Steve no quería tomar al Omega a la fuerza. Jamás se consideró un completo animal para obligar a una persona a estar con él. Quería tentar el terreno, ver las expresiones de Tony, observar las reacciones de su cuerpo y saber si realmente el Omega podría soportar su testosterona.

Desplegó su aroma dejando toda la habitación inundada de él.

Tony respiraba rápido mientras cerraba los ojos. Steve sabía que se estaba forzando.

—Continúa. —Tony lo vio con los ojos llenos de lágrimas—. Hazlo.

Rogers le sonrió tranquilo, bajando un poco la intensidad del aroma, dejando que poco a poco el cuerpo de Tony se acostumbrara a su fragancia. Beso los ojos del castaño, sus mejillas, su nariz, su frente y finalmente sus labios.

Anthony se aferro a sus fuertes hombros y abrió la boca dejando que Steve la invadiera y explorará a su gusto.

—Tony...

—Ignoralo. —Stark se abrazo al Alpha—. Por favor, ignoralo.

El cuerpo del Omega temblaba.

El Omega de Tony sabía que Steve no era su Alpha enlazado y se rehusaba a corromper el compromiso que se le impuso. Por otro lado, la parte racional del castaño, esa que le susurraba que amaba infinitente al rubio, que deseaba al hombre encima suyo, le suplicaba que lo intentará. Que no se detuviera.

Steve volvió a desplegar su aroma tentando el aguante de Tony. Lo vio desviar la boca de manera involuntaria rompiendo así el beso.

—Lo siento. —Tony lloro—. Perdoname, yo no...

—Lo sé. —Steve detuvo toda acción. Dejó que su cuerpo se calmara, dejó que el aroma se disipara y simplemente beso la frente del joven—. Iremos poco a poco. No tienes que forzarte.

—Pero....

—Te amo. —Declaró el rubio con una mirada comprensiva—. Te amo y me duele verte así. No lo estás disfrutando Tony y no es culpa tuya.

El Omega bajo la mirada y asintió.

—¿Vas a dejarme? —Cuestionó con temor el castaño.

Steve rio ante la tonta pregunta.

—Por supuesto que no. ¿Acaso no dije que te amo?

—Una vez lo hicieron. —Susurro temeroso Tony.

Rogers entendió el punto.

—No pienso dejarte, nunca. —Steve acuno la mejilla del castaño y lo hizo verlo a los ojos—. Porque mis sentimientos no solo son palabras. Daría cualquier cosa por ti, Tony. Me costó mucho tiempo encontrarte y valor para confesarme, ahora que te tengo no pienso dejarte ir.

Anthony se abrazo al .

—Te amo, Steve.