-Vamos a dejar esto... - Dijo el castaño acariciando su propio brazo desde el marco de la puerta recolectando al pelinegro que escribía en su laptop.

En menor alzó la mirada encontrándose con los ojitos miel de su esposo cubiertos de gruesas lágrimas, su labio apresado por los dientes y... Una seriedad que daba que daba miedo.

-¿Qué?- El menor cerró el aparato y lo apartó rápidamente para ponerse de pie, su corazón se achicó de sobre manera al estar cerca de su esposo y recibir un empujón, seguido de unas palabras que le perforaron el corazón e hicieron que su mirada se nublara rápidamente.

- ¡No quiero estar contigo más! ¡Déjame de una vez! ¡No te quiero JiMin! -Gritó en medio de un desgarrador llanto, sus manos temblando y sus ojos rojos por las lágrimas, al igual que sus mejillas.

Él labio del menor tembló, quedándose quieto y sin realizar ningún movimiento, sus ojos expresando un dolor creciente. Sin entender nada, es decir, hacía unas horas estaban en el baño realizando el lavado de pelo de las niñas y apenas algunos minutos acostaron al más pequeño seáis hijos y ahora... ¿Le decía que no le quería más? ¿A qué se deben estos gritos y estas súplicas sin sentido?

Vayamos un poco atrás, justo del cumpleaños número cinco de los mellizos Yeosang y Minha.

Jungkook y Seokjin prepararon la tarta, JiMin se encargó de decorar la casa entera con TaeHyung y sus amigos ayudaron a entretener a todos los niños mientras lo preparaban.

¿Qué hay de malo en esto?

Un chico, joven, guapo, inteligente, amable, soltero...

Es un estudiante de la Universidad y es bastante atractivo, es amigo de TaeHyung y ese día, les ayudó con la decoración.

JiMin estaba harto de las descaradas insinuaciones del rubio e incluso le dijo a TaeHyung que le ayudará a quitárselo de encima por que no quería tener problemas con su esposo.

Pero él no llegó a más hasta el final de la fiesta infantil, cuando todos los niños se dirigieron a sus habitaciones acompañados de su papá Kook mientras JiMin despedía a las visitas.

Cuando ya todos, mejor dicho,casi todos se fueron, JiMin fue a su habitación donde se encontró la cabellera rubia de su esposo-Jungkook llevó el pelo rubio algunos meses y luego se lo cambio a negro y actualmente lo lleva castaño-se despojó de su camisa y se arrecostó a su lado y como de costumbre, apresó el cuerpo del mayor entre su fornido cuerpo, agitandolo y dándole un beso en los labios y fue entonces, cuando dio ese beso, que ese no era su esposo. Con brusquedad se levantó, tirando las mantas y dejando al descubierto el cuerpo semi desnudo del otro. Y en ese momento, el que si era su esposo entró.

Llevándose una gran sorpresa al ver a su esposo en esa situación.

Una confusión enorme en su cabeza haciéndolo pensar que su fiel y amado esposo le era infiel.

Su corazón palpitaba con fuerza en su interior, intercambiando la mirada entre JiMin y... ¿Cómo se llamaba ese chico? Nunca lo supo y mejor así.

JiMin, muy nervioso y ansioso por hecha a patadas al chico, intento acercarse a Jungkook recibiendo una cachetada en su mejilla izquierda.

- Jungkook, no,no, no es así, no he hecho nada-

-¿Me explicas esto entonces? -Sus ojos ardieron y dirigió una mirada rápida al que estaba tumbado en su cama-¡Y tú sal de mi cama estúpido!

JiMin vio al par de rubios y trago seco cuando su esposo fue hasta el otro furioso, diciendole del pelo y tirándolo de la cama, el chico comenzó a gritarle cosas sin sentido a Jungkook, JiMin a un lado sin poder hacer nada porque, Jungkook estaba molesto y ahora mismo no podía hacer nada con claridad debido al enfado que traía.

Pero con lo que ninguno contaba era que Hyekook entrará con el ceño fruncido y un pequeño Yeonsang cogido de su pijama, Jungkook dejó de tironear el cabello mal teñido del rubio y se acercó a su pequeño que tenía los ojos rojos y una expresión asustada.

-¿Porqué él está aquí, papá?-Hyekook llegó al lado de JiMin cogiendole de la mano, podía ser mayor pero se catalogaba como el héroe de la relación entre sus papás, aún recuerda cuando les hizo darse un pequeño pico.

Después de eso... bueno, esa complicada situación se solucionó fácil, dejando a un pelinegro y a un rubio fuera de casa, para más señas el pelinegro era Jimin. Y estuvo sin ir a casa durante más de un mes completo, Jungkook no le permitió entrar y menos ver a las seis criaturas que cada día que pasaba se preocupaban más por la relación sus padres y los más mayores quienes ya han visto demaciadas peleas entre sus padres. Yeonsang y Minha fueron los únicos a quienes Jungkook pudo salvar de ver cosas malas en ese mes, como por ejemplo a JiMin escalando por la terraza del balcón y a Jungkook pegándole con una escoba... Son infantiles...

¿Cómo regresó?

Con ayuda de Hoseok, que le dijo querer llevar a los niños a un parque acuático y Kook se los dejo con lo que el rubio no contaba era que cierto pelinegro que se coló en casa quitándole la cerradura con destornilladores...

JungKook estaba en el salón dormido y con una manta tapándole, había una taza de té aún caliente en la mesa y al observar con detenimiento su rostro, suspiró con el dolor en el pecho, su linda carita estaba ahora adornada con unas enormes ojeras y sus labios se encontraban rotos, sus ojos se notaban hinchados y... En su mano no descansaba el anillo que portaba hace ya cinco años...

Se sentó en la alfombra, dejando caer lágrimas gruesas y saladas, sin permitirse ir hasta su esposo y abrazarlo con fuerza como siempre ha hecho. Se quedó esperando dejándole descansar pues sabe que ahora mismo con los mellizos es difícil llevar todo bajo control estando él solo.

Una hora pasada y JiMin se quedó dormido.

Y cuando despertó unas manos acusaban sus mejillas, unos labios muy conocidos le daban tiernos besos en el cabello y el olor a vainilla tipico de su novio se coló en su corazón, alzando la cabeza y viendo como el mayor le sonreía dulcemente.

-Siento todo esto, Mochi... - Se disculpó el rubio pasando su dedo por la mejilla de su novio quitando algunas lágrimas que escaparon de los ojos del menor.

-N-no, y-yo lo siento Kookie... Te... quería explicar, yo no estuve con él, yo no lo toqué yo jamás te engañaría...

- Lo sé - Dijo ahora soltando un suspiro pesado-TaeHyung vino el otro día y... habló conmigo sobre su amigo-cabrónrobamaridos... - Se relamio sus finos labios y se sentó a un lado de JiMin.

-Sé que vino, estaba afuera... -Comento un tanto divertido.

- Me dijo que estuviste muy incómodo durante la fiesta, aunque yo no noté nada...

- Lo menos que quería hacer era preocuparte en el cumpleaños de nuestro bebés, Kook...

-Ya... También me comentó sobre el chico y dijo no estar seguro del por que actuó de esa forma y... tú hablaste con él ¿cierto?-dijo refiriéndose a TaeHyung y JiMin asíntio.

- Creo que fui a dar pena a todas las casas de nuestros amigos...

-Eso lo noté cuando BaekHyun me llamo asustado... Él punto es-Prosiguio viendo fijo a los ojos del menor - Te creo,Mochi y ahora sé que tengo que controlarme más por el bien de nuestros hijos...

-Nunca te engañaría,Jungkook-el rubio sonrió enternecido y asintió cuando el pelinegro abrió sus brazos indicándole a darle un abrazo.

Se acercó a él y JiMin le envolvió, dándole besitos en la cabellera rubia de su novio.

-Ponte el anillo antes de que me largue a llorar -interrumpió JiMin separándose del mayor.

Y Jungkook sonrió en grande.

Bien, se suponía que el problema ya estaba resuelto y que ahora no había nada que los pusiera en tal situación... Se suponía...

Pues varios mensajes comenzaron a llegar al móvil del mayor tan solo dos semanas después de que JiMin volviera a casa y no eran mensajes buenos desde luego.

No cuando era ese mismo chico quien puso en peligro su relación.

Jungkook no le prestó atención y al parecer su error fue no decirle a JiMin acerca de estos mensajes.

Pero vamos a adelantan un poco las cosas, justo el día de ayer en la noche, después de que JiMin se durmiera en sus sus brazos luego de una cena de la empresa a la cual Jungkook se negó a ir, un mensaje más llegó a su móvil, más bien dos fotos, una de JiMin cenando esa misma noche y otra de él, con una prueba de embarazo en la mano, sonriendo hacia la cámara y mostrando con orgullo la prueba positiva, eso acompañado de unas palabras.

'Jiminie ya se cansó de ti y ahora será padre otra vez, pero no contigo, sino conmigo. Qué duermas bien'

Y ahora, después de estar todo el día tenso y dando vueltas a las cosas, Jungkook soltó esas palabras que él no quería decir pero que para él eran necesarias. Si JiMin era el padre, tendría que hacerse cargo-un poco ilógico ya que JiMin no ha tocado a nadie más que Jungkook-y él no permitiría que estuviera casado con él y que al mismo tiempo tuviera un hijo con otra persona. Y aunque cualquier persona estuviera en desacuerdo por las tontas ideas del rubio, es cuando tenemos en cuenta todos los mensajes que le llegaron al mayor, traumándole a la hora de tomar decisiones como esta. Volviendolo indeciso y confundiendole en cosas que no tendría que pensar mucho.

Los mensajes llegaban de diferentes números y Jungkook ya no podía seguir cambiando de número, sus amigos ya comenzaban a reclamarle el porqué de cambiar de targeta y el propio JiMin le cuestionó recibiendo un 'porque si' de Jungkook.

-¡No te entiendo, Jungkook!-Grito con la voz forzada.

-¿No entiendes?¿Entiendes que le dejaste embarazado?-JiMin le vio con una enorme confusión.

-¿De qué estás hablando? ¿A quién he dejado embarazado?-Jungkook se mordió el labio, quitando con brusquedad el anillo de su dedo y tirandolo hacia JiMin.

-¡Deberías saberlo! ¡Quiero el divorcio! ¡Y que te vayas para siempre de la casa! ¡No te quiero volver a ver!

Una nueva adaptación!^^