señor. -

Wang sonrió humildemente y su expresión de autodesprecio fue muy marcada.

-También... ¿Cómo puedes tener tanta paciencia conmigo? Los documentos que tienes que revisar están sobre la mesa, vámonos. -

Sostuvo al Akita otra vez. La fragilidad de las lágrimas ocasionadas por la película parecen ser una ilusión. Pero, Wang se volvió cada vez más silencioso y se veía absolutamente abrumado por alguna clase de carga invisible.

Finalmente, un día, Wang Yibo desapareció por completo. No estoy seguro si volverá, pero mi corazón siempre ha tenido el presentimiento inexplicable de que ya nunca voy a volver a ver su cara.

Yibo al menos no irá con Zhan... Me siento culpable al decir que eso me alegra. Porque él quiere redimirse, pero antes tiene que compensar y tiene que probar el sabor de lo que cosechó... Zhan, fue una taza de agua simple para Yibo.

Comenzó a calmar su sed, pero luego se enamoró de otra variedad de bebidas. Cuando el agua se agotó, supo entonces que perdió algo indispensable para su vida.

No podemos regresar al pasado, la vida no puede reiniciarse y por eso, es mejor que seamos siempre agradecidos con las personas que nos rodean. No cuidamos lo que amamos porque pensamos que no lo vamos a perder, y nos arrepentimos únicamente cuando comenzamos a extrañar.

Esto es lo que aprendí después de diez años observando, y voy a compartirlo eternamente con todos.

~ 🕊️🪦 ~

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Bueno, llegamos al final de esta historia, con los sentimientos a flor de piel. Sin lágrimas y sin pañitos, pero con una lección... Ama, valora, respeta... Atesora lo que tienes...✨

Las letras de más canciones que hemos elegido _Heebtz para cada uno de los personajes son de nuestros bebés hermosos de Straykids:

Liu Haikuan : Love Poem.

Wang Yibo : Ex.

Xiao Zhan : Secret secret.

Gracias por seguir esta historia 🥰

Ahora los invito a pasar a una nueva historia

Ya está disponible...
Vayan a darle amor 😉

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