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CAPÍTULO 11

Todos estaban callados y nadie se dirigía la mirada, Cooper había logrado que el Blackwing volviera a volar, pero eso no era ni por asomo lo que importaba.
Iron estaba inconsciente en una cama, sus signos vitales se habían normalizado y para la tranquilidad de Cooper sus ''pesadillas'' habían terminado.

—Bueno, ya hablé con nuestro contacto en el gobierno francés, no nos demandarán, pero digamos que no somos muy bienvenidos en París desde ahora —le dijo al equipo, un comentario que no los tranquilizó ni mucho menos logró elevar sus ánimos.

—¿Algún muerto o herido de gravedad? —preguntó Jack sin retirar una bolsa de hielos de su ojo derecho.

—Por suerte no hubo ninguna fatalidad, pero... hay algunos heridos, se repondrán o eso espero —Jack lo miró completamente deprimido.

—¿Nuestros fondos... pueden reparar los daños?

—Digamos que después de esto, perdimos algunos patrocinadores —dijo en un tono más ''suave'' que no funcionó en lo más mínimo ante la situación. Después de que Los Defensores comenzaran a ayudar a la gente, muchas empresas, compañías e incluso gobiernos pusieron de su parte en la lucha de los Alterados contra el crimen. Ayudando de manera monetaria o incluso con apoyo tecnológico al equipo, ser un héroe no significaba siempre tener todo en la vida.
Jack agachó la cabeza y se colocó la bolsa nuevamente en su hinchado y morado ojo.

—¿Alguna pista de Evan? —preguntó Barry mientras observaba el radar.

—Ninguna —sentenció Cooper mirando a los demás—. Llegaremos en menos de media hora, estén listos —Gwen apoyó su cabeza en el hombro de Jack con suavidad.

—Lo siento mucho, Jack, lo arruiné — pronunció bastante triste.

—No fue tu culpa, fue mía. Si te hubieras quedado en el cuartel a salvo, no hubieramos perdido el cristal y esto no hubiera pasado —Gwen abrió la boca para responder, pero al ver su semblante supo que lo mejor sería no decir nada, por lo menos hasta que las cosas se calmaran un poco.

Cold caminó a lo largo de la nave y se sentó lo más alejado posible, ciertamente él también tenía mucho en que pensar.

Después de que llegara y ayudara a Jack y a Evan, aquella chica pelirroja apareció, Cold intentó evitar el combate con ella en primer lugar, y fue ahí cuando lo notó. Aquella chica tenía una mirada distinta a la de su hermano, no era aquella mirada psicótica que solo ansiaba el caos, era como si estuviera en serios problemas.

—Podemos ayudarte —fue lo que dijo en ese momento, el semblante de Jannet Blood cambió drásticamente.

—Nadie puede ayudarme —le disparó una gran llamarada de fuego tras eso, después se había esfumado.

Respiró profundamente y miró a Quick, él estaba muy desanimado, parecía como si en verdad algo malo le hubiera pasado, y tal vez así fue.
Poco después de que el Blackwing cayera en medio del combate Quick salió volando un par de metros fuera de Jaime, cuándo se levantó y caminó entre el humo y la destrucción lo primero que miró fue a Pepper, separando lentamente sus labios de los de Jack.
Todo pareció quedar en silencio una vez que observó eso, pero Jaime Blood lo devolvió a la realidad con un derribo a la velocidad de un jet.
Quick pasó sus manos por su rostro deseando jamás haber visto eso.

Continuaron en el aire durante poco tiempo, la aeronave comenzó a descender lentamente y en cuanto aterrizó en la superficie de la isla y la compuerta trasera bajó, Alicia ya los esperaba bastante preocupada.
Aterrada corrió junto a Iron, quien seguía inconsciente en una camilla.

—¿Qué le pasó? —preguntó realmente alarmada, incluso parecía que rompería en llanto solo con verlo.

—Las cosas se complicaron... —Cooper respondió con la mirada en el suelo.

—¿Pero se pondrá bien, no es así? —acarició su cabello y nuevemante lo miró.

—Iron es fuerte, resistirá. Ahora hay que llevarlo a la enfermería.

Todos entraron al cuartel con pesadez y falta de ánimos, y lo primero que hicieron fue tirarse en cualquier lugar de la sala principal.
Jack caminó sin decir absolutamente nada y al llegar a su habitación azotó la puerta, Gwen estuvo a punto de ir junto a él, pero Barry la detuvo antes.

—Necesita tiempo para meditar, y tú necesitas descansar un poco —ambos caminaron a la cocina y Barry le dió una botella de agua.

—Barry, ¿esto fue mi culpa? —parecía una niña tras haber recibido algún regaño por parte de su madre. Barry bebió bastante agua y suspiró.

—Lo que ocurrió no fue culpa de nadie, nos confiamos demasiado, a demás no sabíamos lo fuertes que podrían ser. No te sientas mal por algo que no causaste.

—Muchas gracias, Barry, es muy comprensivo de tu parte —bebió un poco más de agua y lo miró un tanto confundida—. Hay algo que me intriga mucho, ¿por qué siendo un chico tan comprensivo y con tanto que ofrecer no tienes novia? —Barry tragó agua de manera nerviosa y emitió una pequeña carcajada.

—Bueno Gwen, no soy alguien que tenga particular interés en las chicas.

—Sí, sé que estás muy ocupado y eres un enorme lobo azul pero... —volteó a verlo y él tenía una pequeña sonrisa que la hizo comprender al instante—. Oh, entiendo —le sonrió.

—Gwen puedes venir por favor —comentó Cooper caminando hacia su laboratorio, se despidió de Barry y llegó junto a él.

—¿Qué ocurre?

—Debido a los recientes acontecimientos me he puesto a pensar dos cosas. La primera la discutiremos en grupo, cuando todos estén mejor.

—¿Y la segunda?

—La segunda es sobre tu seguridad. Ya se demostró que dejarte en ''confinamiento'' no ayuda mucho, así que he optado por otras medidas —Cooper accionó un par de controles, y de una pared emergió un traje. De colores oscuros y toques de azul fuerte.

—¿Y eso?

—Es tuyo —ella lo miró incrédula—, si vas a estar con nosotros y ser parte del equipo a largo o corto plazo necesitas algunas cosas; una es tener alguna habilidad especial, y ya que no la tienes ¿que te parece si te entreno para tener una?

—¿Sabes pelear? No te ofendas Cooper pero aquí no pareces ser el más fuerte.

—Al tener un super cerebro y una amalgama de habilidades conferidas de éste, tengo la particularidad de aprender cosas a ritmos impresionantes, lo que significa que tengo conocimientos en distintas artes marciales y estilos de pelea —tomó un bastón de su mesa de trabajo y lo giró tan rápido y con tanta habilidad que la dejó perpleja —. Y bien, ¿empezamos?

Pepper caminó por el pasillo buscando llegar a su habitación, pero como si una fuerza extranormal la detuviera; frenó su andar y tras un suspiro se acercó a la habitación de Jack. Y tocó.

—Jack, Jack sé que puedes escucharme —pegó su oído a la puerta, no percibió nada en lo absoluto—. Escucha, sé que no estás de humor para visitas, y mucho menos mías, pero no conseguirás nada atormentándote a ti mismo —retiró su oído y justo en ese instante pareció escuchar un gemido.

Abrió la puerta utilizando su energía, y lo encontró tendido en el suelo cubriéndose los ojos con dolor.

—¿Qué demonios te pasa? —preguntó alarmada.

—Arde —consiguió decir entre quejidos. Y en sus pupilas solo había fuego, era lo único que veía, un aterrador y espectral fuego color verde.

—Escucha, respira —colocó su mano en su pecho y el se aferró a ella con fuerza—, tranquilo, todo estará bien —y como si hubiera recitado un hechizo, el dolor se detuvo— ¿mejor?

—Mejor —respondió con el sudor sobre su frente.

—Bueno, ¿ahora me puedes decir... qué diablos tratabas de hacer?

—Buscaba alguna pista sobre ellos —se acarició la cabeza y tallaba sus ojos mientras hablaba.

—¿Siquiera averiguaste algo?

—No, no pude, al intentar ver a través de alguno de ellos algo realmente raro pasó... fue como si me hubieran colocado una venda en los ojos, no podía ver nada, para luego ver solamente llamas. Alguien evita que use mi Omnisciencia, y apuesto a que fue Verónica, esa maldita bruja me ha logrado bloquear de sus ojos —sus palabras demostraban que estaba realmente consternado.
Ambos se levantaron, y tras eso se quedaron en un abrumador y largo silencio. Jack se sentó en su cama y adolorido acarició su ojo morado.

—Déjame ver —se acercó a él y tomó su cara, la levantó y ambos se miraron—. La hinchazón ya bajó, solo necesitas algo de maquillaje para cubrir esto —tocó con delicadeza su ojo y él se quejó—, lo siento.

—No te preocupes, lo único que necesito es encontrar al responsable de esto —Pepper lo soltó y se alejó un poco de él.

—Sí, ''el responsable'' —comentó dándole la espalda.

—¿Qué insinuas? —se levantó también.

—No crees que existe otro responsable —su tono de voz era todo menos amistoso.

—Hablas de Gwen, crees que ella tuvo la culpa de todo, ¿no es así?

—Creo que ya sabes la repuesta —volteó a mirarlo, era como si el tema realmente le disgustara.

—Sé que cometió un error, también lo hice, todos lo hicimos, pero no creo que esa sea razón para despreciarla tanto.

—Tú sabes que ese no es el motivo —se cruzó de brazos y evitó mirarlo.

—¿Entonces cuál es? ¿Por qué cuando ella llegó aquí no dejas de mirarla y actuar de una manera horrible conmigo y ella?

—¿Por qué? ¿Oor qué mejor no te pones en mis zapatos y dime como te sentirías al saber que la persona que más quieres no puede estar contigo? A causa... de alguien más —se alejó y le dio la espalda, limpió una lágrima de su mejilla, y fue cuando sintió como sus brazos la rodeaban en un abrazo.

—Escucha, Pepper, hemos hablado esto muchas veces, y sé que es duro de escuchar, pero una vez que ella llegó a mi vida realmente logré dejar de pensar en el pasado, finalmente puedo dormir por las noches, otra vez soy feliz.

—Es bueno saberlo —caminó con rapidez hacia la puerta y antes de salir Jack la cerró.

—Eres una persona realmente importante en mi vida, y te quiero demasiado como para verte sufrir de esa manera, estoy completamente seguro que cualquiera sería afortunado de tenerte.

—Yo no quiero a cualquiera —abrió la puerta utilizando su energía y salió de ahí a toda prisa. Barry asomó su cabeza hacia la habitación.

—Jack, reunión urgente en la sala.

—Ahora voy —salió de ahí, todos estaban sentados por todas partes, Jack se sentó a lado de Gwen, quién se veía agotada.

—Miren quién despertó —después de que Cold pronunciara esas palabras con una gran sonrisa todos voltearon a ver. Iron caminaba tranquilamente hacia ellos, se veía en su rostro que realmente le había costado trabajo abrir los ojos.

—Hola, chicos —les sonrió a todos. Quick estuvo a punto de correr hacia él para abrazarlo, pero Cold lo detuvo antes de ello.

—Creo que querrás ver esto —susurró en su oído, Alicia llegó a la sala y se quedó paralizada al verlo. Iron le sonrió y la saludó con la mano, ella corrió y lo abrazó con todas sus fuerzas. Se quedó helado ante ello, pero la rodeó con sus brazos y apoyó su mentón encima de su cabeza mientras sonreía como nunca.

—Me alegra mucho que estés bien —le dijo sin separarse de él.

—Bueno, tenía que volver a verte —respondió y ella lo miró con sus ojos llorosos. Ambos se quedaron mirándose realmente cerca sin dejar de lado sus sonrisas.

—¿Van a besarse ya o qué? —Quick incluso ya tenía lista una cámara.
Alicia y Iron empezaron a reír.

—Bien echo, idiota, arruinaste el momento —Jack se levantó y abrazó a su amigo.

—Nos alegra que estés de vuelta, hermano.

—Y a mí... ¡cielos! ¿qué te pasó? —Jack miró hacia otro lado, y Iron lo notó, todos se veían acabados y algo mal heridos—. ¿Qué fue lo que ocurrió?

Durante largo rato estuvieron explicando todo lo que aconteció mientras él dormía, y ciertamente no eran cosas que lograron subirle los ánimos.

—¿Entonces ellos tienen la primera pieza del arma? —preguntó tras asimilar todo.

—Sí —respondió Cooper, quién fue el que contó la mayoría de lo ocurrido.

—Eso significa que tenemos que conseguir la siguiente en cuánto antes.

—Copié algunos de los archivos de Evan, la segunda pieza se encuentra en Italia.

—Bien, entonces ya saben que hacer, hay que prepararnos —dijo Jack tras levantarse, pero todos se quedaron mirándolo sin decir nada.

—Jack —Cooper se levantó —. Todos estuvimos charlando y llegamos a un acuerdo, creo que en esta ocasión no deberías ser el líder...








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Una gran disculpa por la tardanza, espero y el capítulo haya valido la pena.

Si te gustó por favor deja un voto y un comentario.

En verdad te lo agradecería.
Y si te gustan mis historias por favor sígueme.

Gracias por leer.

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