El regreso a Hogwarts fue más rápido de lo esperado, sus padres como siempre, se fueron en el expreso junto a sus hijos, pero está vez, no iban solo los Hills. Acacia y Kang Hajoon se encontraban en el mismo compartimiento que ellos, por supuesto que era uno de esos vagones grandes en donde caería más de la mitad de la población de Londres, así que no había problema alguno en ir todos allí, hasta las gemelas que ya estaban a cuatro semanas de cumplir tres meses se veían cómodas en los brazos de Hajoon y Deamon.

── ¿Los imaginas de adultos siendo padres? ── susurró Acacia al oído de su novio. Christopher los miró y negó, su hermano no estaba ni estaría listo para algo como eso.

No podía con la presión de ser nuevamente el hermano mayor, menos podría con ser padre.

── ¿Y ustedes dos que tanto cuchichean? Mejor vayan planeando su boda, de seguro y Christopher ya seleccionó meticulosamente a quienes invitar, desde luego, yo seré el padrino ── Deamon los bombardeó con aquellas palabras y Hajoon se río a su lado. Catelyn comenzó a lloriquear, por lo que Alina la arrebató de los brazos de su hijo mayor.

── Claro, dos padrinos. Deamon y su novio ── la sonrisa que se había formado en los labios del chico a causa de sus hermanas, se borró rápidamente.

A diferencia de las ocasiones anteriores, el muchacho saltó a la defensiva.
── No somos novios, no tiene ningún maldito sentido.

── ¿Incluso cuando se han besado?

Los padres, que escuchaban la conversación-discusión, quedaron pasmados al oír eso.

── ¡Teníamos trece años!

── Sí, Christopher tenía doce y no lo ve como un error ── murmuró Acacia, aunque debería de haberse quedado callada.

── ¿Me estás diciendo que tú y mi hermano se besaron cuando...? ¡Mejor no digas nada! No quiero oírlo.

── ¿Ya terminaron su estúpida discusión? ── quiso saber Alina.

Alina se veía mejor que el año anterior, ya no tenía ojeras y su cara había recuperado los tonos rosados. El embarazo había sido el causante de su malestar, pero había valido la pena.

── Sí ── murmuraron de manera descoordinada.

── Bien, tengo una información que podría servirles, sí, a ti también Devon ── el hombre se encogió de hombros antes de tomar a Tywin que ya no quería estar en brazos de Hajoon ──. Mi hermano me contó que el ministerio pretende infiltrarse en Hogwarts por todo lo que pasó con Cedric y que supuestamente el Innombrable volvió, cosa que nadie cree, salvo nosotros ¿No es así? Por lo que necesito que tengan cuidado, nada de llamar la atención, ni algo por el estilo y por favor, traten de estar sobrios más de tres semanas porque si la persona que Fudge enviará a supervisar el colegio los llega a descubrir, seremos historia.

── Claro, el ministerio se mete solo cuando le afecta a su reputación, no cuando niños y adolescentes corren riesgo de morir constantemente a causa de un mago malvado, genial. Eso me parece más estúpido que un chico de quince años drogándose a escondidas desde hace dos años.

── Así es el sistema, Deamon, no les interesas hasta que te conviertes en un obstáculo ── Hajoon siempre había querido ser activista, pero se le daba fatal hasta declararse ¿Cómo iba a luchar por las injusticias y desigualdades sociales si apenas podía decir un "me gustas" y al igual que Deamon, salir huyendo como un asesino en la escena del crimen? No eran tan diferentes en ese aspecto ── ¿Alguna vez la policía, en este caso, los aurores han hecho algo para combatir pequeñas injusticias creadas por el mismo parlamento? Quizás el mundo mágico no es un país, pero se rige por las mismas normas que uno.

── Ya me mareaste y todavía no llegamos a Hogwarts, quedan como cuatro horas ── murmuró Deamon ── ¿Podrías dejarme dormir en tu regazo?

Lo preguntó como si nada, como si sus padres, sus hermanas o Acacia no estuvieran allí. Las mejillas de Hajoon ardieron o eso fue lo que él sintió, pero accedió y dejó que acomodara su cabeza libremente y se durmió más rápido que una Saeta de Fuego.

── ¿Vivan los novios? ── preguntó Acacia, en vez de canturrearlo como habría hecho en otra situación.

Los pensamientos de Kang Hajoon eran un desastre, pero no se comparaban a los del chico que dormía como un niño pequeño agotado después de un día intenso de juegos. No sabía lo que Deamon sentía por él, pero Hajoon sí que tenía muy claros sus sentimientos. Estaba enamorado y no quería perder la experiencia de tener un romance adolescente, incluso si no era correspondido, incluso si solo se habían besado dos veces en todo el tiempo que llevaba él enamorado de Deamon Hills.

Tal vez esos besos fuesen lo único que llegara a obtener, porque no podía mantener una relación con una persona como Deamon sabiendo que estaba metido en las drogas y que su salud mental no era la adecuada para un muchacho de su edad. Necesitaba terapia y rehabilitación en vez de un novio y Hajoon ya lo había aprendido en un par de sesiones con el señor Hills; él no podía ser el centro de rehabilitación de alguien porque esa no era la función de ninguna persona. Deamon debía buscar ayuda por su cuenta, pero con el apoyo de las personas que lo querían y para eso, debía contar con una fuerza de voluntad inmensa, pero apenas y podía llegar al tercer mes de sobriedad.

── Te gusta mucho ¿No? ── Alina sonrió mientras contemplaba la escena de su hijo en el regazo de Kang Hajoon ──. Espero algún día pueda salir antes de que caiga como Devon, amaría ver eso.

Sí, él también lo amaría, pero con el señor tenebroso de vuelta en el juego, era probable que no todos llegaran con vida a finales de los años 90's.

── Sí, pero creo que no es la persona correcta, ni el momento adecuado.

── Podría enojarme porque es mi hijo, pero si es la persona correcta, la vida los llevará a encontrarse cuando verdaderamente estén listos.

Hajoon deseó que eso sucediera pronto, pero la rehabilitación no daba frutos de la noche a la mañana, debía ser paciente y no perder la cabeza antes de tiempo, solo quedaba esperar, aunque doliera. Todavía eran jóvenes, no era el fin del mundo.