Paint the sky, make it yours

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6 de junio. 09:06 horas. París, Francia

Las nubes parecían estar hechas de aquél delicioso algodón de azúcar que cualquier infante degusta felizmente a las afueras de su vecindario, ahí estaban, flotando libre y lentamente por el hermoso firmamento que yacía repleto de todo tipo de matices azulados, las palomas lo surcaban acompañadas de la deliciosa brisa primaveral, misma que, parecía abrazar a todo aquél que encontrara en su camino, niños, doncellas, jóvenes y hasta a turistas; mariposas y unas cuantas catarinas se posaban suavemente en los pétalos malva de alguna Freesia o quizá una Hortensia, después de todo, el parecido de dichas flores es impresionante. Se podía observar un ligero cambio de temperatura, y hasta en el brillo del astro rey, pues, este era comparable con el de alguno de esos días calurosos de tropicales veranos; lo cual era malo, el que, desde tempranas horas mañaneras, la temperatura fuese subiendo lentamente, solo podía anunciar un día realmente caluroso, lo cual, para cierto peli oliváceo, iba a ser una despiadada tortura

Nos adentramos en aquel modesto, pero sofisticado establecimiento repleto de matices pasteles, pero también fríos rebajados en blanco, y vitrales sutilmente decorados con influencias renacentistas, el nombre yacía escrito en una hermosa caligrafía dorada, que bien podía hacer juego con todo lo ya antes mencionado, 'Vaguement sincère café', ("Café vagamente sincero", traducido a nuestro idioma). El bullicio de las calles parisinas, junto con los resonantes toques que daban, aparentemente sin cesar, o solo de vez en cuando, los cubiertos, que yacían rodeados por los dedos de aquellos comensales que, se habían dispuesto a ocupar cada una de las mesas habidas, la programación de jazz parisino que reproducía la radio del lugar, y el exquisito aroma a soufflé de queso recién horneado, hacían una espléndida combinación, todo era agradable, desde las risas, hasta los silencios

Una peli platinada llevaba algunos de los muchos postres empalagosos que toda su clientela amaba en una fina bandeja del mismo color que el de su cabello, iba tarareando por lo bajo alguna canción parisina mientras daba delicados pasos sobre los hermosos mosaicos de pálida cerámica, mismos que recubrían toda la parte más baja de aquél local; iba distraída, pensando en cosas triviales, sin importancia, hasta que decidió salir un momento de sus pensamientos, para levantar un poco la vista, y ahí estaba, su estimado peli oliváceo de hermosos ojos orquídea, al lado de su adorado hermano menor. Ambos caminaban tranquilamente, uno usaba anteojos oscuros que contrastaban a la perfección con la lívida piel que poseía, mientras que el otro, había decidido dejar sus hermosas perlas orquídeas al descubierto, y estas, al ser tocadas por la luz solar, parecían luceros. Pocas veces la joven lo había visto sin sus tan habituales gafas, por lo que la sorpresa no tardó en reflejarse en su terso rostro

— ¡Oh! — Dijo por lo bajo la peli platinada, para luego abrir rápidamente la puerta de aquel establecimiento

Degel al voltear su vista se llevó una hermosa sorpresa, ahí estaba ella, Seraphina Gólubev Petrov, su amada peli plata de mejillas rosadas y labios carmín, su adorada joven de tiernos ojos que lo tenían cautivado desde hacía 7 inviernos atrás, la preciosa joven que tanto amaba como admiraba

El primero en entrar fue Unity seguido de un tanto nervioso Degel con ciertos matices rosados en las pálidas mejillas. El primero hizo un leve movimiento de brazo y mano para así, poder despojarse de los lentes oscuros que cubrían en su totalidad aquellos bellos ojos cual turquesas, al mismo tiempo de que sacudía de manera sutil la cabeza para arreglar un poco su larga y lacia cabellera platinada, y al terminar, sonreírle a su hermana que lo miraba con esos expresivos ojos llenos de cariño. El segundo, por su parte, solo alzó ligeramente su vista para poder sonreírle a la joven y dejar ver aquella pura y perfecta sonrisa, algo que no hacía recurrentemente, o al menos no con cualquier persona

— Oh, hermano... ¡Degel!, qué sorpresa — Aunque tartamudeó ligeramente, logró hacerle frente a los "nervios", y sonreír lo más natural y hermoso posible, como siempre — ¿Qué los trae por aquí?, y especialmente tan temprano, siempre vienen al atardecer si no mal recuerdo — Dijo la joven

Unity se acercó a ella — Venimos por ti tontita, ¿Tienes mucho trabajo?

— Tenemos casa llena genio — Dijo la mayor

Degel río por lo bajo, pero no lo suficientemente bajo como para que los ahí presentes no se percataran de ello

— Mmh, ¿y tú?, ¿No me dirás algo? — Decía la de ojos celestes juguetonamente

— Casa llena ¿eh?, ¿Y se puede saber qué haces trabajando en sábado? — Habló el peli oliváceo

— Una chica renunció en la semana, por lo que ahora tengo que ocupar su puesto en los sábados, pero, supongo que es bueno, además nunca tengo planes para los fines de semana, y el café es un lindo lugar donde pasar el tiempo — Terminó aquella frase con su habitual sonrisa

— Oh, ya veo, al menos eso es lo bueno — Dijo Degel

— Ah, ¡Sí! — Los ojos se le iluminaron y la sonrisa se extendió a lo largo de sus lindas mejillas rosadas, y ambos se perdieron por unos cuantos segundos en la mirada del otro, los ojos orquídeas no podían apartar su atención de los celestes, ninguno quería apartar la vista, o bueno, claro que así hubiera sido, de no ser por alguien...

— Oigan, sigo aquí por si no se han dado cuenta — Decía en tono molesto pero burlón Unity. Ambos jóvenes dieron unos cuantos parpadeos y sacudidas a su cabeza, en su intento de "reaccionar"

— Ah, cierto, entonces, ¿Para qué me necesitaban? — Dijo entre tartamudeos la peli plata

Unity iba a hablar, pero al parecer Degel quería decirlo él mismo — Me preguntaba si — Mordió levemente su labio  — Podríamos pasar un rato todos juntos, ya sabes, como antes... nosotros... tres— Hizo largas pausas, pero logró decirlo — Claro, si tú quieres — Con cada palabra, su voz se iba atenuando un poco más, los acuarianos nerviosos son las cosas más adorables que verás

Unity veía todo con ternura, aunque los tartamudeos de ambos lo hacían rodar los ojos de vez en cuando

— Qué nostalgia la de aquellos días, por supuesto Degel, es más, escuché que hoy cerramos más temprano que de costumbre, por lo que no tendrán que esperar demasiado — Decía la de pálidas mejillas

— ¿Ya terminaron? — Ahora habló el de cabello platinado. Degel volteó su mirada que en ese momento parecía tranquila, en la dirección del que recién había hablado, para así, convertirse en una asesina. — Ah, ¿Quieren tomar algo?, la casa invita — Dijo la joven con una sonrisa

Luego de eso, Seraphina les entregó el menú y una pequeña hoja blanca con un bolígrafo para que pudiesen escribir las bebidas que tomarían; "un latte", escribió con una hermosa letra manuscrita el primogénito de la familia Fluorite, mientras que las palabras que más tarde trazó aquél bolígrafo, esta vez manejado por el menor, fueron: "un espresso macchiato", siendo sincera, se trataban de unas excelentes opciones, el primero, uno de los más populares entre el público y los baristas especializados, se preguntarán el porqué, básicamente viene siendo una combinación de café espresso y algo de leche al vapor, café latte, una delicia para los amantes de las cafeterías sofisticadas, y como era de esperarse, se trataba de la bebida predilecta del de ojos orquídea, puesto que tenía algo especial, el llamado "Arte del latte" o "Arte del café con leche", solo los baristas especializados son capaces de lograrlo, esto habla de un trabajo profesional y delicioso a la vez, la presentación siempre es importante, ¿o no?, además, el arte se encuentra en todos lados, hasta en los sitios menos esperados, por eso y por muchas más cosas me encanta; en lo que consiste este arte, o bueno, esta técnica es en "dibujar" figuras (comúnmente flores, o la llamada Rosetta) con la leche al vapor, utilizando en demasía
la destreza, y la motricidad fina, para que la forma deseada quede a la perfección, esto lleva años de práctica, pero son hermosos, y eso mismo ha llevado a que críticos y público o hasta clientela de todo el mundo, ovacionen a los baristas responsables de estas obras, y delicias culinarias

Y el segundo, un espresso macchiato típico italiano, este y el latte, guardan cierta similitud, pero no demasiada, ya que, el macchiato consiste en un espresso con una pequeña cantidad de leche y espuma, en otros países, como viene siendo España, simplemente se le denomina "cortado". La palabra 'macchiato', traducida al español, viene significando algo parecido al adjetivo 'manchado', eso mismo hace alusión a la leche espumada que se le es colocada por encima a la bebida para así, poder indicar que dicho café tiene un poco de leche sobre de él. Este y el latte, al guardar cierta relación, también puede tener "Arte del café con leche" encima suyo

Y eso fue lo que les preparó la mismísima peli platinada, en ambas bebidas se encargó de hacer el "Arte del café", una Rosetta en ambas tazas fue su obra culinaria, les entregó sus respectivas tazas a ambos jóvenes, los cuales estaban conversando para matar el tiempo y de vez en cuando, soltaban algunas risitas discretas, estos la miraron sorprendidos, a lo cual ella misma dijo: "Solo lo mejor para mi hermano y mi mejor amigo", la peli platinada por más que quisiese quedarse no podía, ya que, como había dicho, había 'casa llena', por lo que tenía mucho trabajo al que enfrentarse, y un manojo de personas que no paraban de pronunciar su nombre cada que necesitaban algo. Degel y Unity sorbían de aquellas pálidas tazas mientras veían como su querida joven de ojos celestes iba de una mesa a otra, con una bandeja repleta de, o bebidas, o galletas

— Trabaja mucho, ¿cierto? — Habló el de ojos orquídea

— Demasiado, pero a pesar de todo, siempre tiene una sonrisa para mostrar — Respondió el peli plata

— Es verdad, eso es increíble — Soltó un suspiro de esos que suelen delatar tus sentimientos, por más que quieras ocultarlo — demasiado increíble, diría yo — Que lindos son los acuarianos cuando se sonrojan

Unity sonrió y le lanzó una mirada juguetona al mayor. Este a dicho gesto, solo pudo rodar un poco los ojos, y tratar de "ocultar" un poco su sonrojo mirando hacia otro lado

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6 de junio. 00:46 horas. San Francisco, California

Media noche, bueno, a escasos minutos de que las manecillas de su reloj tocaran el número 1 para poder así, indicar lo entrada que estaba ya la madrugada, el perfume de esta se empezaba a hacer presente, era tan delicado y delicioso como siempre, tenía el gran ventanal entre abierto, y las cortinas de par en par, dejando así, entrar por completo toda esa inmensa, pero tenue cantidad de luz proveniente, o de los astros celestes de aquella hermosa bóveda celeste, o de alguna de las muchas luces vívidas que se podían apreciar a la lejanía; había puesto algo de música en su tan preciado tocadiscos, pocas veces hacía eso, puesto que no lo solía usar regularmente, pero ese era un día especial, por lo que se encargó que aquél dispositivo reprodujera uno de sus vinilos favoritos, el volumen era algo moderado, al ser tan tempranas horas, no había demasiado ruido fuera, por lo que hasta teniendo el volumen al mínimo se podía apreciar bastante bien, estaba recostado en su cama, pensando en todo lo ocurrido en aquél extraño pero hermoso día

Cabe destacar que nuestro querido joven de orbes celestes, muy pocas veces se atrevía a desvelarse, trasnochar nunca fue de su agrado, además de que él solía dormir a tempranas horas para así poder tener unas 'considerables' horas de sueño, "la belleza cuesta", como suelen decir por ahí, y eso lo sabía a la perfección, aunque tal parecía que aquello no le importó mucho en esos momentos. El peli celeste se encontraba abrazando una de las muchas almohadas que había sobre aquellas pálidas sábanas, era una noche de primavera, por lo que hacía demasiado, de verdad, demasiado calor, y al parecer no podía dormir "debido a eso", aunque, muy probablemente esa no sería la verdadera causa de su insomnio, quizá esa solo fue una excusa que usó consigo mismo para así, no tener que aceptar la verdad de su desvelo

-"Okey, okey, okey, veamos, resumamos este extraño día: Primero, hago una perfecta actuación en mi escabullida por el jardín, pero, escucho la voz de un extraño persiguiendo a un gato, y más tarde por alguna extraña razón, le 'obsequio' al felino mi listón favorito, luego, salgo a las hermosas calles de la ciudad, pensando que así al menos podría tener algo de tranquilidad, pero, ¡oh sorpresa!, me doy cuenta de que en poco más de 5 años las condiciones sociales no han cambiado en nada, y termino ayudando a cierto peli verde para darle una lección a su 'némesis', almorzamos en un elegante restaurante, y terminamos volviéndonos una especie de 'amigos'". Con cada palabra movía un poco más las manos, o hacía algún tipo de expresión facial, ya saben, sonrisas o movimientos de cejas, como si estuviese hablando con alguien; le gustaba mucho hacer eso cada que hablaba mentalmente consigo mismo

Tomó un sorbo de té para seguir contando su travesía - "Pensando que ya no encontraría más problemas o situaciones extrañas, pero, además, para desestresarme un poco, decido ir al centro comercial a ver qué hay, sin embargo, entre la multitud, logro divisar a un pequeño de no más de 7 años llorando desconsoladamente".

El peli celeste hizo una pequeña pausa para pensar un poco sus palabras, esta vez tomó un poco de aire, para así, decidirse a hablar -"Y claro, ¿qué hace el sentimental de Afrodita Lindberg Bloeme?, oh cierto, lo único que puede hacer bien, dejarse controlar por sus emociones, por lo que decide ayudar al infante, que lo lleva de local en local a preguntar por su "padre", y escasos minutos más tarde al fin lo encuentran". Hizo una pausa repentina, puesto que, quería cambiar el vinilo que se encontraba escuchando, no le apetecía escuchar las canciones siguientes a la que segundos antes había empezado, se paró para ir en busca del disco que deseaba escuchar, y pocos minutos más tarde, lo tenía entre sus pálidas manos para así, poder colocarlo en el tocadiscos, y que este lo empezara a reproducir

Le había cansado su posición anterior, por lo que, por más extraño que suene, esta vez decidió tomar reposo sobre la pálida alfombra de su habitación y siguió "hablando", aunque era una 'conversación' mental. - "Resulta que, al hombre al que buscábamos, su 'padre' como lo llamaba el pequeño, no tenía ningún parentesco con él, era una relación algo extraña"- Niega con la cabeza - "Según lo que entendí fue que aquel chico rubio, lo estaba 'cuidando' de cierta forma, y el verdadero responsable del infante se encontraba en algún otro lado" - Toma un sorbo de la delicada taza con estampados florales que tenía al lado; mientras bebía, recordó algo, por lo que, terminó su trago de golpe, para así, mover las manos como loco, intentando hacer una seña de "Alto, detengan todo" o algo parecido - "Pero... peeero, el rubio se sonrojaba demasiado cada que el chiquillo lo llamaba de esa forma" - Otra pausa, esta vez se llevó las manos a su pálida cara, cubriendo así, labios y gran parte de la nariz - " Aww, que lindo, cuando vea a esa pareja no podré ser más feliz"- Discúlpenlo, es demasiado sensible emocionalmente por lo que, hasta el más mínimo detalle lo pone de muy buen humor, o le sube la adrenalina hasta el tope, ah, se parece a mí

Afrodita salió un rato al gran balcón que tenía, para así, poder contemplar la belleza de la luna geminiana que yacía suspendida en la bóveda celeste, y a su al rededor, cientos de hermosas estrellas, se quedó ahí un largo rato, no tenía nada pasando por su mente, simplemente le dio ese 'algo' de apreciar en silencio todo lo que ocurría en el cielo nocturno, unos cuantos suspiros después, decidió seguir con su 'plática' mental. - "Ah, cierto, al menos por brindarle mi 'ayuda' al pequeño, el rubio nos compró helados a ambos" - Sonrió, y seguido de eso, hizo una larga pausa que duró poco más de 2 minutos - "Ahora que lo pienso, hice 3 buenas acciones hoy, ayudé al felino blanquecino, ayudé a ese chico, Shun, y por último al infante pelirrojo, y a su"- Hizo una pausa para reír un poco - " 'padre', dijo que se llamaba Shaka Spicum, si no mal recuerdo"- Otra pausa, esta vez para pensar un poco más en lo sucedido, y llevarse una gran sorpresa - "Un segundo, al ayudar a Shun, dejé de ser ese sensible niño al que cualquiera podía molestar cada vez que escapaba de casa con..." - Sus ojitos se cristalizaron un poco - "Bueno, el caso es que le di una lección a quien molestaba a ese pobre chico peli verde, y a cambio, recibí su amistad, y quizá más valentía o confianza en mí mismo"- Entró un momento por su taza de té, y unos segundos más tarde volvió al gran balcón

- "Luego, al ayudar a un pequeño que lloraba desconsoladamente a encontrar a Shaka, lo que obtuve a cambio fue... fue... ¿Un helado?" - Ríe en tono irónico - "... no, dudo que haya sido solo eso... veamos, ayudé a un niño... ¿Ayudar a un alma pura e inocente?... quizá sí, pero, no lo sé, ¿La pareja que hacen Shaka y el otro chico tendrá algo que ver con esto?, ¿Ayudar a una pareja?... ¿Tendrá algo que ver con el amor?, ah no tengo idea, siempre he sido pésimo para descifrar mensajes ocultos, de esos que el 'universo' o el 'destino' nos da por alguna razón"- Sorbió un poco de la taza el delicioso té de frambuesa, el agradable sabor agridulce de esta, recorría libremente su garganta, hasta que este detuvo la acción, y alejó un poco la taza de sus rosados labios -" Y, por último, ayudar a un felino blancuzco de las garras de un chico al que quizá nunca conozca... veamos, simplemente ayudé a un gato... pero por alguna extraña razón que no conozco, até a su cuello mi listón de seda preferido, y como consecuencia de aquello, en la reunión con la familia Fluorite de hace unas horas, tenía el cabello desatado" - Recostó su mentón en la palma de su fina mano izquierda, y soltó un pesado suspiro - "Veamos, el suceso del felino y la reunión con los Fluorite parecen estar relacionados el uno con el otro... ¿Qué de relevante ocurrió en dicha velada con los dos franceses?, conocí a Camus, pero no le veo ningún parecido con un gato, o algo así" - Se distrajo un momento viendo los rosales del hermoso jardín

-"Cierto, hoy me arreglé, pero no utilicé ni una gota de maquillaje, o bueno, quizá sí, pero fue lo más natural posible"- Otro sorbo a su té, pero esta vez, al terminar su trago y dejar el objeto de cerámica sobre una pequeña, pero alta mesa, algo pasó por su mente - " Esperen, poco maquillaje... cabello quizá algo 'desarreglado', y ropa en unos tonos pasteles, parecidos a los del atardecer... la verdad me mostré como soy yo en realidad... el desatarme el pelo y atarlo en el cuello del felino, ¿Habrá tenido algo que ver con 'mi verdadero yo'?, parece lógico... pero, ¿Dónde encaja el minino blanco?, el color blanco significa pureza e inocencia... ¿Quizá eso?, aunque, no tengo idea del significado de un gato blanco en concreto..."- El peli celeste estaba algo confundido por lo último, y es que, sí, efectivamente, los mensajes que de una u otra forma nos suelen dar el universo, el destino, o hasta las deidades, como lo quieras llamar, son difíciles de comprender, pero, sin embargo, están ahí, solo es cuestión de que veas más allá de lo convencional, los pequeños detalles, siempre son los más importantes, les recomiendo no olvidar eso

De un momento a otro se quedó viendo el místico encanto de la luna, esta era llena, se encontraba en su fase de mayor esplendor por lo que, alzar la vista al cielo, era algo mágico, el perfume nocturno era tan embriagante como de costumbre, llevó su vista hacia la hermosa jacaranda en la que pocas horas antes había estado, al recordar lo sucedido debajo de la inmensa copa del gran árbol, sus pálidas mejillas se empezaron a tornar un tanto rojizas, de un tenue color parecido al guinda, prosiguió con su 'recapitulación de aquel día' -" Y finalmente, 'la cereza del pastel', Ángelo Ceccarelli, 'dios', hasta pronunciar su nombre me hace sonreír como un idiota" - Pocas veces hacía uso de la expresión 'dios', nunca había creído en alguien así, pero le parecía una palabra bastante expresiva, valga la redundancia, una de esas que se usan para exagerar asombro, por lo que, de vez en cuando la usaba; arregló un poco su cabello, y siguió - "Él es... interesante... y quizá... increíble, hace mucho que alguien no me hace reír de esa forma, no muchas personas logran intrigarme o asombrarme tanto... como él" - Soltó un tenue suspiro con matices de un sentimiento, quizá extraño para él, pero que, tú y yo lo conocemos de maravilla

"Tal vez, la magia no está en la luna, está en quien piensas al admirarla, o quizá en ambas, las cosas confusas son mis favoritas", suelo decir eso a menudo

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18:16 horas. París, Francia

Horas antes, los chicos habían estado ayudando un poco a Seraphina, a los nuevos clientes que iban llegando al establecimiento, se encargaban de darles una delicada hoja color almendra y el fino bolígrafo de tinta azabache, y estos al terminar de escribir su orden, se la entregaban, o a Unity, o a Degel, a pesar de que fuese algo, quizá 'insignificante', ayudaban mucho a la peli platinada, por lo que esta estaba inmensamente agradecida con ambos. Las seis y cuarto de la tarde, más o menos a esa hora, en el hemisferio norte, y por supuesto en horario de verano, el atardecer empieza a hacerse próximo, o bueno, algo lejano, pero próximo, la temperatura empieza disminuir lentamente y los matices del cielo, al igual que unas cuantas nubes empiezan a ser un poco más saturadas de tonos un tanto rosados, o quizá hasta melocotones; había considerablemente, una poca cantidad de autos transitando en las calles, puesto que las tempranas horas vespertinas, en las que la mayoría de los trabajadores acostumbraban a entrar a su trabajo, por suerte, ya habían concluido

El turno laboral de la peli platinada había terminado escasos minutos antes, Degel y Unity yacían esperándola fuera de aquel establecimiento, el menor veía despreocupadamente su teléfono, probablemente se encontraba leyendo el artículo científico que había dejado a medias esa misma mañana, y, por su parte, el mayor simplemente sostenía su preciada caja de mentas inglesas mientras se llevaba una a la boca, para degustar como octava vez en el día su delicioso y fresco sabor, tenía su vista plantada en la nada, quizá estaba viendo los edificios departamentales que había cerca, o puede que solo las sombras de las personas que pasaban por los al rededores, nunca lo sabremos con precisión; la puerta del local se abrió, dejando ver a una hermosa chica de piel tan blanca como la nieve, rojos labios cual carmín, ojos tan celestes como el propio cielo  y hermoso  cabello rubio platinado, esta llevaba puesto un hermoso vestido color malva con un estampado de flores parecidas a las hortensias blancas, y oscuros tacones altos, de joyas no llevaba mucho, solo pendientes dorados de estrellas, y una cadena del mimo color con su nombre escrito en una hermosa caligrafía, se veía hermosa, realmente hermosa

El peli oliváceo solamente pudo quedarse embobado viendo como aquella bella mujer se acercaba lentamente a él, hasta que la propia voz de esta lo sacó de sus pensamientos — Esto es extraño, hace mucho que no me visto así — Dijo la de orbes celestes

— ¿De qué hablas?, te ves preciosa Serph —Habló el hermano de esta — Hacía mucho tiempo que no me decías así — Decía algo apenada la mayor — Es mejor tarde que nunca — Respondió Unity; la peli platinada soltó una de esas hermosas risitas que todos amaban oír — ¿Tu qué opinas Deg? — Dijo sonriente; ante esto, el de orbes orquídea solo pudo sonrojarse tenuemente— Te queda bellísimo Seraphina — ¡Cielos!, quién diría que una frase tan simple como esa podría ser tan difícil de pronunciar

La mencionada se sonrojó tenuemente — Oh, muchas gracias — Volteó hacia otro lado para poder tranquilizarse un poco — No hay de qué — Dijo el francés

— Sí claro, que lindo, en fin, ahora, ¿A dónde quieres que vayamos Degel? — Dijo en tono elocuente e irónico Unity

— No hemos comido, ¿Tienen hambre? — Habló el de orbes orquídea

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Tarde otra vez, lo sé, lo siento, de verdad lo siento, ya terminó mayo y yo que quería publicar 3 capítulos, ah lloro por eso, lloro porque mi vida sea una maldita montaña rusa, lloremos

En fin, hablemos del capítulo en sí, amé escribir la escena de Dita, por cierto, ¿Alguien ya entendió en dónde encaja lo del gato blanco al que Dita le ató su listón de seda?

¿Se nota mucho que ni Seraphina, ni Unity son de mi agrado?, espero que no, di mi mejor esfuerzo en ello

Afrodita Lindberg Bloeme, Degel Fluorite Dubois, Camus Fluorite Dubois, Ángelo Ceccarelli, Shura Sorní y Shaka Spicum; ay no, los nombres de estos niños son hermosos, me esforcé mucho en ponerles apellidos lindos

No se esperaban que los sucesos de los capítulos anteriores fueran retomados y tomaran cierta importancia, ¿Cierto?, como les dije, presten atención en los pequeños detalles, como en las horas que aparecen en los encabezados o hasta en las fechas

Nos leemos luego, gracias por llegar hasta aquí, y gracias por tener tanta paciencia, te quiero mucho, te amo y te mando un abrazo, ¡gracias! ♡

29/05/2021