Narra Amber

- No te preocupes por lo que te digan ¿Si? - Dice Zane mientras llegábamos hasta su casa.

- Es fácil decirlo... - Murmuré casi sin voz y apartando la vista.

Suspiré mientras miraba la gran entrada de la casa de sus padres, él me acerca a su cuerpo y besa mi cien.

- Solo será una cena entre nosotros cuatro y nos iremos, terminará rápido -

Eso espero...

Zane toca la puerta y en unos momentos abre aquella señora que había evitado ver desde hace años, aunque no fue muy difícil ya que ella no salía mucho de su casa y también me evitaba.

- ¡Zane! Mi hijo, al fin nos vemos - Ella salta a abrazarlo.

- Nos vimos hace unos días mamá, no exageres - Dice él riendo un poco.

- Aún así... - Su mirada pasa a mi y cambia completamente - ¿Ella es... ? -

- Si mamá, ella es Amber - Zane me toma de la mano - Mi Mate y mi novia -

Aguanté mi rostro de incomodidad y sonreí con amabilidad. Al menos yo tendría que ser la educada ¿No?

- Es bueno verla bien, señora -

Ella me mira de pies a cabeza, no dice nada y se gira para entrar y llamar a su esposo, resoplé pero sentí el leve apretón en mi mano por parte de Zane.

- Vamos -

Asentí y ambos entramos a la casa del ex Beta de la manada, escuché las voces de los padres en la que creía era la sala pero entonces escuché más de dos voces.

- ¡Ah, ahí está! - El padre de Zane camina hacia nosotros pero abraza a Zane haciéndome a un lado - Mi campeón -

- Papá... Hola - Dice él tratando de recobrar la compostura luego de ver a la cantidad de gente aquí.

- Te ves bien, Zane, ha pasado un tiempo -

- Lo mismo digo... tío - Él sonríe un poco - ¿Qué hacen todos aquí? -

- Yo los llamé -

Pero claro... no podía ser nadie más que la madre de mi novio.

- Es una gran noticia para todos el que hayas encontrado a tu Mate... -

Todas las miradas se posaron en mi y yo me sentí realmente intimidada. Aquí solo habían Betas, Deltas u Omegas de muy alto estatus...

Habían chicas, parecían menores o de nuestra misma edad, supuse eran las primas de Zane, todas ellas me analizaban junto a las demás mujeres en la habitación. Veían mi ropa y hacían muecas como si juzgaran que no era de marca como las de ellas.

No pude evitarlo y me sentí fuera de lugar... quería irme... Pero entonces Zane me agarra por la cintura.

- Bueno, entonces me alegro que puedan conocer todos de una vez a mi hermosa novia - Zane me mira de reojo y sonríe, me devolvió un poco los ánimos y la suficiente confianza para decir algo.

- Es un placer... - Sonteí con amabilidad y tratando de que no fuera una mueca.

- Bueno, tienes razón, hermosa si es - Un chico se acerca.

- Oh, por favor, Nathan... que bajo caes - Una de las chicas habla.

- No hablo del rostro, hermanita -

Me sobresalté por el comentario tan inapropiado en un momento como este y frente a todos los demás, además de que tuvo el descaro de hacerlo frente a Zane y encima guiñarme un ojo.

Me acaba de decir fea por mi rostro ¿Y espera que lo tome como un cumplido aún así? Que idiota...

Pero entonces se escucha un fuerte y dominante gruñido que hizo sorprender bastante a los demás, Zane me coloca un poco detrás de él.

- Puede que seas mi primo Nathan pero no permitiré que hables del cuerpo de mi pareja como si yo no existiera. Al próximo comentario como ese que hagas te partiré el rostro ¿Entiendes? -

Nathan sonríe como si no le importara la amenaza de Zane.

- Nathan, compórtate, tu también Jessica - Ambos chicos se cruzan de brazos ante la advertencia de su madre, supongo - No juzguen tan rápido -

Ella se me acerca sonriendo y me toma las manos con delicadeza. Wau... es la más agradable de aquí.

- Dime cariño... ¿De qué trabajas? -

No, ahí se pudre todo. Genial, ahora tengo que decir que soy la chica del servicio en la casa del Alpha...

- Yo... eh... -

- Oh, Miriam, ella trabaja en el servicio del Alpha, nada relevante - Dice la madre de Zane.

Entonces la mujer frente a mi suelta mis manos como si estas estuvieran infectadas de algún virus y hace una mueca.

- Entiendo... si me disculpan tengo que ir al baño a... lavarme -

Realmente no quiero estar aquí... Miré a Zane y le hice una seña con los ojos para irnos y hablar en privado, por suerte él comprende.

- Enseguida regresamos - Avisa.

- Claro, pero no te tardes hijito, quiero presentarte a una muy buena chica - Apunta a una de las mujeres junto a las primas.

Alta, piel bronceada y perfecta, ropa impecable, buenos atributos y... con olor a Beta.

- Trabaja codo a codo con un Alpha muy importante - Su mamá sonríe satisfecha y complacida.

Di vuelta mi cabeza para rodar los ojos, agarré la mano de Zane y lo jalé conmigo hasta acercarnos a la puerta principal y salir de la casa.

- No puedo -

- Amber... -

- Hice el intento Zane, de verdad que quería aguantar esto pero simplemente... no puedo, y recién van empezando -

- Sé que es... realmente difícil, lo sé... pero en serio quiero demostrarles que eres perfecta para mi... -

- Es que no tienes que hacerlo... no necesitas demostrar nada -

Él suspira pero me acaricia los brazos y me atrae a él para abrazarme, me sentí mejor estando cerca de él, suspiré y me aferré a su ropa.

- Son mi familia... pospuse esto cuanto pude pero no nos dejarán en paz hasta que esto acabe... -

- Sé que es importante para ti... y me gustaría hacer esto, pero... no sé... -

- Hagamos esto... terminamos de comer y nos vamos, te llevaré al lugar que tú quieras y haremos lo que tú desees hacer... ¿Qué te parece? -

Yo me quedé en silencio para pensar pero entonces suspiré y asentí.

- Está bien... intentaré aguantar -

- Gracias, amor... -

- Pero intenta tú también que controlen lo que dicen... las criticas no son agradables -

- Haré lo que pueda... ¿Regresamos? -

Asentí, él me sonríe pero besa mi frente con ternura antes de tomar mi mano y regresar a dentro.