Capítulo 5
- Zane no quiero... temo salir herida de esto. Y como soy solo una omega no creo soportarlo... - Dije agachando la mirada.
Zane agarra mi barbilla con delicadeza y sube mi mirada hasta conectarla con la suya.
- No eres solo una omega, Amber créeme por favor cuando te digo que he cambiado, ya no soy ese imbécil que se dedicaba a hacerte la vida imposible. Cuando venía hacia aquí, juré que nunca más menospresiaría a un omega y a ti te pediría disculpas - Dijo.
Yo escuchaba los latidos de su corazón y nunca aumentaron... Decía la verdad. Suspiré y lo miré a los ojos mientras decidía y calmaba esa lucha interna que tenía en mi.
Narra Mayka
Esperaba ansiosa poder volver a ver a Amber y saber que estaba bien, quería saber qué había ocurrido para que saliera así y quien era ese chico que Alek había dicho que era su beta, Zane.
Suspiraba nerviosa mientras miraba a todos lados hasta que por fin los vi acercarse, a ambos.
- ¡Amber! - Corrí hacia ella y la abracé - ¿Estás bien? ¿Que pasó? -
- Estoy bien May, tranquila. Solo... quiero estar sola - Dijo cabizbaja y yéndose de aquí rápidamente.
La vemos alejarse, yo miré a Zane quien estaba con la cabeza gacha apretando los dientes y con una expresión de tristeza y rabia.
- No te perdonó... eh... - Dice Alek acercándose hacia él.
- No - Dice Zane - Soy un imbécil -
Él se pasa de largo pero en lugar de ir tras Amber o dentro de la casa, se va hacia otro lado, aunque se detiene un momento pero no se gira.
- Me pondré a trabajar de una vez... iré a revisar los límites para ver que sean seguros... -
- Bien, pero no te cargues de trabajo solo por estar deprimido. No te hará bien... Zane... cálmate -
El nombrado no dice nada, solo asiente ligeramente con la cabeza, entonces se transforma y se aleja corriendo bastante rápido.
- No... entiendo - Dije, Alek me abraza por detrás.
- Ellos dos tuvieron problemas en la infancia, y saber que son Mates no le agradó mucho a Amber, ahora Zane está pagando por todo lo que le hizo -
- ¿Qué fue lo que le hizo? - Pregunté.
- No puedo decirlo yo, uno de los dos debe hacerlo, lo que paso entre ellos no me concierne a mi y no sé si ellos quieran que sepas o no - Dijo.
Asentí, entendía que él no pueda decirme. No es un tema que lo involucre y admiro que piense en cómo se sentirían ellos si él estuviera divulgando sus problemas a cualquiera... Ambos caminamos hasta dentro de la casa.
Fuimos a la habitación y decidimos ver una película, pero en lo que menos prestaba atención era en eso. Solo podía pensar en que habrá pasado entre Amber y Zane.
- Mi Luna calma, se te nota lo preocupada, las cosas se pondrán mejor - Dijo.
- Eso espero, no quiero que Amber esté desanimada... Es mi amiga -
- Entiendo, pero debes dejar que ellos arreglen sus problemas, será mejor no interferir -
- Si, lo entiendo... Esta bien -
Volvemos a prestar atención a la película hasta que esta sí nos llamó la atención y nos enganchamos bastante.
Nos quedamos abrazados como de costumbre mientras mirábamos la película hasta que mi estómago exigió comida. Me sonrojé y evité mirar a Alek quien reía levemente y entre dientes.
- ¿Vamos a comer Mi Luna? - Dice a lo que asentí sin mirarlo por la pena, nos levantamos y salimos de la habitación para luego irnos al comedor y sentarnos al lado del otro.
Las chicas del servicio nos repartieron la comida, pero entonces vimos a Amber entrar con un jarrón de jugo para nosotros, aunque se veía algo distraída aún.
Pero nos mira y sonríe tratando de no desanimar el ambiente, le devolví la sonrisa, una de apoyo, hasta que escuchamos un aullido. No sé mucho del idioma lobuno pero eso se escuchaba doloroso y suplicante...
- ¡Huh! - Me sobresalté por un sonido de vidrio rompiéndose y luego miré hacia donde estaba Amber, pero ya no estaba.
- ¿Que... Qué pasa? - Pregunté algo asustada.
- Zane está en problemas - Dijo Alek, pero se levanta y yo igual - Quédate aquí, yo iré con unos guerreros - Dijo.
- ¿Pero y si te pasa algo? - Pregunte extrañamente preocupada.
Realmente me había encariñado rápido con todos aquí, es que son realmente amables y... amigables.
- No me pasará nada, volveré sano y salvo -
- Mas te vale - Dije e inconscientemente lo besé para sorpresa de ambos.
Me acorraló la cintura con sus brazos y me siguió el beso con la misma intensidad, hasta que nos separamos y me sonrió.
- Ahora más que nunca volveré sano y salvo, mi Luna - Dijo y salió corriendo, unos guardias se le sumaron a la corrida y todos se fueron hacia el bosque.
- Tranquila señorita May, el Alpha es muy difícil de lastimar - Dice Rosa.
- Eso espero Rosa -
Narra Amber
Seguí el aullido, hasta encontrar a Zane enredado en una red de plata. Los cazadores lo tenían encadenado con cadenas del mismo material que la red y se le notaban las quemaduras por este.
Rugí con fuerza y salté sobre los hombres, logré matar a dos pero otro me enreda una cadena en el cuello estirándome hasta que la plata quemándome y apretándome el cuello hiciera que comenzara a salirme sangre.
Escuché el rugido desesperado de Zane por ayudarme pero cada vez que se movía se quemaba mucho más. Mordí la cadena que me sostenía arrancándola de las manos del cazador.
Me coloqué frente a Zane para evitar que se acercaran y los cazadores se me acercaban. Uno sacó un látigo y me golpeó el rostro, chillé del dolor, me golpeó de nuevo pero seguía sin moverme.
Me golpea pero entonces vi la oportunidad y agarré el látigo con la boca para estirarlo hasta mi y luego matarlo. Corrí y ataqué a otro pero entonces recibí un disparo en el hombro derecho.
- ¡Amber! ¡Basta! ¡Debes irte! -
Ignoré a Zane y me coloqué junto a él, agarré la red entre mis dientes sin importarme el dolor y se la quité. Era tan pesado que me costó un poco.
Mi cuello quemaba por la cadena que seguía atada a mi cuello y ahora mi boca.
- Amber debes irte ahora -
- N..No, Zane, que siga molesta contigo no significa que quiera que mueras... yo... ¡Nhg... ! -
Sentí un disparo en el pecho, creo que le dió a un pulmón porque me quedé sin aire, comencé a ver borroso y a desequilibrarme, caí sobre Zane quien me sujetó.
Regresé a mi forma humana y caí al suelo, Zane me atrapa entre sus brazos y grita mi nombre pero lo escuchaba tan lejos...
Trataba de respirar pero simplemente el aire escapaba de mi tan rápido, finalmente no pude quedarme despierta más tiempo pero si pude escuchar la llegada de otros lobos.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro