Capítulo II: Un encuentro bajo un día lluvioso en Tokyo (Parte I)
Flashbacks: Sitio Desconocido
"No tengo recuerdos después de lo ocurrido hace tiempo atrás sobre esa misteriosa persona enmascarada que me salvó la vida. El Orfanato, aquel día, quedó sumergido en una profunda presión por las muertes de aquellos infelices que me hicieron daño. En su funeral, yo estaba sonriendo por dentro, me sentía feliz de que alguien les diera su merecido...pero oír aquel nombre de uno de ellos y su procedencia...Albania...Recuerdo que mi padre les tenía un profundo odio a esos traidores, lo mismo a los de Kosovo, porque traicionaron a sus Hermanos para venderse a los Occidentales. Aún tengo, en mi memoria, el día en el que nos llevaron a una marcha contra Albania y Kosovo, nunca la olvidaré, era pequeño, pero esos tiempos en los que estuve con mi familia nunca se olvidan...Sí, los extraño, todos los días pienso en ellos, en especial en Mi Natasha...Mi hermosa hermana, mi querida y dulce hermana, ¿por qué te tuvieron que matar a ti y a los nuestros?.
Pero me estoy desviando del contexto general: Un tiempo después, para el 2009, alguien me secuestró, no supe quién fue ni nada por el estilo. Solo sé que me drogó y caí inconsciente hasta que desperté, atado a una cama y en donde...uffff, no quisiera ni recordar lo que pasó después de eso".- Pensaba el joven de cabellos blanco-plateados, mientras que se veían imágenes del Pasado.
Fin del Flashbacks:
P.O.V. de Alexander:
- "Aún así, comencé a entrenar con los Nacionalistas. Estoy más que dispuesto a ir a esta futura guerra que estallará en cualquier momento. Solo deseo ver morir a todo norteamericano, inglés, francés, israelí y demás basuras que se interpongan en mi camino. Pero, por ahora, estoy en Tokyo, Japón. Es Enero, hace un frío terrible, uno que te paspa los labios y causa algunas laceraciones en la piel, para ello hay que estar bien abrigado para salir a la calle".- Relató el muchacho, quien iba caminando por las calles de la Capital Nipona hasta detenerse en un café que se ubicaba en el Centro de la misma.
Miró el letrero luminoso, había estado aprendiendo varios idiomas, entre ellos el japonés, inglés y otros más para cuando estallara el conflicto armado. Se quitó la boina negra que llevaba consigo e ingresó en el local, abriéndose las puertas de par en par. Dejó su paraguas depositado sobre un perchero, el cual goteaba a más no poder, empapando el piso y oyéndose el "cric-cric" de aquel líquido. El interior no estaba muy lleno, habían unas cuantas mesas vacías y con ello se aproximó hasta una que daba a las ventanas del exterior.
Afuera era un diluvio y sumado al clima frío era la perfecta combinación para no caer enfermo por algún resfrío. Miró para todas partes, no hay casi nadie, salvo por el personal, un grupo de jóvenes que trabajan en la barra. Una muchacha se me acerca y me habla en su idioma, yo le respondo en el mismo y pido un café capuchino con crema. Algo caliente me vendría bien para esta tarde gélida.
En la televisión estaban pasando las noticias del Mundo: América Latina, pobre gente, ¿acaso son estúpidos?. Se están manifestando contra sus gobiernos pero luego los vuelven a votar porque les prometen que les llenarán la heladera. No, no solo son estúpidos, sino de que son unos macacos, con perdón a los animales que no tienen la culpa, ellos son más inteligentes que nosotros, primero los votan y luego lloran porque se mueren de hambre. Si aprendieran a que no deben confiar en las palabras de los políticos, sean de la puta Izquierda o la Derecha traicionera, ese continente sería un sitio mejor. En otras noticias, Corea del Norte continuaba con sus ensayos de armas nucleares, disparando misiles balísticos sobre el Mar del Japón ¿y ellos no pueden defenderse?.
Vuelven a América Latina, protestas en varios países, yo sonrío, me da gracia ver que los imbéciles que se creyeron las palabras de Fidel Castro y Nicolás Maduro, ahora, están pidiendo por "elecciones libres y anticipadas". Sí, apoyo las rebeliones civiles pero no cuando se meten imbéciles de otros partidos políticos para hacer lo que quieren.
La chica que me atendió me trae el café con crema, huele delicioso, mis huesos están congelados, a pesar de que me guste el frío pero ahora voy a disfrutar de un momento tranquilo. Saco de uno de los bolsillos de mi gabardina "Trench Coat" negra un libro, su portada viene con el título "1984" de George Orwell. Un señalador se halla en la página que me lo dejé en la última lectura y procedo con la misma.
El ambiente es tranquilo dentro del café, no hay mucho movimiento, es un día de semana y muchos están en la escuela o en el trabajo. El aroma a aquel brebaje, esa infusión que despierta el alma, calma los nervios, aleja las malas tensiones. Sí, también es una "sustancia adictiva", un "Vicio" que nos corrompe igual que las drogas o los cigarrillos. Mi cabeza siente un par de mareos, otra vez esos recuerdos, ¿quién era ella?. Trato de recordar algo, incluso si tenía algún color en sus cabellos pero no, no sale nada, solo un "Vacío" que no puede llenarse ni con todos los placeres del Mundo.
Arrabales oscuros de una vida que perdí hace tiempo atrás, suplantando en mi corazón el odio que siento al ver a esos estúpidos llenarse los bolsillos con dinero manchado de sangre. Meneo la cabeza, el humo del café capuchino se eleva y con ello yo lo aspiro para disfrutar de su dulce aroma. Culpa de este Mundo, culpa de alguien que estaba detrás de todo eso, la muerte de mis seres queridos, mientras que pienso en sus nombres: Mama, papa, Boris, Katyusha, Anastasia, abuelos, tíos, Boyan, su familia, Natasha...Natasha...Natasha...
https://youtu.be/ToTrlITJgkw
Me tiemblan las manos, solo siento ganas de llorar, las lágrimas ganan la "carrera", ya no puedo más. El sufrimiento que pesa sobre mí es enorme, igual que una montaña de escombros al caer de un edificio en llamas. Me pesa el corazón, todo el cuerpo sucumbe ante las "heridas del Pasado". Siento algo cálido en mis ojos rojo-escarlata, únicamente hay un "camino" frío, gélido. Al recordar sus muertes, solo me puedo ver a mí mismo, sin poder hacer nada...¿Qué podía hacer por ellos?. Me iban a matar esos malnacidos...Ellos se sacrificaron por mí...Solo pienso que, si este Mundo debe llegar a su fin, espero que sea pronto...no, eso es una tontería, burda y sin sentido de los idiotas de los mal llamados "Ecologistas" que piensan que el Ser Humano debe morirse cuando todos tenemos el mismo derecho a vivir aquí.
Ahora mi cabeza se ha vuelto fría, reconozco ese "problema" mío, la Bipolaridad, el odio que siento y hace hervir mi sangre. La televisión muestra a aquellas personas, esos estúpidos "SWJ", cómo los odio, los desollaría como hacían antes los Europeos con los enemigos que se topaban en su camino. Me cuesta creer que este Mundo se haya vuelto tan débil, tan cobarde y estúpido...
Las lágrimas han cesado, no hubo llanto, solo dolor y con ello veo que un par de las mismas dio contra la mesa. Ahora me queda pensar en lo que vendrá más adelante, si esta guerra será un éxito o no, iremos a pelear contra la OTAN y sus Aliados, será larga, lo sé. No me queda la menor de las dudas.
De golpe, alguien ingresa en el café, lo que lleva a que me de la vuelta y compruebe su presencia. En efecto, sí lo es: Alguien llegado hasta aquí...No es nadie importante, un cliente común y corriente. Dejo de pensar en ello y tomo mi libro, luego le doy un sorbo a mi café y con ello me concentro en la lectura del mismo.
George Orwell y su libro "1984", un "Profeta" en medio de la "Guerra Fría" y la gente lo tildó de loco pero no lo era, sino de que fue un "Visionario", tenía razón de cómo sería el Futuro de la Humanidad al tener gobiernos que solo pensaban en mantenerse enquistados en el poder y que no les importaba el bienestar de su pueblo. No importa que fueran de Izquierda o Derecha, ambas posturas eran una mierda y estaba en lo correcto. El personaje de Winston Smith, pobre tipo, vivir en una "Sociedad Para-Policial", donde hay cámaras hasta en las pantallas que tienen en sus casas, ¡qué vida de mierda!. Esas son mis primeras expresiones con respecto al contexto en el que se halla el protagonista.
Fin del P.O.V. de Alexander:
Mientras que el Bosnio leía, en la televisión notó que, en el Canal de las Noticias, el Presidente de EEUU iba a ir de visita a Japón pero habían manifestaciones en su contra. Una ligera sonrisa cruzó por su rostro.
- "Parece ser que las perras de los yanquis han dejado de estar atadas. Espero que sea verdad".- Pensó tras lanzar una risilla y le daba vuelta a otra página. Una vez que terminó leer el libro, hasta donde llegó, procedió a dejar un señalador y a beberse otro trago del café, el cual se le iba a enfriar en cualquier momento.
Mientras tanto, en las afueras del Café, una figura entraba en aquel sitio, abriendo las puertas y quitándose una campera contra la lluvia y que venía con una capucha, dejándola colgada en el perchero. Alexander, por su parte, había vuelto a leer y con ello se quedó concentrado sin notar que alguien iba hasta su posición.
- "1984" de George Orwell, interesante lectura tienes contigo.- Habló una voz femenina, quien llamó la atención del joven y éste alzó la vista.
- ¿Disculpa?.- Preguntó el muchacho y vio que se trataba de una chica.
- ¿No le molesta que me siente aquí?.- Señaló a un asiento que tenía frente a él. El peli blanco-plateado asintió con la cabeza y ésta fue hasta donde se encontraba.-
- George Orwell, un digno escritor que deberían estar enseñándoles en las escuelas para que los niños no sean unos ignorantes y más en países como éstos, donde te ponen que los Norteamericanos son los héroes pero no es así: Fueron unos malditos genocidas.- Explicó y aquello tomó por sorpresa al Bosnio, quien cerró su libro.
- Bueno, en eso le puedo dar la razón, Señorita.- Sostuvo éste pero la muchacha le miró con seriedad al ir por ese camino formal pero lo aguantó.- Hoy, la sociedad de estos días, está plagada de pura propaganda de EEUU y ni hablar de China junto a sus atrocidades pero nadie se atreve a decir nada.- Apuntó el muchacho y de ahí miró la pantalla de la televisión, donde habían varios actores de EEUU queriendo solidarizarse con los pobres.- Asco me dan esos tipos, no me importa de donde vengan, ellos están llenos de dineros y joyas, incluso propiedades pero luego se quieren hacer nuestros amigos. Que se metan esa porquería en el fondo del culo, ahora no saben qué hacer con los problemas que han ocasionado en EEUU: "Black Live Matters", si hay algo que odio más que al "Ku Klux Klan" son a los "BLM", malditas mierdas, los enviaría a los Gulags junto a todos los Rojos y Liberales.- Apretó Alexander los dientes con fuerza y eso llamó la atención de la chica, quien sonrió ante ese gesto.
- Veo que no estoy sola en este Mundo de mierda.- Empezó a hablar la muchacha.- Cuéntame una cosa: ¿Eres de Europa?.- Preguntó y él asintió con la cabeza.
- Del Este, los Balcanes.- Respondió a su interrogante.
- Yo también, de Croacia pero también soy de Japón y España.- Agregó la muchacha más información al relato.-
- Yo nací en Sarajevo, Capital de Bosnia-Herzegovina, Marzo de 1989.- Continuó Alexander y es ahí donde comenzó a escribirse los orígenes de una historia, una que acababa de aparecer en las páginas de los libros que ellos mismos iban a tener consigo.
Un inicio de algo sumamente importante para el Futuro.
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