Capítulo 36
“Muéstrame la casa en la que crecí y el bosque donde solía jugar. Pequeño barco estable llévame a casa porque estoy lejos. Hasta el minuto, hasta el segundo. Puedo sentir cada respiración desarrollarse.”
—Down To The Second
(Zach Berkman)
☽
Las diferentes unidades de rastreo y ataque de la guardia de la Unión, avanzaron sin separar sus caminos hasta que lo que parecía ser la parte central del poblado de cazadores apareció ante sus miradas. Algunos caminaban en su forma animal, sin embargo la mayoría se mantenían en pie como humanos, pues conocían más que bien las consecuencias que ser descubiertos así fuera de la montaña podría acarrear sobre todo su clan. Había sido una decisión de última hora, una que no gustaba a todos pero que llegó después de que aquellos que desconocían la profundidad de la niebla se toparon con esta de frente. La vista de un lobo en su forma animal siempre era mucho mejor que la de su forma humana y por eso aquellos que abrían la marcha eran los mismos que no deberían ser vistos en estado de conversión. Nada ocultos y nada protegidos. Incluso si ellos mismo quisieron eso que ahora estaba sucediendo.
A algo como aquello se le llamaba sacrificio y Hoseok estaba bastante cansado de ello después de muchos años teniendo que ver ir y venir a guardianes alrededor de su hogar. Demasiados lobos lastimados por una guerra sin sentido. Ahora era otro el motivo que los empujaba a arriesgarlo todo pero… ¿Realmente valía la pena empezar de nuevo? ¿Otra vez? ¿Para lograr el qué exactamente?
—Esto es un maldito despropósito —algún viejo guardián sureño se quejó cerca de Hoseok y aunque este odiaba tener que ponerse del lado de los sectores más tradicionalistas, lo cierto es que lo era—. Si nos descubren, ellos serán los primeros a los que verán. No podemos estar entrando de esta manera en territorio de cazadores sin tan siquiera darle algunas vueltas al asunto. ¿No entendéis lo peligroso que es?
Se trataba de Kang, ahora que se detenía a escucharlo bien Hoseok ya podía situarlo. Si el padre de los hermanos Jung estuviera vivo probablemente lo hubiese reconocido con solo una mirada. Habían compartido batallas enfrentadas durante una vida completa y se habían visto crecer el uno al otro desde diferentes perspectivas y bandos, con un río de por medio separando sus caminos la gran mayoría del tiempo. Era una de esas personas en el sur que su padre se había atrevido a admirar como guardián en voz alta. Porque el viejo Kang era tradicionalista pero aún con todo no se apegaba a un régimen dictatorial. Cuando Kang luchaba lo hacía bajo su propio criterio. Y fue tan bueno en batalla que a ningún dirigente le importó esa vena rebelde que siempre parecía crecer bajo su cuello e hincharse cuando alguna orden no le agradaba.
Ahora ahí estaba. Lejos de encontrarse ante su padre dispuesto para luchar, se situaba cerca de dos hermanos Jung. En el mismo bando. Con menos fuerza por la edad que lo acompañaba pero la misma mentalidad. Kang no se dejaría convencer fácilmente por algo que dijera un líder, para que él luchase la batalla tendrían que darle razones suficientes. Y racionales.
—¡El viejo Kang tiene razón! —otro lobo se revolvió en su posición—. Ni siquiera sabemos quién puede estar esperándonos detrás de la niebla. Podríamos estar fácilmente caminando hacía una muerte segura.
Sungjae frenó sus pasos y sostuvo con fuerza la mano de Joy.
—Antes de venir aquí os pregunté a cada uno si estabais dispuestos a morir por la Unión y vuestra respuesta fue positiva. Más de una decena de veces lo hice. Me aseguré bien de que mis palabras fueran comprendidas.
—¡A morir en batalla o luchando por un mejor futuro, líder! ¡El suicidio es una cosa bien distinta! —y ese había sido un norteño perteneciente a la unidad habitual de rastreo que dirigía Jung Hoseok.
—Podéis estar seguros de que este sacrificio no será llamado suicidio. Somos los primeros y por lo tanto no sabemos lo que nos espera tras la niebla o en el interior de esas casas pero yo al igual que vosotros estoy aquí y si he de morir para conseguir que nuestro pueblo sea libre en el futuro, entonces lo haré.
Y entonces nuestro pueblo quedará sin líder a su cuidado. Pensó Hoseok.
—¿Y q.. qué pasa si no es necesario m..morir? —Yoongi tironeó del brazo de Hoseok hasta hacerlo inclinarse y susurró contra su oído. Empezaba a odiar el hecho de que el guardián fuese notablemente más alto que él—. Vosotros sois mucho más mitad humanos así q..que supongo que d..deberíais ser en p..parte mucho más raciocinio y no s..solo instinto animal como yo. En c..cambio esto se parece más a un movimiento arriesgado que a un p..plan elaborado.
Hoseok mantuvo su posición inclinada y giró su cabeza para susurrar contra el oído de Yoongi del modo en el que el chico lo había hecho con él anteriormente, su flequillo se deslizó contra la mejilla del muchacho. Entonces, cuando se encontró lo suficientemente cerca para hablar su nariz rozó la glándula de olor del lobo de viento por un instante y aspiró, sabía que no era el lugar adecuado para dejarse llevar pero simplemente no podía evitarlo cuando él estaba ahí, tan pegado y quieto. Casi pareciendo obediente. Para ser sincero, en realidad era un alivio sentir el aroma de la compatibilidad pulsando a su alrededor cuando estaba a punto de meter su culo en una misión kamikaze. Nunca había podido desinhibirse hasta olvidarse de su nombre con una pareja, como muchos de sus compañeros hacían antes de una batalla.
No sabía lo que era sentir el alivio antes de enfrentarse a la posibilidad de la muerte y suponía que quizás se sentía de la manera en la que ahora su cuerpo estaba comenzando a sentirse. Cosquilleante y excitado.
—Estoy seguro de que los líderes pretenden forzar una reacción en quién sea que esté detrás de la niebla para descubrir qué es lo que estamos enfrentando realmente —Hoseok llevó una de sus manos hacia la barbilla de Yoongi y jugueteó con el labio inferior de este. Cuando el chico aspiró su aroma en consecuencia, bueno, eso casi logró que algo en su interior se tambalease un poco. Estaban rodeados de guardianes que fácilmente olerían lo que les sucedía pero no podría importarle menos, de hecho era asqueroso que ni siquiera sintiese vergüenza por ello. No se fijo ni siquiera en su hermano, quien seguramente los pudiese ver perfectamente juguetear del modo más inadecuado—. Incluso si no lo han expresado en voz alta, el que hayan puesto a una decena de guardias convertidos a la cabeza de nuestra marcha a lo largo de la carretera solo puede ser considerado como una provocación. Y que entienda su método no significa que lo secunde. Para mí el sacrificio de unos pocos por el bien común no es discutible. Si hay cazadores y brujos escondidos, si logramos tocar algo que ellos no quieren que toquemos y si salen de dónde sea que estén…
—Habrá heridos —Yoongi olisqueó a Hoseok de nuevo antes de que este alejase la mano de su barbilla. Hacerlo, en cierta forma, lo tranquilizaba—. P..puede que muertos.
—Lo has pillado, chico listo —Hoseok rodeó con su brazo los hombros de Yoongi y le revolvió el cabello—. Supongo que si no morimos asesinados por algún brujo loco, podría premiarte por ello.
—Besugo.
Hoseok no pudo evitar carcajearse.
Lugar y momento completamente inadecuados para ello. Se había perdido la discusión al completo entre Kang y el líder Yook, pero maldita sea, hacía un tiempo que no se sentía tan libre como en esos momentos. Mucho menos durante una guardia.
—Sí, claro. Vuelve a decírmelo cuando recibas tu regalo, chico listo.
Volviendo al problema central, Joy y Sungjae fueron los culpables principales de tal permisividad desde el inicio pero los responsables de las unidades tenían gran parte de culpa en que esa misión hubiese sido iniciada del modo en el que lo había sido hecho. En la Unión no se tomaban decisiones sin un consenso y todo se sometía a votaciones en las que el consejo territorial también tenía enorme capacidad de participación. Aquello había sido algo que puso al fin de acuerdo en una maldita cosa a los dos hermanos Jung. No deberían tener que preocuparse por cubrir el culo de tantos compañeros mientras cruzaban un pueblo que aparentemente estaba vacío pero que a la par estaba muy lejos de ser seguro. No sabían realmente lo que los esperaba tras la nube de niebla pero lo que sí sabían era que quién quiera que tuviese el control de esta podría estar escondido todavía en ese lugar y que por lo tanto los cazadores no tenían porque haber desaparecido literalmente. En realidad, estos, podrían simplemente haber decidido esconderse para atraerlos hacía una trampa en la que la masacre estaba casi asegurada.
Y por las pistas que habían reunido, era obvio que no estaban solos. De otro modo su coche no hubiese desaparecido durante la última visita al poblado.
Podrían estar justo en ese instante ahí mismo. Mirándolos. Observando cada uno de sus pasos. Esperando hasta verlos dividirse para comenzar a perseguirlos y entonces…
Hoseok apartó la nariz de la glándula de olor de Yoongi y encendió sus ojos, todavía sujetando al chico cerca decidió poner la atención sobre Yunho.
—”Si alguno de esos lobos decide morder primero, ten por seguro que la guardia al completo estará muerta. Mira esa niebla bien, hermano. ¿Cómo protegeremos a una unidad entera cuando difícilmente podemos ver más allá de aquellos que caminan por delante de nosotros en este instante? Nuestros poderes aquí no harán demasiado cuando el oponente parece ser invisible a la mirada. En forma animal o humana, estamos luchando contra algo que va más allá de lo que jamás hemos llegado a conocer y no deberíamos estar entrando en este sitio con el ansia de ganar una batalla que ni siquiera debe ser iniciada. Sabes lo que implica que haya guardias en estado de conversión, lo que interpretarán los cazadores si llegan a verlos aquí. No es lo que aprobamos, ni lo que planeamos durante la primera reunión. Ni siquiera se parece en nada a lo que creí que haríamos hoy. No sabemos nada todavía acerca de lo ocurrido y sin embargo los líderes están jugando…”
—”Tienes razón. Sé que la tienes y sé lo que significa que haya lobos presentes en estado de conversión en medio de un poblado de cazadores pero de todos modos hemos decidido romper los pactos. ¿No es así, Hoseok? Ten fé en que no habrá ninguna batalla e intenta tenerla también en que nuestras hipótesis puedan ser correctas. Con toda esta magia negra pululando alrededor cualquier cazador se volvería loco, esos fanáticos religiosos no podrían respirar en medio de este ambiente. Confía en mí, si hay algo que pueda descubrir a nuestros compañeros entonces es posible que ese algo tenga sangre de brujo corriendo a través de sus venas. Si logramos que alguien venga a recibirnos estaremos en igualdad de condiciones porque la Diosa Luna nos ha dado algo con lo que luchar.”
Hoseok estaba a punto de enviar a Yunho a la mierda cuando su líder frenó los pasos de la unidad al completo. Muchos de sus compañeros se habían quedado en el campamento de la frontera, ni de lejos sumaban la guardia completa y sin embargo una sola vida en peligro ya sería motivo más que suficiente para replantear esa misión. O al menos eso era lo que pensaba él. Claro que, por supuesto, no se podía considerar a sí mismo uno de los guardianes más exitosos de su territorio.
—Nos dividiremos en grupos de dos y tres para inspeccionar las casas vacías que han dejado atrás los cazadores, si alguien ve o percibe algo extraño… —Sungjae solo necesitó un instante para colarse en la cabeza de todos ellos tras pedir permiso delicadamente y cuando lo hizo fue como si un soplo de alivio acariciase el interior de sus almas. Hoseok había sentido muy pocas veces antes algo similar, se trataba de una clara señal del porqué Yook había sido escogido como líder por su gente de manera casi unánime años atrás. Había poder en sus acciones pero también una extraña calma arrasadora—. “Solo tenéis que comunicaros entre vosotros, escuchad a vuestros compañeros y a aquellos que se muevan por las casas más próximas a las que estéis rastreando. Sé que a muchos os cuesta usar la comunicación mental después de años siendo enseñados a mantenerla lejos de vuestras vidas pero este es un recurso que la Diosa Luna nos ha proporcionado y es un regalo que en circunstancias como la de hoy podría llegar a salvarnos la vida. Usaremos grupos pequeños porque los grupos pequeños suponen un menor esfuerzo para la trasmisión de comunicación mental, hay menos cantidad de personas a las que llegar y por lo tanto menos fuerza necesita ser usada. Es importante que intentéis mantener todos vuestros sentidos alerta.”
Joy dió un par de pasos hacia delante. Al contrario que Sungjae, ella no usó la comunicación mental para hablarles.
—Como muchos os habréis imaginado, hoy no estamos aquí tan solo para encontrar posibles archivos que nos sirvan de ayuda. Hoy estamos aquí entre otras cosas para sacar de detrás de esa niebla a quién sea que la haya provocado. No es nuestro principal objetivo y no queremos que nadie arriesgue su vida para obtener más respuestas que aquellas que se puedan encontrar en lo que los cazadores se hayan olvidado tras sus pasos, pero si resulta que en nuestra búsqueda podemos atrapar a algún brujo —Joy sonrió—. Entonces supongo que estaremos confirmando una parte de nuestras sospechas y tal vez devolviendo a su aquelarre un poco de lo que nos han hecho.
—Durante el último año hemos sufrido una y otra vez ataques cruzados que han enfrentado a nuestros pueblos y gentes. Si todo ha sido causado por ellos, es el momento adecuado para ponerle respuesta. Escuchad bien las órdenes de los líderes de la Unión, se os ruega que si encontráis a algún brujo en este territorio lo captureis con vida pues deberá ser correctamente interrogado —Sungjae avanzó hacia el lugar en el que se encontraba Joy—. “Esta es quizás una de nuestras misiones más importantes. No debemos permitir que se hagan con el control de lo que es nuestro por derecho. ¿De acuerdo?”
Revisar las casas de los cazadores resultó una tarea relativamente sencilla. Sobre todo gracias a que la primera misión de reconocimiento y rastreo se centraría en analizar aquello que habrían podido dejar atrás los pesos pesados de la caza en ese poblado.
Las casas que la guardia tenía que inspeccionar eran poco más de veinte, entre las cuales la más importante residía en el mismísimo centro del pueblo y era bordeada por las siguientes más peligrosas en rango de atención. Si había una posibilidad de encontrar cazadores escondidos por algún sitio, quizás cabía entender que estos pudiesen ser herederos de alguna de las principales familias. Aquellos que no tenían miedo alguno a lo que suponían los dientes afilados, los aullidos o los poderes sobrenaturales.
—Axel, ese maldito hijo de puta nunca dejaría nada atrás por error —Yunho le lanzó lo que parecía un viejo cuaderno a Hoseok y el polvo que este desprendió dejó una estela sobre la poca claridad de luz que se colaba entre las ventanas del salón del primer piso de la casa. A diferencia de todo lo demás, la libreta de madera parecía vieja y estaba repleta de humedad—. Él y su hermano saben muy bien cómo trabajar. Hay pocos ancianos que hayan vivido tantas épocas. Sus firmas estaban en los pactos que hemos roto esta noche.
Jungkook y Yoongi dieron un paso a la vez y llevaron la mirada sobre el hombro de Hoseok cuando esté decidió abrir el cuaderno. Inspeccionar una casa como la de la familia de Axel requería algo más que un par de cazadores. Eran cuatro en el interior y al menos cinco lobos en conversión cubriendo el jardín y la valla que bordeaba la estructura exterior. Y aún con todo, sin importar que les estuvieran cubriendo las espaldas o no, el lugar al completo daba escalofríos. Cada pared mantenía la marca intacta de la zona en la que habían sido colgadas durante años armas de todo tipo.
Yoongi frunció el ceño sobre el hombro de Hoseok, tratando de identificar alguna palabra.
—¿Qué es esto exactamente? —Hoseok se preguntó en voz alta.
—Parece una especie de libro de familia con datos exactos acerca de la implicación de cada uno de los miembros en la caza —Jungkook estiró su brazo y señaló un par de palabras antes de comenzar a leer— El entrenamiento inicial indica que sus capacidades para el tiro son notables, no lo son sin embargo sus capacidades con el manejo de las estacas. Sigue moviéndose torpemente cuando se trata de clavar con fuerza.
—Eso es exactamente lo que he pensado —Yunho asintió, abriendo algunos cajones de la estantería sobre la que había encontrado el cuaderno—. Y aunque buscaré en cada esquina de esta casa hasta cerciorarme de que no haya nada más a nuestra vista que se nos pueda escapar… Algo me dice que si se lo han llevado todo, incluida la comida de la nevera y las despensas, que hayan dejado tan a la vista un cuaderno repleto de datos debe tener un sentido concreto.
—Quizás simplemente se lo olvidaron. Mudarse nunca es sencillo. Cuando Taehyung y sus padres se movieron hacia la cabaña del sur todavía tuvieron que regresar al norte a por cosas al menos una docena de veces.
—Sabían que tenían un hogar al que regresar y de hecho ese hogar era uno que querían mantener vivo sin importar que la Unión funcionase o no —Hoseok intervino—. Aunque odio estar de acuerdo con Yunho, esto es completamente diferente. Axel no dejaría atrás un libro en el que se exponen todas las capacidades y debilidades de los miembros de su familia si no fuese por una razón de peso.
Yoongi observó a los guardianes con cierta curiosidad.
—N..no entiendo.
—Si hay un cazador tradicional y uno que podría negarse a trabajar con brujos, ese es Axel. No sé mucho acerca de sus hermanos pero sé que ese viejo hijo de puta aprovecharía cualquier oportunidad para asesinar a cualquier lobo antes de la firma de los pactos. Mató a niños de no más de dos años e incluso lo intentó con mestizos a pesar de que sus compañeros estaban en contra de ir a por criaturas más humanas que animales, no es diferente con otros seres que ellos consideran de naturaleza que se aleja de lo natural. Axel no aceptaría jamás a un brujo en su territorio.
Jungkook y Yoongi volvieron a una posición normal cuando Hoseok se los sacudió lejos.
—¿Crees que dejó e..este cuaderno aquí porqué en sus p.. páginas podría haber algún dato sobre cómo acabar c..on quién sea que se haya unido a los brujos? Es decir, s..si realmente brujos y cazadores están trabajando juntos.
Los tres guardianes se miraron. Hoseok sostuvo con fuerza el cuaderno entre sus dedos, los nudillos de sus manos se volvieron blancos y las runas de su cuello se iluminaron a juego con sus ojos.
—Tal vez, chico listo. Me gusta tu forma de pensar pero de momento debemos seguir con la misión de rastreo. No podemos perder el tiempo con hipótesis —Hoseok volvió a sostener la barbilla de Yoongi, su dedo pulgar acariciando el labio inferior de este—. Moved el culo —pero ni sus manos ni sus ojos se apartaron del lobo de viento mientras ladraba la orden—. Yoongi, no te alejes demasiado. Voy a necesitar tu mente de chico listo mientras rastreamos el resto de la casa. ¿Lo entiendes?
—Lo entiendo.
—Jungkook y Yunho, primer y segundo piso. Nosotros nos encargaremos del tercero y el cuarto. Si sucede algo… Atacad primero y preguntad después. Me importa muy poco el alma de un brujo de mierda que quiere matar a nuestro clan. ¿Trato?
—Trato —Jungkook chocó su puño contra el hombro de Hoseok con una mueca divertida—. Temo que si me niego puedas lanzarte a mi yugular, jefe Jung.
Yunho parecía tener sus propias ideas acerca de aquello pero en lugar de protestar tan solo le dedicó a Hoseok una enorme mueca de decepción. En realidad, allí quién debería estar dando las órdenes era él. Los dos sabían eso y dejar que Hoseok tomase el papel de líder de su facción de rastreo había sido solo una manera de escapar de las posibles disputas.
—Supongo que has olvidado tu parte humana.
—Supongo que olvidas que ahora mismo estás entre lobos, Jung Yunho. Deja lo humano para cuando jodas a tu bonito chico.
—Déjalo fuera de esto. Te lo he dicho muchas veces, maldita sea.
—Sí, por supuesto. Los lobos de tu familia podrían comérselo si resulta que tienes la decencia de traerlo aquí y enseñarle quién eres de verdad. Te has ganado esto a pulso, si quieres respeto para tu humano entonces no nos hagas odiar la mera idea de él.
Fueron las últimas palabras entre los dos hermanos antes de que sus caminos se separasen con algunas maldiciones de por medio. Jungkook tuvo que empujar a Yunho hacia la derecha mientras Yoongi perseguía a Hoseok hacia la izquierda.
—Suficiente drama Jung por hoy. Moved el culo, los dos.
Ahora Hoseok mantenía la mano de Yoongi apretada alrededor de sus dedos. Los dos avanzaban a través de los largos pasillos. Se trataba de un viejo edificio de administración con demasiadas oficinas para su gusto. Algo poco común entre los cazadores pero habitual en los poblados de humanos. Después de terminar de revisar las principales casas y tras salir de la zona más preocupante tan solo con un cuaderno como prueba de importancia, decidieron ampliar la zona de búsqueda a sitios donde necesariamente se tendrían que haber movido datos en algún momento.
—”Continúa caminando cerca, Yoongi.”
—”Lo intento.”
Sostenerlo no había sido algo planeado. De hecho, si Yoongi no hubiera empezado a respirar agitadamente de forma repentina tras llegar al tercer piso probablemente nunca lo habría decidido hacer.
Su reacción era extraña. Parecía fuera de lugar y lo asustaba. No debería estar perdiendo la respiración por subir unas cuantas escaleras. Hoseok sabía que no se trataba de un mero hecho físico después de todos los entrenamientos que habían atravesado juntos. Tenía que haber algo ahí que lo lastimaba.
—”Hey, trata de frenar por un instante si lo necesitas. Solo tienes que avisar. ¿Ocurre algo contigo?” —Hoseok frenó sus pasos y se giró en medio de la penumbra del pasillo. La niebla oscurecía las estancias pero sus ojos estaban acostumbrados a las noches de la montaña. Podía distinguir a la perfección todas las facciones del rostro de Yoongi y este parecía estar al borde del colapso. Sus pupilas se iluminaban y apagaban, una y otra vez. Definitivamente algo lo estaba envenenando pero la niebla no había entrado. Las ventanas continuaban cerradas—. “¿Qué tienes?”
—”Hay un olor extraño aquí. En incesante y me impide… me impide concentrarme.”
Olor. Hoseok no olió nada hasta que fue casi demasiado tarde. Entonces su cabeza comenzó a dar vueltas y cayó casi a la par que lo hacía Yoongi. Los dos se precipitaron sobre el suelo con las manos unidas y las frentes a escasos centímetros. Entonces el chico de viento se acurrucó contra el hueco de su cuello y lloriqueó.
—R..recuerdo este olor.
—¿Qué recuerdas exactamente?
Hoseok se relamió los labios y acarició los brazos de Yoongi, una y otra vez. Aunque los dos parecían mareados, lo que sea que fuese aquel aroma estaba lastimando más a Yoongi. Él solo se tambaleaba pero el lobo de viento…
—Hei, Yoongi, dime a qué te recuerda. Ahora. Es una maldita orden. No puedes dormirte sin decírmelo.
—M..me recuerda…
—Sigue.
—Creo que lo olí en la c..ceremonia de mi coronación como líder de la tribu de v..viento. Había algo extraño en las c..cenizas que estaban q..quemando los lobos y entonces… Nos dormimos. Tengo sueño, H..Hoseok.
—Sigue hablando. Te dormiste, ¿qué más?
—Oscuridad. No sé cuánto dormimos p..pero nos despertaron los sonidos de las armas siendo d..disparadas y y..yo solo tuve tiempo de esconder a los pequeños. Lo curioso es que…
Yoongi se tambaleó y olisqueó cerca de la glándula de olor de Hoseok, adormilado.
—¡¿Qué?! ¡Habla maldita sea!
—Q..que cr..creo que no recordaba h..haberme quedado dormido hasta ahora. E..el aroma ha traído el r..recuerdo a mí cabeza de n..nuevo…
Y después de eso nada.
Yoongi se durmió por completo.
Hoseok gruñó y se obligó a sí mismo a levantarse. El mundo parecía girar a cien por hora a su alrededor mientras se inclinaba para recoger al muchacho del suelo y tomarlo entre sus brazos, bajar las escaleras podría haber acabado en desastre. Tal vez le llevó horas pero no lo hizo.
Se sintieron como días.
Y cuando finalmente pudo llegar al primer piso todo se volvió borroso. Yunho y Jungkook estaban dormidos cerca de la puerta de salida del edificio de administración.
Una trampa. Aquello tenía que ser una maldita trampa.
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Hiii!!
Qué tal estáis?
Espero que bien y espero que os haya gustado el capítulo. Diría dos cosas, una que ha habido un poco de todo y dos que por si no lo habíais notado os confirmo que sí, que a Hoseok le gusta la boca de Yoongi. Jejejeje
En fin. Qué en serio espero que lo hayáis disfrutado.
Un beso,
os amo
Mel
💜
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