MAYRA HABÍA DESPERTADO Y NUEVAMENTE ESTABA SOLA EN CASA, AL PARECER SOMCHAI estaba demasiado ocupado y llegaba muy tarde para irse muy temprano, pero no le molestaba demasiado.

Notó la caja de zapatillas que le había obsequiado intacta en su lugar y se acercó para abrirla, notando que estaba vacía y sonrió, hasta que noto el teléfono de su hermano estaba en el escritorio y decidió ir personalmente a su escuela a dejárselo.

Le envió un mensaje a Kumon para que avisara que llegaría tarde por problemas personales y se colocó un pan en la boca, saliendo de casa mientras que se colocaba audífonos para no aburrirse en el camino. El trayecto al paradero de buses no estaba tan lejos, por lo que pudo comer su pan solo como debía y subir hasta los asientos de atrás, recordando la dirección que una vez su hermano le había indicado para llegar y no demoraría mas de veinte minutos si la ruta que el bus haría si no hubiera un tráfico tan agitado, y cruzó sus dedos para que eso sucediera.

Movió uno de sus pies al ritmo de la música, notando como el celular de su hermano vibraba ruidosamente dentro de su mochila y decidió sacarlo, no por chismosa porque respetaba la privacidad de la vida de su hermano pero ver tantos mensajes de un tal "Imbécil" donde llegaba amenaza tras amenaza, del tipo "voy a silenciarte" o "hoy estas muerto, Srisawat" le hicieron hervir la sangre... ¿acaso su hermano estaba siendo acosado?, no lo sabía y bueno... la historia volvería a repetirse.

Se levantó apretando el botón para que le abrieran las puertas y bajó apresurada, cayendo nuevamente sobre sus rodillas y suspiró, no había tiempo para revisar heridas.

—Bien... maldito imbécil, voy a encontrarte—susurró para si misma, guardando el teléfono en su mochila y entró por la gran y elegante entrada de la escuela de su hermano y agradeció que ni siquiera custiodiaban la entrada.

—Somchai tiene la tarjeta de los F4–escuchó cuchicheos de alumnos correr sonrientes.

Y se acercó a una chica y tocó su hombro, la cual la miró con desprecio para luego cambiarla a una sonrisa coqueta, lamiendo su paleta— ¿Eres nueva?, soy...

—¿A qué se refieren con que Somchai obtuvo otra tarjeta?

—¿Somchai Srisawat?—dijo desanimada y la más pequeña asintió— a bueno, ha desafiado multiples veces a los F4, es segunda vez que la obtiene... corazón, te aconsejo que te quedes conmigo... eso no es bueno de mirar

—No me importa, ¿dónde está?

—Lo están llevando a... ¿a dónde los llevaban Dan?

—Es un edificio al otro lado, por ahí—apuntó desinteresada la otra chica mirando su teléfono— de todas maneras, fue demasiado tonto con ir contra Thyme de nuevo, estoy segura que si la vez pasada se salvo por lamer su zapato, ahora si o si está muerto

Y sintió ansiedad, su corazón latiendo rápidamente y la adrenalina corriendo por sus venas, haciéndola moverse a donde las chicas habían señalado, aguantando sus lágrimas... como solía pensar, si uno de los dos tiene miedo, el otro debe ser valiente aunque lo tenga.

TODOS ESTABAN MIRANDO COMO THYME CORTABA LAS ZAPATILLAS nuevas de Somchai, mientras el era retenido por algunos alumnos para que no diera siquiera un paso.

—¿Creíste que con esto ibas a simular ser rico?, eres patético en todo sentido de la palabra—dijo riéndose para luego lanzarlas a la basura.

—El patético eres tú—y un golpe fue proporcionado a su estómago por uno de los estudiantes que lo retenían.

—Llévenlo dentro, quiero divertirme un poco

Y así fue, los calcetines blanquecinos de Srisawat tocaron el agua sucia haciéndolo tener escalofríos y trataba de regular su respiración. Aún recordaba que el día anterior había defendido a Gorya de las garras de estudiantes y sobre todo, de las malas palabras de Thyme, activándole nuevamente el odio.

Y fue lanzado al agua, cientos de ojos puestos en él entre risas, flashes de teléfonos grabando o de gritos para alentar a Thyme a hacer cosas horribles y morbosas, y bien planeado lo tenía porque sus amigos estaban ocupados con asuntos "femeninos", dejándole la diversión a él...

Y luego de unos golpes y humillaciones, un grito femenino se escuchó a espaldas del de abrigo de animal print, haciéndole voltear, notando a una pequeña niña, la cuál corría hacía él y de un salto similar a uno de una bailarina, una suela de zapato llegó a su mejilla derecha, tirándolo al suelo junto a su contrincante y agua sucia.

—¿Quién es?

—Que vulgar...

—De seguro solo quiere atención

Y otros comentarios que incluso llegaban a insultos, pero no había tiempo para siquiera defenderse, su objetivo era claro, defender a Somchai a toda costa.

—¿No te enseñaron modales en casa?—dijo molesta, agachándose a su altura, colocando su rodilla en el pecho del moreno— creo que la frase "El que te quiere te aporrea" es un decir, no algo literal

—¿Quién eres?—trato de levantarse y Mayra cargó más su peso.

—La peor pesadilla para personas como tú, Time—dijo con una sonrisa divertida.

—Thyme—corrigió.

—Da igual como te llames, voy a dejarte una cosa clara...—y se acercó a su rostro, escuchando nuevos alaridos desde las gradas— vuelves a tocarle un pelo a mi hermano y te juro por mi vida, que voy a joderte la existencia... y créeme, los niños ricos y sin modales son mis favoritos —susurró rozando sus labios con los ajenos, haciéndolo removerse con asco— ¿sabes por qué?, porque son patéticos y la mínima muestra de afecto los hace delirar, como si fuera la poción de amor número 5–hizo referencia a una película que el moreno ni siquiera conocía.

Y se separó, poniéndose de pie para luego darle desde ese lugar una patada en los bajos, sintiéndolo gemir de dolor y le extendió una mano a su hermano.

—Vamos a casa, compráremos nuevas zapatillas—le extendió una mano a su hermano para ayudarlo a levantarse.

—¡¿Qué se supone que estas haciendo?!—gritó poniéndose de pie— ¿por qué siempre tienes que entrometerte en mi vida?

Y Mayra se quedó en silencio así como los estudiantes en las gradas, cuchicheando.

—¿Qué quieres que haga?

—Desaparecer, ¿sabes que hiciste?, empeoraste todo, no necesitaba tu ayuda—escupió sus palabras furioso.

—Bueno—respondió sacando el teléfono de su mochila para tirárselo y luego, de su billetera unos baths— de todas maneras, esta es la última vez que lo hago

Y antes de que pudiera irse, gritos femeninos sonaron anunciando la llegada de los últimos 3 miembros del grupo, dejando a Kavin y a MJ sorprendidos por verla ahí.

—¿Mayra?—Kavin pronunció, acercándose a ella— ¿eres tú?

—¿Quién es Mayra?

—Ni idea, ni siquiera esta a la altura de Kavin... seguramente juega a dos mandos, es una zorra

Y volteó, enfocando la vista en ambos chicos y decidió avanzar, chocando los hombros con sus dos "pretendientes", saliendo del edificio en ruinas para irse. Nuevamente la historia se repetía, nuevamente Mayra debía jugar un rol que no le correspondía y nuevamente, ella tenía la culpa de todo...