Las grandes puertas metálicas
del ascensor se abrieron de par
en par para poder dar paso aquel
elegante alfa de cabellera platinada y luceros apagados. Soltando un leve suspiro observó el reloj que adornaba su muñeca, y el cual marcaban las 6:24 a.m.

Había llegado un poco más
temprano de lo habitual, todo para poder adelantar trabajo que había tenido que dejar anoche. Tomando su maletín salió de aquel cubículo mientras acomodaba su reluciente
corbata blanca. Con una pequeña
sonrisa comenzó a caminar por
el largo pasillo que daba hacia su
oficina.

Por el pasillo se terminó
encontrando con personal de la
empresa, los cuales al verlo lo
saludaban con una reverencia
de noventa grados y la cual
él respondía con una ligera
reverencia acompañada de una
leve sonrisa; »Ante todo debes
ser agradecido« Él lo sabía a la
perfección, no importaba qué
posición tuviera entre los rangos y
las jerarquías, él debía dar un trato amable y cordiala todos.

Sonrió de lado en el momento que
se terminó encontrando con un
rostro bastante familiar.-Buenos
días Kim-Saludó al beta que
sostenía una agenda y una
pequeña tableta. Namjoon le
correspondió el saludo con una leve reverencia.-¿Qué planes tenemos para el día de hoy?-Cuestionó hacia su secretario mientras ambos
se adentraban al interior de la
oficina.

El beta enseguida comenzó a
checar en la agenda todos los
compromisos que su jefe debía
atender el día de hoy.-Bien, a las
diez tiene la junta que solicitó
con todos los empleados del
departamento Bil, debe revisar
de nueva cuenta los puntos que
mandó a corregir del contrato para la inversión en China y a las cuatro tiene una comida con los dueños de la empresa poison.-Jimin suspiró asintiendo mientras prendía su computadora para revisar si la empresa de España había respondido a su correo.

-Esta bien, por favor ve a revisar
que todo esté listo para la junta
de las diez, dile a Yongsun que te
ayude a llevar las copias del reporte de gestión a la sala tres.Namjoon asintió con un simple movimiento de cabeza para seguidamente
proceder a girarse sobre sus talones y así poder hacer su trabajo, pero antes de salir de la oficina volvió a dirigir su mirada hacia su jefe.

-Presidente Park.-Habló un tanto
bajito, sabía que esto que le diría
probablemente haría molestar o
poner melancólico al alfa. A pesar
de que su llamado fue casi en
susurro logró llamar la atención del platinado, el cual le veía con ojos curiosos.-Umh, ayer en la noche su ex prometido habló.-Jimin se tensó
un poco, retiró su mirada de la
computadora para así posarla sobre el moreno delante de él.

Un par de segundos se mantuvieron
en silencio hasta el momento
en el que el alfa lamió sus secos
labios para seguidamente poder
recargar su espalda sobre la silla
giratoria.-¿Qué fue lo que dijo?
-Cuestionó hacia el beta mientras
comenzaba a jugar nervioso con el borde de los guantes colocados en sus manos.

-Dijo que se iría del país por
una larga temporada, que por
favor devolviera sus cosas a su
departamento...y que devolvería
el anillo de compromiso lo más
pronto posible.-»No puedo estar
atado a un alfa como tú, lo siento. «Ante aquel recuerdo Jimin colocó
su dedo pulgar e índice sobre el
puente de su nariz. No eran para
nada extrañas aquellas decisiones
tomadas por el omega, por alguna
razón ya las veía venir.

Él sabía que posiblemente aquel
omega superficial no se quedaría
a su lado después de saber su
condición.-Bien.-Mencionó
mientras comenzaba a escribir en
una pequeña hoja blanca.-Dile
a mi chófer que lleve todas
las cosas del señor Lee a esta
dirección.-Namjoon asintió
tomando entre sus manos aquel
pedazo de papel.-si ya es todo
lo que debías decirme puedes
retirarte.-El beta asintió, y tras una leve reverencia se retiró del lugar, dejando solo al alfa.

Jimin se quedó observando la
puerta por donde había salido su
asistente mientras un pequeño
recuerdo de su antigua relación
aparecía por su mente: »Somos
almas gemelas no inmporta el pasar del tiempo, siempre te amaré, Jimin.«
»Si, me gusta la manera en la que
hablas. Me gusta incluso como
suenan tus pequeñas palabras. «
Gruñó molesto regresando a la
realidad.

Sin duda todo eso había sido tan
ridículo.

Masajeando su cuello se paró de
su asiento para poder despejar su
mente de todos esos pensamientos, a pequeños pasos se acercó hasta la gran ventana para asi poder observar a través de ella la espléndida vista a la ciudad. Observó Cómo las personas caminaban tranquilamente por las
calles, como transitaban un par de autos y como los rayos del sol iban haciéndose más presentes.

Una ligera sonrisa se dibujó en
su rostro al ver como un hombre
caminaba sosteniendo la mano de
un pequeño niño que cargaba una
mochila de tortuga, el pequeño
daba diminutos saltos sobre el
pavimento mientras el mayor lo
veía sonriendo. Jimin retiró su
mirada al sentir a su lobo gruñir,
rápidamente dirigió su vista hacia
el bosque que se encontraba cerca
de la ciudad, al cual tenía tiempo de no ir.

Negó, debía intentar hacer un
tiempo para poder ir, sabía que a su lobo le tranquilizaba ir aquel sitio.
El correr sin ningún rumbo por los frescos árboles siempre a hecho feliz aquel resentido lobo, el cual aún no acepta su parte humana; todo debido aquél defecto.

El fuerte sonido de una alarma
logró que Park saliera de todos
esos pensamientos. Un poco
desorientado observó a su
alrededor para poder encontrar de dónde provenía aquel ruido, tras unos segundos finalmente halló el causante del sonido; su teléfono.
Negando caminó hacia su escritorio para poder tomar entre sus manos aquel aparato electrónico, observó la hora en la pantalla de cristal y ahí cayó en cuenta a la causa de la alarma.

Guardando el teléfono móvil en su
bolsillo para así rodear su escritorio y poder sacar un bote de pastillas del cajón superior. Destapó el frasco y colocó dos pastillas sobre su lengua y después las tragó junto a un poco de agua. Dejó caer su cuerpo sobre su silla, y mientras observaba sus manos cubiertas por aquel par de guantes blancos susurró un débil lo siento hacia su lobo...

"Con cada paso la sombra crece otra vez."

👀💗