"La razón por la que escondes tu corazón. Me hace sentir que sólo estás jugando conmigo. Me seduces haciéndome creer que ya te tengo y al final te burlas porque no pude atraparte. La curiosidad se apodera de mí. ¿Piensas en mí incluso con los ojos cerrados?. Terminarás volviendo a mí otra vez. La razón es que ya no puedes esconderte. "

—Reason (KAI)

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Todos lo sabían, incluso antes de proponerlo en asamblea. El hecho de tratar que una misión como la que pretendían llevar a cabo fuese aprobada, sería en el mejor de los casos bastante complicado. Quizás por eso no les sorprendió el detalle de que esta fuese aceptada casi por una casualidad del destino y gracias de hecho a las ansias de venganza de las que Lae Vianea gozaba. Sin que ni siquiera los líderes pudieran interceder demasiado a su favor frente a un nuevo consejo nombrado precisamente para tratar de encontrar armonía en la manada.

La loba buscaba con ganas un movimiento en contra de los humanos, quería obtener el territorio de estos y hacerlos hincar las rodillas ante los licántropos hasta el final de sus días. Necesitaba que su territorio dejase de estar limitado, que su gente no tuviera que esconderse... Y aquello por supuesto resultaba una canción tremendamente atractiva para la mayoría de personas que estaban cansadas de la guerra, el dolor y el miedo. Lae ansiaba ver a los que consideraba una raza superior, liderando sobre un mundo perdido debido a las acciones de locos movidos por el poder.

Ella desde luego que no llegaba a entender todavía lo mucho que su personalidad se parecía a eso que decía odiar. Sus seguidores probablemente estarían ciegos a esas alturas del mismo modo.

—Nos moveremos únicamente por los túneles, mis hombres han estado dibujando mapas con la ayuda del brujo durante toda la noche y parece que por fin tenemos algo decente con lo que guiarnos.

Aunque la señora Jeon no dirigía la misión y sabía bien que el poder de ello recaía directamente sobre un Jung, sus palabras y movimientos hacían que todo pareciese lo contrario. Porque sin duda la loba que durante mucho tiempo fingió no tener menor idea sobre estrategías, rastreo y guerra, ahora era prácticamente la mejor de todos los presentes con respecto a las actitudes nombradas. Y a Jungkook no dejaría de dolerle nunca. Ver lo bien que en realidad su madre se movía en ese mundo que siempre fue suyo y del que ella quiso fingir mantenerse a parte. Del que por alguna razón no lo hicieron participe y causó que creyese que su padre era un hombre plenamente diferente del que en realidad era.

—¿Cómo sabemos que los túneles son seguros? No me gusta la idea de llevar a mi grupo de rastreo a través de caminos que puedan desembocar en...

Hoseok no pudo terminar de hablar y a su lado Yoongi inevitablemente sonrió mientras estiraba sus brazos para aliviar levemente el dolor que se acumulaba en su nuca tras varias horas de reunión.

—"Al menos estás mostrando una parte de tí que se parece mucho más a un ser sintiente que la que me dejaste ver al inicio de toda esta cosa. Espero que no vuelvas a cambiar repentinamente."

Hoseok giró la cabeza hacia Yoongi y apretó el agarre sobre los dedos de la mano de este antes de volver a poner toda su atención sobre la loba que de alguna manera parecía dispuesta a dirigir no solo la misión que tendrían que estar compartiendo sino también a su grupo de rastreo por completo.

—¿Realmente eres un guardián? —la señora Jeon trató de bromear. Nadie pareció divertido con ello—. Lo que quiero decir... Y perdón si ofendo a alguno de los presentes con esto, es únicamente que el tipo de guardián que yo conozco suele estar dispuesto a perderse y a perderlo todo con tal de lograr que su manada esté bien. Claro que para mí, la vehemencia y rebeldía solían estar unidas de forma inevitable al deber. Puede que haya más que algunos conflictos entre nosotros con respecto a la forma de entendimiento.

—Porque lo soy precisamente, mi tarea es la de proteger a la mayor cantidad de personas que me resulte posible y si he de elegir llevar a los lobos que siguen mis órdenes por un camino sin salida entonces más vale que aquello que espera al otro lado valga realmente la pena. No me han entrenado una vida entera para convertirme en kamikaze, da igual lo atractivo que a algunos les resulte. No hay nada bonito en morir si la muerte tan solo sirve para que otros hereden las batallas de quienes se han marchado. Si he de morir, que sea cuando mis patas estén cansadas de correr y mi mandíbula duela tras luchar.

—¿Acaso quieres prepararte para una batalla, hermano? —Yunho apoyó las palmas de las manos sobre la mesa de madera de la casa de líderes, entonces miró directamente a Joy y Sungjae tras ver a Hoseok negar varias veces con la cabeza—. ¿Y usted, señora Jeon? ¿Quiere llevar a su hijo a la muerte cuando ni siquiera parece haberlo recuperado plenamente del todo? —Jungkook se inclinó sobre la mesa, la mano de Taehyung en su pecho lo frenó de contestar precipitadamente—. ¿Qué hay de vosotros dos? ¿En qué podéis ayudarnos ahora mismo? —la mirada de Yunho atacó entonces directamente a Joy y Sungjae. Ellos dos eran quizás los lobos que menos habían intervenido a lo largo de todas y cada una de las juntanzas que necesariamente estuvieron obligados a vivir durante la mañana. Porque pretendían ser imparciales y la imparcialidad acababa con las personas desde lo profundo del corazón. La imparcialidad causaba que pareciese que nadie les importaba salvo ellos mismos—. Ni siquiera he escuchado una idea...

Silencio.

—Oh vamos, sé que ahora mismo mis oídos no pueden captar demasiado pero definitivamente esperaba que los líderes pusieran a nuestro lado una cuarta parte de sus guardias de élite. Si vamos a meternos en túneles que no se han recorrido desde que nuestros antepasados eran más animal que persona, y si lo vamos a hacer para después dinamitar la parte de estos que lleva a algún lugar que tiene que ver con humanos que ni siquiera conocemos o entendemos el poder que alcanza... En fin, solo estoy tratando de decir, que al menos deberíamos hacerlo con la espalda bien cubierta. Les he prometido a mis hermanos que estaré y necesito estar. Sea como sea.

Hoseok tragó aire. Las manos del guardián se apretaron hasta que los nudillos se le volvieron del color de la nieve que comenzaba a derretirse en el exterior.

—Bien, no he escuchado a nadie pedir refuerzos hasta este instante, cuando eso es en realidad todo lo que necesitáis hacer para que cualquiera de nosotros decida poner lo que sea a vuestro servicio —Sungjae suspiró—. Y a menudo hacéis lo que sea que os apetece por vuestra cuenta —los ojos del líder se posaron directamente sobre la madre de Jungkook. La tía de Joy no se molestó en negar la acusación, las Lunas Azules realmente actuaban sin pedir permisos y eso había salvado a muchos lobos de muertes políticas absurdas a lo largo de las décadas—. ¿Queréis a guardias de élite cubriendo vuestra espalda? ¿Guardias que cubran la espalda de otros guardias? Perfecto, pero para ello habrá puntos de nuestra montaña que tendrán que ver su protección debilitada en multitud de aspectos. Poned en una balanza lo que de verás resulta más importante. Decidme si es más importante blindar las fronteras o cruzar túneles que han estado toda una vida bajo nuestros pies en búsqueda de entradas que los humanos podrían estar usando o no. Habladme de porqué es importante tirar abajo su entrada y no la nuestra, de porqué simplemente no podemos eliminar el riesgo desde nuestras propias tierras y con la seguridad a un lado de...

—Queremos guardias que trabajen al lado de otros guardias —Hoseok golpeó con su mano la mesa, los dedos de esta recogidos en un puño—. Ni siquiera debería ser necesario que lo pidamos, da igual si algunos de nosotros hacemos las cosas por cuenta propia o no. Sois líderes, debilitados o no, haced vuestra parte del trabajo. Cuestionar porqué es importante recorrer esos túneles resulta simplemente vergonzoso. No sabemos quién los puede haber usado y si podrían seguir en activo, tampoco conocemos la manera en la que se extienden y bifurcan y hasta dónde podría llegar el enemigo por mucho que cerremos una de las infinitas posibilidades de entradas y salidas que seguramente habrá en la montaña.

Sungjae gruñó, dejando que sus ojos de omega brillasen en el interior de la estancia de la casa de líderes. Joy a su lado no mostró reacción alguna. Pocos sabían acerca de lo duro que resultaba sostener la Unión, y ahora que la enfermedad por mantenerse lejos de casa estaba empujando a su pareja hasta el borde del aguante físico... Pocos sabían también todo lo que quizás ellos dos podrían estar dispuestos a sacrificar para que la paz instaurada permaneciera. Pero se trataba de actuar con movimientos precisos y cuidadosamente pensados, seguir corazonadas podría terminar con la muerte de demasiados lobos.

—Os acompañaremos en esa misión, pondremos personas al lado de vuestras familias para cuidarlas mientras estáis lejos y si queréis que más guardias se sumen entonces podemos hacerlo de ese modo. Pero recordad, tanto en la vida de un líder como en la de un guardián...

—El peligro siempre estará presente y este no se puede esquivar por muchas personas que estén a nuestro lado ayudándonos. Si la Diosa Luna llegase a decidir que nuestra muerte se escribe en un túnel o en una arena de batalla, así será . Que ahora le tengáis tanto miedo solo implica que estáis empezando a amar y cuando uno ama, el pánico a que la vida desaparezca y con ella todas las cosas bonitas que adora, inevitablemente entra en juego. No le permitáis ganar la batalla —Namjoon descruzó los brazos que había mantenido alrededor de su torso mientras miraba la lluvia descender por los cristales de la ventana—. De lo contrario moriréis antes de tan siquiera empezar, porque vuestras cabezas se mantendrán demasiado lejos de lo que debe ser atendido con urgencia.

(***)

—No p..puedo dejar a los cachorros atrás y no p..puedo llevarlos con n..nosotros.

Esa fue la primera frase que dejó escapar entre los labios Yoongi cuando finalmente atravesaron la puerta de la casa de Hoseok. Después de un tiempo sin estar allí, el aroma a hogar se sentía más cálido que nunca pero las circunstancias no le permitieron al guardián disfrutar de ello. La fragancia de la mandarina que impregnaba las mantas y sofás sería disfrutada por tan solo un par de horas antes de que su partida se convirtiese en algo inevitable.

—Vas a quedarte, ¿no es cierto? Ahora que Jimin nos acompañará a los túneles tras su discusión con Taemin, no confías en ninguna de las personas de esta manada lo suficiente como para poner la salud y bienestar de Winter y Drako en sus manos.

—No voy a p..pedir que lo entiendas, simplemente sucederá de ese modo. Incluso y..yo he tenido que dejar mi d..deseo de vengar a mi pueblo a un lado. Ellos son lo único q..que me queda.

Hoseok negó en esa ocasión.

—Estoy de acuerdo en lo primero, no estoy de acuerdo en lo segundo. Durante todo este tiempo que ha pasado, has conocido a muchas personas dispuestas a luchar contigo y a tu lado. Empezaste la historia como un posible enemigo pero algo me dice que la terminarás siendo el mejor de nuestros aliados. Incluso has logrado encontrar un surco en el momento más inesperado de tu vida.

Yoongi entendió cada una de las palabras, gracias tal vez a que ahora Hoseok estaba expresando sus sentimientos de forma directa. Se habían acabado los juegos de tira y afloja o vaivenes, el tiempo quizás estuviese pulsando con demasiada fuerza como para permitir que sus bailes se extendieran.

—¿Y qué h..hay de tí? —el lobo de viento depositó a los cachorros sobre la mullida alfombra de la sala de estar—. ¿También estás dispuesto a l..luchar a mi lado? ¿Eres una de esas p..personas que me considera un aliado después de h..haberme desterrado de la zona de e..enemigos?

Los dos se movieron a la par, como guiados por una atracción invisible que los invitaba a colisionar. Necesitaban estar cerca, tan solo un poco más de lo que las circunstancias se lo habían permitido los últimos días. Quizás un par de centímetros...

—Creo que te lo he dejado muy claro, Yoongi.

—No lo has hecho.

Sin tartamudeos. Yoongi tenía claro que si la memoria de Adaham podía ser sostenida por una persona más en su vida, esta debía demostrar con certeza que se sentía del mismo modo. Si solo él se arriesgase a amar, quizá implicaría perderse a sí mismo.

Hoseok se envolvió la nuca con la palma de la mano y suspiró, exasperado.

—¿Cuán más claro necesitas que sea?

—Puedes usar las p..palabras de los humanos o las de l..los lobos. Solo... Comunicame lo que deseas y quieres de mí en el f..futuro que tal vez podamos o n..no vivir juntos.

El guardián altiorem alzó una ceja, sonriente esta vez.

—Realmente tomé una mala decisión al escoger a Jimin como tu maestro.

—Si eso es todo l..lo que tienes p..para decirme...

Yoongi amenazó con retroceder, las manos de Hoseok lo sostuvieron de la cintura y se lo impidieron.

—Maldita sea, escúchame bien porque no suelo ser un lobo que se moleste en hablar para demostrar lo que siente.

Los ojos de Yoongi se iluminaron y posó las manos sobre las del guardián que todavía se mantenían alrededor de la curva de su cintura.

—Tú h..habla. Y..yo escucho.

—Bien. Te quiero cerca, en mi casa y en mi cama. Quiero ver a tus cachorros crecer y formar un vínculo más fuerte en el que se me incluya. Necesito manteneros dentro de esta especie de familia que hemos creado mientras esperaba órdenes que nunca llegaron de mis superiores con respecto a tí. Y ansío ser capaz de arrastrar a la persona que dañó a tu pueblo por toda la montaña para lanzarlo a tus pies y permitir que te vengues como sé que sueñas pero la vida te ha impedido hacer. Si quieres darle un nombre o una palabra a ello, adelante. Si no lo quieres, al menos me conformaré con lograr mantenerte cerca. Sea lo que sea, debes saber, que este guardián está viviendo para cuidaros a toda costa.

El agarre de Yoongi sobre las manos de Hoseok se apretó.

—Nombralo. D..dale nombre. A lo q..que deseas.

Hoseok gruñó, exasperado. Sus ojos brillando esta vez en respuesta al fulgor que desprendían los del contrario.

—Pareja.

—Quiero q..que lo demuestres t..también.

—Estoy en contra de las marcas.

—Pero no lo estás de los vínculos, deja que mi mente y la tuya conecten del todo. Así sabré si estás bien o mal cuando bajes a esos túneles.

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Hiiiii!!!!

Tengo que pedir disculpas porque una semana más me ha resultado imposible subir el capítulo a tiempo, pero de verdad estas semanas están siendo especialmente agotadoras.

Solo espero que os haya gustado, aiiins.

Un beso,

os amo

Mel

💜