Nuestra protagonista caminaba por los pasillos de la UA, al ser tan temprano casi no había nadie por los pasillos, pasó por enfrente de la clase 2A logrando ver a Bakugō en su lugar mirando a la ventana con sus audífonos puestos, ella dio medio paso hacia la puerta para saludarlo, pero en pocos segundos negó con la cabeza siguiendo su camino a su salón, no quería molestarlo.

El rubio al sentir una mirada en u persona miro hacia la puerta, pero solo vio unos pies alejándose de allí, no le dio mucha importancia y siguió mirando hacia la nada disfrutando de la música que estaba escuchando, recordándola a ella.

Los minutos pasaron y los estudiantes iban ingresando, Shika notó que su mejor amigo, Shinzo no había llegado.

- Seguro se quedó dormido y llegará tarde - pensó, pero pasaron las horas y su amigo no llegaba, por lo que decidió mandarle un mensaje preguntándole donde estaba, pues el rara vez faltaba -

Luego de unos segundos le respondió "Estoy un poco enfermo, no iré" fue lo que recibió a lo que ella suspiro, no le gustaba estar sola en clase, pero recordó que en el almuerzo podría estar con Mina y eso la ánimo un poco

(...)

El almuerzo llegó y no encontró a su amiga rosada por lo que se acercó a uno de sus compañeros que conocía, el presidente de su clase, Iida Tenya, para preguntar ya que se lo había encontrado.

- D-disculpa, Iida - lo llamó a lo que esté volteo - No sé si me reconoces, soy Shika Suzume - dijo algo nerviosa, pues casi nunca cruzaban palabras -

- Oh si, eres la mejor amiga de Mina, ¿Que necesitas? - pregunto el amable y con una sonrisa -

- Quería saber si Mina vino a clase hoy, ya que no la he visto durante todo el día - preguntó algo confundida -

- No, ella no llegó hoy, Yaoyozoru la llamó y no contesto, pero puede que se haya quedado dormida, no te preocupes, ella suele faltar algunos días - dijo él restándole importancia -

- D-de acuerdo, gracias - dijo haciendo una pequeña reverencia para luego ir camino al comedor -

Se sentía rara, pues estaba tan acostumbrada a la presencia de sus amigos que cuando ninguno de ellos estaban era muy distinto, le recordaba a aquellos días antes de conocerlos, cuando solo se la pasaba estudiando y haciendo deberes para luego dormir y volver al instituto, eran días repetitivos y sin emoción alguna.

Al tener su almuerzo y se sentó en una mesa vacía el sentimiento de incomodidad aumento por la falta de sus amigos, sí, era representante de su clase y todos la conocían, sin embargo, solo hablaba con sus compañeros cuando tenía un enunciado que hacer o ellos le pedía sus deberes para estudiar, nunca hizo lazos de amistad por su timidez vergüenza de hacer el ridículo.

Soltó un suspiro y negó con la cabeza, no iba a dejar que aquellos pensamientos negativos la dominen, juntó sus palmas, agradeció por la comida y comenzó a comer de manera tranquila y en silencio.

Ella sin que lo notará, era observada por un rubio ceniza, sus amigos dejaron su conversación de lado para mirar a Bakugō, luego a Shika y de nuevo a Bakugō, se sonrieron entre sí con malicia a lo que Kirishima soltó una falsa toz para llamar la atención de su amigo y así fue.

- ¿No creen que deberíamos ir junto a Suzume y hacerle compañía? - preguntó juguetón a sus amigos a lo que Sero y Kaminari sonrieron -

- Sí, Mina se enojará con nosotros si se entera que la dejamos sola - excuso Sero levantando los hombros -

- Yo no quiero lidiar con Mina enojada - continúo Kaminari -

- ¿Que? Esperen...- dijo Bakugō sin querer hacerlo por la vergüenza que le daba -

- Somos 3 contra 1, ya está decidido - afirmó el pelirojo sonriendo divertido agarrando su bandeja de comida y levantándose junto a sus amigos -

- Oh, los alcanzaré en un momento, llevaré a Jirou para que no se sienta incómoda entre nosotros - dijo nombrando a su pareja alegre tal cual un perro que le dieron un premio corriendo de inmediato hacía la recién nombrada -

- ¿Vienes, Bakugō? - dijo Sero -

El rubio chasqueo la lengua para luego levantarse junto a su bandeja de comida y caminar hacia Shika quien seguía comiendo tranquilamente.

Ella levanto la mirada al notar que esas tres personas se estaban sentando con ella a lo que los miro confundida, ¿Querían la mesa para ellos?, ¿No notaron que ella estaba allí? Tal vez se confundieron de persona y creyeron que era alguien más.

Pero luego de verlos durante unos segundos los reconoció, era el grupo de amigos de Mina, de los que ella siempre hablaba, aparte de Bakugō nunca entablaba conversación con ellos aparte de saludarse de vez en cuando, el par que no conocía la miraba con sonrisas amables mientras Bakugō miraba a cualquier lado.

- ¿Necesitan al-- fue interrumpida de inmediato por Kirishima -

- Suzume, un gusto por fin poder hablar contigo - dijo emocionado el de dientes afilados - Mina siempre esta hablando de ti, y como notamos que estabas libre quisimos almorzar contigo, si no te es un problema - dijo amable -

- N-no, para nada, es un gusto conocerlos también - respondió ella nerviosa -

- Soy Kirishima Eijiro - anuncio apuntándose con su pulgar mientras estiraba la espalda -

- Sero Hasta, un gusto - dijo él azabache -

- Y Bakugō Katsuki, pero a él ya lo conoces - dijo Kirishima apuntando al rubio quien solo le sonrió amable a la de ojos café dejando algo sorprendidos a sus amigos -

- Ya llegamos - anunció Kaminari sujetando de la mano a Jirou - Un gusto al fin conocerte, Suzume, soy Kaminari Denki y ella es mí novi-- fue interrumpido por la de cabello corto -

- Puedo presentarme sola, Jirou Kyouka, es un placer - dijo ella con una sonrisa amable - Y como habrás escuchado, soy novia de este idiota - dijo apuntando a su pareja a lo que el asintió ignorando el insulto -

Ambos se sentaron a un lado de Shika, estando Sero enfrente de Shika, Kirishima enfrente de Kaminari y Bakugō enfrente de Jirou, todos conversaban animadamente, aunque nuestra protagonista no sabía cómo unirse a la conversación de vez en cuando ellos la incluían haciendo preguntas sobre ella o preguntando si opinión, hasta que sonó la campana para volver a clases.

Los chicos se adelantaron ya que si llegaban un minuto tarde Aizawa se enfadaria, pero Bakugō se quedó junto a ella hasta acompañarla a su salón sin importarle el posible castigo que tendría.

- No era necesario que me acompañaras - dijo la castaña con una sonrisa agradecida - Nos vemos luego Bakugō - ella hizo una pequeña reverencia amigable -

- Espera - dijo este a lo que ella le miró curiosa -

El acercó su mano a la mejilla izquierda de la chica, está se sonrojo levemente poniéndose nerviosa, el acarició con su pulgar a un lado de sus labios, rosando estos a los cuales miraba sin disimulo para luego mirarla a ella a los ojos poniéndola aún más nerviosa.

- Tenías un poco de salsa del almuerzo - dijo él con una sonrisa amable a lo que Shika desvió la mirada - Nos vemos luego - se despidió él poniendo sus manos en sus bolsillos y caminando a su salón, la castaña lo veía irse, luego reaccionó y entro a su salón -

Estaba algo confundida, nerviosa y su corazón parecía que iba a estallar, pero la sonrisa avergonzada de su rostro no desapareció el resto de ese día.