Miguel Arango

Estoy muy molesto y solo escucho como Mia y Yina se burlan de mí después de contarles el acontecimiento que pasó con mi móvil.

En el día de hoy no he estado de humor, ya que la reunión en la empresa no se llevó a cabo porque los inversionistas nos dejaron plantados como estúpidos.

Por otro lado papá se la paso regañando a Milan toda la mañana acusándolo de que todo es su culpa porque no logró convencer a los inversionistas por llamada telefónica y esa fue la razón de que nos vieran la cara.

Ahora para contemplar el hermoso día se me atraviesa en el camino una completa inútil que a simple vista demuestra que no tiene ni un 5% de educación.

Me pateo provocando que callera al suelo y causando que mi móvil quedará con la pantalla destruida. El aparato quedó tan mal que no ha vuelto a encender más y están descarada que no fue capaz de pedirme unas simples disculpas.

Estoy apunto de ir al área de recursos humanos del hospital para presentar una queja por el personal que se cargan y la despidan. De seguro encuentran otra que limpie los baños y pisos con más educación.

Me palpita la sien del estres, me aflojó la corbata del traje porque siento que me estoy ahogando.

-Miguel no es para tanto -me dice Mia que la noto con mucho más animo- Estas exagerando ¿Por qué no te compras un móvil nuevo y ya?

Me cabrea su comentario, el problema aquí no es comprarme un móvil nuevo si no que no puedo sacarme de la cabeza el abuso que cometió conmigo esa inmadura. Se merece Pal de fuertes nalgadas.

-Pues claro que me tengo que comprar un móvil nuevo, porque este ya no enciende -tiro el móvil en la cama al lado de Mia.

-Deja de gritar -opina Yina- el dinero te sobra para comprarte más de 10 teléfonos última generación.

-¿Yina porque no me compras tu un móvil nuevo? -es muy fácil dar opiniones cuando no estás en los zapatos de otros.

-Porque no eres mi novio para regalarte nada, no tengo tan mal gusto -bromea pero no estoy para juegos.

-Ya dejemos de hablar de tu móvil
-dice Mia- Mejor hablemos de Alma que vino a verme.

-Alma es un encantó -opina Yina.

-Si por eso vine quería conocerla. Milan me envió un mensaje de texto sobre que ella estaba aquí, pero por el percance que pase con la loca afuera del elevador llegue tarde.

-Ya después la conocerás y te aseguro que te caerá muy bien. Ella estará en el mismo salón que Lucía y yo.

-¿Esta estudiando arquitectura?
-pregunto. Me gustan las personas que se esfuerzan por ser profesionales.

-Si, así que tendremos una ingeniera más para la empresa Los Arango.

La puerta se abre de golpe cuando entra mamá sin tocar haciendo que la habitación quede en total silencio.

Trae puesto un vestido rosa ajustado al cuerpo, con unos tacones dorados, en la cabeza tiene un sombrero del mismo color del vestido y el pelo recogido en una cola. Para completar el atuendo lleva una gafas de sol oscuras marca Prada.

Así es mi madre, se arregla mejor que mis hermanas y para ella su competencia es ella misma. Cada día trata de superar el atuendo del anterior.

-¿De qué tanto hablaban? -se quita los lentes- Desde que entre dejaron de hablar.

-Mamá estábamos hablando de Alma -le responde Mia- Vino a verme hoy.

-¿Qué cosas dices? -mamá enfurece- ¿Dejaron entrar a esa delincuente aquí? ¡La seguridad de este hospital es una mierda!.

Nuestra madre tiene un temperamento muy fuerte. Ella asegura que Alma es cómplice de todo lo sucedido.

-El comisario fue a la empresa a informarnos de las investigaciones
-continua con sus peleas- Nos dijo que esa chica es pobre y que está en la universidad gracias a una beca.

-¿Qué tiene de malo que sea pobre?
-le pregunta Mia, la conozco muy bien está a punto de llorar.

-Soy tu madre, tengo más experiencia de la vida que tú y conozco muy bien como son esas clases de personas. Ella planeo todo para luego quedar como la heroína de esta historia.

-Mamá creo que estás exagerando
-intervengo en la conversación porque sé que no va a terminar bien.

-¡¿Exagerando?! -me grita.

-Tienes que calmarte -intento acercarme a ella, pero no me deja.

-¿Cómo quieres que me calme? Intentaron asesinar a mi hija quemándola viva y la responsable de todo viene aquí a burlarse de todos. ¡Ya mismo voy a comunicarme con el comisario para que emita una orden de arresto contra Alma Velasco!.

Truena como la jefa de nosotros que es. Siempre se ha comportado como si fuera nuestra jefa no como madre, nos trata como si fuéramos sus empleados los cuales deben de obedecer órdenes y hacer todo lo que ella dice.

Se dirige hacia la puerta para irse a ordenándole al comisario o mejor dicho pagarle un fajo de billetes para que arreste a esa chica sin pruebas solo porque ella lo ordena.

Mamá toma la manilla de la puerta para abrirla y antes de girarla. Mia se quita el aparato de oxígeno que tiene pegado a la nariz y....

-¡Mia no! -le grita Yina.

-¡Espera no hagas eso! -intento detenerla, pero no me deja.

Mia saca fuerzas de donde no tiene y me aparta tirándose de la cama como una salvaje para detener a mi madre.

Todo sucede muy rápido, a nuestra madre no le da tiempo de salir, cuando se voltea ya mi hermana está tirada en el suelo revolcándose del dolor porque en el proceso se lastimo el brazo que tiene vendado por las quemaduras.

-¡¿Por qué haces eso?! -mamá empieza a gritarle regañándola en vez de preocuparse- ¡Te quieres terminar de joder el brazo por defender a esa muerta de hambre!

No me encuentro con humor para ponerme a discutir con mamá así que cargo a Mía levantándola del suelo y subiéndolo a la cama. Está llorando, se que es por el dolor en el brazo y porque mamá siempre es un problema.

-¿Mia estás bien? -le pregunta Yina.

-No... yo....

Intenta responder, pero no puede.

-No .... No puedo... respirar....

-¡Joder el oxígeno! -grita Yina muy preocupada.

No está respirando bien, su pecho sube y baja de una manera rápida. Está tratando de tomar bocanadas de aires, pero no puede, el aire no le pasa por la garganta.

Me da una impotencia verla así. Amo a mis tres hermanos, pero ella es una excepción, es mi niña bonita y me duele que este sufriendo.

Mamá continua con los insultos y regaños. Tengo tantos deseos de gritarle lo que siento, que de tanta rabia que siento ahora mismo por dentro mejor callo.

-¡Yina busca al doctor! -le ordenó y sale disparada a buscar ayuda.

En un abrir y cerrar de ojos Yina regresa con el doctor.

-¿Qué sucedió aquí? -es lo primero que dice el doctor al ver en el estado que se encuentra Mía- Tienen que salir y esperar a fuera.

-¿Doctor dígame porque mi hermana no puede respirar? -pregunto. Cada segundo que pasa ella empeora.

-La vamos a estabilizar, pero tienen que salir ¡ya!

Captamos el mandato y los tres salimos de la habitación, vemos cuando llegan dos doctores más junto con dos enfermeras. Cierran la puerta al entrar y nosotros quedamos afuera a esperar buenas respuestas.

Pasan minutos y minutos, estamos en silencio, nadie dice nada. Yina no para de llorar, mamá está pegada al móvil como si nada estuviera pasando y yo solo le pido a Dios que por el bien de mamá que mi hermana esté bien.

Le quitó el móvil a Yina para llamar a papá y contarle lo que está pasando, ya que ella está en llantos y no se le entiende nada de lo que dice.

En menos de 15 minutos llega papá, pero no vino sólo lo acompaña Michelle y Leonardo.

-¿Qué fue lo que sucedió? -pregunta papá con su rostro lleno de preocupación.

-Ella estaba bien está mañana -dice Michelle- me encuentro muy extraño todo esto.

-¿Cómo está mi niña? -es la voz de Lola que acaba de llegar, junto a ella subió Luis que estaba abajo en el estacionamiento en el Mercedes de mamá esperándola.

-¿Qué hace usted aquí? -le pregunta mamá a Lola.

-Es que la jovencita Michelle estaba en casa y alcance a escuchar cuando salió muy rápido porque Octavio le había avisado que el estado de Mía ha empeorado. Corri a buscar mi bolso para alcanzarla pero cuando salí ya no estaba, Tome un taxi y......

-¡Calla! -mamá no la deja terminar- No me hagas tener que recordarte cual es su puesto aquí. ¡Eres una simple sirvienta! Váyase a la mansión a cumplir con su trabajo que para eso es que le pagamos -Señala a Luis- Y usted espéreme abajo que esto es un asunto familiar. Los dos limítense a tener que tirarlos a la calle.

-Familiares de Mía Arango -interrumpe el doctor saliendo de la habitación evitando que yo interceda en la conversación y mande a mamá a la mierda.

-¿Cómo esta mi hija doctor? -pregunta papá- ¿Qué fue lo que ocurrió?

-Solo tubo un pequeño descontrol porque se quitó el oxígeno pero ya logramos estabilizarla. También se lastimó las quemaduras del brazo pero nada de que preocuparse.

-¿Podemos verla? -pregunta Michelle.

-Si ya pueden pasar -le responde el doctor- Les pido que estén más al pendiente de ella. No puede quitarse el oxígeno porque sus pulmones están débiles y tiene una pequeña infección en las vías respiratorias. No respirara vía oxígeno de por vida, pero si hasta nuevo aviso.

-Gracias, tendremos más cuidado -respondo y papá me da una mirada asesina. Se los regaños que se avecinan.

Los doctores junto a las enfermeras salen de la habitación y entramos todos nosotros menos Luis que le teme a mamá y se largo al estacionamiento.

Mia esta con los ojos cerrados media dormida, pero desde siente nuestra presencia los abre. Está muy débil, lo puedo notar en sus ojos que se le empiezan a llenar de lágrimas.

-Necesitó que me digan ya mismo ¿Porqué Mia no tenía el oxígeno y como se lastimó el brazo? -Pregunta papá y se le nota a leguas que no está de humor.

Todos quedan en silencio, nadie se atreve a responder nada.

-¿Dónde está Milan? -continua papá con el interrogatorio- Se supone que él tenía que estar aquí porque le tocaba cuidar a Mia todo el día.

Todos siguen en silencio. Ahora que recuerdo tengo que investigar a Milan que se está desapareciendo últimamente casi todos los días sin decir nada.

-¡¿Nadie me va a responde?! -el silencio continua.

Yo si le daré las explicaciones que espera, la culpable de todo esto es mamá que se la pasa atropellándonos cada vez que se le antoja. No les importamos, solo se empeña en que hagamos nuestras responsabilidades bien y en qué la familia tenga una buena imagen.

En la casa y en la empresa se hace lo que mamá diga, pero ya es hora que de papá se ponga los pantalones.

-Mamá es la culpable -lo suelto sin decoraciones.

-Miguel -me intenta detener mamá.

-Si usted es la culpable y solo usted
-intervine Yina dándole la cara de frente a mamá- Mia se quitó el oxígeno para detenerla porque usted se iba para donde el comisario a convencerlo de encarcelar a Alma Velasco y....

-¡Cállate! -la interrumpe mamá.

-Eres mi tía y te adoro, pero en estos momentos no te voy a defender. Tratas a tus hijos como mierda, nunca los escuchas. Michelle quiere mostrarle al mundo lo que puede hacer a través del arte, diseñando esculturas. Pero te has empeñado en convertirla en una modelo, cosa que ella nunca ha querido hacer. Solo porque fue tu sueño desde pequeña y no pudiste cumplirlo.

-Yina, déjalo -Michelle trata de hacerla que calle, pero continúa.

-Milan nunca te dijo que quería ser ingeniero y lo obligaste a estudiar una carrera que no le gustaba y Mía nunca le preguntaste que le apetecía estudiar, solo fuiste y la inscribiste en la universidad con la carrera de arquitectura.

-Yina... -Mia también intenta hacerla callar, pero sigue poniendo a mamá en su puesto.

A decir la verdad estoy orgulloso de ella.

-Debes de asumir tu responsabilidad como madre de una vez por todas porque nunca lo has sido. Tu esposo y tus hijos te ven como la dictadora de la familia.....

La calla con una bofetada en la cara que se escucha por toda la habitación. Haciendo que Yina caiga al suelo y quede aturdida.

-¿Mamá como te atreviste? -le pregunta Michelle mientras ayuda a levantar a Yina.

-No tenía que pegarle -le dice Lola mientras se acerca a Yina para revisarla.

-¡Le ordene que se largará a la mansión! -le grita mamá- ¿Qué parte de eso no entendió?

-¡No le hables así! -le grito, no puede tratarla así. Lola siempre ha estado para nosotros.

La habitación se vuelve un caos de todos discutiendo al mismo tiempo. Mamá quiere sacar a Lola por la fuerza, pero si se mete con ella, se mete con nosotros. En realidad, ya estamos en guerra desde que le puso la mano a Yina.

-¡Baaaaaasta! -Grita papá haciendo que todos quedemos en silencio- Verónica quiero que te vayas.

Todos en la habitación estamos sorprendidos por la reacción de papá echando a mamá del hospital.

-¿Perdón? -Ni ella misma se lo cree.

-Tienes que irte, no quiero discutir así que hablaremos en la casa.

-No me iré.

-¡Si te irás! -papá se enfurece- Nuestra hija empeoró por tu culpa y tuviste el descaro de pegarle a Yina que también es como una hija para mí. No te lo vuelvo a repetir ¡vete!

Mamá abre la boca para responderle, pero luego la cierra y toma un suspiró, da media vuelta para largarse y antes de salir....

-Verónica -papá la detiene- Tienes prohibido hablar con el comisario sobre Alma Velasco.

No responde nada solo termina de irse.

-Papá yo te puedo asegurar que Alma no es cómplice, ella solo me salvó la vida.

-Lo sé hija -responde papá- El comisario me dijo que por el interrogatorio que le hizo pudo darse cuenta que ella no tiene nada que ver, sólo te salvó la vida y tenemos que ser agradecidos. Las investigaciones están abiertas, pero no contra ella.

-Gracias papá.

-Mia ¿Como te sientes? -le pregunto.

-Estoy bien -me sonríe.

-Ok. Entonces Leonardo y yo no vamos -tenemos asuntos pendientes y estamos retrasados.

-¿A dónde van? -pregunta papá.

-Pablo llega hoy, tenemos que ir a recogerlo al aeropuerto-le responde Leonardo diciendo las primeras palabras. Él es ya parte de la familia pero no le gusta opinar en asuntos familiares- Recuerde que usted lo mando a buscar.

-Ya era hora -dice papá, se que está feliz porque se estaba volviendo loco sin su contable- Dígale que lo espero mañana a primera hora en la empresa.

-Mia que te recuperes - se despide Leonardo de mi hermana. Yo le doy un beso en la coronilla y nos largamos.

Abordamos el Porsche y nos dirigimos al aeropuerto. Llegamos 40 minutos después y ya es de noche. Alcanzamos a ver a Pablo en la entrada que se acerca desde que nos ve y no trae buena cara me imagino que tiene más de una hora esperando.

-Hasta que por fin llegan -se acerca Pablo con 5 maletas parece que se trajo a Colombia entero.

-Mia se puso grave porque se quitó el oxigeno con una pelea con Victoria -le dice Leonardo mientras se dan un pequeño abrazo.

-Lamento mucho lo que ha pasado con Mia -me dice mientras lo estrecho con un gran abrazo- Mañana a primera hora iré a verla.

-No lo creo, papá fue muy claro en qué tienes que estar en la empresa desde que salga el sol.

-No si quieres llévame a la empresa está noche y duermo haya.

-Muy chistoso.

Los tres entramos al Porsche y conduzco en dirección al apartamento de Pablo, en el camino nos cuenta cómo le fue en Colombia con el abuelo.

-Oigan ¿Qué tal si nos paramos unos minutos en el bar del centro de la ciudad y nos tomamos unos tragos? -Leonardo dando ideas.

-No he tenido un lindo día y......

-Por esa razón -me detiene- Debemos distraernos, yo tampoco tuve un lindo día. Es más no he tenido una linda semana porque desde la semana pasada no he follado con nadie.

-Busca novia o cásate para que resuelvas ese problema -le responde Pablo.

-No gracias, usar lo mismo me aburre.

5 minutos Después llegamos al centro de la ciudad y nos detenemos en el bar que estamos acostumbrados a visitar. Estacionó el Porsche en el parqueo para que Leonardo se calle y nos bajamos para entrar al lugar.

Atravesamos la puerta principal del bar, elegimos una mesa y nos acomodamos los tres. Se acerca una de las trabajadoras que lucen de revistas a tomar la orden. Pedimos una botella de vodka y no tardan en traerla.

Cada uno se sirve un trago y se escucha Taste de Tyga ft Offset.

Aunque tengamos mil problemas brindamos porque estamos los tres juntos. Los tres mejores amigos.

-Miguel te llamé un montón de veces está tarde y respondía la operadora -me dice Pablo poniéndome a recordar la maldita forma como perdí mi móvil.

Me cabrera de solo recordar.

-Si. Siempre tienes tu iPhone en la mano y en toda la tarde no te lo he visto ¿Dónde está? -pregunta Leonardo.

-Esta en la basura -se me empieza a calentar la sangre- Una desquiciada en el hospital me tumbo contra el suelo y tenía el móvil en la mano, cuando lo levante la pantalla estaba desbaratada y no quiso encender más.

Estoy que voto humo de las entrañas y mientras a mi me provoca rabia a ellos le produce gracia.

Se están burlando de mi a carcajadas.

-Me imagino jajajajaja el rostro que tenias jajajajajaja -Leonardo no puede ni hablar por el ataque de risa.

-Seguro le dijiste que te lo pague y la condenada te vio la cara jajajajajaja -Pablo también hace su chiste, hasta se ahoga con el tequila y lo hace toser.

-No es gracioso -Estoy apunto de perder el control.

-Lo conozco perfectamente seguro le dijo que le pidiera disculpas -continua Pablo.

-Si y ella no quiso -le responde Leonardo. Hablan como si yo no estuviera y las risas no paran.

Voy a encontrar a esa maldita y se las verá conmigo, me voy a cobrar el que mis amigos se burlaran de mí. Pero mientras tanto tengo que callar a estos dos.

-¡Pidoooo! ¡Pido! ¡Pido! -paran de reír porque saben lo que se avecina- Leonardo y Pablo deben de comprarme un iPhone último modelo. Tienen 24 horas para hacerlo.

-¡Joder! ¡Hijo de puta! -se queja Leonardo.

-Estas me las vas a pagar -me amenaza Pablo.

-¿Qué pasó que ya no se ríen?

-¡Pidoooo! ¡Pido! ¡Pido! -exclama Leonardo.

-No puedes retarme con nada que tenga que ver con mi móvil nuevo.

-Tranquilo, nada de Eso.

Está muy tranquilo, se que se saldrá con la suya.

-Miguel tienes que pagar 3 mujeres de este bar para cada uno y el hotel para que pasemos la noche.

-Si quieres te la pagamos a ti, pero Miguel y yo no estamos interesados -lo regaña Pablo- Miguel tiene novia recuerda.

-A Miguel le importa un saco de mierda Lucía, es su novia, pero se coge a cualquiera y tu ni novia tienes.

-Si tengo novia.

-¿Desde cuándo? Haaaa conseguiste novia para Colombia. Tranquilo que están bien lejos, ella va a coger haya y tu vas a coger aquí.

-No, mi novia es Yina.

Ninguno responde nada, estamos sorprendidos nunca nos esperábamos algo así.

-¿Desde cuándo te coges a mi prima? -le suelto la pregunta.

No me importa que sea su novia. Pablo es un buen hombre y es mi mejor amigo y Yina es adulta, lo que me molesta es que no lo sabía.

-Esa no es la pregunta -me contradice Leonardo- ¿Desde cuando te gusta Yina? Has incumplido una de nuestras reglas.

-Si la regla de que no puede haber secretos entre nosotros -le digo.

-Y la regla de que no se puede mirar la mujer del otro.

-¿Qué? -reacciona Pablo- ¿Estuviste con Yina?

Estoy perdido en esta conversación y me acabo de dar cuenta que mis mejores amigos me esconden secretos.

-Eres de lo peor -lo insulta Pablo- ¿Cuándo te acostaste con ella? ¿Fue después que me fui a Colombia? -se le quiebra la voz- Ella me dijo que nunca había estado con nadie, que esperé a que se sienta preparada.

No sé si es el efecto del Tequila, pero empieza a llorar.

-Yo la amo y le dije que no me importa tener que esperar lo necesario ¡Responde! ¿La amas? ¿Te acostaste con ella?

-No -responde Leonardo cortante- Solo fue un beso, hace 10 años en el viaje de vacaciones que hicimos en familia a Acapulco.

Se tenía ese secreto callado desde hace 10 años.

-No se los comenté porque fue algo sin importancia. Solo fue en beso, no hay atracción entre ninguno de los dos y jamás hablamos de ese tema.

-¿Seguro? -pregunta Pablo más calmado.

-Es toda tuya, eres mi mejor amigo y nunca te mentiría.

Se dan un abrazo con significado de paz, pago la cuenta y nos largamos del bar. Abordamos el Porsche y está vez si me dirijo a casa de Pablo, en poco tiempo lo dejo frente a su apartamento, lo ayudamos a bajar las maletas y nos despedimos.

Minutos después estoy camino a casa de Leonardo y como estamos solo le suelto la pregunta que me ronda en la cabeza.

-¿Leonardo te acostaste con ella en Acapulco?

-¿Enserio vamos a volver con el mismo tema? -me responde.

-¡Responde! -piso el freno de golpe y nos detenemos en medio de la autopista- ¿Te acostaste con ella si o no? Responde o te bajas aquí y te vas hasta tu casa caminando que por cierto faltan más de 10 cuadras.

-¡Si! -me grita- ¡Si me acosté con ella! Pero fue algo si importancia.

-¿En que maldito momento paso eso?

-Fue la noche que regresamos de la playa, nos quedamos despiertos solos y pues pasó.

-Ustedes tenían apenas 15 años en ese entonces.

-Si ya éramos lo suficientemente razonables para lo que pasó.

Este día ha sido de locos, no veo la hora que termine. Leonardo me oculto un secreto por 10 años y Yina está jugando con los sentimientos de Pablo con la típica mentira de que es virgen.

-Amigo perdón por no contarte, pero la verdad es que nunca he sentido nada por ella, ni ella por mi. Sabes cómo soy, siempre me he dado la que me gusta. Aunque ella ni siquiera me gustaba, pero son cosas que pasan en la vida.

-Tienes que decirle la verdad a Pablo.

-No, eso no. Yina y yo juramos jamás decirle a nadie y olvidar todo.

-¡Joder Tío! Está engañando a nuestro amigo diciéndole que es virgen.

-Esta enamorado, tú viste que se puso a gritar como un bebé porque solo se imaginó que tuvimos algo imagínate que lo sepa.

-Pues que se desilusione entonces. Yina es mi prima pero no puede hacerle eso a Pablo. Yo siempre voy con la verdad y esta vez no te voy apoyar.

-Escucha.....

-¡No quiero escuchar nada más de ese tema -no lo dejo terminar- Tienes una semana para que le digas la verdad a Pablo o se lo digo yo.

Piso el acelerador de mala gana antes de que me arrepienta y saqué a Leonardo de mi auto a patadas para que se largue hasta su casa caminando. Espero que me ahorre las ganas de tener que ir a contarle todo Pablo.

Mañana volveré al hospital a visitar a Mia y también a verificar en qué área trabaja la loca que me desbarató el móvil. Le voy a decir todas sus verdades a la cara de que no puede atropellárme y desaparecer como que no hizo nada.