TAL COMO SI FUERA UNA GUERRA DE DRAGONES, AMBOS CHICOS NO DEJABAN DE MANTENER SUS MIRADAS conectadas con miradas afiladas y si fueran animales, expulsarían feromonas y mostrarían sus cualidades de "macho alfa", quizás no eran alces pero si tuvieran los cuernos en la cabeza estarían dispuestos a golpearse hasta quizás la muerte.

—¿Qué hacen aquí?—la voz tímida de Mayra sonó.

—Cállate—ambos reaccionaron hablando de manera inmediata de forma cortante— Mayra yo...

Voltearon a verla, notando que les quitó su gorro para simplemente seguir su caminó con una mueca, claramente ofendida y atacada.

—Mayra, no fue mi intención hablarte de esa forma—MJ se aproximó, tomando su mano— discúlpame

Kavin simplemente se acercó tomando la otra, acercándola suavemente a él— yo simplemente se lo dije a MJ, no iba para ti, May-May

Ella simplemente no respondió, incluso, trato de zafarse pero ambas manos se aferraron como las lapas lo hacían a las rocas en las playas, sin dejarla ir.

—¿Por qué están aquí?—preguntó harta.

Realmente se estaba recriminando por no haber ido al otro centro comercial, quizás se hubiera evitado cruzarse con ambos amigos, sintiéndose también culpable por quizás esta competencia.

—Bueno, venía a comprar algunas cosas para una persona especial—MJ respondió honesto.

—Yo solo vine a pasear, ya sabes, es fin de sem... ¿y tu?, ¿no que no querías salir hoy?—alzó una ceja el de gafas.

—Creo que no tienes que recriminarle, es libre de hacer lo que quiera, si no quería salir y luego si, es su problema, Kavin

—Bueno, técnicamente yo la invité primero que tú, quizás lo dijo por lástima

—Y también te rechazaron primero, ¿no?

—No es un rechazo que no haya querido salir conmigo ni mucho menos contigo

—Por eso precisamente lo dije—se excusó entrando a la conversación— quería mi espacio y comprarme cosas, por eso quise salir so-

—¿Qué quieres, preciosa?, yo te lo compró—MJ sonrió amable.

Kavin soltó una risita— ¿siquiera sabes qué cosas le gustan?

—Chicos, ¡Lady Gaga!—gritó.

—¿Dónde?

Y cuando tuvo el amago de soltarse y correr, la devolvieron a su lugar de un jalón, haciéndola pucherear.

MAYRA ESTABA MIRANDO ROPA EN UNA TIENDA NO CARÍSIMA CON OJOS CURIOSOS, realmente la única ropa que tenía eran de su tía y algunas de Somchai, por lo que, andaba buscando estilo personal.

Kavin caminaba buscando cosas al igual que MJ, agradecían a H&M por tener variedad de estilos debido a las temporadas, por lo que, cada uno se fue por diferentes estilos: MJ se fue a los tonos neutros como el blanco, negro, gris y el café; Kavin a cosas más soft como rosa, verde, celeste, blanco y tonos pasteles ; y Mayra... simplemente cualquier cosa que le agradará a la a vista.

Era gracioso ver como ambos chicos estaban con una pila de ropa mientras que Mayra simplemente tenía pocas cosas en su mano, haciéndole dirigir la vista a ambos montones de prendas.

—Creo que los colores neutros te quedarían bien, es más tu estilo—MJ sonrió honesto.

—Tu personalidad y tonalidad de piel, hace que los colores y las tonalidades pasteles te favorezcan—Kavin aclaro guiñándole un ojo.

—¿Y piensan que voy a llevarme todo eso?—apuntó ambos montones con su rostro— no tengo el dinero suficiente para llevarme toda la tienda, chicos

—No es problema para nosotros—ambos hablaron al mismo tiempo, rodando los ojos.

Les dio una mirada asesina a ambos, haciéndoles retroceder un paso, indicando que Mayra no quería ayuda económica.

—Elijan las que más les gusten de ahí y llevare, pero esos montones no se irán conmigo—aclaró, para seguir viendo los pantalones frente a ella.

Y ambos suspiraron.

—Mayra, cariño, precisamente la ropa que elegimos es para...—MJ trato de hablar y Kavin negó con la cabeza, apuntando luego una de las cajas de la misma manera— nada, olvídalo

—Ajá—se fue a otro colgador de ropa, ignorándolos a ambos.

Y ambos fueron hacía las cajas para pagar la ropa, mientras que las miradas de muchas féminas estaban sobre ellos, envidiosas.

—Aveces tienes que simplemente ignorarla y hacer las cosas, no vale la pena tratar de explicarle las cosas —Kavin explicó, dejando frente a una chica la pila de ropa, junto a su tarjeta— es demasiado orgullosa para aceptar que pagues sus cosas

—Por eso me gusta, es diferente a todas con las que he estado—MJ hizo lo mismo que su amigo.

—¿No qué me dejabas el camino libre?—volteo a verlo, cruzando sus brazos.

—Bueno, las cosas cambian...—se apoyó en el mostrador, mostrando seguridad— como los gustos

—De cualquier manera yo la conocí primero y con quién más ha estado es conmigo—aclaró— creo que si somos amigos, existen ciertos códigos que debes respetar, MJ

—No hay códigos cuando se tratan de sentimientos reales que yo si siento, no cómo tú—le apuntó con el mentón— ¿cómo crees que se va a sentir cuando lo sepa?

Las chicas tras el mostrador estaban tratando de hacer su trabajo y estar pendiente del chisme de ambos jóvenes millonarios, que al parecer, estaban mucho muy entrenidas.

—¿Vas a romperle el corazón de esa forma, sabiendo que tú habías aceptado de igual manera y que lo sabías?—Kavin ladeo la cabeza, riendo suave— no, ¿verdad?... y sigue siendo una lástima, porque a mi también me gusta

AMBOS CHICOS MIRABAN COMO MAYRA COMÍA DONAS DEL DUNKIN DONUTS, SILENCIANDOSE A SI MISMA DE querer golpear a ambos chicos quiénes compraron media tienda para ella, teniendo más de diez bolsas mientras que la castaña había salido con unas dos.

—¿No quieres ver zapatos, May-May?—Kavin preguntó, haciéndola voltear el cuello casi como la niña del exorcista con una mirada terrorífica y una dona en su boca— bien, no habrán zapatos hoy

—¿Por qué no?, digo que deberías tener al menos para combinar estas cosas—levantó las bolsas MJ.

Mayra tragó la masa de su boca para relamer sus labios y hablar— pues búsquense a alguien que la use, porque yo no -

—¿Por qué no?—Mj la cortó— ya te dije que yo no estoy interesado en nadie más

—Ni yo—Kavin aclaró.

Y suspiró, dándose cuenta que no podía pelear ni hacer nada al respecto.

—Bien, la aceptaré con una condición

—La que sea

—Déjenme a mí comprar mis zapatos y el resto de la tarde tranquila

—¿y qué hacemos con la ropa?

—Llévenla a mi casa o ténganlas en su auto, no lo sé

—Pero Mayra... yo no quiero irme—MJ hizo un pucherito— yo vine precisamente para llevarte algo más tarde y nos vimos...

Kavin miró raro a su amigo, celoso de toda la atención que la más baja le daba al de coleta y no a él.

—¿Qué tal si nos vemos a las 6?—preguntó mirando su reloj de muñeca.

—Bien, a las 6 nos vemos en mi casa—sacudió su mano— nos vemos

Y se alejó, dando saltitos haciéndole sonreír, Mayra parecía ser demasiado para ambos, pero aún así, lograría estar a la altura.

—Vámonos antes de que empieces a llorar como un perdedor—Kavin se dio la vuelta para irse.

—Estoy seguro que si tú no te hubieras entrometido, estaríamos juntos toda la tarde

—Que pena porque tú quisiste meterte donde no te llaman, desde el principio de esto—rodó los ojos.