Capítulo XXIV: Operación Jani Beg (Parte II)

Las explosiones habían dañado una buena parte del complejo de investigaciones del "Escuadrón 731", mientras que las Defensas Anti-Aéreas respondían al fuego enemigo, viéndose el resplandor de las balas trazantes, en especial las "Trazadoras"; muchos de los que estaban presos huyeron del lugar, ya que los Guardias habían ido para responder al ataque de la aviación enemiga. Reina estaba en camino y Alexander se dirigía con refuerzos para contener los motines e intentos de fuga. Una de las bombas había tenido la fuerza suficiente como para destruir una pared de las celdas y permitir que varios prisioneros, entre políticos Comunistas, LGBT, "SWJ" y demás huyeran de allí, tomando las armas de los muertos y con ello fueron abriéndose paso, en medio de una hecatombe nunca antes vista.

Uno de los Capitanes de Guardia accionó la alarma, ésta empezó a repercutir en todo el edificio y de ahí los prisioneros seguían con su fuga. Uno de ellos, entre el fuego que se alzaba, de aquel sitio, era una figura sombría, gélida, aterradora que puso la piel de gallina a una de las Feministas, quien gritó con fuerza. Allí, en medio de la devastación, Reina Yagami había aparecido, muchos la conocían de antemano, aquella que había sido la asesina que más Feministas había enviado al Más Allá y no venía sola: Sus Aliados y los "Ustachas" estaban presentes allí.

Para la OTAN, en aquellos momentos en los que creían que el raid había sido un éxito, comenzaron a verse superados por la gran cantidad de bajas en sus aeronaves, ya que los defensores no cesaban en dispararles y podían presenciar la caída de aquellos aparatos, convertidos en bolas de fuego y columnas de humo al impactar contra el suelo. Sumado también a los aviones Nacionalistas e Imperiales que habían acudido en auxilio de sus Camaradas, los cuales dieron el brazo a torcer contra el enemigo.

En varios kilómetros a la redonda, fuera del "Escuadrón 731", muchos prisioneros fugados habían conseguido instalar una serie de campamentos y armarse contra posibles "Grupos de Búsqueda" que estarían en movimiento. Alexander, viendo todo desde el edificio de la prisión, desenfundó su Pistola Parabellum, sacó el seguro y sintiendo la rabia que le invadía por dentro, aquella que Reina le había inculcado, martilló el arma varias veces y apuntó hacia el exterior, justo para donde se encontraban varios prófugos, entre ellos latino americanos, asiáticos, norteamericanos, Comunistas, Capitalistas y "SWJ". Apuntó al primero, contra un No-Binario y le voló la tapa de los sesos. El tiro fue certero, restos de materia gris y óseos, volaron por el agujero, quedando de pie, por unos últimos segundos hasta desplomarse contra el piso. Acto seguido, el joven volvió a apuntar y mató a un colombiano, el cual había alzado sus brazos en el aire.

- ¡Señor!.- Llamó uno de los Centinelas pero vio que el muchacho se hallaba exultante, con la mirada perdida y apretando los dientes con fuerza.-

- ¡Abran fuego contra los prófugos, no tomen prisioneros, mátenlos a todos! ¡Que salgan los "Escuadrones de la Muerte" ya mismo!.- Fueron las órdenes que impartió y el Centinela salió disparado para cumplirlas. Pronto, el peli blanco-plateado notó que un argentino también se rendía pero tiró a matar, siendo éste una mujer que estaba con sus hijos en brazos pero no le importó, ya que también mató a la criatura en los brazos de la citada.

Un muchacho mexicano tomó el arma de un caído y le apuntó al Bosnio, pero éste fue más rápido, atinó y le dio justo en el cuello. La bala perforó la vena yugular, la sangre manó de la herida y el joven intentó pararla con sus propias manos. Una segunda impactó contra la garganta, destrozándola y causando que éste se ahogara con aquel líquido vital. 

Desde la azotea de la Prisión, un grupo de Soldados de las "SS" instalaron nidos de ametralladoras y comenzaron a tirar contra las masas de prisioneros que seguían saltando entre los boquetes, en medio de las explosiones causadas por los bombardeos que aún continuaban, por lo que un grupo hacía fuego contra los aviones, además de contar con misiles anti-aéreos "Sea Dart" y "Sea Wolf", mientras que las Baterías de Defensa conseguían derribar a varios Drones enemigos. Los que ocuparon sus posiciones en las ametralladoras y abrían fuego contra los prisioneros, pudieron ver cómo los cuerpos de los citados caían contra el suelo, otros quedaban colgados de las alambradas que habían caído, pareciendo monigotes ensangrentados y que formaban charcos con la misma. Otros quedaron destrozados cuando las tropas apostadas en tierras dispararon con morteros, se podían oír gritos de desesperación en los prisioneros que habían perdido un brazo o una pierna, el muñón que no paraba de sangrar a borbotones, todo eso era un "Cóctel Perfecto" para Alexander, el cual tenía esas imágenes del Pasado.

- ¡Por favor, no la maten a mi hermana mayor, se los suplico, ella es todo lo que me queda! ¡Ya mataron a mi familia, déjenla vivir!.- Rogaba un muchacho albino, siendo agarrado por dos Mercenarios de EEUU, quienes lo mantenían a raya, casi como a un animal, mientras que una chica rubia platinada yacía de rodillas pero con la mirada tranquila.

No hubo nada que los contuviera, entre risas y burlas, aquel que estaba a cargo preparó su arma y le obligó a la joven para que lo mirara a su hermano menor.

- Vamos, putita Rusa, di a tu hermanito que todo estará bien, vamos.- Le "animaba", burlonamente.

- Alex...- Le llamó ella.- Pase lo que pase, sin importar lo que me ocurra, tú vas a ser alguien. Recuerda: Rotos pero nunca doblegados. Te quiero mucho, hermanito.- Fueron las últimas palabras que ella dio, cerrando los ojos, esperando su ejecución.

En aquel momento, el citado adversario jaló del gatillo, matándola en el acto y ante la mirada horrorizada junto a los gritos de desesperación de aquel niño, quien fue soltado y abrazaba a la joven con fuerza.

Ahora, en el Presente, aquella ira bullía, hervía y provocaba eso: Una auténtica matanza. Las ametralladoras apostadas en la azotea de aquel edificio no cesaban, Alexander no paraba de disparar, incluso cuando ya no estaban en el rango de tiro suyo, unos cuantos habían conseguido internarse hacia los bosques pero cuando la peli azul oscura apareció, en compañía de sus Aliados, pudo notar el estado de ira que ardía en el interior del chico peli blanco-plateado.

- Alista todo.- Le encomendó a ella, llamando su atención, muy interesada.- Nos vamos de cacería.

Oír aquellas palabras, ver esos ojos desprovistos de cualquier rastro de debilidad, llevaron a que Reina lo observara alejarse hasta sonreír, llevando sus brazos contra la espalda, agarrando las manos mutuamente mientras que sus Aliados se la quedaban viendo impresionados.

- Tal y como dije, amiga: Tienes a una verdadera máquina de matar contigo.- Apuntó Aiden.- 

- En efecto.- Comprendió ella y de ahí se dirigía hacia el exterior junto a los demás.- Antes de que vayamos tras esos desgraciados, quiero mostrarles algo.

Saliendo al predio principal, ubicados con los Soldados que se preparaban para ir a cazar, armados con sus fusiles, rifles de asalto e incluso con Artillería, tanques y jeeps, sin olvidarse de los camiones, también traían consigo armamento químico, las primeras "Bombas de Gas Mostaza", las cuales eran cargadas por varios Soldados de Rusia y Japón. Por su parte, Reina tampoco había venido sin refuerzos, ya que una serie de Destacamentos Batallones de la Infantería Imperial Nipona habían arribado, junto a la Caballería, para participar en las operaciones contra el enemigo. Varios Oficiales habían traído a unos perros de raza "Rottweiler", los cuales tenían una mirada asesina sobre los que se habían escapado, siendo alentados por los Japoneses para que les dieran caza a aquellos prófugos.

- Veo que ustedes, Mis Camaradas de Japón, ansían que sus katanas se empapen con la sangre de esos infelices. Pero descuiden, hoy será una "Noche de Baile", una en donde la Muerte se quedará regocijada con lo que harán.- Impartió Reina sus órdenes.- No me importa si los prisioneros se rinden, los decapitan a todos, incluyendo a los hijos. A las mujeres y hombres, ya saben qué hacer y si es una horrenda Feminista o alguna LGBT, les doy total libertad, al igual que a los "Ustachas", para que hagan lo que quieran con ellos.- Sostuvo la joven, mientras que los ánimos se iban insuflando cada vez más hasta alcanzar grados sumamente peligrosos y todo ante la mirada de la nipona, quien sonrió con maldad.

- Que los cañones estén cargados y listos. Que la Aviación Imperial Japonesa y China se preparen para atacar a Taiwán: Quiero esa isla caída para el Amanecer.- Ordenó Chun-li a sus efectivos.

- Destruyan los hangares del enemigo, no tomen prisioneros. Es una orden.- Añadió Ryu a los suyos, quienes acataron todo al pie de la letra.

Una vez concluidas las órdenes y toma de decisiones, se inició la marcha, saliendo por una carretera secundaria y desprovista de cualquier rastro de luces artificiales, salvo por la Luna, las Estrellas del Firmamento y de los faroles en los vehículos, metiéndose en los sendos junto a los "Einsantzgruppen" y los "Einsantkommando" que Alexander dirigía. Según las últimas informaciones provenientes de los espías que tenían, los fugados habían establecido varios campamentos con el fin de rescatados por los helicópteros de la OTAN, desconociendo que, en aquellos momentos, los aviones de los Imperios de China y Japón despegaban para bombardear a la Flota enemiga y sus instalaciones Taiwán y su Capital, Formosa. 

- Dios...nunca creí que lo lograríamos.- Dijo uno de los prisioneros fugados, mientras que iban trayendo leña un grupo de activistas por el medio ambiente.- ¡Hey, ¿qué hacen?! ¡No era que no se dedicaban a talar árboles, hipócritas!.

- ¡¿Quién eres para decirnos lo que tenemos que hacer, infeliz?!.- Le contestó una chica y con ello se desataron una serie de discusiones entre los grupos, cosa que todo el tumulto llamó la atención de las tropas desplegadas por los bosques.

Un Observador pasó el dato a los presentes y de ahí dieron la orden de ingresar, siendo los "Ustachas" los primeros en atacar el campamento, entrando a los tiros y matando a todo aquel que se moviera por allí. Desde sus posiciones, los refuerzos fueron haciendo su entrada, en especial los blindados livianos y pesados, disparando, desde las torretas, contra todo aquel que se estuviera moviendo, abatiendo y ametrallando a cualquiera que intentara huir o mostrar una defensa frente a ellos. Los "Ustachas" desplegaron, junto a los Japoneses, una brutalidad como nunca antes se hubiera visto en esos tiempos contemporáneos, en donde desenfundaron las katanas y decapitaron a los que eran activistas por el medio ambiente. 

Muchos otros fueron encerrados en las tiendas y éstas terminaron por ser prendidas fuego con antorchas y lanzallamas que portaban, incluso unas fortificaciones que cavaron, en forma de trincheras y búnkeres terminaron por ser rociadas por aquella sustancia incendiara. Reina, en primera fila, contemplaba ver a incontables prisioneros fugados arder en llamas, rogando para que les pegaran un tiro y así terminar con sus vidas, mientras que los "Escuadrones de la Muerte" de Alexander separaban a los niños de sus padres, a los cuales ejecutaban, siendo los infantes llevados hacia los camiones.

- ¡¿Qué van a hacer con ellos?!.- Preguntó un No-Binario, aterrado.

- Lo que se debería haber desde hace mucho tiempo: Alejarlos de enfermos como ustedes, defensores de la pedofilia y educarlos como es debido. Y para que lo sepas, nosotros exterminamos a basuras LGBT como ustedes, no a los homosexuales que son tolerantes.- Le espetó el Bosnio y le disparó a la cabeza.- Que no quede ningún superviviente: Mátenlos a todos.- Fue la orden gélida que dio el muchacho a sus efectivos en esos momentos, los cuales cumplieron al pie de la letra.

Por su parte, un grupo de fugados habían sido puesto de rodillas, bajo la vigilancia de varios Soldados japoneses, quienes estaban bajo las órdenes de Reina. Las katanas yacían en sus manos, pulso firme, decidido. Solo aguardaban la llamada para cometer el acto. Algunos de los capturados lloraban, gimoteaban, los que eran Comunistas fueron despojados de sus ropas y obligados a marchar, bajo las gélidas temperaturas, por la carretera. El resto fue destinado hacia otros "Escuadrones" que se encontraban a cientos de kilómetros de donde estaban, siendo sometidos a las terribles "Marchas de la Muerte".

- "Como a los Nazis los vamos a ir a buscar".- Se burló Reina de los que pertenecían al Comunismo.- Pobres criaturas con retraso mental, cómo se nota que sus abuelos creyeron en una vil mentira y miren cómo acabaron: Muertos de hambre y ahora ustedes les tocará ir al mismo Infierno que Chávez, Castro y demás mierdas humanas. Ahora somos nosotros a los que fuimos a buscar.- Sentenció ella, riéndose de la desafortunada desgracia que iba a caerles a ellos. Acto seguido, dándose la vuelta, se dirigió ella a los Oficiales nipones.- Que se diviertan masacrando a estas lacras inhumanas.- Ordenó y con ello desenvainaron las katanas, las alzaron y con un arco descendente decapitaron a los prisioneros, uno por uno. Las cabezas rodaron con la sangre, mientras que los gritos de los otros seguían sintiéndose por doquier.

Desde los otros campamentos, la Artillería había empezado a bombardear las posiciones enemigas, las primeras "Bombas Químicas" cayeron en los refugios y se liberó el "Gas Mostaza". Una densa cortina de humo amarillo fue asfixiando a las víctimas, quienes trataban de huir, en una estampida descontrolada, hacia la seguridad pero todo era en vano. Muchos caían, durante el pánico, siendo pisoteados por aquellos que eran sus seres queridos y amigos. Los que sobrevivían, trataban de ayudar a los que quedaron ciegos o ya les estaban fallando los pulmones, pero al hacerlo y salir del perímetro de los campamentos, fueron recibidos por los fusiles y rifles de asalto de los "Einsantzgruppen" y "Einsantkommando" quienes no tuvieron ni un ápice de remordimiento en matar a todos ellos, además de prender fuego las tiendas y trincheras cavadas por ellos, así como también los búnkeres precarios.

Entre el humo, el fuego y el olor a carne humada quemada, las tropas de Alexander y Reina iban sembrando el terror, los "Ustachas" se llevaban "Souvenirs" que consistían en dedos y orejas cortadas a sus víctimas, así como también otros empezaban a rapiñar a los que podían llevar dientes de oro, Perlas u otros objetos de valor, por lo que revisaban los cadáveres de los enemigos caídos. En un momento dado, el Bosnio les hizo una seña a los Soldados que portaban lanzallamas para que incendiaran otros búnkeres precarios. Inmediatamente, aquellos efectos posicionaron los cañones y una poderosa llamarada conjunta salió expulsada, vomitando fuego y con ello formó una "lengua" que envolvió el interior.

Una explosión se hizo presente y desde ahí salieron varios fugados, "SWJ" en su mayoría, envueltos en llamas, gritando por la desesperación mientras que su sangre hervía, la piel y la carne se consumían, un olor a quemado iba impregnando el aire y las fosas nasales, ácido, tan parecido a los recuerdos que Alexander tenía en aquellos momentos de su infancia, el momento en el que esos Mercenarios habían irrumpido dentro de su hogar y masacrado a su familia, matando a su hermana mayor delante de sus ojos y ahora el odio que se hallaba allí.

- ¡POR FAVOR, NO ME DEJEN MORIR!.- Rogaba un moreno, integrante de esas filas de jóvenes "revolucionarios" pero Alexander lo pateó en la cabeza.-

- La Muerte no se la puede evadir, a todos nos llega la hora de partir, sea el Valhala o el Tártaro pero a basuras como ustedes, inútiles que no valen nada para esta vida o la siguiente, solo les depara la sombra y el frío del Inframundo, en un sitio donde solo Hades conoce su destino.- Dijo con burla, dejándolo allí, desangrándose a más poder.-

- ¡Auxilio! ¡Auxilio!.- Oyó la voz de otros que se iban quemando, estando atrapados en  medio de los incendios, pero el Bosnio no les dio importancia.

- Rocíen con más fuego aquellas edificaciones, que no queden supervivientes.- Ordenó al Comandante a cargo de esa sección, los cuales cumplieron con ese pedido sin rechistar.

Pronto, alejándose de allí hacia donde estaba Reina, éste la tomó en sus brazos y la besó apasionadamente, en medio de la masacre desatada y que apenas comenzaba sobre aquella gente. 

- Lo admito: Te he dado el desarrollo de personaje que necesitabas. Ya no eres ese llorón que imploraba por piedad, sino el hombre que deberías ser, que no le importa que sus enemigos sufran o que implore por piedad. Eso me hace sentir orgullosa de lo que he hecho, pero no lo arruines, en el Futuro, con alguna tontería, un "Flashback" de piedad.- Le felicitó la chica.

- El viejo Alexander llorón ha muerto, ahora soy yo, el verdadero, aquí presente y quien manda a las escorias al Tártaro como debe ser.- Respondió con calma el muchacho, mientras que la besaba a más no poder.- Tú has sido la persona que me ayudó a ser lo que soy, aquella que me guío, en medio de esa Oscuridad y desesperación, por el camino que debía tomar. ¿Qué más puede pedir?. Nada más que estar contigo; Reina.- Sostuvo y ella acarició su rostro, las mejillas, maravillada de su "creación".

https://youtu.be/9o-xkgJtPk0

- Eres lo justo, lo necesario, una persona, un alma que ha sido demasiado "bondadosa" para este Mundo que nunca te ha entendido. Ahora, desde lo más profundo de mi espíritu, juntos y con nuestros Aliados haremos que estas basuras ardan en lo más profundo del Averno. Un digno "tributo" para "Black Donald".- Al decir aquello, varias personas comenzaron a gritar de la desesperación, cosa que ella sabía muy bien aquello.- ¿Qué pasa? ¿Tan supersticiosos son? ¿No era que no creían en ninguna "Deidad"?. Vaya, se nota que hasta los supuestos "listillos" no son más que un puñado de maricones hipócritas y llorones. No me extraña, incluso de aquellos que admiran, terminan meándose del miedo.- 

https://youtu.be/zFkLokuNfQM

- Acaben con todos ellos.- Fue la orden que impuso Alexander y de ahí se reiniciaron las "Operaciones de Limpieza".

Cada extensión, hectárea y terreno en donde se hallaban los enemigos fugados, era convertido en un auténtico campo de batalla, donde solo quedaban cuerpos, la mayoría irreconocibles, destrozados por las bombas, con sus miradas cargadas de terror, angustia, agarrándose la garganta, casi destrozándose las cuerdas vocales, los ojos en blanco, casi echando espuma cuando el "Gas Mostaza" hizo efecto en sus organismos y les causó daños severos o irreversibles. 

Mientras tanto, en medio de las masacres, Alexander había ordenado encender un viejo fonógrafo, en el cual comenzó a escucharse una vieja canción del año 1917, plena Primera Guerra Mundial y en donde tomó las manos de su pareja, "invitándola" a bailar, por lo que ella accedió y de ahí empezó su diversión, entre cañoneos, bombardeos y matanzas sin fin, donde solo los Bosques de Manchuria eran testigos de lo que ocurría, pero sin boca para relatar, con sus propias palabras, lo que se estaba llevando a cabo.

- ¡NO! ¡NO, POR FAVOR! ¡NO ME MATES!.- Rogó una pareja de Brasil.

- Ve a pedírselo a tu Presidente, el amigo de los Rojos.- Le espetó un Oficial nipón y los ejecutó con su katana, agarrando las cabezas y colocándolas en la punta de su katana.

Los Soldados de las "SS", los "Escuadrones de la Muerte" de Alexander y los "Ustachas", en compañía de los Japoneses y Chinos, se estaban dando un verdadero "Banquete" con los objetos de valor que tenían los muertos: A las mujeres les cortaban los dedos, una vez fusiladas, para sacarles los anillos, a los hombres les partían la mandíbula con cinceles y martillos con el fin de obtener "Dientes de Oro" u otros Diamantes, lanzando burlas hacia los muertos y luego eran tirados en unos barrancos, los cuales hacían explotar con las cargas de dinamita y C-4 hasta reducirlos a meras montañas de carne pulverizada y de ahí venían las lanzallamas.

Los pocos que sobrevivían a las matanzas, al ser "rescatados"; los obligaban a marchar por cientos de kilómetros, bajo la Noche y el clima gélido que hacían. Muchos, durante el trayecto, se desplomaban, débiles y sin ganas de poder moverse, por lo que los Guardias les propinaban golpes con sus bastones o las culatas de las armas. El que no obedecía era asesinado por las bayonetas y si algún Oficial o Suboficial estaba aburrido, éste reclutaba a un "Pelotón" y conformaban una serie de fusilamientos de prisioneros elegidos al azar.

- Espero poder bailar esta pieza contigo en París.- Fue el deseo que pidió Alexander a ella.

- Cuando lleguemos allí, una vez que hayamos erradicado a unas cuantas "plagas" que hay allí, nos divertiremos un montón. Lo mismo en España.- Prometió la peli azul y de ahí volvió a besarlo en los labios a su Caballero Bosnio, todo ante una noche que quedaba para el recuerdo y los libros de Historia.

Por su parte, en EEUU, en su Estación de Radio, siendo las 12 de la Medianoche, Alastor iniciaba con su nueva ronda nocturna de noticias y algo más. Un "bocadillo" muy especial que tenía preparado para todos sus oyentes.

- ¿Acaso esto es lo que queremos?. Nuestro tan "afamado gobierno" que cree en el "amor", le declara la guerra a una gente que solo busca una cosa: El Futuro. Todos lo queremos, yacemos, desde nuestros comienzos, ansiando poder tenerlo todo en nuestras manos pero, ahora, tenemos que aguantar al Señor Presidente Biden y a su Comitiva con bombardear a personas inocentes, gente que está haciendo bien en esta Mundo: Exterminar a las escorias de hipócritas, delincuentes y tantas mierdas que apoyan los tan "queridos" políticos y periodistas.- Relataba con seriedad y de ahí sonreía, aplicando sus "Repetidoras" para que sus seguidores lo escucharan.- Para mi querida amiga, Reina Yagami, no estás sola: Nosotros estamos contigo. Yo estoy contigo porque has hecho lo que nadie ha realizado en su puta vida: Abrirnos los ojos.- Siguió hablando, mientras que una muchacha peli naranja, pantalones blancos, remera celeste con una imagen de un gato negro en caricatura en su Centro, zapatillas blancas, ojos verde-esmeralda, capa con capucha y una máscara iba moviéndose por allí, escapando de la Policía y oyéndose las palabras de Alastor con su apoyo a Reina.

- "Y yo también voy a unirme a su causa, Camaradas. Cuenten conmigo".- Pensó la muchacha, desapareciendo en la noche.

[Nuevo capítulo y con la llegada de un nuevo personaje, sumado a otros más que veremos más adelante.

Justo ayer estaba viendo un "Gameplay" de un juego llamado "Under: Depths of Fear" y los Soundtracks son buenísimos, por lo que decidió aplicarlo aquí, sobre todo con el baile de Alexander y Reina durante las matanzas contra sus enemigos para darle un "toque especial" al capítulo.

Mando saludos y agradecimientos para shadowbellatrix y los demás seguidores.

Cuídense y que tengan un excelente fin de semana, Camaradas.].