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Capítulo 5: Furia.

No encontrábamos frente a aquel monstruo rana, Josef había desenfundado su espada estando atento a cualquier movimiento de la criatura esperando algún movimiento, mientras el monstruo nos miraba con sus ojos, posándose primero en mí y luego en Josef.

-Lucy, no tenemos mucho tiempo, intenta que llegue lo más alto que puedas.

Exclamo Josef empuñando su espada con todas sus fuerzas, mirando hacia el monstruo con temor, el cual al verlo titubear ataco dando un zarpazo con su mano derecha, sus garras impactaron con la espada de Josef lanzando chispas mientras empujaba al alquimista hacia atrás casi haciendo lo caer sobre el rio.

-¡Josef!

Grite queriendo auxiliarlo pero mis piernas no se movieron, algo me gritaba que no me acercara.

-¡Lucy no pierdas el tiempo, necesitamos a Rohei y a los demás!

Grito Josef con enojo en su voz, empuñando su espada con su mano derecha atacando con toda su fuerza al monstruo golpeando su piel verrugosa, abriéndole una herida, pero demasiado superficial, recibiendo otro golpe del brazo izquierdo del monstruo.

Empuñe mis manos retrocediendo ante las palabras de Josef, tenía razón, debía hacerlo o... ambos moriríamos.

Extendí ambas manos hacia el cielo comenzando a reunir toda mi magia, recordando las lecciones de mi profesora, para aumentar la distancia, debía concentrarme, imaginar que era una flecha y juntar toda mi magia para liberarla en un solo momento.

-[Ardan llamas del inframundo]

Exclame con todas mis fuerzas, estirando mis manos hacia el cielo haciendo que el fuego cubriera mis brazos juntándose en la palma de mis manos, las brasas danzaban con el viento, mientras Josef intentaba defenderse de los embates de la criatura intentando alejarla de mí.

-¡Fuego!

Grite disparando el hechizo hacia el cielo el cual avanzo y estallo a unos metros por arriba de las copas de los árboles, su explosión resonó algo débil, sin dudas estaba muy lejos de la potencia de un adulto.

-Maldición, fue demasiado débil.

Susurro Josef, antes de recibir la patada del monstruo el cual lo lanzo hacia los pastizales a la orilla opuesta del rio, cayendo entre el pasto crecido.

Intente gritar su nombre, solo para ver como el monstro giraba su rostro hacia mí, su mirada me helo la sangre, abrió su enorme boca, liberando un par de burbujas de su boca las cuales avanzaron hacia mí, rápidamente intente correr hacia Josef, mientras las burbujas me seguían, y la criatura avanzaba saltando hacia mí, sin ninguna prisa.

Josef no tardo en volver a levantarse destacando entre la hierba, estaba lleno de rasguños por el combate y las ramas, con algo de sangre sobre su pañuelo azul. Empujo sus piernas pateando el suelo corriendo hacia mí.

-¡Lucy, aléjate de esas burbujas si te tocan no te permitirán moverte!

Exclamo Josef dándome la señal de correr hacia los árboles, lejos del agua, mientras el corría para interceptar al monstruo Rana, atacándolo por la espalda cuando apenas había tocando tierra, enterrando su espada en la joroba del monstruo, haciendo que sus verrugas liberaran una nueve morada siendo aspirada por Josef, quien inmediatamente comenzó a toser, rápidamente el monstruo lo lanzo hacia el suelo sacudiéndose lo de encima.

-¡groooooh!

Josef volvió a levantarse aun sujetando su espada atacando otra vez con todas sus fuerzas pero siendo repelido por la criatura, cuyas afiladas garras golpearon su pecho rasgando su armadura y lanzándolo una vez más al suelo.

El alquimista grito con toda su fuerza, mostrándose herido y agonizante, mientras yo corría dando un giro para regresar al boque volviendo a atravesar el rio, llegando a la playa donde habíamos enfrentado a la Fauga, corriendo hacia el boque, sin embargo, pronto vi como el suelo se acercó bruscamente hacia mí.

-¡Aaaaahhhhh!

Tropecé cayendo al suelo, rápidamente intente levantarme sin embargo tan pronto lo hice, sentí algo mojado en mi espalda antes de verme rodeada por la misma burbuja que intentaba escapar. Atrapándome en su interior como si me hubiera devorado, dejándome completamente empapada en un abrir y cerrar de ojos.

-No, no, no.

Dije sacando mi daga para intentar atravesar la burbuja en donde me encontraba, comenzando a dar puñaladas con fuerza, pero mi daga rebotaba en toda ocasión.

La burbuja era un poco más grande que yo, permitiéndome estar parada, desde su interior se sentía el aire húmedo y pesado, sus paredes habían teñido el mundo de azul, haciendo que todo se sintiera mojado empapándome cadáver que golpeaba sus paredes.

-¡Ayuda!

Volví a gritar intentando reventar la burbuja desde adentro sin éxito, entonces.

-Ribit...

Escuche el croar de una rana girando hacia atrás viendo al monstruo parado a unos metros de mí, con su mirada posada sobre mí, guarde mi daga antes de intentar golpear la burbuja con todas mis fuerzas para que esta se moviera, pero no hubo resultado.

Paso...

Lo intente otra vez, solo saliendo empapada.

Paso...

No me rendí, creía que si se podía, solo que me faltaba fuerza.

Paso...

Empuje con todas mis fuerzas intentando que la burbuja girara.

Paso...

Nada funcionaba, era imposible.

Con temor gire hacia atrás mirando como ya la rana se encontraba frente a mí, a un metro o tal vez menos.

Abrió su boca preparando su lengua.

Respire profundo, mientras la rana disparaba su lengua la cual atravesó la burbuja sin romperla, pero logre esquivarla saltando hacia un lado, sin embargo, alcanzo a rozarme su punta de hueso, la cual hizo que todo mi cuerpo se entumeciera en un instante.

Su lengua salió de la burbuja tan rápido como entro, para luego volver a posicionarse.

Mi cuerpo no respondía, me dolía moverlo, mientras que respirar me era cada vez más difícil.

-Her...ma...ni...to.

Dije, sintiendo como el sueño empezaba a ganarme.

Entonces empecé a escuchar unos pasos rápidos saliendo del bosque.

Sin dejar que el monstruo volviera a atacar, una mancha roja salió de los arboles golpeando al monstruo rana con una poderosa patada lanzándolo de regreso al rio, remplazando la figura del monstruo, se encontraba un ave de gran tamaño y de plumaje rojizo, Coco había llegado protegiéndome erizando sus plumas.

Pero un faisán nunca estaba lejos de su jinete.

Un segundo destello rojo abrió atravesó la membrana de la burbuja haciendo que esta se transformara en agua rompiéndose y dejándome caer al suelo.

-¡Lucy!

Escuche y vi a mi hermanito tomarme en brazos, vi su rostro lleno de temor abrazarme, revisar si estaba bien, mientras me aplicaba cura.

-Her...manito...

Susurre intentando levantar mi mano hacia él, suavemente la tomo, se sentía tan cálida.

Sin embargo esa calidez se volvió en un fulgor sofocante.

Mis ojos vieron como su rostro preocupado se transformó en una ira sin precedentes.

Suavemente me levanto colocándome al pie de un árbol.

-Coco, cuida a Lucy, Luna, Mateo, busquen a Josef.

Hablo mientras giraba desenfundando una hoja color azul y tomando su escudo en su mano derecha, parándose frente al monstruo.

-¿Lucy estas bien? tranquila, no te asustes.

Escuche la voz de Luna mirando como se arrodillaba junto a mi extendiendo sus manos, aplicándome un hechizo el cual hizo que mi cuerpo dejara de doler, que la parálisis se fuera en un instante, y el sueño se esfumara.

Sin embargo mi mirada se posó la mayor parte del tiempo en mi hermanito, su rostro serio era notable intentando mantener controlada su ira mientras el monstruo se levantaba para enfrentarlo.

-[¡Fury!]

Exclamo sin titubear, cambiando su expresión a un enojo palpable, sentí como su magia se sobrecargo hasta estallar, envolviendo su cuerpo en un aura carmesí, su espada de un brillo azul, se transformó en una hoja al rojo vivo, sus ojos se volvieron de un rojo único como si fueran las brasas de una fogata, mientras su cabello había comenzado a liberar brazas como si estuviera encendido.

Al verlo el monstruo retrocedió bufando antes de abrir su boca liberando un torrente de agua de su boca, el cual avanzo hacia mi hermanito.

-[Muro de fuego]

Suavemente extendió su mano creando un escudo carmesí, el cual recibió el impacto del agua dispersándose en varias direcciones dejando ileso a mi hermanito.

Al terminar el disparo, disperso el hechizo de protección comenzando a correr hacia la criatura empuñando su espada con fuerza, dando un tajo contra el monstruo, el cual intento defenderse con sus brazos recibiendo una corte en ambos.

Sin embargo, aprovecho para atacar con su lengua rápida como un rayo disparándola hacia mi hermanito.

Un arco carmesí fue trazado al instante por la hoja radiante, cortando la punta de hueso, lanzándola hacia los pastizales haciendo que su lengua se desangrara.

Claramente podía notarlo, mi hermanito se había vuelto más rápido, ni siquiera había visto ese corte.

-¡[Atravesar]!

Grito haciendo que el color de su espada se volviera más intenso, procediendo a dar una estocada contra el monstruo, quien dio un enorme salto hacia atrás esquivando el ataque, cayendo sobre los pastizales.

Haciendo que mi hermanito lo persiguiera, ni siquiera lo pensé dos veces, subí sobre coco, tome sus riendas y lo hice avanzar cruzando el rio para ver el combate.

[Fury]

La habilidad que se me había otorgado al despertar como guardián, solo la había usado una vez, contra Emma, o eso pensaba.

Pues ahora era diferente.

Ver a Lucy tan herida, tan asustada, me hizo sentir mi sangre hervir, todo en mi cuerpo gritaba que debía acabar con ese monstruo de cualquier forma.

Deja que tu ira te consuma.

Escuche en alguna parte pero a su vez en ninguna.

Criaturas así, merecen la muerte.

Una voz femenina llego a mi oído.

Úsalo, antes de que sea demasiado tarde.

Ese último susurro, casi lo había sentido sobre mi oreja.

-[Fury]

Solo pronuncie esas palabras, activando mi habilidad, encendiéndome, sintiendo como toda mi ira se convertía en magia nutriendo mi cuerpo en un instante. Toda esa ira se enfocó en el monstruo.

Era diferente a cuando enfrente a Emma, parecía ser menos poder, pero de alguna forma más estable, más adecuado a mi cuerpo, más acorde a mis estadísticas, incluso mucho más fácil de controlar.

Sin embargo, mi enemigo no era ordinario, era rápido y fuerte, con una gran capacidad de salto.

Corrí contra el cruzando el riachuelo hacia el pastizal viendo como este caía con dificultad, pareciendo no haber previsto su salto.

Al verme sacudió su brazo derecho liberando un corte formado de agua, el cual corto el pasto forzándome a esquivar dando un salto hacia al lado.

-Si vas a luchar con magia entonces hare lo mismo [Ardan llamas del inframundo] ¡Fuego!

Grite liberando una llamarada mayor a lo que esperaba contra el monstruo quemando parte del pastizal, pero escapo dando un gran salto hacia arriba, al verlo note su depresión, pareciendo querer aplastarme, por lo cual salte para esquivarlo.

Al golpear el suelo este tembló con fuerza, haciendo que el lodo volara por todos lados, pero ahora estaba al alcance de mi espada.

Sin pensarlo dos veces ataque con fuerza dando un tajo contra el monstruo, cortando su piel verrugosa, pero su carne era dura, difícil de cortar, apenas logrando hacer una herida no muy profunda a lo largo de su espalda.

Cuando el monstruo sintió el calor y el dolor del corte en su espada, este grito con fuerza, sus verrugas se tensaron antes de liberar una capa de humo morado.

-¡Rohei no lo respires!

Escuche un grito de Josef, forzándome a saltar hacia atrás extendiendo mi mano, volviendo a invocar fuego, el disparo encendió la espalda de la criatura empujándola hacia atrás quemando sus verrugas provocando un gran dolor en esta y levantando una nube de humo.

-No falta mucho, prepárate bestia.

Dije apretando el agarre de mi espada mientras empujaba el suelo bajo mis pies comenzando a correr hacia el humo.

Observe la silueta de la criatura entre el humo lanzando una estocada directamente hacia su pecho.

Sin embargo mi arma no alcanzo su pecho, su mano izquierda se interpuso recibiendo mi arma, siendo atravesada por mi hoja, quedando su punta a pocos centímetros de su pecho, pues la cruz había chocado con la palma de su mano.

Rápidamente intente retirar mi espada, pero antes de hacerlo sus garras se cerraron sobre mi mano atrapándome.

Mis ojos se abrieron al sentir sus afiladas garras atravesar mi piel, sus ojos se enfocaron en mi como si me sonriera burlándose. Levanto su mano derecha sobre su cabeza dando un golpe con gran fuerza, el cual bloqueé con mi escudo, pero el impacto recorrió todo mi cuerpo haciendo que mis viejas heridas volvieran a doler.

Una y otra vez, continuo golpeando con más y más fuerza, casi riendo, las chispas volaban con cada golpe, mi brazo comenzaba a cansarse mientras sentía mi mano derecha debilitarse.

Mi ira solo aumentaba, estaba cansado de este momento.

Cansado de aquel monstruo.

Harto de enfrentarlo.

Frustrado por no haber podido proteger a Lucy.

Enojado por el daño que le hizo a ella y a Josef.

No dejaría que siguiera viviendo más tiempo.

-¡No creas que me tienes acorralado maldito monstruo!

Grite repeliendo el brazo derecho del monstruo antes de atacar con mi escudo dándole un potente golpe en su espada, empujándolo hacia atrás levemente, sus garras rasgaron la piel de mi mano izquierda al hacerse hacia atrás atrapando ahora la cruz de mi espada.

-[¡Atravesar!]

Grite activando aquella técnica sacudiendo mi mano derecha trotando partiendo su mano en dos, aproveche su desconcierto para arrancarle el brazo izquierdo de un tajo antes de que el efecto de atravesar terminara.

-¡GRROOOOO!

Grito el monstruo con dolor, antes de abrir su boca otra vez listo para disparar un chorro de agua.

-[Muro de fuego]

Pronuncie el hechizo al instante, invocándolo al final de la punta de mi espada mientras estaba extendía, quedando a menos de un metro del monstruo, recibiendo el impacto del ataque del monstruo dispersando el agua hacia los lados.

Al terminar el hechizo del monstruo desactive el escudo de fuego, empuje mis piernas hacia el frente y sostuve mi espada con todas mis fuerzas dando un tajo contra el monstruo.

Sobre su vientre se dibujó una línea roja atravesándolo, la cual pronto comenzó a sangrar mientras el monstruo me miraba manteniéndose paralizado, antes de caer hacia atrás dividiéndose en dos mientras su viseras salían de su cuerpo manchando el pasto.

Respire aliviado observando como el monstruo había muerto casi al instante, luego mire hacia mi espada.

-Antes me había costado cortarlo... pero...

Susurre observando mi mano, preguntándome si antes solo me había contenido, contrario a ahora.

Mire a mi alrededor, mis brazos y mis piernas, el aura que salía de mí, apenas me había dado cuenta de mi apariencia.

Suspire intentando tranquilizarme, sintiendo como mi corazón se calmaba así como el ardor que surgía de este iba bajando hasta desaparecer, sentí como mis heridas comenzaron a doler, así como sentir a mi brazo derecho paralizarse.

-Sus garras tambien eran venenosas...

Dije suspirando viendo como mi espada se resbalaba de mi mano cayendo al suelo, el dolor comenzó a recorrer mi cuerpo mientras el sueño parecía hacerse presente.

-¡Roooeee!

Escuche un grito girando levemente, antes de que Luna se abalanzara sobre mí abrazándome colocando sus manos sobre mi espalda.

-[Te rezo a ti angel que nos protege de las enfermedades, concédeme el poder para realizar un milagro] Remedio angelical.

Canto mientras me abrazaba con fuerza, pronto sentí como los efectos del veneno comenzaban a desaparecer hasta volverse solo un recuerdo. Pero ella no se detuvo, pues procedió a aplicarme cura casi de inmediato.

-Luna... ya estoy bien puedes soltarme.

Dije sintiendo como su abrazo empezaba a sofocarme.

-¡No! ¡Volviste a ser tú, ahora no te soltare!

Me respondió haciendo que mirara hacia mis compañeros, Josef se estaba recuperando, Mateo lucia preocupado mirándome con cierta desconfianza, por ultimo Lucy me miro con ojos llorosos pronto vino corriendo para unirse al abrazo.

-Espera... ¿A que te refieres con que no era yo?

Pregunte mirando hacia Luna quien levanto su mirada hacia mí.

-Tu magia, tu corazón, cambio por completo, no te reconocí.

Sus palabras me sorprendieron, pues ¿qué significaba eso? Nunca había escuchado nada así viniendo de Luna.

Fury.

Era la primera vez que activaba esta habilidad, generándome más preguntas que respuestas.

¿Cuál era su límite?

¿Por qué me cambiaba?

¿Qué más ocultaba?

Mirando hacia un espejo, reflejando el momento en el cual Rohei y compañía se habían reunido tras derrotar a la atrocidad, se encontraban dos entes en medio de un bosque oscuro.

-Impresionante, derroto a un monstruo de nivel 15 domesticado.

Comento uno de esos seres con una voz profunda que hacía eco entre los árboles.

-No es sorpresa, los guardianes tienen esa capacidad, fue un buen primer combate.

Comento el segundo ser con una voz femenina con un toque maternal.

-Esas cucarachas liberaron a ese monstruo para controlar a los granjeros, así que esta pequeña victoria es más importante de lo que parece.

Reafirmo la primera voz reafirmando su alegría con algunos resoplidos.

-Si... pero necesita fortalecerse más.

El segundo ser se acercó al espejo acariciado su superficie con su mano.

-El pronto se encontrara con ellos, apresúrate, haz que venga a verme pronto.

Susurro dando media vuelta mirando hacia el primer ser.

-Lo vigilare hasta que llegue el momento, prometo guiarlo hacia ti.

Como un viento el primer ser desapareció en la bruma dispuesto a continuar con su misión, mientras el segundo seguiría observando desde aquel espejo.

-Te has vuelto muy fuerte, es momento de que tengas tu primera misión.

Susurro mirando hacia Rohei y Lucy.

Buenas noches o buenos días, que les ha parecido el capítulo de hoy espero que les guste, apenas comenzamos este libro, espero que podamos avanzar para terminarlo antes de que termine el año.

Jaja aunque me dio risa la imagen que escogí para representar a este horrible monstruo, que por cierto se llama atrocidad, que debería verse más imponente, pero esa imagen era lo más cercano que tenía al respecto.

Sin más que decir, les agradezco por leer el capítulo de hoy, cuídense y que las gemas los protejan.

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