Maratón 3/3

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Último día de esta semana tan calurosa, me sentía más calmada ahora pero hace rato con solo escuchar a Alek pasando frente a la puerta lo agarré y lo metí a la habitación para otra ronda. Creo que no lo dejé dormir casi nada.

Aunque ahora estábamos en el sofá viendo una película, este podría ser su momento de descanso. Pero ya pasó una hora... y el calor regresó a mi...

Levanté la mirada encontrando el cuello de Alek por estar acostada sobre él con mi cabeza en su pecho, entonces pude comenzar a besarlo y lamerlo.

- ¿No quieres terminar de ver la película? -

- Prefiero hacer otra cosa -

- Hm... bueno, fue un buen descanso -

Sonreí y comencé a besarlo intensamente, pero él no se quedó atrás, aunque me agarró y sonrió un momento antes de darme vuelta y cuando me di cuenta tenía su miembro frente a mí.

- Creo que esta será mi pose favorita - Dijo pasando dos dedos por mi intimidad haciéndome estremecer, pero no tardó en pasar su lengua por mi y comenzar a chupar.

- Mhm... ah... -

Empecé a meter su miembro en mi boca y me moví a la par que usaba mi lengua, succionaba y besaba, aunque era un poco complicado hacerlo bien ya que su estímulo en mi intimidad y clítoris me hacía temblar de placer.

Aún así saqué fuerzas para mover mis caderas sobre su rostro, de manera que hacía movimientos en circulo o de atrás para adelante sobre él, dándome incluso más placer a mí misma com su ayuda.

Pero fui más rápido cuando comencé a sentir que iba a correrme, usé mis manos para masturbar lo que quedaba de él que no podía meter en mi boca hasta que ambos terminamos por corrernos.

Jadeé pero fue Alek quien volvió a cambiarnos, me acostó y se colocó sobre mí, separó mis piernas y entró en mi interior comenzando a moverse, me agarré del reposabrazos del sofá enterrando mis uñas en este mientras sentía como empujaba su miembro completamente dentro, se inclinó y alcanzó mis labios comenzando a besarme.

Llevé mis manos a su espalda y me aferré a él, sus embestidas fueron aún más rápidas y duras consiguiendo que yo me arqueara y estremeciera en mi lugar, rasguñé su espalda y gemí junto a su oído haciendo que gruñiera.

- ¡Nhg... ! ¡A..Ah... ! -

Lo presioné contra mí con mis piernas cuando se corrió en mi interior, apretó sus manos en el sofá y ambos respiramos jadeando. Lo miré un momento antes de agarrar su rostro y acercarlo para besarlo.

- Te amo, Alek -

- También te amo, mi Luna -

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- Amiga, te lo juro, deberían haber más temporadas de celo en un año - Dije sonriendo.

- Es verdad, amo más que nada estas semanas... - Dijo ella con el mismo tono que yo.

- ¿Ustedes que opinan chicos? -

- ¿Chicos? -

Ambas miramos el sofá en donde estaban ellos, ahora dormidos. Nos miramos junto a Amber un momento antes de verlos de nuevo, ambos estaban con ojeras y realmente cansados.

- Supongo que... siendo omegas es más... intenso - Dice Amber.

- Y eso que Alek dijo que el celo de un Alpha lo era más -

- Bueno... realmente lo es... pero al parecer ni él aguantó el primer celo de una Omega Luna como tú -

Me sonrojé pero reí un poco, ambas nos levantamos y acomodamos a los chicos en el sofá ya que o sino tendrán dolor de cuello y espalda. Amber consigue una manta y los cubrimos.

Decidimos acompañarlos, nos pusimos del lado de nuestros Mates sosteniéndolos, coloqué a Alek entre mis piernas con su cabeza apoyada en mi abdomen, se mueve sonámbulo para acomodarse y me abraza, pero sigue durmiendo.

Miré a Amber que hizo lo mismo con Zane, ambas nos miramos y chocamos puños antes de reír en silencio y concentrarnos en ambos chicos.

Hundí mis dedos en el cabello de Alek y le hice caricias con mis uñas levemente, con una mano en su cabello y la otra en su rostro, él se relaja a cada segundo y yo apoyé mi cabeza en el respaldo del sofá.

Creo que si me pasé un poco... Pero técnicamente no era mi culpa, sino de la naturaleza.

Aunque... he de admitir que si habían veces que usaba de excusa el celo solo porque quería hacerlo con él... espero y no se entere, pero igual no creo que se moleste... nah, no creo.

Suspiré y me bajé un poco más para abrazar a Alek y cerrar mis ojos con ganas de dormir un poco junto a él.